La encontré,  o mejor dicho,  ella a mí.  Corrió en mi dirección y entonces supe que algo no andaba bien.

Parecía un poco desorientada.

Reposó su frente en mi pecho -su contacto me afectó mucho- y rompió a llorar como una niña pequeña,  -no supe que hacer, ni qué decir, solo tuve un impulso: abrazarla,  consolarla e intentar que se sintiese mejor- cuando calmó su llanto se separó de mí y  le tendí un pañuelo -aunque hubiese querido abrazarla hasta que olvidase por completo su aflixión.

Musitó un gracias,  cargado de significado alegando: -Por estar ahí siempre, por ser ese oído que escucha y no difama. Por llegar en el momento indicado. Gracias por todo- sin saber que el que agradecía incluso conocerla soy yo.

Preguntar por su estado y sitio al cual quisiera ir -fue una agonía para mis sentidos,  pues quería llevarla conmigo lejos de su dolor- al escuchar su respuesta sentí el fuego de la ira prenderse en mi interior.

Sonaba enojada y fuera de sí,  pero no la tomó conmigo sino que optó por asistir a un gimnasio,  que original y considerada.

Al principio se negó a mi compañía,  pero ni loco la dejaría sola como está, al final terminó cediendo por mi insistencia.

El gimnasio estaba a tope y solo habían hombres,  pensé que golpearía el saco hasta saciarse (cansarse)   nunca pasó por mi mente que lucharía contra ¿15 hombres?

Es un hecho que jamás olvidare, derroto a sus contrincantes como si de un juego se tratase, alucine presenciar tal cosa.

Sus amigos no la dejaron ir tan fácil, solo con su silencio le interrogaron de una manera espectacular y única, la apoyaron y prestaron sus puños para una posible revancha con su ex.

Ella no fue consciente de mi presencia ya que me (oculte) por decirlo de algún modo, no deseaba interferir en su vida tan abruptamente.

Admire su determinación y autoridad.

Cuando se marchó sentí el impulso de seguirla pero me detuvo y tal Sebastián Rio, y comprendí que necesitaba estar sola al recibir un SMS suyo.

Sebastián platico conmigo como si nos conociéramos desde hace mucho, me inspiro confianza y me demostró que no soy el único que vela por ella, que tiene amigos... que amigos hermanos... esos chicos son buena onda, pasar tiempo con ellos fue de gran ayuda.

-Ash es nuestra niña linda, nuestra protegida y nuestra protectora. -expuso uno de los chicos un tal Maxwell.

Eh...Cam lo apoyo, Sebas sonrió, Yosh asintió y...

-Oye colega una lágrima de la reina del ring, lo pagaras con un puñetazo en la parte más débil de tu anatomía, guapo. -expresó Luy entre amenaza y burla.

Todos rieron por su última palabra, pero comprendieron el significado de la casi broma.

Espero les guste esta nueva entrega.

Se despide de ustedes 💋

Su autora 💀Death💀