Si quieres que te dedique un capítulo, recuerda responder todas las preguntas <3 

Capítulo dedicado a @Geralcb06 ❤️​

CAPÍTULO 2

La presentación

Alex

Cada estudiante de Reino Unido llegó sano y salvo al aeropuerto de Los Ángeles. Justo como se tenía previsto, los autobuses pasaron por ellos y los dejaron frente a las residencias seleccionadas por la organización.

Según mi asistente, cada residencia fue ubicada en una zona segura y cercana a las universidades, así que era de esperar que todos los estudiantes aceptaran el alojamiento de forma inmediata. Era de esperar, pero no sucedió así.

Niels y su compañero de piso solicitaron un cambio y como si fuera poco, se negaron a darle la dirección al secretario de recursos humanos.

Sé por qué lo hace. Seguramente sabe que yo soy el director y fundador de la campaña y no quiere que sepa sus datos personales. ¿Por qué es tan infantil? Ahora sé que es cierto lo que decía Aiden: éramos demasiado inestables.

Me pesa mucho todo lo que pasó en su vida antes de irse y me habría encantado poder ayudarlo más cuanto estuvimos juntos, pero ahora siendo adulto, sé que no era mi responsabilidad y que tuvimos una relación demasiado conflictiva. Lo mejor para los dos fue separarnos. Espero que él haya sanado también.

El auto se detiene en el lugar indicado y dejo mi tablet de lado, desconectándome del trabajo y dándole el debido respeto a mi destino.

Como cada mes, me tomo una hora o varias para visitar la tumba de mis allegados. Siempre que paso a visitar a Gael, también aprovecho para visitar a mi padre, a mi abuelo y a la mamá de Niels.

Una vez que supe la historia, no pude evitar sentirme afectado por su muerte y sabiendo que su familia nunca vendría a verla, me encargué de poner flores en su tumba desde que la recordé.

Con mi padre hablo durante horas, puedo incluso sentarme toda la mañana o tarde con él. Es más fácil abrirme cuando no hay nadie juzgándome por mis actos. A Gael siempre le llevo pizza. Sé que hay un vagabundo en el cementerio que lo sabe y siempre viene después de mí para comerla, pero no importa: sé que Gael se la daría si estuviera vivo.

No tengo muchos recuerdos del abuelo, pero sé lo mucho que apoyó a mis padres y por eso siempre le llevo los chismes más recientes de la familia.

A Belle —la madre de Niels —, siempre le llevo el ramo más grande que haya en la floristería. No importa si hay una tormenta: siempre me encargo de que su tumba esté decorada con algo. Siento que es lo mínimo que puedo hacer por ella.

A pesar de todo, soy el único que la visita.

Mi familia fue la que se encargó de los gastos funerarios. Eso me lo dijo Thomas tiempo después, cuando quise visitarla. No le pusieron epitafio porque les parecía algo muy personal, pero se encargaron de enterrarla cerca de donde está mi papá. Todos dijeron que no podía estar sola, que a pesar de todo, casi habíamos sido familia política.

¿Será que Niels sabe que ella se encuentra acá? Eso era lo que quería decirle cuando solicité su información a recursos humanos. Por eso me molesté: él está actuando como si estuviera huyendo de mí. Es un inmaduro.

Suspiro imaginando la cara de él cuando le diga todo. ¿Llorará? Por lo que recuerdo de él, sé que era una persona muy llorona. Espero que lo tome bien, porque no quiero que se moleste con mi familia por lo que hicieron.

En realidad nos ocupamos del cuerpo de su mamá porque no había nadie más que lo hiciera. El hermano de Niels fue llevado a prisión por intento de homicidio y su padre fue condenado por homicidio.

Fue una noche trágica para él. En realidad fue una noche trágica para todos.

¿Cómo habrá sobrevivido a todo eso estando solo? Pensarlo solo me genera incomodidad. Sí, ya no siento nada por él, pero eso no quiere decir que en algún momento no fue una persona importante para mí.

Lo quise. Mis actos y recuerdos lo confirman. Quise a ese chico más que al resto del mundo y aún así no pude salvarlo.

Tal vez lo que me tiene pensando en él es ese sentimiento de culpa. No pude ayudarlo cuando más me necesitó.

          —Su hijo regresó, señora Baasch —digo a la lápida frente a mí.

No sé muy bien cómo actuar al respecto, ya que nunca le hablé y tampoco esperaba hacerlo.

Solo espero que con esto, ella logre descansar en paz. Quiero que sepa que logró salvarlo y él está bien.

Dejo el ramo delicadamente y respiro hondo, comenzando a caminar de regreso a la limusina.

Mi teléfono comienza a repicar sin detenerse y ruedo los ojos, sabiendo que es Aiden y debe estar intenso porque desaparecí desde la mañana.

A veces no soporto que mi novio sea un relacionista público. Jamás deja de hablar de trabajo y lo peor: jamás se le olvida que trabajamos juntos. Es muy intenso y controla todo lo que hago. A veces siento que finge ser mi novio para controlarme más.

          —Estoy en el cementerio —digo apenas contesto. En la otra línea, se escucha el bullicio.

          —Lo sé, hablé con tu chofer —responde, alejándose del ruido —. ¿Qué haces allá? Necesito que asistas al estreno de tu hermano. Es a las ocho, solo tienes cuatro horas para arreglarte.

          — ¿Por qué debo ir? Ya he visto la película como tres veces —entro a la limusina y le indico a Joe que vaya hasta el departamento.

          —Porque eso hará que el público vea en ti un hermano leal que siempre apoya a su gemelo —dice Aiden como si fuera obvio —. Recuerda que debes asegurarle al mundo que David no se equivocó al elegirte. Tienes que fingir que eres bueno si quieres que te acepten.

          —No me importa que no me quieran —gruño y miro por la ventana.

Escucho su risa al otro lado de la línea.

         —Ya sé que no te importa, demonio, pero es lo mejor para la empresa —una voz en el fondo me indica que lo están llamando —. Tengo que irme. Avísame cuando estés listo y así nos encontramos allá. Te amo.

Cuelgo y dejo el teléfono a un lado, pensando en todo lo que tendré que hacer durante estos meses para que no me destituyan.

Una de las reglas de la junta directiva fue esa: debía mejorar mi imagen pública si quería permanecer en la presidencia. De lo contrario y si las ventas bajaban debido a las críticas, Daniel asumiría el cargo.

Desde que comencé a trabajar en la empresa las críticas hacia mí nunca se hicieron esperar. Nadie me quería, ni siquiera los empleados que susurraban a mis espaldas cada vez que pasaba. Luego de la noche del accidente, internet explotó con fotos de mi relación. Muchos salieron a atacarme por mi sexualidad y a su vez, muchos resaltaron que durante mucho tiempo se ocultaron mis abusos y actos violentos a mis compañeros de clases. Muchos de mis compañeros resaltaron que fueron agredidos por mí, que fueron insultados y que incluso la mayoría me tenía miedo.

Muchos confesaron que me temían porque era demasiado agresivo y temperamental. Incluso llegaron a decir que golpeé a Niels durante nuestra relación y que por eso él siempre estaba herido.

Jamás esperé encontrarme con tanto odio cuando abrí mis redes sociales. Antes tenía seguidores, pero luego de la ola masiva, mis seguidores se triplicaron al haber tantas cuentas de odio dirigidas exclusivamente a mi persona.

Comentarios como "no eres un Crild", "eres una decepción", "que asco de persona", "el error de los hermanos", "das náuseas", "me desilusionaste Alex, eras mi crush y resultaste gay", "una seguidora menos", "no soy homofóbica pero no lo imaginaba así", "das asco", "eras mi Crild favorito pero eres gay, que asco", "yo sí pensé que eras un hombre". Fueron algunos de los muchos que recibí.

Fue tanto el odio, que le entregué mis cuentas a mi asistente para que las manejara él. Ya no uso redes sociales y apenas toco el teléfono.

Creo que habría sido mejor no haber regresado a ese mundo. Me habría gustado seguir sumergido en mi ignorancia, estaba demasiado feliz con el juego de la culebrita que tenía el teléfono prehistórico —aquel que me dieron mis hermanos luego del accidente—. La única razón por la que insistí en ver mi teléfono viejo fue para comprobar todo el caos que mi hermano me había dicho que había.

Lo que más me impresionó es que antes de eso, nadie decía nada respecto a mi personalidad temperamental. Según las personas, era normal que un "hombre" actuara así bajo presión. Luego de que se dio a conocer mi orientación, muchos se volvieron en mi contra diciendo que actuaba así por mi "condición".

Jamás esperé ser odiado por no ser hetero. Era algo tan normalizado en mi familia y en mi entorno, que no esperé que las personas reaccionaran tan mal. La única razón por la que no me abrí con mi familia antes, fue porque no lo veía como algo que debía "anunciar". Mi plan era presentarles a mi novio y ya.

Supongo que luego de eso, entendí más el comportamiento de mi ex. Thomas me contó que su hermano y los amigos de su hermano lo golpeaban constantemente fuera del instituto.

Yo me alejé de las redes, pero él no podía alejarse de su hermano.

           —Llegamos —la voz de Joe me saca de mis pensamientos.

Alzo la mirada y suspiro cuando noto que ya estoy frente al edificio. ¿Hace cuanto llegamos? Tenía tiempo sin estar tan distraído.

Entro al departamento con paso lento y suspiro cuando los gritos de Loki invaden todo el espacio. Cada vez que me ve, grita, y no solo eso: me llama de la forma en la que Thomas le ordenó que me llamara. Mi gemelo estuvo todo un mes entrenándolo para que me dijera así y al loro jamás se le olvidó. Creo que él piensa que me llamo así.

          — ¡PAAAAAAPI!

Ruedo los ojos cuando vuela hasta mí y comienza a aletear frente a mi cara. Lo peor es que es la única palabra en español que se sabe. Esa y "sexo". No sé de dónde aprendió la palabra "sexo", pero ama decirla cuando está emocionado.

           —Cálmate —le pido, poniendo mi dedo en su pecho para que lo tome con sus garras.

Él me hace caso y se sujeta de mi dedo, comenzando a acariciar mi mejilla con su cabeza.

A pesar de todo lo que vivió, es un animal bastante tierno. Aunque intenté dejarlo en su hábitat natural muchas veces, siempre regresó porque no sabe vivir solo. Se crió desde pequeño con humanos y le cuesta relacionarse con los de su especie. Aún así, estoy en búsqueda de una pareja para que no se sienta solo o diferente.

Camino hasta su habitación, asegurándome de que tenga comida y agua. Me quedo satisfecho al notar que sí y lo impulso hacia su árbol cuando comienza a aletear emocionado. Ese es su problema: tengo que vigilarlo hasta que duerma porque sino, comienza a gritar que nadie lo quiere.

Lo veo volar de un lado a otro y brincar de rama en rama. Ambienté su habitación antes de mudarme con Aiden, fue la única condición que le puse; un espacio seguro para Loki. A pesar de que no se llevaron bien desde un inicio, Aiden se aseguró de cumplir mi pedido y contrató a un diseñador de interiores, un ambientalista y un veterinario exótico para crear la habitación.

El lugar posee flora natural elegida cuidadosamente para la salud y el gusto de los loros. Hay varios árboles frutales que se conservan debido a la luz azul y a la cascada artificial, la cual se desliza por el medio de la habitación hasta el centro, en donde se detiene en forma de un círculo que es contenido con ayuda de rocas que Loki usa como escaleras cuando quiere meterse al agua.

Es un niño muy mimado, pero en mi defensa, es el único recuerdo que me queda de lo que alguna vez fui.

Cuando al fin lo veo dormirse, camino hasta mi habitación y me doy una larga ducha.

Uso champú, acondicionador y al salir, me agrego el perfume de mi colaboración con Russell Fragancy. Miley no se dejó llevar por los comentarios negativos y aprovechó mi éxito como modelo para firmar conmigo. Ahora mi perfume está catalogado como uno de los más importantes al estar bajo el sello de una marca de lujo.

Eso es lo que más les duele a los antis: a pesar de todo, mi imagen genera más dinero en un segundo, que lo que ellos tendrán en toda su vida.

Salgo del baño con la toalla alrededor de mi cintura y le indico a Alexa que reproduzca Unforgettable de French Montana y Swae Lee mientras elijo qué ponerme.

Aún no entiendo por qué tengo que ir a la presentación de una película que vi tres veces con mi hermano. Thomas no paró de hacer vídeo-llamadas cada vez que terminaba de grabar una escena para contarme cómo le iba. Vi la producción, la postproducción y la edición final como si fuera otro miembro del equipo.

Sé que solo iré a dormir a ese lugar y que a raíz de eso, saldrán noticias de mí diciendo que no soy respetuoso y no valoro el trabajo de mi hermano.

La prensa no pierde oportunidad para hablar mal de mí. Les genera dinero y público.

Me decido por un smoking negro y unos zapatos de vestir del mismo color. Mi teléfono vibra, indicándome que Aiden necesita actualización sobre lo que estoy haciendo.

Le envío un rápido mensaje diciendo que ya casi estoy listo y él me envía un emoji de afirmación.

Busco mi reloj, mis cadenas y mis anillos. Observo el anillo de alien y pienso si quitármelo o no para la ocasión. Aiden casi me asesina cuando le comenté que no me quitaría el anillo, pero se quedó tranquilo cuando me lo coloqué en el otro dedo anular para no opacar el anillo de compromiso.

Una parte de mí sabe que es extraño no quitarme un detalle que me dio mi ex, pero así lo habría hecho mi yo del pasado; es lo que dijo Thomas: «tú nunca te habrías quitado ese anillo». Fue él quien lo guardó y me lo devolvió una vez que supe todo.

Desde entonces lo conservo como un anillo de la suerte. A pesar de todo, me gusta mucho y siento que es muy yo. Sin duda ese chico conocía mis gustos.

Salgo del edificio una vez que le indico a Joe que prepare el auto y entro a la limusina siguiendo seguido por un montón de flashes. Como era de esperarse, ya hay un montón de paparazzis detrás de mí porque mi asistencia en la presentación fue confirmada.

          —Buenas tardes, señor —dice Russ una vez que le contesto la llamada —. El señor Aiden lo estará esperando en la sala principal junto al resto de su familia. Me indicaron que hay una aglomeración de paparazzis en la entrada, así que dos hombres de seguridad lo escoltarán hasta la entrada del edificio.

         —De acuerdo —digo cuando lo oigo detenerse. La verdad es que no escuché ni la mitad de lo que dijo —. ¿Mamá está ahí?

           —Sí, señor. Su madre se encuentra junto a sus hermanos. Fue una de las primeras invitadas en llegar.

           —Vale. ¿Las grabaciones de las clases de hoy están preparadas?

          —Sí, señor. Me encargué de simular un parcial debido a que la semana próxima tendrá algunos exámenes de tres materias.

          —Perfecto. Por favor asigna el simulador para mañana a primera hora. Si hay alguna reunión o alguna junta, posponla para el lunes.

           —Entendido. ¿Desea algo más?

            —Eso es todo. Descansa, Russ.

Cuelgo y centro mi mirada en el cristal, observando la ciudad bajo la luz del atardecer. Los edificios pasan con rapidez al igual que los autos. Algo que me gusta de no conducir, es que puedo perderme en mis pensamientos sin temor a atropellar a alguien. Ese fue mi primer error cuando obtuve mi licencia y primer auto: casi mato a alguien por estar distraído. Desde entonces, conduzco muy poco y con mucho cuidado.

Al llegar al edificio, noto que la noche ya está presente y lo único que ilumina las calles son los faroles y los flashes de los paparazzis. Aún no ha llegado el reparto principal, —entre ellos, Thomas—, lo que aumenta aún más la emoción del público presente.

Apenas pongo un pie fuera de la limusina, los gritos no tardan en llegar. Eso es debido a que algunos fans se confunden y piensan que soy Thomas. Obviamente dura unos segundos, porque me logran diferenciar gracias a mis tatuajes y a mi cara de amargado.

            — ¡ALEX! —una chica me llama cuando paso frente a ella —. ¡¿Me das tu autógrafo?!

Me detengo en medio de los escoltas y me giro hacia ella, recibiendo muchos más gritos.

Ella sonríe cuando le doy la cara y me tiende una imagen impresa en la que aparezco con mi gemelo. Supongo que su meta es obtener el autógrafo de ambos, ya que me pide que deje la imagen de Thomas en blanco para cuando él llegue.

            — ¡Eres más alto en persona! —su comentario me hace sonreír —. Y también más guapo.

            —Gracias —le entrego el bolígrafo y la foto, haciéndola gritar junto al resto de las seguidoras.

Entro al edificio siendo escoltado por los guardias y una vez localizada la sala principal, no dudo en caminar hasta mi mami, abrazándola por detrás para asustarla.

Por supuesto que no lo logro.

           —Algún día, cariño —es lo único que dice una vez que se da la vuelta —. Te ves muy guapo —sonríe y acomoda el lazo en mi cuello.

          —Gracias, tú también te ves preciosa —dejo un beso en su mejilla y me separo para saludar a mis hermanos.

Taylor revuelve mi cabello y Daniel me aprieta el trasero cuando me acerco, recibiendo un puñetazo en la costilla. Ellos solo ríen mientras mi mami los reprende por fastidiarme.

          — ¿Qué tal todo, enano? ¿Ya nos dejaste en bancarrota? —pregunta Taylor mientras me peina con sus dedos.

          —Sí, falta poco para que nos demanden por evadir impuestos —le sigo la broma, quitando una pelusa de mi brazo.

Saludo a Miley y a Dania antes de caminar hasta Aiden. Por supuesto que él se encuentra haciendo llamadas y no me saluda enseguida. Tengo que esperar un buen rato para que se desocupe y cuando lo hace, no duda en escanearme de arriba abajo, verificando que mi atuendo esté acorde a la ocasión.

           —Perfecto —sonríe y acaricia mi mejilla —. Las críticas están siendo muy buenas. Esa reacción que tuviste allá afuera, está dando de qué hablar. Todos están comentando lo humilde que eres.

¿Yo? ¿Humilde?

         —Es solo la verdad —sonrío y él suspira, negando —. Te ves lindo.

         —Gracias, demonio —dice y se acerca, dejando un rápido beso en mis labios —. Ya quiero que lleguemos a casa.

Intento responderle, pero lo único que hago es dar un salto cuando unas manos aprietan mis costillas, causándome cosquillas.

          — ¡ALEX! —el grito de Thomas alerta a todos.

Me giro y le doy un zape, haciéndolo reír y abrazarme con fuerza.

          —Me extrañaste, admítelo —sus brazos aprietan con fuerza mi torso.

La verdad es que sí lo extrañé, pero no pienso admitirlo. Estuvo un año fuera del país debido a las grabaciones de la película. A pesar de que hablamos incontables veces por vídeo-llamada, es muy diferente tenerlo conmigo ahora.

Sin duda hay muchas cosas que quiero contarle y sé que él a mí. Luego de lo sucedido, ambos nos prometimos estar para el otro siempre que lo necesitáramos.

         — ¿Quién te puede extrañar a ti? —es lo único que pregunto cuando nos separamos.

Él rueda los ojos y comienza a saludar al resto de la familia. Claramente tarda un buen rato en soltar a nuestra madre, a quien carga en un fuerte abrazo que la hace gritar y reír. Luego de un rato, vuelve a donde estoy y también saluda a Aiden, quien se encuentra hablando con la sombra de Thomas —digo, su hermana—. Porque sí, Sabrina trabaja de la mano con Thomas y aunque no sé muy bien qué papel desempeña en su vida, el de "asistente" le queda perfecto. Ese o el de "sombra", porque no se le separa ni un segundo de él.

Thomas lo sabe y Aiden también: ella no me cae bien.

           — ¡Hola, cuñado! —ella me sonríe, tan amigable como siempre, y yo le devuelvo el saludo sin molestarme en sonreír —. Tan carismático como siempre.

           —Tan metida como siempre.

          —Ya, no empiecen —Aiden interviene, pasando un brazo por encima de sus hombros y tomando mi mano para que camine a su otro lado.

Thomas se pierde entre las personas y cuando vuelve, lo hace con un montón de compañeros que conozco de vista. La mayoría son actores de reparto o parte del equipo de producción. Eso es algo que caracteriza a mi gemelo: siempre se lleva bien con todos. En cada película en la que participa, siempre consigue hacer buenos amigos.

          — ¡Alex! ¡Por fin te conozco en persona! —Diego me abraza en cuanto llega hasta nosotros y se aleja, detallando mi cara —. Sí, definitivamente eres el gemelo de Thomas.

          — ¿Lo dudabas? —pregunto y él ríe, dirigiendo su vista a mi hermano.

          —Nadie se creía que alguien tan guapo tuviera un doble —señala a Thomas y este rueda los ojos.

El agarre en mi mano incrementa.

        —Él es mi novio —digo rápidamente, ganándome una mirada curiosa por parte de todos.

         —Aiden Harvey, mucho gusto —él sonríe y se presenta, entablando una conversación animada con todo el grupo.

Thomas me detalla y entrecierra sus ojos cuando yo comienzo a alejarme del grupo en busca de soledad.

Eso es lo que nos diferencia a Aiden y a mí: él es la persona más sociable y extrovertida del mundo y yo siento que las personas me roban la energía cada vez que estoy en público.

Una vez que logro librarme de la mano de Aiden, huyo hacia el asiento asignado para la familia.

Los asientos son rojos y frente a nosotros se alza el gran kauber en el que se reproducirá la película. Por suerte la sala está a oscuras y no hay muchas personas debido a que todos se encuentran hablando o tomándose fotos en las salas posteriores.

            —El día que no huyas de un grupo de personas, haré una fiesta —dice Thomas, sentándose a mi lado.

Ruedo los ojos y apoyo mis pies en los asientos delanteros, siendo imitado por él.

A pesar del tiempo, siento que no nos alejamos ni un poco. Por suerte tenemos una amistad que trasciende el tiempo o la distancia. Estuvimos meses sin hablar pero a pesar de todo, en el momento en el que uno se comunicaba con el otro, todo seguía como siempre. Así se siente ahora: como si no nos hubiéramos alejado nunca.

            —Sigo pensando en lo que te dije la otra vez —dice luego de un rato.

            — ¿De qué hablas? —pregunto, observando hacia la nada.

            —Aiden siempre quiere ser el centro de atención.

            —No sé por qué lo dices —frunzo el ceño y me giro hacia él —. Inició una conversación e incluyó a todos. No es su culpa ser extrovertido y llevarse bien con las personas.

            —Diego dijo lo mismo —Thomas niega —. Lo llevé exclusivamente para que te conociera y Aiden no tardó en acaparar la atención.

            —Él lo hace por mí —suspiro —. Sabe que no me gusta socializar y me quita ese peso de encima. Es mi novio, Thomas. Me conoce.

             —Claro.

Suelto un largo suspiro y acaricio el puente de mi nariz. A pesar de todos los intentos que ha hecho Aiden para ganarse la confianza de Thomas, jamás ha logrado pasar la línea de cuñados. Thomas es extremadamente celoso y desconfiado y desde lo que sucedió tiempo antes de que yo recuperara la memoria, jamás lo volvió a tratar igual.

Para él, Aiden se aprovechó de mi vulnerabilidad para acercarse.

            — ¿Sigues entrenando? —pregunta luego de un rato, tomando mi mano —. Tus nudillos están intactos, ¿qué ha pasado?

            —Simón dice que no debo pelear teniendo tantas presiones encima —me encojo de hombros —. Aún sigo entrenando, pero no tengo tiempo de nada más con tantos compromisos.

            — ¿Qué tal la universidad?

            —A veces quiero dejarla.

            — ¿A veces? —se ríe.

            —Siempre —suspiro.

            —Ya falta poco. Cuando menos lo esperes, tendrás tu título.

            —Eso espero. Me siento como un niño hablando de bebés con todo el tema del C.V.S. ¿Puedes creer que seleccionaron a Niels como uno de los estudiantes de Reino Unido? Aiden casi se muere cuando se enteró —sonrío y veo hacia el techo.

Por suerte reaccionó de la mejor manera cuando le comenté que buscaría a Niels para confesarle lo que pasó con el cuerpo de su madre. Me dijo que le parecía correcto y que estaba de acuerdo en que le dejara esa carga a alguien más. Aiden sabe que siempre que puedo visito el cementerio, por lo que no quería que siguiera sintiéndome en deuda o culpable por una responsabilidad que no me correspondía.

           — ¿Qué?

La pregunta de Thomas me saca de mis pensamientos.

Lo observo sin entender y frunzo el ceño cuando noto que aunque para mí es un tema superado y trivial, para él no. Ni Thomas ni nadie están enterados del regreso de Niels. Supongo que es sorprendente para él ya que en algún momento fueron amigos.

            — ¿Niels regresó? —vuelve a hablar, enderezándose en el asiento —. ¿Niels? ¿El solecito?

¿Qué?

            — ¿Por qué le dices así? —pregunto confundido y mi gemelo jadea.

            — ¡Alex! —lo observo confundido cuando jadea y se levanta de inmediato —. ¡Niels volvió! ¡¿Sabes lo que significa?! —me mira con emoción, causándome confusión.

¿Por qué se emociona tanto?

          —No sé... ¿Que está bien? —pregunto confundido.

¿Mi yo del pasado habría reaccionado igual que él?

           — ¡Alex! ¡Vas a poder recordar todo! —Thomas coloca sus manos en mis hombros y me zarandea —. Ya no más recuerdos vagos. Estoy seguro de que si lo ves, recordarás todo lo que sentiste.

No lo había pensado de esa manera.

Es cierto. Si veo a Niels, es probable que recuerde todo lo que mi mente aún mantiene bloqueado. Si eso pasa, tal vez me conecte aún más conmigo mismo, con esa versión que alguna vez fui.

            — ¡Tengo que verlo! ¡¿Sabes si está bien?! —Thomas brinca y mira hacia los lados —. Tengo que decirle muchas cosas. No puedo creer que volvió así.

Mi pecho se aprieta un poco.

¿Por qué se emociona tanto?

          — ¿De qué hablan? —la pregunta de Aiden logra que mi gemelo deje de saltar.

          —De mi mejor amigo —Thomas sonríe y alza su muñeca, dejando ver una pulsera amarilla —. Regresó y yo no sabía nada.

          — ¿Hablas de Niels? —Aiden sonríe y se gira hacia mí —. Veo que no esperaste ni un día para decirle.

Me remuevo en mi asiento.

          —Lo...

          —Este tipo de noticias no deben hacerse esperar —Thomas me corta y observa a Aiden con seriedad —. Tal vez para ti no sea importante, pero él fue una persona muy especial para todos.

          —Para mí no —Aiden se encoge de hombros.

Thomas intenta responder, pero antes de poder pronunciar una palabra, Sabrina se acerca, anunciando que debe presentarse junto al elenco para las fotografías.

Aiden tarda un buen rato en sacar el tema a flote y sé por su silencio que piensa hacerlo. Lo conozco y sé que le molestó que pareciera tan interesado en el tema luego de que actué como si no me importara.

No pensé que Thomas reaccionaría así y tampoco pensé que Aiden se pondría tan celoso.

           — ¿Era necesario que le dijeras? —es lo primero que pregunta.

           —No lo hice con mala intención, se me escapó...

           —Sí, y debido a eso, no tardará en buscarlo —mi novio me mira con reproche —. Si lo que querías era una excusa para tenerlo cerca, no tenías que fingir que te daba igual.

           —Aiden, no es eso...

Las risas y las voces de mis hermanos me obligan a guardar silencio. Mi mamá se sienta a mi lado izquierdo y los chicos atrás. Aiden no me mira en ningún momento y tampoco se molesta en entablar una conversación, lo que indica que se encuentra muy molesto con la situación.

Y es entendible. Él cree que aún siento algo por Niels cuando no es así y con esto, solo incrementé sus dudas e inseguridades.

La función comienza luego de la reverencia y los aplausos al elenco.

La película es entretenida, tiene muy buenos ganchos y está muy bien argumentada la trama, pero al verla tantas veces ya conozco el desenlace y no me emociona repetirla: por eso termino durmiéndome a la mitad.

Me despierto cinco minutos antes de que termine y aplaudo junto a los demás la entrega en la que mi hermano actúa como psicópata y asesino.

Debido a su atractivo, bondad y el hecho de que es hijo de unos pastores muy importantes de la iglesia, nadie logra sospechar de él. Así es, hasta que su propia esposa descubre a la mujer que tiene escondida en el sótano y la ayuda a escapar. Lamentablemente Trevor —el personaje que interpreta Thomas —, mata a su esposa y culpa a la mujer del homicidio. Nadie le cree a la chica, porque es una prostituta a la que él secuestró por ocio. Su plan era asesinarla la noche en la que su esposa la escuchó caer de la silla que la tenía sujetada.

Lo más interesante de la trama fue ver a Mage —la prostituta — destruir la reputación y la vida de Thomas hasta asesinarlo, literalmente. Su muerte fue la escena más sangrienta y divertida de la película.

Entrelazo mis dedos con los de Aiden cuando todos comienzan a salir y comienzo a caminar hasta donde se encuentra Thomas.

No me extraña que al llegar, haya un montón de personas rodeándolo. Una vez que logramos acercarnos lo suficiente, podemos ver un gran ramo de rosas con una dedicatoria que le saca algunas lágrimas. Obviamente es un regalo de David ya que al no poder estar presente físicamente, se vio todo el estreno desde una pantalla y no dudó en felicitarlo por su buen trabajo.

Mi hermano mayor y mi cuñada se encuentran viajando por América debido a la gira de Lau. Luego de que mi cuñada lanzara su primer álbum, su éxito y carrera despegaron y decidió hacer su primera gira para conocer a sus fans por todo el mundo. Desde luego que los mellizos están con ellos porque mi hermano jamás habría dejado tanto tiempo a sus hijos. Los cuatro se encuentran compartiendo un momento muy importante para Lauren y es muy lindo ver que gracias a su esfuerzo, mi hermano está disfrutando de unas merecidas vacaciones.

            —El reparto hará una fiesta en el salón del hotel, ¿te quedas? —pregunta Thomas, sujetando mi mano para alejarme del grupo.

Me lo pienso unos segundos, pero niego de inmediato. Me encuentro demasiado cansado y no deseo dejar a Aiden así como está.

           —No, gracias —hago una mueca y él suspira —. Pero diviértete tú y recuerda no volverte mierda.

           —Tengo mejor tolerancia al alcohol que tú —él se burla y me abraza —. Veámonos mañana, ¿sí? Hay muchas cosas que tenemos que decirnos.

          —Quieres saber más de él, ¿cierto? —digo con seriedad.

           —Sí. Quiero verlo y saber cómo está —él se separa y suspira —. No se trata solo de tu relación, se trata de lo que vivió. La última vez que lo vi fue cuando corrió a su casa para evitar que su papá lo matara. ¿Es anormal querer saber todo lo que tuvo que vivir estos años?

La verdad, no, no es anormal. Pero me sigue causando incomodidad su emoción.

          —Aiden está celoso y no quiero discutir con él —suspiro —. Si tus ganas de hablar de él tienen que ver con que deseas verlo, ven a la conferencia del C.V.S. Estará ahí junto a los otros estudiantes y podrás preguntarle todo lo que quieras.

Thomas observa detrás de mí y se cruza de brazos.

          —Ambos. Tenemos que hablar los dos. Es necesario que tú también le hables.

          —Ha pasado mucho tiempo, si no recordé nada en todos estos años, no creo que pueda recordarlo tan fácil.

         —Una cosa es ver fragmentos y otra muy diferente es verlo a él. Además, no tiene que ser en términos románticos. Pueden iniciar una relación amistosa.

         — ¿Amistosa...? —Unas manos se detienen en mi cintura, impidiéndome seguir hablando.

         —Tenemos que irnos ahora o el tráfico nos obligará a dormir en el hotel —dice Aiden —. Mañana tienes que presentar el simulador de exámenes y es mejor que descanses.

         —De acuerdo —suspiro y palmeo el hombro de Thomas —. Felicitaciones, hiciste un buen trabajo.

Mi gemelo sonríe y me abraza, separándome un poco de Aiden.

          —Gracias, idiota —su abrazo se intensifica cuando baja la voz —. Piensa en lo que te dije, ¿vale? Sé que Niels no te dará la espalda si le cuentas todo lo que pasó.

Lo observo cuando se separa y me sonríe, despidiéndose de Aiden con seriedad.

Me despido de mi mamá con un gran abrazo y sonrío cuando Aiden también la carga, haciéndola reír por los halagos que le hace. Daniel y Taylor me abrazan en contra de mi voluntad y a pesar de que actúo como si me molestara, no puedo evitar sonreír cuando entre los dos me alzan en un abrazo que hace reír a todos.

            —Adiós, presidente —Miley, quien es la esposa de mi hermano Taylor, deja un beso en mi mejilla y revuelve mi cabello —. Descansa, pequeño.

           —Igualmente —le sonrío y abrazo a Dania, la esposa de mi hermano Daniel —. Hasta luego, Joli.

           —Nos vemos —ella sonríe y me guiña un ojo —. Vamos a ver quién gana esta vez.

Ruedo los ojos y sonrío, tomando la mano de Aiden cuando lo localizo.

Ambos caminamos con rapidez hasta el auto y nos despedimos de los fans que aún se encuentran afuera del hotel.

Por supuesto que al llegar al auto, Aiden suelta mi mano y se gira hacia la ventana, haciéndome saber lo molesto que está.

Vuelvo a tomar su mano con lentitud.

            —Lo siento —digo con sinceridad —. No quiero que te sientas intimidado o inseguro debido a esto. Él ya no significa nada para mí.

           —Thomas no opina lo mismo. Lo vi demasiado alegre.

           —Era su mejor amigo —suspiro, acariciando su dorsal —. Entiende, Niels no solo fue mi novio: también fue el mejor amigo de mi hermano.

          —Me quedó claro, tranquilo —dice intentando apartar su mano.

          —Aiden...

Veo su cara a través del cristal y mi pecho se aprieta al ver sus ojos llenos de lágrimas.

De verdad me mata verlo así porque Aiden no llora, al contrario; él es la persona más feliz que conozco. Todo esto es mi culpa y si no lo soluciono a tiempo, arruinaré la paz que hemos conseguido con mucho esfuerzo.

           —Aiden, hagámoslo público.

Mis palabras rompen el silencio.

Él tarda un rato en despegar su mirada del cristal, al parecer no es consciente o no entiende a lo que me refiero.

            — ¿De qué hablas? —pregunta confundido.

Aprieto su mano y acaricio su anillo de compromiso con delicadeza.

          —Si te hace sentir más tranquilo que el mundo sepa que nos casaremos, hagámoslo, ¿de acuerdo? —sonrío —. Cuando tú quieras, lo más pronto posible. Organiza una rueda de prensa y una cena con la familia. Lo anunciaremos cuanto antes.

Su mirada pasa de estar triste a brillar de felicidad en segundos.

          — ¿En serio? —Su sonrisa me hace sonreír también.

Asiento y río cuando se abalanza sobre mí, besándome con fuerza y emoción.

          — ¡Te amo! Organizaré todo para anunciarlo cuanto antes —chilla y me abraza con fuerza, apoyando su cara en mi pecho.

Deslizo mis manos por su espalda y observo por la ventana la ciudad a oscuras.

Pienso en todo lo que dirá mi familia y todo lo que dirá la prensa cuando se enteren. Supongo que se alegrarán, ya que todos esperaban que me casara con Aiden desde que confirmamos nuestra relación.

Pienso en lo que me dijo Thomas y mi expresión se congela. «Vas a volver a recordar todo». Espero que sí, solo deseo que sean recuerdos buenos y no unos que me hagan sufrir más.

No sé si sea egoísta de mi parte utilizarlo para reencontrarme conmigo mismo, pero espero que lo entienda. Ya no se trata solo de informarle lo que pasó con el cuerpo de su madre, sino sobre mí.

Ahora quiero acercarme, porque más que un sentimiento de culpabilidad, es una necesidad. Quiero que me ayude a recuperar al viejo yo.

Buenas tardeeees, ¿cómo están? Acá dejaré tres preguntitas para saber suus opiniones respecto a la historia. Recueden que leerlos me ayuda y me motiva a seguir escribiendo<3

¿Por qué creen que Niels no aceptó la residencia? 

¿Qué creen que pasará cuando se encuentren? 

¿Qué tal les cae Aiden?