Capitulo 13
Cassandra: ¿A dónde vas?- susurró alterada
____: Calmate- dije de igual manera
Cassandra: ¡Sabés que si bajas te matan!- aclaró
____: Cassandra, ya no quiero estár aquí, prefiero morir a tener una vida de encierro y no poder ser feliz- aguantaba las lágrimas que querían salir desconsoladamente- Extraño a mi familia, a mis amigos, necesitó verlos
Ella me abrazó
Cassandra: Tienes que pensar antes de actuar- dijo viendome fijamente
Asentí dejando salir unas cuantas lágrimas.
Cassandra: Si alguno de esos chicos te ve...- tomó mi rostro entre sus manos- Te Matá- susurró asustada
____: Debo irme de aquí- me solté de su agarré
Bajé un escalón
Cassandra: ¡____, no!- gritó susurrando
No le hice caso y bajé.
Al llegar al primer nivel escuché unos murmuros que provenían de la sala, me acerque sigilosamente y me escondí detrás de la pared para que nadie me viera. Erá Daniel y Mario Bautista, hablaban y tomaban cerveza mientras veían el televisor. Todas las luces estaban apagadas, lo único que alumbraba aquella sala erá la luz de la pantalla.
Daniel: Es hermosa, los clientes nos pagarían muy bien por ella
Mario B: No niego que es muy bella, pero sabés que si tocamos uno solo de sus hermosos cabellos- rió- Villalobos nos matá
Fruncí el ceño sin entender de lo que estaban hablando.
Daniel: Lo sé...- bebió de su cerveza- daría lo que sea por pasar una noche con ella
Mario rió
Daniel: Sus facciones tan femeninas, sus rostro, su cuerpo, su cabello- mordió su labio inferior- toda ella es exquisita
Mario B: Esta buena, es una vieja hermosa- bebió
Daniel: Esta hecha toda una mamacita
Mario B: ¿Creés que Villalobos ya se acostó con la muñequita?- preguntó
Daniel simplemente rió
Daniel: Claro parce, ¿Acaso no escuchaste el océano de gemidos que provenían de su habitación horas atrás?
Mis mejillas ardieron, de vergüenza. Estaban hablando de mí.
Mario B: Que suerte la de Sebastián
Daniel: Sus gemidos son la cosa más sensual y exitante que he oído
Mario B: Será mejor que dejemos de fantasear con la chica de Villalobos
Daniel: Mientras él no se enteré que importa- bebió nuevamente de su cerveza
Levante una de mis cejas y negué con la cabeza ¿Qué clase de amigos son estos?
Mis ojos se clavaron en un pequeño jarrón que se encontraba en una linda mesa que decoraba la enorme casa. Caminé sigilosamente hasta el y lo tomé. Apunte hacía las escaleras y lo tiré con fuerza, de inmediato me escondí detrás de la pared para que no me vieran.
Daniel: ¿Escuchaste eso?- sacó una pistola al igual que Mario
Mario: Si- ambos se pararon- Vamos
Daniel: Camina
Comenzaron a subir las escaleras, salí de donde estaba y caminé rápidamente hacía la puerta, la abrí para luego volver a cerrarla con cuidado. Comencé a caminar rápidamente por el enorme y hermoso patio, para mi mala suerte el auto de Sebastián íba entrando por la enorme puerta con rejas, de inmediato me escondí detrás de la fuente.
Estacionó su auto justo enfrente de la casa y bajó. Erá tan guapo, su manera de caminar, sus gestos, la manera de alborotar su cabello. Suspiré sin darme cuenta. Sacó unas llaves de su bolsillo derecho y abrió la puerta para luego entrar, salí de mi trance y me pare de dónde estaba, corrí hasta la enorme puerta llena de rejas y comencé a treparme hasta llegar al otro lado.
Al fin erá libré.
Comencé a correr por una carretera sin rumbo alguno. Sebastián no tardará en salir a buscarme junto con los demás.
Quería irme muy lejos de allí.
NARRA SEBASTIÁN
Entré a la casa y ví a Bautista y Daniel discutiendo mientras veían un jarrón roto cerca de las escaleras.
Sebastián: ¿Qué pasa?- fruncí el ceño
Daniel: No lo se, alguién lanzó esté jarrón cuando estábamos distraídos viendo televisión y bebiendo- pasó la mano por su cabello
Sebastián: ¿Y los demás?- hablé serio
Mario B: Ruíz, Arango y Juca salieron, los otros estan arriba con las chicas- aclaró
Sebastián: ¿Entonces quién lanzó esté jarrón?- dije sin entender
Ví nuevamente el jarrón y pensé en ____, tense la mandíbula
Sebastián: Mierda...No puede ser...- Daniel y Mario me vieron sin entender
Subí corriendo hacía la habitación.
[…]
Abrí la puerta bruscamente, recorrí rápidamente con la mirada cada rincón del cuarto, había una toalla en el suelo y otra en la esquina de la cama, caminé hasta el baño y ví la secadora conectada, pero no estaba ____.
Sebastián: ¡____!... Sal de dónde estés- grité
Sentí como mi corazón se aceleraba y la sangre subía a mi cabeza. Salí y comencé a recorrer la casa mientras gritaba su nombre.
Volví a la sala en donde se esncontraba Mario y Daniel, Saqué un arma y disparé tres veces al techo. Ellos se alarmaron.
Juanpa: ¿Qué ocurre?- dijo bajando las gradas
Jancarlo y Andy bajaron detrás de él con un arma en la mano.
Sebastián: ____ escapó, quiero que la busquen hasta encontrarla, no me importa lo que hagan, busquenla hasta debajo de las piedras si es posible, pero la quiero aquí ahora- dije furioso- Yo la buscaré por aquí cerca, ustedes busquen en carreteras y paradas, no debe estár tan lejos.
Andy: Ya escucharon, vamos- ordenó
Sebastián: Otra cosa- dije llamando su atención- La quiero viva
NARRA ____
Ví una parada y caminé hacía ella, no había nadie, maldije mentalmente y seguí caminando, me encontré con un teléfono público y marqué el número de mi casa.
*llamando*
*Pit...pit..pit...pit...pit*- comencé a desesperarme
Mamá: ¿Hola?
Al oír su voz me alegré, solo quería verla a ella y a mi padre.
Mamá: ¿Hola?
____: Mamá- lloré desesperadamente- ayúdame, mamá quiero irme de aquí necesitó que me ayudes
Mi mamá comenzó a llorar
Mamá: HIJA- gritó- cálmate ¿dónde estás?
Papá: ¿Hija? ¿Eres tú?- preguntó mi papá
Mi corazón brinco de felicidad
____: Ayúdenme- lloré
Papá: ¿Dónde estás?- dijo alterado
De pronto sentí que me toparon la boca.
Xxx: Casí te escapas linda- Solté el teléfono
Comencé a gritar, traté de safarme de su agarré, pero no pude y empecé a patalear.
Papá: Hija!!!- lloró- Vamos a encontrarte
Daniel colgó el teléfono y me agarró de la cintura mientras pataleaba para que me soltará, parecía una fiera.
____: DÉJAME- grité mientras él me subía al auto.
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