Antes de que comiences a leer... hay algo que debo de decirles, esta historia la en colaboración con...

 @NanyS2808, así a que esperas para ir a seguirla. 💜

Volví a ver por milésima vez su fotografía, ya hacía un año que Jimin se había marchado para siempre, un año en que nuestras vidas no volvieron a ser las mismas de antes.

Aquella mañana del seis de junio de dos mil veintiuno, Jimin vino a visitarme al estudio, a decirme que las "Fans" lo odiaban, y que no sabía qué hacer.

- ¡Maldita sea! – Chillé.

Aún recuerdo bien mis palabras.

Jimin-shi, nosotros te amamos y ahí fuera hay ARMYS que también te aman, no debes de hacer caso a las que no tienen ni el derecho a llamarse "ARMYS".

¿Pero cuál debía de ser a la presión que estaba sometido, para cortarse las venas?

¿Cuál era la maldita razón de que tuviera que dejarnos?

Después de aquello nadie queríamos pertenecer a la banda, y no es que amaramos la música...cosa que seguimos haciendo, pero decidimos que debía de ser así...por nuestro pequeño "Mochi".

El último concierto que teníamos antes de comenzar a prepararnos para nuestros singles en solitario fue cancelado, por respeto a nuestro mejor amigo y hermano.

Un año después...

Yoongi tomó su coche y se dirigió hacia el cementerio, cuando llego aparco el coche, bajando de este sin antes sacar el ramo de tulipanes amarillas, las que más amaba Jimin, su más querido amigo. Yoongi se dirigió hacia la tumba y se sentó al lado de esta.

- Pequeño trasto, no sabes lo que te echo de menos, lo que te echamos de menos. - Comenzó a hablar mientras acariciaba la tumba.

- Namjoon, sigue haciendo música, su última canción va dedicada a ti. -Dijo secándose una lágrima.

- Hobi y nuestro "Golden Maknae", han montado una empresa de danza.

- Tae y Jin están trabajando juntos como actores, ¿te lo puedes creer? - Pregunto.

- Y bueno, yo sigo igual, echándote de menos. - Suspiro.

Yoongi sacó la pequeña libreta que llevaba siempre encima suyo y que utilizaba para escribir cuando tenía alguna inspiración, y comenzo a leer, mientras que las lágrimas comenzaban a correr por su mejilla.

"Me encanta conducir por todos aquellos lugares donde solíamos quedar, perdiendo el tiempo como dice papá.

¿Acaso fue mi culpa que te marcharas?

A veces empiezo a preguntarme, ¿y si fue una mentira?

Aún recuerdo aquel día...

¿Y los sueños que dejaste atrás?, ¿no los necesitabas? Como cada deseo que alguna vez hicimos."

- ¿Por qué eres tan egoísta Jimin? - Preguntó parando de escribir, secándose con rabia esas malditas lágrimas que no lo dejaban siquiera ver.

- Maldita sea desearía poder despertar con amnesia y olvidar todas las pequeñas cosas estúpidas; como la manera en la que se sentía dormirse a tu lado y los recuerdos de los que no puedo escapar. - Sollozo.

- Las fotos que me enviaste siguen en mi teléfono. Admito que me gusta verlas. - Admito que me siento solo.

Todo el mundo me dice que te deje ir, pero no puedo... no quiero pequeño.

- Es difícil escuchar tu nombre cuándo no te he visto desde hace tanto tiempo. - Si hoy me despertara contigo a mi lado, como si todo esto fuera solo un sueño retorcido. Te abrazaría más fuerte de lo que nunca hice antes y nunca te escaparías.

Yoongi seguía hablando consigo mismo, cuando escuchó un ruido proveniente detrás suyo, este se giró hacia atrás, encontrándose con un pequeño gato calico. Yoongi comenzó a llamarlo, este no dudó un segundo en acudir a su llamada, y acurrucarse en sus piernas.

- ¿Eres tú Jimin? - Pregunto acariciando al gato.

El pequeño gato ronroneo en su respuesta, mientras acariciaba al pequeño gato su teléfono comenzó a sonar.

Yoongi lo sacó de su chaqueta, era Namjoon.

- ¿Hyung? ¿Dónde estás? - preguntó Nam.

- Estoy donde siempre - respondió Suga.

- Date la vuelta - Dijo Nam.

Suga obedeció y se giró hacia atrás, encontrándoselos a a los seis, quienes lo saludaban con la mano.

El primero en acercarse fue el pequeño.

- Hyung - dijo agachándose para acariciar al pequeño gato que no se había movido del regazo de Suga.

Todos comenzaron a acercarse y a sentarse alrededor de la tumba.

- ¿Queréis escuchar la canción? - preguntó Nam.

Asentí con la cabeza...pero lo que no sabía era que los demás iban a cantarla junto a Namjoon.

Tae:

- Ha sido un largo día sin ti, amigo mío.

- Te lo contaré todo cuando te vuelva a ver.

Nam:

- Hemos recorrido un largo camino desde que empezamos.

- Maldita sea, ¿quién lo diría?

Kook:

- Todos los aviones que volamos.

- Las cosas buenas que hemos pasado.

- Quien diría que estaría aquí hablando contigo, sobre otro camino.

- Sé que nos encantaba salir a la carretera y reír.

Jin:

- Pero algo me dijo que no duraría.

- Tuve que cambiar.

- Mirar las cosas de manera diferente, ver el panorama general.

Hobi:

- Esos fueron los días.

- El trabajo duro siempre paga.

- Ahora te veo en un lugar mejor.

Nam:

- ¿Cómo no podemos hablar de la familia?

- ¿Cuándo la familia es todo lo que tenemos?

- Todo lo que pasé y tú estabas ahí a mi lado. - Susurro Suga.

Los demás asistieron...

Tae:

- Ahora vas a estar conmigo para el último viaje.

- Primero, ambos salimos del camino. La vibración se siente fuerte.

Todos:

- Lo pequeño se convierte en una amistad. Una amistad se convierte en un vínculo y ese vínculo nunca se romperá.

- El amor nunca se perderá.

- Cuando la hermandad es lo primero. Entonces la línea nunca se cruzará.

- La establecimos por nuestra cuenta.

- Cuando esa línea tuvo que ser dibujada, esa línea es la que alcanzamos.

El gato calico ronroneo tristemente.

- Vaya, le ha gustado - dijo Tae acariciándolo.

Todos reímos... Con lágrimas en los ojos...