2. Stalkeo

Llegué a mi casa con mi papilla de bebé en mano y me lancé al sillón.

No tenía el nombre del vecino, pero sabía cómo se llamaba su lugar de trabajo y estaba segura de que tendría redes sociales ya que hoy en día la mayoría de negocios cuenta al menos con una página de Facebook.

Así, que corrí a mi habitación y saqué la computadora, teclee el nombre y al inicio no encontré nada, pero diez minutos después encontré una página que se veía muy vieja no tenía información y solo tenía dos fotografías sobre algunos productos.

Suspiré pesado y me puse a stalkear uno a uno a las personas que reaccionaban a dichas publicaciones.

A la primera que vi fue una señora grande que no tenía foto de perfil, pero el apellido era el mismo que el de la tarjeta que tenía.

Así que me puse a buscar entre sus amigos y en ese momento agradecí que algunas personas no pusieran su información privada, ya que gracias a ella di con otra señora y esa señora tenía agregada a la mamá del muchacho.

¿Cómo sabía que era su mama?

Fue muy fácil ya tenía de portada una foto de todos sus hijos entre ellos estaba el vecino.

Entre a ver los me gusta de la foto y ahí estaba el perfil de él.

Sonreí ya que no esperaba que fuera tan fácil dar con una persona, en redes sociales sin saber si quiera su nombre, yo creo que ni la CIA hubiera hecho un trabajo tan impecable como el mío.

Comencé a buscar en su página y al parecer no era una persona que le gustará mucho las redes sociales ya que tenía muy poca información la ventaja de esto era que su cuenta estaba vinculada a la de instagram, al entrar a la cuenta tenía muy pocas publicaciones y pude ver qué le gustaba el ejercicio, éramos como dos polos opuestos ya que yo no era muy fan del deporte.

Guarde una captura de su red social.

La parte uno de buscar a la víctima ya estaba realizada, ahora seguía la segunda fase que era hablarle, pero no podía simplemente mandarle mensaje y ya.

Si lo hacía él pensaría que estaba loca y claramente lo estaba, aún así necesitaba un plan para que él supiera de mi existencia y de esa manera poder hablarle sin que el sospechará de mi acoso.

Apague la computadora y camine a mi escritorio para así planear paso a paso todo el camino, el ser escritora me daba una ventaja ya que mi imaginación iba más allá de muchas cosas.

Plan V (V de vecino)

1. Ir a comprar todos los días a pesar de que no necesite nada de la tienda y quedé a unas diez cuadras de distancia.

2. Hacer platicas casuales tipo preguntas de señora.

3. Ignorarlo aunque me esté muriendo de las ganas de preguntarle su nombre.

4. Mándale mensaje con la esperanza de no ser ignorada y que él acepte ser mi modelo.

Repasé nuevamente las reglas y eran bastante fáciles, algo que una acosadora podría llevar a cabo discretamente, lo malo era que yo era todo menos discreta, así que aunque mi plan fuera perfecto estaba segura que en algún momento la cargaría ya que era algo típico de mi, regar las cosas, como dirían en mi pueblo.

Pero necesitaba intentarlo ya que me conocía bastante bien y sabía que no sé me quitaría de la cabeza esa idea, al menos que le hablará y era una persona muy introvertida, me daba bastante pena el acercarme directamente.

Además a Raquel le había funcionado el acosar a Ares, quizá mi caso no sería diferente.

No tenía nada que perder, al contrario podía ganar el conocer al futuro padre de mis hijos.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top