Capítulo 8: "La pelea"
(Ashley)
Minutos después.
El inicio de nuestra batalla fue genial destilé mi ira -sí, esa que contenía y trataba de disfrazar bajo unas palabras bonitas "alegres" y una sonrisa fingida- en medio de la actuación su seria, firme y algo preocupada -bella- voz me trajo de regreso a la realidad...
-Si la forma de liberarte es la lucha, golpéame hasta ser libre.
-¿Qué es este lugar? -Pregunté alarmada pero con educación.
-Eso no importa ahora.-Expuso gentilmente.
Su tono despreocupado y dulce me distrajo... Con sus movimientos me derribó cayendo sobre mí e inmovilizándome. Opté por mirarle fijamente -fracase fue mi peor decisión- sus ojos me trasladaron a un universo en el que solo existíamos él y yo, entonces lo vi... Ese destello que se mostró, muy, en el fondo de sus curiosos ojos negros, sus pupilas se dilataron y su respiración se volvió variable como la mía... Tuvo un momento de vacilación que duró unos segundos, luego destilaba determinación y seguridad... Así de la nada acortó la distancia que nos separaba y posó sus carnosos y exquisitos labios en los míos... Es cierto que me traía su forma de ser, por lo menos conmigo, lo poco que conocía de él me gustaba, mas no lo veía como una loca enamorada ni cosas por el estilo... Jamás pensé que mis labios anhelaran tanto los suyos... Su roce, increíblemente gentil, suave... ¡Ah! Suspiro sin poder evitarlo. Me quedo de piedra... es inaudito que esto esté pasando; en mi mente se acumulan millares de pensamientos... mis terminaciones nerviosas están más activas que un policía infiltrado en la magia.
Le rechazo, por insólito que parezca, rechazo a este bombónzote. Soltándome agarre aprovecho su debilidad golpeándolo en sus costillas izquierdas provocando que se encoja y me apriete aún más contra el suelo, jadeando contra mis labios...
Continúa su ataque hasta que separo mis labios levemente y él invade mi boca con su cálida lengua causándole una sensación agradable y extraña a la vez.
Tenerle cerca es raro, tenerlo sobre mí así, es... extravagante, que sus labios toquen los míos y su insistencia me haga recibirlo aunque renuentemente en mi ansiosa y asustada boca, se siente muy bien...
No, no debo sentir eso... Él es el conductor, mi confidente... No, no o o o o o o... No puedo caer en ese fornido cuerpo y dejarme abrasar por esos brazos bien formados.
Ese fuerte poder que ejerce sobre mí solo con una ojeada, me hace sentir dividida entre esta conexión que nos une y mi conciencia que me grita que me aleje y huya de él, ahora que es débil...
No sé qué decisión es la mejor... no respondo a su ósculo invasor y posesivo...él se retira por aire pegando su frente a la mía, sus ojos hacen que mis murallas se tambaleen; es tan tierno, tener su rostro -de nariz perfilada, cejas gruesas y pestañas espesas color castaño oscuro, ver en ese pequeño lunar sobre el final de su ceja derecha que le hace lucir dulce- cerca...
Su boca es de tamaño normal, bueno el correcto para sus rasgos, esos labios que no sé cómo definir "ardientes" "cálidos" -rojos, carnosos- "apetecibles"... ¡Uf! Espera, acabo de suspirar con anhelo, visualizando su boca... ¡Oh oh oh! No... Demasiado tarde... Ya los unió otra vez, pero esta vez, sí respondo, tardo en fiarme, posteriormente, entreabro mis labios mientras su lengua juguetea con mi labio inferior... Se siente fenomenal, son el mejor dulce que he probado jamás, agreguémosle la temperatura que desprende de su -al parecer muy ejercitado- ser.
El beso se intensifica llevándome a desear más que esa simple caricia. Llevo mis manos a su nuca enredando mis dedos en su -sudado y sedoso- cabello atrayéndolo hacia mí. Él se deja hacer, lo que agradezco...
Ya no puedo parar de explorar cada parte de su ardorosa y húmeda boca.
Después de todo lo que he vivido en los últimos días, su actuar para conmigo y... e-e-esto que está sucediendo ahora es lo mejor que me ha pasado. Negar que no tengo sentimientos hacia él y no sólo deseo, sería de locos como bien dice Coral continuamente.
Lo poco que sé de él me hace sentir en casa cuando estamos juntos en el mismo espacio... Me reconforta su apoyo y su voz me vuelve un poco tonta, es como una droga que, definitivamente, no quiero dejar jamás.
Sus mimos están volviéndome a la realidad, lejos de mis cavilaciones y despertando mi fuero interno...
Nuestros cuerpos yacen sudorosos en el centro del ring, su olor masculino invadía mi nariz como si de mi perfume favorito se tratase.
Sus besos apasionados me trasladaron a un terreno desconocido...
Nuestras manos recorren apresuradas con caricias que van de la ternura y sensibilidad al deseo, la pasión y la posesividad.
-Eres mía -expuso firme, mirándome con fijeza.
-Tú... Usted, está loco -dije entrecortadamente.
-Eres mía. -puntualizó antes de devorar mi cuello haciéndome reír.
-¿Qué pasa?
-Me haces cosquillas...-digo riendo- pero me gusta.
-¡Oh!...-Silencio-continuamos entonces, me gusta tu risa.
Su avance en lugar de molestarme, me hizo gemir de placer, sólo porque era él.
Apreté mis dedos en su cuero cabelludo, me encanta la sensación de su sedoso cabello entre mis dedos.
Capturó uno de mis senos con sus dedos y me sobresalté.
-¿Estás bien? ¿En qué piensas?
-Sí, yo... Sólo me tomó por sorpresa.
Cuando creí que no me sorprendería nada más, su boca sustituye los dedos sobre mi pecho y se siente jodidamente genial.
Aferré mi mano libre a su ancha y sudorosa espalda...
Cuando creo que me ha robado suficientes gemidos, traza un camino de besos húmedos de mi abdomen hasta mi vientre y comienza a deshacerse de mi ajustado pantalón, posa sus labios en mi parte más íntima y necesitada de su toque.
Entre sus labios, su boca y sus ágiles dedos me llevan al mejor orgasmo del que haya sido protagonista de ser.
-Sabes a gloria - murmura sobre mi sensible piel, asomando sus ardientes entre mis piernas.
No espero mi respuesta y se entregó de lleno a su trabajo anterior, haciéndome gritar "soy tuya"... me descubrí más de una vez pidiéndole más... que no se detuviese nunca... ¡Dios! Me he vuelto completamente loca, corrección me ha volvió loca pero de placer... Ahora que lo recuerdo ante mis demandas actuó de inmediato luego de repasarme de arriba abajo y pícaramente...
¿Cómo fue que caí? ¡Arg! ¿Cómo puede caer?
Lo peor es que no me quiero levantar, este pozo es más cómodo que la cama de un rey y más cálido que el interior de un horno en pleno uso de sus habilidades...
La magia de sus manos al entrar en contacto con mi enfebrecida piel -mis piernas vibraron como las cuerdas de una guitarra- unido a la profundidad de sus ojos -dos pozos sin fondo- me advirtió que su interés por mí apenas comenzaba.
Se colocó un preservativo y entro en lenta y...
Se colocó un preservativo y entró -lenta y deliciosamente- en mí.
Esperó a que mi interior se acostumbrase a su invasión para proceder a moverse como ambos necesitábamos, el placer estaba en cada poro de mi piel y según sus jadeos -roncos y sexys- en cada uno de sus cabellos.
Sus movimientos buscaban sin agotamiento el placer de los dos.
Espero les guste esta nueva aventura.
Se despide de ustedes 💋
Su autora 💀Death💀
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