N/A: Quiero aclarar que algunos personajes perteneces a Animes, Mangas y Novelas que no e visto. Así que si notan que en un personaje algo no tiene sentido es por qué desconozco de tal, pido disculpas de antemano.

Al día siguiente:

Hoy era un miércoles, todo normal hasta que Najimi salió aparentemente de la nada y corrió hasta mi escritorio en la hora del almuerzo.

Najimi: Oye, oye Leonida-kun. ¿Estás libre está tarde? Iremos de compras con Komi-san y los demás simps. — jaja, dijo simps. Energéticamente hizo una invitación, a lo cual acepte. — Okaaay, entonces te espero en el centro comercial de Kuoh.

Salió corriendo de mi escritorio a hablar con demás personas. La dirección no era nada lejos de mi casa, así que tendía bastante tiempo para prepararme.

Ahora que lo pienso, no estoy saliendo mucho de casa últimamente, ni siquiera para ir a la base de Fatui, creo que poco a poco me estoy convirtiendo de Fuutaro.

Touya: Supongo que nadie puede negarle algo a 'eso' ¿Huh? — sacándome de mis pensamientos, Touya apareció cerca de mi escritorio hablándome sin despejar la vista de Najimi con una gota de sudor.

Ayanokouji: Tiene demasiados amigos, probablemente piensa pedirle un poco de dinero a todos. Tendría mucho dinero para gastar o ahorrar. — bueno, esa situación me hace acordar a qué si un país tiene 15 millones de habitantes y cada uno presta un dólar, el país tendía 15 millones de dólares.

Leonida/Touya: Bueno, tendría muchas deudas después. — al unísono.

Aunque se tratase de Najimi, su capacidad social sigue siendo limitada. Al menos por ahora.

Time Skip.

Ya terminaron las clases por hoy, y no tenía actividades en el club. Salí hasta la puerta de la escuela y ahí estaban los 5 jóvenes que les haría compañía.

Najimi: ¡Leonida, aquí! — sacudió la mano de un lado al otro totalmente alzada, supongo que piensa que me voy a perder o algo así.

Leonida: Veo que ya están todos listos, cuánto tiempo Tadano.

Tadano: Hola, Cuánto tiempo. — yo y Tadano nos saludamos con un leve movimiento de mano, después saludé a los demás, siendo la única diferente Komi-san que me saludo a través de una nota.

Era curioso su trastorno de comunicación y su incapacidad de soltar siquiera una palabra, aunque contaba con la ayuda de Tadano y su grupo de amigos. Gracias a eso ella tiene muchos amigos, y me incluyo en su lista.

Los demás chicos comenzaron a caminar que terminaron dividiéndose, Tadano con Komi y Rumiko Mangabi. Yo con Touya y Najimi, que algunas veces cambiaba de grupos a una enorme velocidad.

Cuando llegamos al centro comercial Najimi dijo que esperemos a otros chicos que invito por celular. Así que pasaron más de 5 minutos y llegaron, me sorprendió que llegara Fuuka con ellos.

Leonida: Que raro, yendo con personas que no te interesan.

Fuuka: Vamos, no soy tan fría. ¿O si? — no que va, y tus kouhai's (jóvenes de menor año, al menos en este caso. Antónimo: sempai) no te tienen miedo.

Leonida: Dejando eso de lado. No esperaba que te interesaran las compras.

Fuuka: Meh, tenía tiempo libre y Najimi llamo, una cosa llegó a la otra y...

Leonida: Ya, ya entiendo. — Aunque era directa con todos, por alguna razón era un poco más amable conmigo. A pesar de que le importo que yo sea el General de la organización, aún hacia lo que quería.

Najimi anuncio que ya empezaban las compras junto con una Komi alejándose de alguien, Ren Yamai, creo que es. Así que con eso, nos separamos nuevamente quedando contra vez con Touya y con Fuuka.

Fuuka: Me parece justo, que una persona con experiencia este con el labor de cuidar a los niños.

Leonida: Tengo la misma edad que tú. ¿Sabes? — una marca de enojo apareció por un momento en mi, el hecho de que sea más bajito que ella no quiere decir que sea un niño. Touya solo sonrió incómodamente.

Touya: Bueno, es nuestra sempai después de todo...

Leonida: Por cierto... — interrumpo. Me saque los lentes en indicación a hablar de la organización. — Chabashira-sensei está a cargo de seguir las investigaciones físicas de los yakuza.

Touya: Nuestra tutora ¿Verdad? Bueno, yo no tengo queja alguna.

Fuuka: Mientras no sea molesto, entonces todo bien para mí.

Leonida: Ah, y terminando. Fuuka, necesito hablar contigo después. — termine de comentar antes de volver a ponerme los lentes. De reojo ví a la albina mirándome con una cara que refleja interes. — Y ahora... — envolví mis brazos con el dúo acompañándome, Touya a la derecha y Fuuka a la izquierda — ¡A comprar!

Time Skip.

Luego de despedirnos de los demás, con algunas bolsas de cartón, hice una llamada a mi madre preguntando si puedo invitar a unos amigos a la casa, cosa que acepto felizmente.

Touya: Bueno... Es bastante grande.

Fuuka: ¿Primera vez?

Ambos estaban en la puerta de mi casa, Touya tenía una cara de asombro e increíble mientras que Fuuka con sonrisa segura cruzo de brazos.

Abrí la puerta y me hice a un lado invitándolos a pasar.

Leonida: Bienvenidos a mi 'humilde' morada. — sobra decir que de humilde tiene poco.

Touya: Con permiso... — Touya seguía con la misma cara de sorpresa al entrar, sacándose los zapatos en la entrada.

Fuuka hizo lo mismo y sin decir nada fue a la sala principal y se sentó en el sofá.

Touya: ¿No es muy grosero...?

Fuuka: Tranquilo, ya estuve aquí antes. — un par de palmadas contra el sofá se escuchó provocados por la albina mientras hablaba, supongo que ya entro en confianza con el ambiente.

Leonida: Siéntate Touya, ¿Quieren tomar algo? — me dirigí a la cocina mientras preguntaba, ya preguntando que vino debería sacar del refrigerador esta vez.

Touya: Un café negro, si no te molesta... — en este punto, el ya estaba sentado.

Fuuka: Vino suave, por favor. — cruzaba de piernas ante su comentario. Touya la vio totalmente incrédulo.

Touya: Este... ¿Eso no es ilegal? — aunque la pregunta fue dirigida a la albina, parecía que está le entró la pregunta por una oreja y le salió por la otra.

Fuuka: Y no sirvas mucho está vez.

Ignorando los jóvenes en el sofá, prepare ambas bebidas. Una en una taza blanca con detalles azulados y una copa de cristal ancha y poco onda, como las típicas copas de vino.

Touya: ¿Tus padres te dejan beber? — se refería al alcohol por supuesto.

Fuuka: Dudo que a ellos les importe, además fue la señorita Selena quien me invitó por primera vez. — mentiras no había en su comentario, aún recuerdo ese día. Probablemente mi madre ya estaba borracha en ese momento.

Leonida: Aquí tienen. — deje una taza de café con un plato de conjunto en la mesa y le di en la mano la copa con un vino rojo oscuro, ambos tomaron un pequeño sorbo de sus respectivos vasos.

Cómo Touya se sentó en sillón en dónde era solo para uno, me senté junto a Fuuka, la cual mostraba indiferencia poniendo su brazo sobre mis hombros. Al mirar a Touya me miraba con una cara monótona, casi preguntando con la mirada "¿En serio?".

Recordé sobre lo que hablamos ayer, y desvíe la mirada. Hablar sobre eso con la protagonista presente sería muy incómodo sin duda alguna.

Leonida: Bien, ahora... — me quite los lentes falsos y los guarde, creo que hay una regla que no explique. Lo haré más tarde. — ¿Estudiaron para los exámenes?

Fuuka: Sabes que no tendré problemas con eso. — un par de palmadas aparecieron con el diálogo, la verdad entiendo un poco el malentendido de que seamos una pareja, y es un poco vergonzoso la verdad. — Además, soy mayor que ustedes, así que les deseo suerte.

Leonida: Te digo que tenemos la misma edad. — de verdad, está mujer hace lo que quiere.

Encendí la televisión en frente de la sala, sabiendo que esto iba a pasar me prepare un jugo de uva.

Ahora que estamos todos en paz, la razón por la que me quite los lentes y me siguieron tratando de manera indiferente es porque al sacarme los lentes y tenerlos a la vista quiere decir que hablaremos de la organización, sin embargo si los guardo quiere decir que solo me los quería quitar, y aún me tienen que preguntar por cuenta propia sobre temas de trabajo.

Por supuesto esto solo se aplica en lugares públicos, sería totalmente innecesario hacerlo en la base. Aunque el club de la escuela sigue contando como un lugar público sin importar si no hay nadie.

Había pasado un tiempo desde que prendí la televisión, inconscientemente recosté mi cabeza sobre el hombro de Fuuka. Algo que no me di cuenta hasta que Touya hablo.

Touya: Lo siento, me tengo que ir a casa para esta noche, gracias por el cuidado.

Leonida: Ah- no, no. Está bien. — su voz me saco del transe en el que estaba y me pare, de reojo pude ver a la chica con una cara de burla antes de desviar la mirada, supuse que se dió cuenta de mi acción.

∆∆∆

Para cuándo Touya se fue de la casa, la albina me miró fija y confiadamente, cosa que me ponía nervioso.

Fuuka: Al fin te estás poniendo cariñoso conmigo, ¿No? — lo sabía, pensaba en tal provocación.

Leonida: S-Solo fue algo que hice inconscientemente. — mierda, tartamudear cuando intentaba dar una razón solo me hacía parecer un tsundere. La mujer en respuesta rio un poco. — Como sea. Ven a mi habitación, hablaremos ahí.

Fuuka se levantó, yo apague la televisión de la sala y dejé la taza y la copa en el lavabo, más tarde los limpiare.

Al llegar a mi habitación ví a Fuuka ya sentada en la cama, su mirada se dirigió en mi.

Fuuka: Vaya, no pensé que serías tan atrevido de invitar a una chica a tu habitación.

Leonida: Cállate, no es la primera y única vez a la cual entraste aquí, también invito a otros amigos. — aunque realmente eran pocas ocasiones. No porque no tenía amigos, si no porque prefiero ir a la casa de otros antes que la mía.

Fuuka: Entonces, ¿Qué quieres que haga?

Leonida: Necesito que te encargues de un grupo de delincuentes. — me dirigí a la silla de un escritorio y me senté, cruzando las piernas. — La última vez que se les vio fue en las calles de Sasori, y según la investigación de los Fatui y la policía, plantearán un atraco en el banco "Regulus" a mano armada, entre otros objetos. Toda información está aquí. — abrí un cajón del escritorio sacando una carpeta azul con algunos separadores, Me pare y la entregue a Fuuka, quien agarro y empezó a dar un vistazo a la carpeta.

Espere unos minutos antes de volver a hablar.

Leonida: ¿Aceptas?

Fuuka: Se ve demasiado fastidioso y muy difícil, espero que me recompensen con esto. — se enojo un poco antes de cerrar y dejar la carpeta de lado.

Leonida: Por supuesto, aunque no tenemos una recompensa definida, puedes pedir lo que quieras. — la albina me dió una mirada imponente e interesada.

Fuuka: ¿Lo que quiera, sin restricciones? — supongo que se refiere a algo más que el dinero o lo material.

Leonida: Si. — ante mi respuesta, la chica sonrió maliciosamente antes de parar el y dirigirse rápidamente a mi, cosa que por instinto retrocedí chocando contra la pared.

Fuuka extendió sus brazos dejándome atrapado entre ella y la pared contra la espalda, esa acción me había asustado un poco.

Leonida: ¿F-Fuuka-san? — estaba por exigir alguna clase de explicación, pero Kiryuin hablo primero.

Fuuka: Sabes muy bien que soy una adolescente ¿No? — bajo uno de sus brazos para, con su mano, subir mi mentón. — Estoy curiosa por saber algunas cosas del mundo, entre ellos, placer sexual.

Sinceramente no me gusta el ritmo por el cual está yendo las cosas, y no ayudaba que Fuuka subía lentamente su rodilla separando mis piernas mientras que al mismo tiempo se acercaba a mi cara.

Fuuka: Creo que ya sabes a lo que me refiero. — Ugh... En ese caso...

Leonida: B-bien, pero tal recompensa requerirá de un excelente trabajo. Así que no esperes que te la de ahora. — con esa respuesta, la chica quedó satisfecha y se alejo, dejándome respirar un poco.

Fuuka: Entonces, lo esperaré con ganas. — volvió a su sonrisa confiada de siempre, una totalmente diferente a la que me acabó de dar.

Con eso Fuuka se retiró de casa. No pude creer que de verdad daría mi virginidad de esa manera. Pero si era lo que quería, como General no puedo negárselo, solo espero estar preparado para la ocasión.

Fin del cap.

Lemon confirmado? Les gustaría? Jsjs