185. Final (1/2)

Un mes después.

David

Hace ya un tiempo, conocí a una diosa griega, me robó el corazón y ahora, me comparte el suyo. Aunque es terca y orgullosa, logré entrar en lo más profundo de su ser, consiguiendo que me dejara quedarme para siempre.

My Heart ―Agarro las manos de la más bella novia que puede existir en el universo y termino por expresarle lo que siento antes de besarla ―te amo.

Nuestros labios se juntan y oigo los aplausos de todos en la iglesia, aunque realmente sólo presto atención a la mujer que tengo en frente, el amor de mi vida.

―Tiraría las flores ―Se ríe ―pero me las quedo porque soy mala persona.

―Y así me gustas ―La vuelvo a besar y nos vamos de la mano.

Subimos al coche y nos dirigimos a la fiesta, bailamos toda la noche con todos. Ian y su pareja, se ofrecieron cuidar de Evan esta noche especial, un cuñado bastante agradable y ella es una persona muy cómica, Nick pasó un rato a saludar, pero después se fue, parece ocupado. Hasta Daniel trajo a Katerina, esa niña pasa mucho tiempo con su primo y hacen líos, me causan gracia, cuando crezcan serán dúo imparable. De parte de mi familia, mi hermano ha venido con Dasha, y Violette no puedo creer que siga con Pietro, al parecer si se quieren.

Y hablando de mafia o negocios en este caso, tengo una nueva sucursal Lovelace Company en Argentina. No puedo estar ni un segundo lejos de mi esposa, mejor traigo el trabajo hacia mí, en vez de ir hasta él.

Volviendo a la realidad, lejos de mi mente, me he quedado hipnotizado mirándola, con ese hermoso vestido blanco y me he perdido en la conversación. Por suerte mi diosa me devuelve a la normalidad, con uno de sus increíbles golpes.

―¡Auch! ―Me río.

―¡¿Me estás escuchando?! ―me grita enfadada.

―Sí... no ―Vuelvo a reír y me pega otro zape ―¡No sé! Ja, ja, ja.

Rueda los ojos.

―Maldito hombre distraído, te estoy diciendo que si ya has despedido a los invitados, porque yo no lo voy a hacer.

―¿Y por qué tengo que hacerlo yo? ―Continúo riendo.

―¡A todos no! A los inversionistas nada más.

―Crista empresaria, modo ON ―Muevo las cejas ―. No soy tu empleado, ve tú.

Bufa.

―Que insoportable ―Se gira para irse y la abrazo por detrás ―¡¿Qué haces?! ¡Suéltame!

―Sólo si me dices que me amas.

Este es el momento, en que toda historia llega a un fin, pero para culminar, primero va mi lado posesivo, lo mío es mío y lo quiero por completo. 

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top