Escuché voces en todas direcciones, todas susurraban.

De ves en cuando las sentía cerca, otras lejos, como si hablarán de mí en susurros.

Había una en especial que sonaba firme, sin emoción.

Tuve miedo de esa voz.

- ¿Ashly?... Ashly.

El olor a alcohol estaba en mi nariz, haciendo que recuperara la conciencia.

Cerré con fuerza los ojos e intenté concentrarme en lo que sucedió antes de desmayarme.

- ¿Mhm?

- Oh, qué alivio - era la voz de mi papá - ¿Cómo te sientes?

Mi padre me ayudó a sentarme en el sillón ¿Sillón? ¿En qué momento llegué aquí?

- Me duele la cabeza - susurré.

Abrí los ojos y lo primero que vi, no fue mi padre, si no Charles.

Cálladita.

- Espérame aquí, traeré un paracetamol - me dio el algodón húmedo.

Mi papá se levantó y se fue hasta la alacena, a buscar la pastilla.

Desvié la vista de Charles. Pero seguía sintiendo su mirada sobre mí.

¿Qué había pasado?

Mis recuerdos ahora son borrosos y confusos.

Había imágenes mías picando los tomates, con los que se supone haría ensalada. Recuerdo también que... ¿Qué pasó después?

Flashes de imágenes en color rojo con bordes negros llegaron a mi mente, había desesperación, pánico en cada imagen a través de mis ojos. Por unos segundos, volví a experimentar ese sentimiento. 

Y por último, Charles con sus manos alrededor de mi garganta, con una emoción que no comprendí.

Papá regresó con un vaso y una pastilla de 650g de paracetamol, tomó asiento junto a mí. La tomé y bebí del agua.

- Señor Tobos, debo irme, mi madre me espera en casa - dijo Charles al tiempo que se ponía de pie y mi papá lo imitaba.

- Oh, por favor, puedes decirme Hugo - estrechó la mano con él - Gracias por ayudar a mi hija.

- No agradezca, sólo hice lo que me enseñaron en cursos - le sonrió - Nos vemos, mañana, cariño - dijo en mi dirección.

Lo miré sorprendida ¿Cómo se le ocurre llamarme así frente a mi padre? 

- Yo lo acompañó a la salida - dije mientras levantaba del siento.

Salí de casa y cerré la puerta detrás de mí. Charles caminó hasta el portón.

- Debo hablar contigo - dije.

-... Adelante - respondió después de unos segundos.

- Bien - pasé saliva, aclaré mi garganta - ¿Por qué has dicho... que somos pareja? Tú y yo no hablamos.

- Ah, eso - asintió y se dio media vuelta, para verme - Por que necesitaba una forma de tenerte junto a mí - se encogió de hombros - Para asegurarme de que no abras la boca.

- Yo recuerdo haberte dicho que no lo haré - le repetí.

- Y te escuché bien, pero no confío en ti aún sabiendo que si lo haces... tu padre muere. Solo me aseguro.

- No puedes hacer eso, no nos llevamos bien y tampoco nos hablamos.

- Ya lo hice, linda.

Empezaba a molestarme su actitud, tan despreocupado, sin importarle lo que sucedía a su alrededor y las consecuencias de sus acciones.

Pero no podía dejarlo ir así sin más. Debía de darme otra explicación.

-... ¿Que sucedió allá dentro? - y aún después de decirlo, tuve miedo de su respuesta.

- Fue tu culpa - dijo - Te cortaste ¿Olvidas que soy sensible a la sangre?

Negué con la cabeza.

- No me refiero a eso - le expliqué - ¿Que sucedió antes de que llegara mi papá?

¿Por qué rayos, mi padre estaba feliz de que Charles estuviera aquí?

- Oh... yo no sé de qué hablas - me pareció que duda un segundo en contestar - Nos vemos al rato.

Antes de que pudiera agregar otra cosa, caminó hasta la salida y de un salto cruzó el portón.

Miré molesta por donde había ido. Aún tenía el día de mañana para hablar con él.

Regresé a casa a continuar de preparar la cena. Decidí no tocar el tema con mi papá, ya que él no se veía molesto con el hecho de que Charles estuviera aquí.

- Entonces ¿Que haremos de cenar? - pregunto mi papá.

- Quizás, será mejor si solo bebemos café - me encogí de hombros.

Cuando tomé el pocillo para lavarlo, miré que mi dedo no tenía la herida que me había hecho con el cuchillo.

¿O acaso fue imaginación mía?... No, por que yo recuerdo...

- Papá... ¿Que sucedió cuando llegaste? ¿Que estaba haciendo... Charles?

Enjuague el pocillo y lo llené con agua para luego colocarlo en la estufa.

- Tu novio estaba aquí, dijo que te desmayaste y te llevó hasta el sofá - me respondió de manera inmediata.

Bien, parte de eso era verdad, pero ¿Y lo otro? Yo recuerdo que él me hizo daño ¡Estuvo a punto de ahocarme!

- ¿Eso sucedió? ¿Qué estaba haciendo él aquí?

- Venían a terminar un trabajo pendiente ¿Ya lo olvidaste?

- Ah, sí ¡Quiero decir, no! No lo olvidé, solo que sí, es verdad - dije nerviosamente.

- Él dijo que te sentiste mal, luego te caíste, te golpeaste la cabeza, yo llegué cuando todavía estabas en el suelo.

Eso no estaba bien, no estaba bien.

¿Cómo es que mi padre recuerda algo que no sucedió? ¿Cómo es que le creyó a Charles?

Tomamos el café en silencio para después cada quién regresar a su habitaciones.

Cuando me miré frente al espejo, observé las marcas en mi cuello.

La prueba de que Charles sí había intentado asfixiarme, pero ¿Por qué mi papá no las veía?

Al día siguiente intenté cubrirlas con maquillaje, ya que se volvieron más notables. Pero por precaución, llevé un suéter con cuello de tortuga.

Apenas puse un pie dentro del Instituto, todos tenían su vista sobre mí.

No podía voltear hacia un lado por qué inmediatamente ellos desviaban la vista o en el peor de los casos, murmuraban entre sí mientras me miraban.

Yo simplemente bajé la mirada, era mejor si no les veía.

- ¡Hey, Ashly!

No pasaron ni cinco segundos cuando tuve que levantar la mirada para encontrarme con Charles.

Venía a paso rápido en mi dirección, yo regrese al frente y caminé lejos de él.

- ¡No seas así, la pelea de ayer ya pasó, cariño!

Ah, maldito.

Lo ignoré y seguí mi camino hasta el aula, pero antes de poder llegar, él ya estaba sosteniendo mi muñeca y llevándome dentro de un salón vacío más cercano.
Para mí suerte, los pasillos estaban vacíos. Sucedió en menos de un segundo, ni cuenta me di cuando yo estaba dentro de otro salón.

- ¡Hey! - me quejé cuando me soltó - ¿Qué haces?

- Será mejor que sigas el juego, linda - dijo apenas cerró la puerta a la vez que se acercaba a mí - Cosas malas pasarán, ya lo sabes.

- Ya te dije que-

- ¡Ya lo sé, deja de repetirlo! - me interrumpió, claramente molesto - Pero no confío en ti ¿Entiendes? Necesito que estés cerca de mí, es por mi seguridad.

Ah, claro, para la seguridad de un vampiro ¿No?

Pero es algo que claramente, no le diría jamás.

- ¿Te recuerdo las consecuencias?

- No - respondí al instante -... Bien, lo haré, seguiré tu juego - le dije al cabo de unos segundos.

- Maravilloso, ahora solo tienes que seguirme la corriente en todo - y de pronto, también estaba sonriendo, pero podía ver un poco de molestia en sus ojos - Ahora, vamos a salir, tomaré tu mano y nos iremos juntos al salón ¿De acuerdo?

No podía creer que ahora estaba jugando a ser su novia, novia de un... vampiro.

Abrió la puerta e hizo exactamente lo que anteriormente había dicho.

Yo no quería jugar a eso, yo quería respuestas ¡Necesitaba saber por qué mi padre ignoro las marcas que él me hizo el día anterior!

El día transcurrió sin más percances.

Marc parecía estar más relajado en cuanto lo vi, incluso dijo que deberíamos ir a ver otra película el fin de semana, accedí gustosa de poder pasar un día con mi mejor amigo.

Charles estuvo sonriente todo el día, hasta que salimos de los límites de la escuela, su rostro cambio a uno sin importancia, me había soltado y tomado su camino, únicamente diciendo un "Nos vemos al rato"

Caminé en silencio hasta mi casa, en verdad necesitaba contarle todo esto a alguien.
Pero si lo hacía, mi padre saldría lastimado y no quería eso.

☠️💉

Tomamos fotos.

Sonreímos.

Nos reímos.

Éramos felices.

Ella miró su reloj y dijo que debía de irse.
Me sonrió triste mientras lo dijo.

Pero ¿De dónde salieron sus maletas?

- Ashly, debo rime, ya es hora.

- No lo hagas, tu avión puede esperar más tiempo ¿No?

- Se irá sin mí y no pagaré en vano - se río un poco.

- Pero aún hay lugares que no hemos visitado - le sugerí - Podemos al teatro o....

- Ya hemos ido a todos los lugares de la ciudad - respondió.

¿En qué momento fue? ¿Por qué no recuerdo eso?

- Solo, vete hasta mañana ¿Si?

Mi hermana esbozó una pequeña sonrisa antes de bajar la mirada, no se que podría estar pensando, pero cuando levantó la vista, ya no estaba feliz.

- Si tanto querías que me quedara... ¿Por qué no me salvaste?

El aeropuerto se transformó en la avenida de la ciudad, sus maletas en la moto y ella estaba en mis brazos, con una herida sangrante en su cabeza.

¿Qué?

- ¿Por qué no me salvaste?

No, yo... ella y yo estábamos bien ¿Que sucedió? ¿Por qué está herida?

Bingo.

Es cierto, ella murió por mi culpa ¿Verdad?

- Ashly ¿Por qué no me salvaste?

☠️💉

Desperté de pronto.

Con la frente sudorosa y el corazón latiendome a mil por hora.

De nuevo, la misma pesadilla.

Me levanté de la cama y fui hasta la cocina, me serví agua en un vaso, lo dejé de nuevo en el fregadero.

Pasé saliva, nerviosa.

Fue solo un sueño, ella no murió por mi culpa... ¿verdad?

Solo estábamos de compras, como todos los fines de semana.

Fue un accidente que de regreso a casa, no viéramos el carro que se aproximó... fue un accidente que ella decidiera darle el casco a su hermana menor... que yo solo mirara lo sucedido.

Pero aún así...

Ella dijo: ¿Por qué no me salvaste?

Por que yo sabía cómo ayudarla y sin embargo, no lo hice. No pude hacerlo.

-karimodelarosa.