"En Gringotts' defensa," Hermione dijo, "they son te pido que hagas lo que eres bueno en."

Parpadeé. "Lo que es eso se supone que significa?"

"Tienes una tendencia a notar cosas que normalmente son ignoradas por otros, Harry,", dijo, "Y tienes una tendencia a estar en el lugar equivocado en el momento correcto."

"¿O el lugar correcto en el momento equivocado?"

Hermione se rió entre dientes. "No, creo que mi versión encaja mejor. ¿Recuerdas el primer año? Tú, yo, Ron— todos tenemos detención. Estuvimos con Hagrid todo el tiempo y no pasó nada. Pero tú y Malfoy no solo conocisteis a Voldemort alimentándose del unicornio sino que ¡fueron salvados por Firenze!"

"Probablemente era el aroma de la sangre de unicornio."

Hermione resopló y se empujó en mi pecho. Estábamos sentados en su habitación, conmigo sentado en el sofá y ella delante de mí, mis piernas alrededor del lado de sus caderas mientras se sentaba frente a mí, dijo, estratégicamente posicionado entre mis piernas.

Se volvió para enfrentarme, mi barbilla tocando sus sienes. "Fine," Ella dijo, "Segundo año. Eras el único que podía escuchar el basilisco en las tuberías."

"Solo porque puedo hablar parseltongue—"

"¿Qué pasa con el diario? ¿Qué hay de interrogar a Aragog? Y este año, fuiste el único que notó a Pettigrew—" ella replicó, "el punto es que tienes esta habilidad para encontrar cosas, especialmente cuando trabajas bajo presión. Si hay alguien en quien confiaría para capturar a Pettigrew dentro de un año, serías tú."

Arqué una ceja.

"Bueno, esa es mi humilde opinión", defendió Hermione. "Realmente depende de lo que quieras. Sirius era inocente y merecía algo mejor. Pero..."

"But?"

"Pero se muere. Inocente o no, ya no importa. Ya no. Así que si estás haciendo esto por Sirius, pregúntate esto. ¿Querría Sirius que arriesgas tu vida para intentar capturar a Pettigrew? Y si no, ¿tener este Señorío Negro significa algo para ti? No eres del tipo codicioso, así que a menos que quieras reclamar a Draco y su madre como tus parientes—"

"Técnicamente, ellos son mis parientes."

"Harry," Ella enfatizó, "En cuanto a sangre pura, todos son parientes. Y te conozco, Harry. No buscas poder. O popularidad. Solo preguntas, ¿es el asunto correcto en sí mismo? Y luego lo haces, sin importar el costo."

Eso me calló. Hermione tenía razón. O más bien, habría tenido razón si fuera Harry Potter de quien estaba hablando. ¿Yo por otro lado? Anhelaba ambos, y el nombre negro me lo concedería. Pero obviamente no podía decirle eso a ella, o tratar de convencerla de que mis motivaciones habían cambiado. Jadeado o no, Hermione probablemente lo consideraría como un comportamiento no parecido a Harry y un Hermione sospechoso era lo último que quería.

Así que intenté algo diferente.

"Hermione, Sirius quería que lo tuviera. El Señorío Negro. Y si no hago nada al respecto, ¿quién crees que ganará el manto?"

Sus labios se enroscaron en disgusto. "Malfoy."

"Exactamente," Comencé a tender la trampa. "Conoces la profecía que Trelawney hizo. El Señor Oscuro se levantará de nuevo, más fuerte que nunca. Y cuando lo haga, Malfoy usará todo ese oro para alimentar su propósito. Los ejércitos requieren financiación, Hermione. La Biblioteca Negra supuestamente tiene una de las colecciones más grandes de libros de magia antiguos en el Mundo Mágico. Todo ese poder, todo ese conocimiento, todo eso será Voldemorthoss para tomar. A menos que yo— a menos que nosotros actúa ahora."

Hermione frunció el ceño. "Quieres lastimarlo económicamente."

"Ese bastardo me quitó todo. Si hay algo que pueda hacer para lastimarlo, lo haré."

"Pero Harry—"

"No Hermione," subrayé, "Piensa en lo que Malfoy te llama. Un sangre de barro. Su padre tiene el oído del Ministro, y es por eso que podría eliminar a Dumbledore en nuestro segundo año. Puso a Hagrid en Azkaban. Él controla la Wizengamot. Por lo que sabemos, Lucius Malfoy conspiró para negarle a Sirius un juicio. Y ahora, oye va a conseguir la fortuna negra y la usará para traer de vuelta a Voldemort!"

Hermione estaba en silencio ahora. Mis palabras estaban llegando a ella.

"¿Qué dice Dumbledore sobre esto?"

"Yo no le he preguntado."

Eso la sorprendió.

"¿Por qué?"

No respondí. ¿Qué iba a decir? ¿Que no confiaría en el viejo director hasta donde podría tirarlo? ¿Que no era Harry Potter y sabía qué esquemas tenía el hombre? De acuerdo, tenía buenas intenciones, pero su necesidad patológica de guardar secretos era más que irritante para mí. Aún así, necesitaba quedarme en sus buenos libros hasta que hubiera ganado suficiente habilidad y poder para marcar la diferencia.

"Harry?"

"Sirius era el mejor amigo de mi padre," hablé después de un minuto reflexivo. "Y mi mamá. Y Lupin. Luchó la buena pelea. Y, sin embargo, nunca tuvo su juicio. ¿Por qué Dumbledore no lo descubrió? Suena al Jefe Brujo. Podría haber ayudado. Nadie hizo nada ni siquiera intentar para saber por qué mi mejor amigo de papá lo traicionó. Es como... como brujas y magos son avestruces y todo el mundo es arena."

"Hmm," Ella dijo después de un tiempo, "usted le ha dado a esto una buena cantidad de pensamiento. Alguna idea sobre cómo quieres hacerlo?"

Frunció el ceño. "Nada concreto a partir de ahora. Miré un poco sobre los búhos y su capacidad para encontrar personas, pero eso es fácilmente detenido por una sala básica para desviar búhos. Pensé en lanzar una recompensa como lo hizo el Ministerio por Sirius, pero incluso ese trabajo no ganado."

"¿Eh? Por qué?"

"Debido a que todas las recompensas deben registrarse en el Departamento de Comunicaciones Domésticas y no hay forma de que Fudgeis permita una recompensa a Peter Pettigrew. No mientras Malfoyws allí." Respondí con un ceño fruncido. "E incluso si lo hacen, siempre hay Polyjuice, y eso es asumir incluso en Gran Bretaña en este momento."

También había considerado la idea de contratar brujas y magos nacidos de muggles en un equipo de ataque. Tal vez aprovechen su rencor contra el sesgo del Ministerio y los de sangre pura y lo usen contra Malfoy y sus semejantes. A diferencia de la Orden del Fénix, este grupo de trabajo se ocuparía de la eliminación sistémica de los Mortífagos superiores, probablemente a través de una mezcla de métodos mágicos y muggles. Había puesto este plan en segundo plano hasta que obtuve un conocimiento más práctico del mundo y, por supuesto, la fortuna negra sería fundamental para financiar este grupo de trabajo.

Pero de nuevo, no es una opción para atrapar a Pettigrew. No, hasta ahora lo único que estaba seguro, o mayormente seguro, era dejar que los eventos del canon siguieran su curso, y encontrar a Pettigrew en el cementerio. Cómo Iird logró capturarlo y traerlo de vuelta sin que Voldemort me matara fue otro problema por completo.

"¿Podemos hablar de esto mañana? Estoy exhausto," murmuré, enterrando mi cabeza en su cabello recién limpiado y tupido. Olía a jazmín y pergamino mientras la cavaba en el cuello. Hermione se erizó un poco, pero le agarré la cintura.

"¿Qué te pasa?" Ella preguntó, claramente atrapada con los pies planos por mi reacción. Mi mente ya estaba en llamas con pensamientos sensuales sobre ella, y su constante empuje y barajamiento inevitablemente se frotaba contra mi eje, haciéndolo crecer de nuevo a tamaño completo en orden rápido. Mis manos subieron su estómago, debajo de su camisa, acariciándola por encima de su sostén, haciéndola retorcerse un poco. Me di cuenta de que estaba respirando pesadamente ahora, con los ojos cerrados y excitados.

"¿Qué puedo decir?" Le susurré al oído, " sacas el animal en mí."

"¿Te sentías agotado?" ella preguntó maliciosamente, lo cual era una actitud rara para ella.

"Dime, Hermione," pregunté, moviendo mi mano derecha y pasando mis dedos sobre su pezón grueso y duro. Hermione dejó escapar un suspiro audible de placer mientras cedía completamente al momento, inclinando su cuerpo contra el mío permitiéndome un acceso completo.

"Sí?" Ella susurró.

"¿Cómo te sentirías al mudarte conmigo?"

Eso la sacó de sus gemidos. Se fue y me miró a los ojos. "¿De qué hablas?"

"Tengo un apartamento ahora," dije, tirándola hacia atrás. "En Londres. Muy protegido. Viviré allí de ahora en adelante. Así que estaba pensando... podrías vivir allí conmigo."

"Eso sería dangero—ah!" Ella gimió, mientras mi mano izquierda se deslizaba sobre su pecho izquierdo. Agarrando la parte inferior de su camisa y con la ayuda de mi mano derecha ya involucrada, levanté su camisa, dejándola solo en su sostén. La empujé hacia adelante y deshice los cierres, dejando que sus suaves bultos se liberaran, exponiéndolos completamente a mí. Con el cuerpo de Hermioneiants presionado en el mío, ahuequé cada pecho y miré su hermoso cuerpo, sus pezones duros sobresaliendo prominentemente de su pecho mientras mis manos la acariciaban y la complacieron.

"¿Estabas diciendo?"

Hermione frunció el ceño. "Ilyll te hexadecine, Harry Potter!"

Husmeé. "Fine. Diversión primero, habla más tarde."

Y la saqué justo sobre mi eje. Hermione giró sus caderas usando su espalda baja y la parte superior de su culo para trabajar mi polla. Recordando nuestra cita anterior, pellizqué cada uno de sus grandes pezones de protuberancia en mis dedos y me retorcí un poco, alejándolos de su pecho. El fuerte jadeo de placer escapando de sus labios me hizo saber que estaba en el camino correcto, así que continué masajeando sus senos y burlándome y tirando de sus pezones. Su cabeza estaba cerca de la mía en este punto, mientras nuestros cuerpos se presionaban más el uno contra el otro. Su cuello yacía expuesto, así que en ángulo mi cabeza y suavemente comencé a besar su piel, corriendo mi lengua a lo largo de su carne tierna. Otro gemido suave escapó de sus labios cuando se acercó a ella con su mano derecha encontrando mi dureza y apretándome, aunque un poco torpemente.

No queriendo ser superado, deslizé mi mano izquierda por la parte delantera de su cuerpo, debajo de sus pantalones cortos y sobre su arbusto bien recortado, encontrando la protuberancia dura de su clítoris. Solo podía alcanzar la capucha de su coño, pero me di cuenta de que estaba extremadamente mojada. No pude llegar a ella por completo, ya que sus frustrantes movimientos de cadera indicaban que pensaba lo mismo. Hermione cambió su posición, girando hacia mí y arrojando su pierna izquierda sobre la mía y alcanzó alrededor de mi cuello con su brazo izquierdo, así que estaba semi frente a mí. Esto me dio acceso completo a su coño mojado con mi mano izquierda, que inmediatamente le di dos dedos.

"Sí! ¡Ay Merlín! Sí!" Ella gimió en mi oído mientras me acercaba. En ese momento, nos estábamos mirando directamente el uno al otro mientras deslizaba mi dedo en su apretado y húmedo coño, ambos completamente en el momento. Seguí moviendo mis dedos dentro y fuera de ella, tratando de encontrar los puntos clave para sacarla. Hermione continuó mirándome como si estuviera considerando algo, y luego me acercó y me besó completamente en los labios. Los momentos iniciales de ese beso se sintieron tentativos, tal vez incluso un poco extraños, antes de que ella me bebiera apasionadamente la lengua en la boca mientras los gritos de placer se ahogaban en la boca.

Cuando rompimos el beso, miré su pecho, pero no pude obtener el ángulo que quería. Al ver mi situación, Hermione usó su mano derecha libre para levantar su pezón izquierdo hasta mi boca. Tragué tanta carne como pude, chupando fuerte y pasando mi lengua sobre su pezón en mi boca. Sus pezones deben haber sido extremadamente sensibles ya que otro largo suspiro de placer se le escapó. El sonido era tan sexy, joder, todo el momento era tan sexy. Tenía dos dedos dentro de ella, mientras chupaba sus tetas y me estaba humedeciendo en seco. ¿Cómo diablos no podría ser sexy?

Hermione me besó por el costado de la cabeza y me mordió suavemente la oreja, lo que envió una sacudida de placer por la columna vertebral.

"Te necesito dentro de mí ahora", susurró.

No queriendo decepcionar, ayudé a levantarla de mí y mientras estaba parada frente a mí, hábilmente bajó sus pantalones cortos por su cuerpo y salió de ellos en un solo movimiento, y ella estaba completamente desnuda ante mí. Al bajar, luchó con los botones de mis pantalones cortos, solo brevemente, y prácticamente los arrancó de mi cuerpo. Cuando mi polla se liberó, ella lo miró con un deseo casi animalista.

Ella me montó entonces, dejando caer su rodilla izquierda a un lado de mí en el sofá y luego balanceando la rodilla derecha hacia el otro lado, alcanzando hacia abajo, y, ella agarró mi polla y se la guió mientras se sentaba en ella en un movimiento suave. Su humedad apretada se sentía como un terciopelo suave mientras se empujaba completamente hacia mí. Hermione estaba empapada, pero también muy apretada cuando comenzó su movimiento largo y lento hacia arriba y hacia abajo.

"Joder sí!" Ella gritó cuando comenzó a aumentar su ritmo, sus senos levantándose y cayendo en mi cara con cada ciclo de empuje. Agarré uno de sus pechos y saqué su pezón a mi boca mientras continuaba conduciendo sobre mi polla. Hermione me rodeó la cabeza y metió la cabeza en sus pechos almohadas mientras le chupaba el pezón. "A la mierda, Harry!" Ella ordenó, envolviendo sus dos brazos a mi alrededor, entrando en un ritmo constante, pero duro.

No iba a durar mucho a este ritmo, ya estaba tan nervioso como estaba. Queriendo saborear el momento un rato más, agarré sus caderas y la encerré sobre mí. Luego, con mis manos, comencé a balancear sus caderas de un lado a otro, moler mi polla en ella en un ángulo diferente, con la esperanza de golpear su punto g. Parecía estar en algo, ya que ella se hizo cargo de la molienda, ahora girando sus caderas al mismo tiempo, no levantando su cuerpo, solo dejando que mi polla se moviera dentro de ella.

Esto me dio un momento para recuperar algo de resistencia, ya que mi polla estaba enterrada en su apretado coño, el movimiento me estabilizaba, en lugar de llevarme a término. Podía escuchar el ritmo de su respiración acelerarse, sentí que se agarraba a mi polla más fuerte y me metió en ella mientras trabajaba sus caderas un poco más rápido.

"Me estoy corriendo!" Ella chilló, "¡Me cum! ¡En!" Ella arqueó la espalda y dejó escapar un grito salvaje de placer mientras su cuerpo estallaba y se estremecía en un poderoso orgasmo. Su cuerpo se convulsionó en varios estremecimientos repetidos, pude sentir su coño apretado con cada uno. Cuando finalmente terminó, Hermione se inclinó y me besó completamente, y apasionadamente. Rompiendo el beso, se retiró y dijo, "Eso fue genial. Tu turno!"

Volvió a su furiosa carrera de arriba y abajo, comenzando lentamente al principio, y luego avanzando a un ritmo fuerte. Su coño, inundado de su propio semen, se sintió increíble. Sus senos estaban agitados y cayendo con su puta violenta. Agarré sus caderas y la empujé hacia mí con fuerza con cada empuje hacia abajo y la bofetada de nuestros cuerpos produciendo un sonido fuerte y punzante. Me sentí construido hasta el clímax y volé mi cabeza hacia atrás.

"Sí, cum en mí, Harry! Cum para mí!" ella gritó. Le agarré las caderas por última vez y grité mientras explotaba dentro de ella. Mi cuerpo se convulsionó con cada chorro en ella y tuve que aferrarme fuertemente para evitar que me cayera. Llené su coño en ráfaga tras ráfaga de semen, la acumulación del día finalmente se desató. Mientras disminuía la velocidad, pude ver mi semen saliendo de ella y bajando mi polla.

Cuando finalmente terminé, sin aliento, la tiré fuertemente hacia mí, sosteniéndola en un tierno abrazo. Ella dejó que el peso de su cuerpo cayera contra mí, agotada. Ambos estábamos sin palabras, sin aliento y completamente gastados.

"¿Qué me has hecho, Harry?" Ella gimió, "Hace una semana, yo era una chica normal. Y ahora, tengo tu semen saliendo de mi clítoris."

"Debiste haberte aburrido hasta la muerte siendo una chica normal." Respondí, empujándola de nuevo.

"Culpo a la maldición del hombre lobo. Es... haciéndome hacer esto."

Resoplé. "Solo está disminuyendo tus inhibiciones. Admítelo, siempre tuviste este lado salvaje. Simplemente lo mantuviste oculto debajo de tu fachada de gusano de libro."

Hermione jadeó, se escandalizó, pero antes de que pudiera decir algo más, me incliné y capturé sus labios de nuevo, mi lengua invadiendo su boca de manera dominante. Hermione dejó escapar otro gemido antes de que me fuera, solo para insertar tres de mis dedos— empapada con su propio cum— en su boca.

"Y créeme cuando te digo," le susurré al oído, "Esto es solo el comienzo."