Recordar nuevamente cada una de las palabras de Sebastián fué como si hubiesen desgarrado mi corazón. Seguían grabadas en mi mente e impregnadas en mi piel.

Cassandra: No llores...- limpió mis lágrimas- no de nuevo

____: ¿Él está aquí?- pregunté con esperanza

Ella asintió.

Cassandra: Está afuera- dijo seria- ¿A caso quieres verlo?- alzó una ceja

____: No.- Lo que más quería era verlo, pero también tenía mi dignidad- Cuando salgas dile que se vaya- hablé con dolor

Cassandra: Sé que te duele, pero con el tiempo tus heridas sanaran...- Sonrió ampliamente- y entonces saldrás a la calle con una deslumbrante sonrisa en tu rostro y caminarás por las calles segura de ti misma.- acarició mi cabello- Ya lo verás

____: Tengo un mal presentimiento- dije finalmente

Ella frunció el ceño.

Cassandra: ¿Porqué?

____: No lo sé, presiento que algo muy malo pasará y nada sera igual- dije viéndola fijamente

Cassandra: Quizá solo sea una superstición.- dijo acariciando mi cabello- Tú tranquila ¿si?

Asentí débilmente.

Cassandra: Será mejor que duermas un poco, yo me quedaré contigo toda la noche

____: Gracias.- sonreí sin ánimos

Cassandra: Ahora vuelvo ¿si?. Iré a avisarle a los chicos que estás bien...¿Segura quieres que le diga a Sebastián que se vaya?

____: Quiero verlo, pero no ahora, quizá mañana- dije sin más

Ella asintió para luego salir de la habitación.

NARRA SEBASTIÁN

Estaba hablando con Bautista sobre lo que había ocurrido con ____ cuando de pronto vi que Cassandra se acercaba a nosotros.

Cassandra: Me quedaré con ella esta noche- dijo seria

Mario B: Si intentas escap...- Cassandra lo interrumpió

Cassandra: Estoy muerta, lo sé.- rodó los ojos- No iré a ningún lado ¿bien?

Sebastián: ¿Cómo está ____?- pregunte preocupado

Cassandra: Está bien, algo débil, pero bien

Sebastián: Iré a verla- dije pero cuando empecé a caminar Cassandra pusó una mano en mi pecho y de inmediato me detuve para verla

Cassandra: Ella no quiere verte, me dijo que te fueras- habló seria

Golpe bajo, algo en mí se rompió, sus palabras fueron duras.

Sebastián: Mientes, no lo aceptaré

Cassandra: Largo- escupió seca

Mario B: Vámonos- toco mi hombro- mañana vendremos de nuevo

Tense la mandíbula y vi fijamente a Cassandra la cual me veía con odio.

Sebastián: Dile que cuando se levanté de esa cama me la voy a llevar a casa y la voy a follar tan duro que no podrá caminar y entonces de verdad tendrá un motivo para estár aquí en el hospital.- dije molesto, ella alzó la ceja desafiante- Nos vemos preciosa- dije tirándole un beso a lo cual ella negó con asco.

NARRA _____

Estár postrada a una cama era realmente aburrido. Lo único que quería era largarme de ahí.

El Doctor entró y de inmediato pregunte:

____: ¿Cuando podré irme?

Él sonrió y comenzó a apuntar algo en su libreta.

Doctor: Veo que ya estás mejor.- dijo risueño- Quizá pasado mañana ya te puedas ir.

Frunci el ceño indispuesta e hice un puchero, quería irme ahora.

Doctor: Se paciente, los días pasan rápido- sin más que decir sé fué dejándome sóla.

Suspiré frustrada. Tengo que admitir que estaba desesperada y la única pregunta que revolotea en mi cabeza es en que si Sebastián se preocupa por mí o le doy lo mísmo.

•Dos día después•

Al fin me habían dado de alta, me sentía mejor, los últimos días en el hospital habían sido realmente aburridos para mí, nada mejor que regresar a casa de nuevo.

No había visto a Sebastián desde que Cassandra prácticamente lo hecho del hospital. Es una gran amiga. ¿Cómo estará Crystel?.

Cassandra: ¡Hora de irse a casa!- dijo entrando al pequeño cuarto donde me encontraba.- Traje ropa para ti.

Alcé la ceja y observé detenidamente la ropa que me había dado.

____: ¿No creés que es un poco atrevido?- pregunté sin más

Ella rodo los ojos.

Cassandra: Atrevido o no es cómodo, ahora levántate y vístete.

Suspiré y decidí hacerle caso y ponerme lo que me había dado.

(...)

Luego de un rato salí arreglada. No quería que Sebastián me viera débil ante él, quería que me viera segura de mí misma.

Cassandra: Vamos.- me vió de pies a cabeza.

Salí adelante de ella y sentí que me dió una nalgada.

Cassandra: Te ves bien.- se puso sus lentes de sol, reí por su comportamiento.

El doctor no me recetó ningúna medicina, pero si un psicólogo.

Al salir del hospital vi el carro de Mario, me alegré que me fuera a ir con ellos y no con Sebastián.

Mario B: ¿Cómo te sientes?- me preguntó amablemente, lo cual se me hizó raro, ya que todos ellos eran una partida de orangutanes.

____: Estoy bien, gracias- sonreí

Cassandra: ¡Maldita sea!- dijo viendo algo fijamente.

Frunci el ceño y me giré hacía la dirección en la que ella veía con enojo, el deportivo azul de Sebastián se acercaba por la carretera.

Cassandra: ¿Tú le dijiste?- le preguntó a Mario.

Él sonrió de lado mostrando uno de sus hoyuelos y asintió.

Mario B: Él me pregunto- dijo

Cassandra negó con la cabeza y suspiró pesadamente.

Cuando el carro de Sebastián paró justo en frente de mí sentí una punzada en el estómago, mi corazón comenzó a latir con fuerza, por poco se salé de mi pecho.

Él salió del auto con un ramo de rosas rojas, luciendo perfecto, sentí que las bragas se me iban a caer con tan sólo verlo.

Llamo la atención de varias personas del lugar, algunas enfermeras y chicas que pasaban lo veían con cara de pervertidas. Sebastián se acercó a mí y me observó de pies a cabeza.

Sebastián: Te ves bien.- dijo de manera ronca, lo cual me hizo estremecer.- Te traje esto, pequeña.- dijo dándome aquél ramo rojo.

Sonreí como una estúpida, él núnca me había dado nada.

____: Son hermosas.- dije con voz suave.

Sebastián: Vamos a casa.- tomó mi mano.

Cassandra: ¡____!- me llamó

Giré a verla y ella pusó una de sus manos en su cintura para luego alzar una ceja molesta.

Giré de nuevo hacía Sebastián y negué con temor.

____: Iré con ellos.- pude sentir la sonrisa triunfadora de Cassandra.

Sebastián sonrió de lado y sin más me tomó de la cintura y me pusó en su hombro como costal de papas.

Sebastián: Nos vemos, bruja.- le dijo a Cassandra la cual tenía la boca abierta.

Él me dió una fuerte nalgada y me metió al auto.