Eva hablando:

Jamás me imaginé, que luego de sentir ese terrible e insoportable dolor, el cual voy a experimentar el resto de mi vida, me iba a sentir increíblemente bien...

Creo que “bien” no es la palabra correcta para explicar cómo me siento en estos momentos... Más bien es como si hubiese perdido mi mente y hubiera encontrado mi alma.

Me siento libre...

Mi loba era tan grande y majestuosa, tanto que podría llevar fácilmente a dos humanos sobre mi lomo, y para qué hablar de mis sentidos: Visión, olfato, audición. Cada uno de ellos había mejorado diez veces más.

Al principio fue raro y doloroso.

Mi cabeza dolía de solo escuchar el simple crujir que hacían las ardillas al masticar sus nueces. Me mareaba ver todo tipo de objetos y cosas y me dificulta a enfocar un objetivo en específico, y mi olfato fue lo más difícil de todo, percibía todo tipo de olores, algunos eran deliciosos… pero otros no tanto.

Gracias a Luke, pude adaptarme rápidamente a los nuevos cambios. Me enseñó que tenía que respirar profundo y concentrarme en qué quería escuchar, ver y olfatear.

—Eres fuerte Eva, nunca había visto a nadie adaptarse tan rápido al cambio como lo has hecho tú... Lo vas a lograr, pequeña.

30 minutos después...

Luke corría delante de mí para guiarme por dónde ir. Desde mi posición, podía escuchar los fuertes latidos de su corazón y su agitada respiración.

Somos tan distintos...

Su pelaje era negro como la noche, en cambio el mío, era tan blanco que cualquiera podría verme a leguas de distancia, solo estando en la nieve podría pasar desapercibida.

Mientras más nos acercábamos a la aldea, más podía oler el característico olor de la sangre.

Tengo miedo de encontrarla muerta, tengo miedo de que sea demasiado tarde...

De tan solo pensar en lo peor se me hacía un nudo en la garganta y mis ojos se llenaban de lágrimas al instante.

Justo en ese momento Luke se detuvo bruscamente, provocando que casi chocara con su fuerte cuerpo, que aún siendo de la misma raza, él seguía siendo incluso más grande e impactante.

Nos mantuvimos en silencio por unos segundos, veía atenta cómo movía sus orejas en todas direcciones tratando de captar algún sonido, entonces, de un empujón me ocultó en unos arbustos y luego se colocó justo detrás de mí. Estaba tan cerca que podía sentir su respiración en mi nuca y sus latidos se escuchaban aún más fuertes de lo normal...

Algo lo asustó...

Permanecimos inmóviles y en silencio por unos segundos, hasta que los escuchamos...

Aullidos, muchos aullidos...

Se escuchaban lejos de donde estábamos, pero después escuchamos un fuerte rugido, fue tan fuerte y ensordecedor que con tan solo escucharlo las aves que dormían en los árboles y entre los arbustos alzaron el vuelo despavoridas...

Son ellos...

No demoró en pasar justo frente a nosotros un gran grupo de lobos, iban corriendo a gran velocidad, dejando a su paso ramas partidas, gruñidos furiosos y sus profundas huellas hundidas en el lodo. Iban rumbo a la aldea, de eso no había dudas. Al verlos alejarse me dispuse a salir, pero Luke me detuvo al instante y nos volvimos a esconder.

En ese momento pasó corriendo frente a nosotros una enorme y aterradora bestia. Su cuerpo era musculoso y enorme, cubierto por un pelaje espeso y negro como la noche. Sus grandes manos era imponentes y con unas aterradoras garras que podrían diseccionar un trozo de carne con facilidad. La reconocí perfectamente, ya habíamos peleado contra uno de ellos una vez. En ese entonces pensé que aquella bestia con facciones de lobo y cuerpo humanoide era terrorífica y que no había nada más como ella, pero me equivoqué... Este Huargo era mucho más grande y terrorífico que el anterior.

Su enorme tamaño, sus largas extremidades con poderosas garras, su pelaje negro como la noche, sus colmillos ansiosos por desgarrar un pedazo de carne... Su ojo rojo.

—Es mi padre, ya no queda nada de humanidad en él —Dijo mientras veíamos cómo se perdía entre los árboles.

—Luke... ¿Cómo vamos a llegar primero que ellos?

Él me miró, y luego volteó a ver los muchos caminos que habían frente a nosotros. No podíamos ir por donde mismo fueron ellos, solo éramos dos lobos contra todos esos licántropos, eso sería como ir directo a la muerte...

Escuchamos movimiento entre los arbustos...

Y de repente unos lobos salieron de la nada y nos rodearon.

—¿¡Quiénes son ustedes!? —Gritó Luke furioso mientras se ponía frente a mí y gruñía mostrando sus imponentes colmillos.

Los extraños permanecían en silencio, mientras que nosotros estábamos en alerta, asustados... Podían ser algunos rezagados del grupo de Lucian, tal vez nos escucharon y volvieron para matarnos...

Y justo en es instante, uno de ellos caminó con calmados pasos hacia nosotros. Su pelaje era igual de negro que el de Luke, incluso eran de misma altura, ellos dos eran tan parecidos.

—Tranquilos, somos amigos —Habló el lobo negro.

—¿Quiénes son ustedes? —Hablé, pero el silencio entre ellos era incómodo.

—Escuchamos que la hija del Alfa Ahab estaba viva —Me observó de arriba a abajo —Y que el hijo del traidor le declaró la guerra a su padre —Miró a Luke sonriente.

¿Nos conocen?

—¡No respondiste mi pregunta! ¡¿Quién demonios son ustedes?! —Gritó Luke y se acercó con rapidez hacia aquel lobo negro, el cual no retrocedió ni un solo milímetro ante la amenaza.

—¡Calma, calma muchacho! Tienes el mismo temperamento de tu padre, es un alivio que solo te pareces a él en eso, lo demás lo heredaste de mí — Sonrió mientras que Luke retrocedió unos pasos mirándolo sorprendido.

—¿Qué? ¿No lo sabes? Tu padre tiene un hermano —Rió por lo bajo —Soy tu tío Lucas.

—¿Pero qué dices? —Luke lo miró sorprendido.

—La última vez que te vi usabas pañales —Sonrió —Nosotros éramos parte de la manada de Ahab.

—¿Ustedes son los que ayudaron a mi madre Tarah a escapar? —Lo interrumpí.

—Así es princesa Woolfmoon, vinimos hasta aquí para ayudarlos, es hora de que la manada Moonlight vuelva a unirse.

—Soy Eva... —Sonreí a boca cerrada —Para los amigos soy solo Eva.

—Les presento a mis amigos —Miró hacia los tres lobos que habían detrás de él —Ellos son Ian y los gemelos Bastian y Dastian, por ahora solo somos nosotros, pero en cuanto nuestras familias estén en un lugar seguro vendrán más hombres para ayudarnos.

Ian era un lobo majestuoso de color marrón oscuro, su mirada transmitía serenidad, al parecer él era el más calmado, el que mejor analizaba las cosas. Mientras que los gemelos eran de un color gris casi negro, pero lo que diferenciaba a Bastian de su hermano, era la franja plateada que traía en su lomo.

—Tenemos que irnos ahora si queremos llegar primero que ellos —Habló Ian.

—Tienes razón hermano, ya nos sacan bastante ventaja —Habló Lucas.

—¿Cómo vamos a llegar primero que ellos? —Pregunté.

—Nosotros vivimos aquí, princesa —Sonrió —Conocemos todos los atajos de este bosque —Dijo Bastian.

—Así es... No es el más seguro, pero sí llegaremos dos horas antes —Habló Dastian.

—¿A qué te refieres con que no es seguro? —Interrumpió Luke.

—¿Haz escuchado hablar de los Blinds? —Dijo Ian.

—Son una leyenda... —Respondió Luke.

—No, no son una leyenda Luke —Lucas se escuchaba bastante serio.

<<Los miré sin entender nada>>

—¿Quiénes son los Blinds? —Finalmente hablé

—No quién, sino qué —Respondió Bastian.

—Son un clan de vampiros que han vivido por siglos en las Cavernas del Diablo, entre las sombras, en un ambiente oscuro, húmedo y frío. Saben trepar paredes con facilidad, son ciegos, por lo que se mueven por sonidos de ecolocalización. Pero tenemos una oportunidad de cruzar las cavernas sin que nos vean. —Explicó Dastian.

Me recuerda a los demonios de las ruinas de Zinias...

Esto no me gusta para nada...

Luke nunca ha visto a los Blinds, de hecho pensaba que solo eran una leyenda que le contaban a los niños para asustarlos cuando hacían travesuras, pero Lucas y sus amigos nos dijeron que sí son reales y que son un verdadero dolor de cabeza... Salen de noche a cazar, por eso tenemos una pequeña oportunidad de pasar desapercibidos, son la principal amenaza con la que han tenido que lidiar todos estos años desde que huyeron de Lucian. No tienen para nada una pizca de humanidad, por lo que no son como los vampiros que Luke asesinó aquella noche, más bien son como animales, por lo que su intelecto es como el de un animal salvaje.

Corrimos por un pequeño arroyo y unos venados que estaban bebiendo agua muy tranquilos salieron corriendo con tan solo vernos. Corrimos por el camino irregular, lleno de ramas, rocas, pequeñas colinas y mucho lodo.

Finalmente llegamos, y todo lo que me imaginé de por qué llevaba ese nombre no daba crédito a lo que mis ojos veían... Estaba escondida entre los árboles, las rocas le daban el aspecto de un rostro terrorífico y el viento se colaba entre sus formaciones rocosas formando un sonido inquietante parecido al de un susurro tenebroso.

Por eso se llama así...

—Mantente cerca de mí, Eva. No sé a lo que nos vamos a enfrentar —Me susurró Luke al oído.

—Luke... —Me miró —¿Tienes miedo? —Él se quedó viéndome en silencio.

—Solo quédate cerca de mí, y todo estará bien. —Respondió.

Cuando nos paramos frente a la entrada una brisa fría golpeó nuestros rostros.

—Mantengan los ojos abiertos, a esta hora deben de estar cazando, pero puede que aún quede algún rezagado —Advirtió Lucas en voz baja.

Al entrar, un fuerte olor a humedad golpeó mi nariz, había frío, goteaba agua del techo y todo estaba oscuro. Aunque nada de eso era realmente un problema para nosotros. Estaba lleno de murciélagos colgados del techo, los cuales, al más mínimo sonido saldrían volando por todos lados. Las estalactitas hacían mucho más peligroso el camino, por lo que teníamos que caminar con mucho cuidado para no tropezar y no hacer ningún ruido fuerte.

Al frente iba Lucas junto a Ian, luego estábamos Luke y yo y detrás de nosotros venían los gemelos.

Mientras más nos adentrábamos, más fuerte era el eco que hacían las gotas de agua al caer, y también se escuchaba el sonido que hacían los murciélagos al revolotear.

Justo en ese momento, Lucas e Ian se detuvieron y comenzaron a mirar cuidadosos hacia todos lados mientras que movían sus orejas captando algún sonido.

—Están aquí... —susurró Luke y mi corazón comenzó a acelerarse.

—Luke, prepárate para correr con Eva —susurró Lucas y el chico asintió...

—¿Qué? No los vamos a dejar aquí —Discutí en voz baja.

—Eva, vinimos hasta aquí para ayudarlos, no para que mueran con nosotros —Habló Bastian en un susurro.

—Está detrás de nosotros... —Susurró Ian.

Nos giramos lentamente, mirando cuidadosos hacia todos lados...

—¿Dónde está? ¡Maldita sea! —susurró Luke algo alterado.

—Arriba... —Hablé con voz temblorosa.

Estaba encima de nosotros, suspendido del techo de la caverna... Su cuerpo era retorcido, no tenía pelaje alguno, en cambio, tenía una piel arrugada y carmelitosa. Sus orejas eran puntiagudas, su nariz era grande y tenía unos enormes hoyos y su boca estaba repleta de dientes pequeños y afilados.

Es realmente aterrador...

La bestia dió unos pasos hacia nosotros y mi corazón se aceleró aún más.

—No te alejes de mí —Me ordenó Luke y yo enseguida asentí.

Y justo en ese momento la bestia saltó sobre nosotros, Luke me empujó, alejándome del peligro.

—¡Corran! —Nos gritó Ian segundos antes de que el Blind saltara sobre él, intentando atacar su cuello.

Lucas corrió hacia su amigo, intentando sacarle a la bestia de encima, lo mordía, lo rasguñaba, hasta que al fin logró quitárselo de encima.

Pero esta vez el animal saltó sobre Lucas.

Mierda...

Estoy congelada, no puedo moverme, estoy en shock.

—¡¡Protéjanla!! —les pidió Luke a los gemelos.

Luke saltó sobre el monstruo que atacaba frenéticamente a Lucas... Lo mordía, le despedazaba la espalda, los brazos, hasta que con la ayuda de Ian lograron quitárselo de encima.

El Blind corrió hacia un extremo de la caverna y vimos cómo trepaba por la pared hasta quedarse suspendido en el techo. Sangraba y se quejaba del dolor mediante unos gruñidos.

Todos lo seguimos con la vista, veíamos cómo el vampiro se quedaba quieto en una esquina del techo mirándonos con esos ojos rojos casi negros.

Y justo en ese momento dirigió su atención hacia mí.

—¡Eva, corre ! —gritó Luke.

Pero fue demasiado tarde, el Blind saltó hacia mí y antes de que llegara, Dastian se puso en el medio impidiendo que me atrapara... Fue directo a su cuello, escuché cuando dio un gemido de dolor y la sangre comenzó a brotar de su herida.

Bastian saltó sobre él y se lo quitó de encima, luego vino Ian y fue directo a su cuello, mordiéndolo, despedazándolo, hasta que ya no se movió más.

Yo estaba temblando de miedo, paralizada en el lugar...

—¿Estás bien, pequeña? —Luke estaba realmente preocupado mientras me inspeccionaba de arriba a abajo.

Asentí, las palabras no me salían de los labios...

—Tranquila, ya pasó —Me consoló con dulce voz y me sentí más tranquila al escucharlo.

—¿Puedes caminar? —le preguntó Bastian a su hermano.

—Tranquilo, sanará... —Dijo Dastian hacía un quejido de dolor.

—¡Te lo advierto! ¡Nadie más que yo puede matarte! —bromeó Bastian y ambos hermanos se abrazaron.

Corrimos, corrimos por aquella caverna sin importar hacer ruido, habíamos perdido mucho tiempo...

Al salir de la caverna aparecimos justo en la aldea. No me fue difícil ver a mi madre y a nuestros amigos desde lo lejos... Mamá estaba acostada en el suelo y junto a ella estaba Lucy tomándola de la mano, Marcos y dos lobos, que ha juzgar por su pelaje, diría que el de color rojizo era Nerina, mientras que el de color gris era Jordan, por lo visto mi amigo había decidido transformarse.

Corrí con todas mis fuerzas hacia mamá, deseé tanto volver a verla, enseguida la acaricié con mi cabeza y unas lágrimas salieron de mis ojos...

—Mamá... —Hablé, pero fue en vano, pues los lobos no podemos comunicarnos con los humanos, aunque quisiéramos, ellos no nos entenderían, y eso era lo que más me atormentaba en estos momentos... No poder decirle a mi madre lo mucho que la amo.

—Lo lograste… hija—Sonrió débilmente y me abrazó mientras unas lágrimas corrían por sus mejillas.

Me duele verla así: Pálida, fría y casi sin aliento...

Conozco estos síntomas, conozco su final...

Sé que las heridas de las dagas mortales tienen un solo antídoto, y aquí no lo hay...

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Hola, hola.

¿Les gustó el capítulo?

¿Qué les pareció el encuentro con el Blind?

Nuestros Luke no está solo después de todo :)

Nos vemos en el próximo capítulo ❤️