Capítulo 2.
Mañana: 7:30 a.m
Me encontraba otra vez sentado en mi escritorio, sin hacer nada más que ver por la ventana como aún van llegando algunos estudiantes de la puerta, con una mano sujetando mi cabeza por el mentón.
X: ¿Kabutsuki-kun? — ante la llamada de mi apellido gire mi cabeza para ver a dos individuos parados al lado de mi silla, uno tenía el cabello desordenado de color verde, ojos verdes con algunas pecas y llevaba el traje masculino de la escuela.
El otro era un poquito más bajo y tenía el cabello un poco más peinado, color azul que convinaban sus ojos, un mechón largo estaba en su cabello y vestía con traje masculino de la escuela. Respectivamente, Izuku Midoriya e Iruma Suzuki.
Leonida: ¿Sucedió algo? — no me pareció raro saber que ellos intentan socializar con algunos miembros de cada clase juntos, ambos eran tímidos e inofensivos. Claro, si le quitamos la fuerza física a Izuku, alias Deku. Y su puntería y profesional uso de arco a Iruma.
Iruma: ¡Ah! Este... Nos preguntábamos si podíamos pedir prestadas algunas cosas del club de jade... ¡Pues solo lo usaremos para practicar!
Leonida: De acuerdo. — acepté antes de que alargará su explicación, a sus ojos parece que tratar una 'estrella' era equivalente a hablar con personas importantes, cosa realmente absurda.
Izuku: ¿Eh? Este... ¿Está bien ir directamente...? — parece que aún tenía dudas, supongo que sí nadie está en el club no habrá nadie que firme papeles para devolver los objetos.
Leonida: Si. Si no hay nadie en el club pueden esperarme, después de todo tengo cosas que hacer allí. — supongo que la visita del presidente del consejo estudiantil, Miyuki Shirogane, no bastará para arreglar asuntos de la organización, a pesar de que tengo bastantes miembros en la escuela.
Iruma/Izuku: ¡Muchas gracias! — en sincronía, ambos adolecentes hicieron una reverencia y salieron del salón antes de que sonara la campana.
X: ¿Tienes cosas que hacer en el club? — al frente mío se sentaba mi compañero de clase y aliado de la organización, el dueño de ese escritorio.
Tenía el cabello café claro y flequillo dividido en la frente, ojos fríos y desinteresados y portaba el uniforme masculino de la escuela, con una altura que ronda alrededor del promedio. Se encontraba Kiyotaka Ayanokouji.
Leonida: Si, compartiré alguna que otra información que me entregué Shirogane. El grupo "Setketsu" se está volviendo una molestia bastante grande. — parecía un oficinista asalariado quejándose de su trabajo, suspiré un poco antes de acomodar mi libro golpeándolo ligeramente contra el escritorio.
Ayanokouji: Ya veo. — respondió con indiferencia y miro al frente, siempre era así de frío. Aunque realmente agradezco que se haya unido a la organización, pero para el, es solo un grupo de personas que puede usar cuando quiere, a cambio ofrecerá ayuda de vez en cuando.
Aunque es un buen tipo. Dejando de lado su monstruosa inteligencia y su "egoista" objetivo, es un adolescente común como cualquier otro, después de todo me llevo muy bien con el y su tranquila presencia.
Y, por ahora, la última miembro de la organización y parte de la escuela no era nada más y nada menos que nuestra tutora. Acabando de entrar a la clase.
Alta, con un cabello café oscuro atado como una cola de caballo, ojos algo cafés y vestía de un simple traje negro, con corbata negra y camisa blanca. El nombre en cuestión es Sae Chabashira.
(N/A: Te amo)
Así damos comienzo a las clases, aburridas obviamente, hasta que sonó la campana para el almuerzo. Cosa que aproveche y me salí del salón, no sin antes recibir una mirada de la profesora.
Me dirigí al consejo estudiantil entre los pasillos, algunas miradas se mantenían fijas en mi mientras que otras solo les daba igual, ni siquiera sé porque soy una estrella de esta escuela, pero yo no controlo tal popularidad. (No puedo evitar ser sexy.png)
Mientras caminaba por el enorme y último pasillo de la escuela para ir a las puertas del consejo estudiantil recordé lo que decía la carta que Fuuka me dió.
'Necesito que pases por el salón del consejo, ahí te pasaré la información de la nueva organización.
Aunque lo que puedo deducir es que aún no representan una amenaza, por lo que si le gustaría dejar esto a manos de los maestros estaría más que bien.
Pd: Necesito un consejo para ganarle a Shinomiya, si es posible pasa mañana, ella no estará.'
Me reí un poco ante el último mensaje. Me pareció curioso que dos genios y superestrellas de esta escuela usarán sus habilidades para hacer que el otro se le declare antes que ellos mismos.
Toque un par de veces la doble puerta de roble, a lo que se escuchó un "pase" del otro lado, así que ahora con permiso abro la puerta.
Leonida: Con permiso... — cruzo y cierro la puerta atrás mío para ver sentado en un escritorio grande y negro a Shirogane. Ojos afilados y sin vida, cabello rubio y desordenado y una tira dorada en el pecho de su uniforme escolar. — Cuánto tiempo, Miyuki.
Shirogane: Cuánto tiempo, siéntate. Esta explicación será un poco larga. — me senté y me quite los lentes que tenía puesto. Efectivamente, la conversación fue larga.
Aunque los detalles de Setketsu fue para decidir poner tal grupo en manos de los 'Maestros' también me explico su situación con Kaguya Shinomiya. La vice-presidenta del consejo estudiantil.
Ambos están indecisos de dónde ir a sus días libres, puesto que Shirogane quizo irse a las montañas y Kaguya a la playa, ambos cambiaron su decisión e intercambiaron lugares, cosa que hizo el asunto más complicado.
Leonida: Bueno... Creo que te olvidaste de los demás miembros, después de todo ustedes no irán solo a ese viaje. Ya que está hecho para que todos se tomen un tiempo fuera de la escuela. — dije mi opinión mientras me ponía los lentes.
Parece que se centró tanto en su guerra de amor que olvidó los otros miembros y sus respectivas opiniones, el viaje está hecho para todo el consejo estudiantil. No para ellos solos.
Shirogane solo suspiro y se agarró la cabeza por un momento — Supongo que tienes razón, el viaje no serviría de nada si solo Shinomiya y yo peleáramos. — parece haber entendido el mensaje.
Con eso me despedí y salí del consejo con una carpeta de archivos y una caja la cual contenía mi almuerzo, me dirijo a la azotea del colegio.
Me senté en una orilla y dejé al lado la carpeta con información, puse mi caja en mi regazo y empecé a comer. Nada que mencionar sobre la comida sin embargo, muy pocas personas estaban allí, por lo que era un lugar perfecto para comer en paz.
Fuuka: Raro verte comer solo. — ahí apareció otra vez, con dos latas de bebida. La albina me entrego una y se sentó al lado mío.
Leonida: No entiendo tu habilidad para encontrarme en cualquier lugar, ¿Tienes un localizador o algo así? — rompí el hielo mientras habría mi lata refrescante, era de naranja por cierto, mi favorita.
Fuuka rio sarcásticamente antes de soltar un 'Que gracioso', después de eso visualizo la carpeta y la agarro. — ¿Esto es la información de esos Yakuza? — abre y se puso a leer dicha carpeta.
Leonida: Si, pienso dejarlo en manos de los 'Maestros' los cuales no tenían nada con que entretenerse. — Fuuka me escuchaba sin quitar la vista de la carpeta, supongo que ella estaría de acuerdo en dejar algo tan fastidioso a las demás personas.
Cerro la carpeta y la dejo dónde estaba, antes de volver a tomar de su lata me hizo una pregunta.
Fuuka: Entonces te quedarás en el club ¿No?
Leonida: Lamentablemente es lo que tengo que hacer. — informar que voy a dejarle esto a los Maestros sonaba cencillo, y lo era, exceptuando a una Comandante un 'poquito' Yandere conmigo, aunque con un "es bastante simple para que yo me haga cargo" debería bastar.
Fuuka: Bueno, te deseo suerte. — Fuuka me dió un par de palmadas en el hombro antes de pararse e irse tirando su lata de refresco a la basura.
Por mi parte guarde mi caja de almuerzo ya vacía y agarre la carpeta, no sin antes tirar la lata. Con eso me fui al salón.
Time Skip.
Ahora estaba en el club de jade, firmando dos hojas para los dos chicos en frente mío. Lo que pidieron fue un arco de tensión ajustable y unos guantes con nudillos de metal pequeños. Lo tomarían prestado por una semana, y lo devolverían respectivamente.
Leonida: Y con eso sería todo, acuerde de entregar los objetos antes de tiempo por favor.
Izuku/Iruma: ¡Muchas gracias! — por segunda vez al día hicieron otra relevancia y se fueron del club.
El club se encontraba dentro de la escuela, ni bien se entra se podía ver el escritorio del presidente del club, es decir, yo. Adelante de una ventana que dirigía al exterior. Alguna que otra estantería y una que otra reliquia que parecía simple decoración, pero realmente eran objetos. Y un enorme y rojo sofá.
Cuando el dúo se fue, suspiré y me saque los lentes falsos. Me puse una gorra al estilo de General, con el símbolo de Fatui en el medio de la gorra.
El símbolo no era más que un rombo con un círculo en el centro, las líneas del rombo se hacían más finas arriba y abajo mientras que ganaban volumen en la izquierda y derecha.
Aún sentado, jugué con la silla meneando la de un lado al otro, es una típica silla de algún oficinista. Ruedas y plegable, color negro, etc.
En la puerta entraba una mujer en traje, cruzandola y cerrando la puerta atrás suya para después ir al escritorio, no era nada más ni nada menos que Sae Chabashira.
Leonida: ¿Sucede algo, sensei? — di una pequeña sonrisa la cual fue respondida con otra pequeña sonrisa.
Sae: Supongo que ya tienes la información de esa organización, General. — directo al grano y sin vacilar, la profesora con un toque de respeto hizo una suposición. La cual respondí dándole la carpeta en dónde estaba toda la información.
La agarro y se puso a leer ahí parada, ya le dije que no necesitaba mi permiso para sentarse, pero nunca hizo caso a ese comentario.
Leonida: Por más sencillo que se vea el asunto, hay que hacer lo que siempre hacemos. En este caso voy a dejar en sus manos. — me dirigí a la mujer en plural para aclarar que dejaba a ella y demás el caso, Chabashira era una 'Maestra' en el rango después de todo.
La mujer cerro la carpeta con una sonrisa confiada y se giró a mi. — Ya veo, en ese caso no lo defraudaremos.
Leonida: Se que no lo harán. — me paró de la silla y me coloco los lentes, aún con la gorra puesta. — bueno, ya es muy tarde, me iré a casa.
Sae: Te acompañaré.
Leonida: ¿A pesar de que pueda defenderme solo? — pregunté con una ceja levantada.
Sae: Si, sería una falta de respeto no hacerlo.
Leonida: Ese respeto es absurdamente grande, ¿Es necesario llegar tan lejos?
Sae: Si me lo permite, no. Usted a hecho mucho por todos y cada uno de los miembros de esta organización. Por lo que es natural tenerle tal respeto. — no se hechara atrás eh...
Leonida: De acuerdo, de acuerdo. Puedes acompañarme, sin embargo deja esas formalidades, es bastante incómodo que me hablen así.
Sae: De acuerdo. — así con la profesora más "aterradora" de la escuela, salí con ella al lado hasta salir del edificio.
Chabashira era así. Puede considerarse una persona franca, sin vacilación y fría en lo que conciente a amistades entre alumnos. Aunque eso no quiere decir que estaba sola en la escuela, hay otra maestra que está casi siempre con ella.
Una persona que no dudaría en llamar "basura" a aquellos que no piensan por si mismos y son ineptos a trabajar en equipo.
Leonida: Por cierto, ¿Sucedió algo más interesante? — rompí el cómodo silencio que nos acompañaba por una curiosidad en mi mente.
Sae: No, las cosas están yendo de maravilla. La organización se está expandiendo exitosamente a otros países y los crímenes de Japón bajaron gradualmente otra vez.
Leonida: Me alegra oír eso. — y no era ninguna mentira. El hecho de salir de Japón para hacer a la organización algo más era sencillamente increíble. Chabashira-sensei sonrió orgullosamente al lado mío, supuse que ella tenía que ver en algo.
Finalmente llegamos a mi casa, a lo cual me tuve que despedir en la entrada.
Leonida: Entonces, nos vemos. Si necesitan ayuda con eso no duden en hablarme.
Sae: Por supuesto, hasta luego. General.
Y con eso ella se fue y yo entre a mi casa, de ahí hice lo mismo de siempre.
Pensé que el asunto resultaría algo mucho más complicado, pero gracias a Dios no duró mucho tiempo para dejarlo en manos de los maestros, con eso, me fuí a dormir.
Fin del cap.
Muchas palabras de más por lo que veo.
Bueno... Adiós, XD
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