Se Aprovechan de la Curiosidad

Adoro Code Geass y adoro SuzaLulu

Contiene lemon. ¡Espero que te guste!

Adult Version

Lelouch está enamorado de Suzaku desde que eran niños. Desde entonces no ha podido sacar la imagen de su amigo de su mente. Nunca ha suspirado por él, y nunca ha intentado confesarse. Sería extraño, no porque Suzaku sea un japonés, sino porque es un hombre, y eso nadie lo aprobaría. Ni siquiera el propio Suzaku aprobaría la homosexualidad de Lelouch.

–Oye, Lulu ¿Podrías ayudarme con esto?–Decía Shirley con un vestido en cada mano–Millie me ha invitado a tomar el té en su casa y quiero saber cuál me queda mejor.

–Te ves linda con cualquiera de los dos.–El pelinegro acompañó su respuesta con una agradable sonrisa.

–Que detalle de tu parte Lulu pero hablo en serio.–La chica intentaba no sonrojarse por la respuesta del joven.–¿Y tú Suzaku? ¿Cuál opinas que se me ve más lindo?

–Soy de la misma opinión que Lelouch.–El castaño respondió con su grata sonrisa.

–Jo, pero a mí no me vale esa respuesta.

Los tres están en el salón del consejo estudiantil, los demás han ido a traer algunas cosas para el próximo festival. Lelouch está ocupado haciendo origami para la zona infantil, mientras que Suzaku acomodaba un par que cajas. La presidenta era muy detallista en cuanto hacer fiestas, por lo que no podía permitirse perder el tiempo.

–Se lo preguntaré a Rivalz.–Continua hablando Shirley–Es el único chico que no me dará una respuesta tan simple.

La pelinaranja sale de la habitación con su par de vestidos en sus manos. El salón permanece en silencio un par de minutos, cada uno por su lado sin prestarle mucha atención al otro.
Lelouch deja un lado los origamis e inspecciona el resto de la decoración.

–Gracias por la ayuda.–Dice Lelouch sin mirar a Suzaku–Ni Rivalz ni yo podemos con el trabajo duro.

–Soy parte del consejo estudiantil ahora, me sentiría mal si no ayudara.

–¿Desde cuando eres tan caricativo? No recuerdo que fueras así cuando éramos niños.

Lelouch mira de reojo a su amigo, se le ve concentrado cargando las cajas. Lelouch sintió la enorme necesidad de abrazarle, de sentirlo cerca, realmente lo extrañó demasiado. Pero ahora hay una barrera aún más grande que la distancia: Zero.

¿Cómo reaccionaria Suzaku si supiera que Lelouch es Zero?

Posiblemente mal, un caos. El hecho de que Zero naciera es la prueba de que el mundo tiene que cambiar. Pero Suzaku nunca lo comprendería, nunca admiraría la grandeza de Zero, una total lástima.

Pero eso no evita que puedan conversar siendo él Lelouch Lamperouge.

–¿Te está gustando la escuela, Suzaku?–Le pregunta Lelouch al mismo tiempo en que decide acomodar las figuras de origami, tienen la misma estatura y forma, al parecer son cisnes.

–No se está tan mal, es relajante y estar en el consejo estudiantil es muy divertido.–Suzaku por su lado, acomoda la última caja para mirar a Lelouch, aunque esté no le devuelve la mirada.-¿Te puedo decir algo y no te lo tomas a mal?

–Jajaja ¿Por quién me tomas Suzaku? Puedes decirme lo que sea.–Lelouch deja de lado los origamis y mira a su amigo–¿Qué pasa?

–Te ves... feliz cuando estás aquí.

–Me siento feliz.–Los labios del pelinegro forman una disimulada y sutil sonrisa, es como una mueca de media luna pasando desapercibida.

–Me refiero a que... comparado a cuando éramos niños, te ves más vivo.–Las palabras de Suzaku están cuidadosamente colocadas, como piezas de rompecabezas que al moverlas de manera incorrecta hacen perder el mensaje. En otras palabras, le habla a Lelouch con cuidado para no dar a entender algo falso.

–¿Vivo? Esa es una manera extraña de decirlo.–Lelouch desvía la mirada para posarla sobre los origamis pero no deja de prestarle atención a Suzaku–¿Dices que de niño no me veía feliz?

Suzaku asiente la cabeza. Lelouch suelta un suspiro cansado, como si aquello que dijo Suzaku no fuese obvio; por supuesto que de niño Lelouch no era feliz, en ese entonces era la guerra, su madre acababa de morir y su padre lo había abandonado junto a la pequeña Nunally. No, en ese entonces, Lelouch no estaba vivo, no era más que un cadáver agarrado por hilos manejado por su cruel padre.

Pero el tiempo ha transcurrido. Las cosas son muy diferentes ahora. Zero ha nacido, y la guerra terminará; Japón volverá a ser un sitio para vivir y no una jaula para seres humanos.

–Se puede decir que si, soy más feliz ahora.–Eso es todo lo que Lelouch le da a Suzaku como respuesta. Tras eso, se levanta y se dirige a la puerta, dándole a entender a su amigo que la conversación se ha acabado.

–Lelouch, espera.–Exclama el castaño levantando un poco la voz.

–¿Qué?–El pelinegro le devuelve la mirada.

–Me...me alegro...me alegro de que volvamos a estar juntos, te extrañe.

Suzaku acompaña su comentario con una cálida sonrisa, aquellas que dan a entender que sus palabras son sinceras y sacadas desde el fondo de su corazón.
El corazón de Lelouch retumba cual tambor, la vergüenza se apodera lentamente de su rostro. Le da la espalda a Suzaku para que no vea su cara sonrojada y sus ojos abiertos como platos.

–Que bien...–La respuesta de Lelouch es corta, camina rápido a la puerta y huye de tan frágil situación.

Suzaku sólo lo ver irse, no hace nada por detenerlo.

Lamperouge no son de esas personas que les gusta ser descortés, pero cuando se trata de Suzaku, la situación es totalmente distinta.
Lelouch había quedado de ver a Milly para hablar de los últimos detalles. ¡¿Pero cómo si está más sonrojado que un tomate?!

–(Lo hiciste a propósito ¿No?)–Ese eran lo pensamientos de Lelouch en ese momento mientras camina con paso rápido.

No quería que alguien lo viera así, sonrojado y nervioso. Con prisa, se encerró en los baños para refrescarse el rostro y alentar su respiración.
Por fortuna, no había nadie. Fue al lavamanos y se arrojó un poco de agua fría para que el enrojecimiento se fuera. Se miró en el espejo, en verdad le gusta Suzaku, desde niños siempre le ha gustado. Quería estar siempre con él, tomarle de la mano y verlo siempre reír. Suena tonto, pero Lelouch siente eso desde hace ya muchos años.

Suzaku siempre rondaba por su mente, y tenía intenciones de irse.

Lelouch se tocó los labios con lentitud, cerró los ojos y dejó que su mente jugará con su inocencia y su lujuria. En su mente, Suzaku le rozaba los labios con los suyos, sintiendo su respiración muy cerca.

"–Eres mío Lelouch Vi Britannia–Le susurra Suzaku en su mente–Pienso tocar cada centímetro de tu ser."

–Suzaku...–Lelouch está hundido en los rincones más oscuros de su mente como para prestar atención a lo que está diciendo en la vida real.

"–Eres un príncipe Lelouch...¿Cómo puedes ser tan sucio?"

–Es tu culpa...–Los dedos delgados del pelinegro acariciaban el pecho con lentitud.

De pronto, Lelouch fue expulsado de su fantasía. No tiene tiempo para esto, no es siquiera el momento ni el lugar para pensar de su mejor amigo de esa manera. No puede pensar de Suzaku de esa manera, no está bien y en cierta forma en inmoral.
Salió de ahí, lo primero que se encontró fue a Suzaku, genial, justo lo que en este momento no necesita.

–Ah, Lelouch, no te esperaba aquí.

–Lo mismo digo...bueno, te veo luego.

–Oye ¿Estás bien? Tienes el rostro muy rojo.

Suzaku extendió su mano para tocarle las mejillas a su amigo, pero este retrocede. Eso sería lo peor que puede hacer ahora mismo.

–¿Sucede algo?–Pregunta el castaño algo desconcertado.

–No sé...

–¿Qué?

–Suzaku, yo... verás, es que...

–Lelouch...–El castaño se acerca para tocarle la frente, desciende su mano hasta sus mejillas y finalmente acaricia sus labios-Estas muy caliente.

–Un poco...

–¿Tienes fiebre?

–No es tanto eso...–Mira directamente a Suzaku–Hay algo que quiero decirte.

–Adelante, te escucho.

–Suzaku, verás... últimamente lo he estado pensando y...

Lelouch cerró los ojos un momento, fue solo un segundo pero para él eran años, no puede seguir soportando este peso, le hace sentir culpable y no podés convertirse en Zero si sigue pensando en cosas tan banales como esos.

–...te quiero Suzaku, más de lo que te imaginas.

Un pausado momento se hizo presente. Fueron unos pocos segundos pero parecía eterno, Suzaku seguía mirando a su amigo con ojos bien abiertos, sin palabras; mientras que Lelouch se arrepentía en su cabeza. Hubiese sido mejor haberse callado, está claro que fue un error.

–Lelouch...estoy tan feliz de que lo hubieras dicho al fin.

–¿Cómo dices?

–Siempre tuve esa corazonada, así que...

–Ya veo, lo sabías.

–En mi cabeza, era una suposición, pero estoy feliz de que no dejaras de mirarme.

Suzaku se acerca un poco más al pelinegro. Lelouch cierra los ojos dejando que todo esto suceda. Su corazón bombardea fuertemente, tantas veces soñando con esto y el hecho de que este pasando ahora mismo hace que Lelouch se sienta como en un sueño.
Se besaron, fue un beso perfecto, como si sus labios nacieron para esto. Pero Lelouch no podía seguir con esto, exponer a Suzaku de esta manera, a la vista de Zero. Podría morir.

Lelouch se separó del castaño, quería seguir un poco más pero ya ha tomado una decisión; no puede posponer todo lo demás por esto.

–Suzaku...no tenemos...que hacer esto.

–Lelouch, me gustas, me gustas mucho.–Le besa tiernamente en los labios–Quiero estar contigo...

–(Yo también, deseo esto con todo mi corazón...pero Zero y Nunally son primero).

Lelouch le toma de la mano a Suzaku, conduciendolo al salón del consejo estudiantil, no hay nadie de momento, lo cual es perfecto. Kururugi le pregunta a Lelouch el que está pasando, pero este se niega darle una respuesta.

–Es una sorpresa mi querido amigo.–Le sonríe y le guiña un ojo, sólo que a diferencia de con Shirley, este es más coqueteo y atrevido.

Entran al salón, Lelouch cierra la puerta con seguro. Se dirige a Suzaku y le abraza del cuello para saborearlo sin que haya el peligro de que alguien los vea.
El castaño le abraza por el cuello, teniendo a Lelouch para él mismo. Sus lenguas bailan, intercambiando saliva y suspiros placenteros.

–Que lindo te ves jadeante...–Le susurra Suzaku mientras acaricia su cabello oscuro y sus delgados labios.

–Esa no es manera de hablarle a un príncipe.–Lelouch sonríe con malicia mientras le toma los hombros a su amigo–Siéntate, te haré pasar un buen rato.

Suzaku se deja caer en la silla más cercana, con desconcierto en su rostro, mira como Lelouch se pone de rodillas frente a él, con su cabeza entre las piernas. El pelinegro con una sonrisa, desabrocha los pantalones de Kururugi con los dientes, primero abriendo los botones y después la bragueta, y por último los baja con sus delgadas y finas manos, dejando a Suzaku en ropa interior.

–Jeje tienes mucho que mostrarme Suzaku.–Comenta Lelouch para después relamerse los labios.

–Lelouch, no creo que...¡Aah! ¡Lelouch! ¿Pero que carajos haces?

Lamperouge había comenzado a lamer el miembro de Suzaku por encima de la ropa interior con lentitud, tocando con suavidad la punta para ir recorriendo el tronco. Las piernas de Suzaku tiemblan pero el placer se va acumulando en su cuerpo por lo que no tiene intenciones de hacer parar a su compañero.

–Quiero hacerte sentir bien Suzaku, me gustas muchísimo por lo que quiero hacerte feliz.

Ya que no podrá estar con Suzaku debido a Zero y al Geass, al menos podrá tener un buen rato con él.

Lelouch bajo la ropa interior de Suzaku lentamente, admirando el miembro palpitante que tiene frente a la cara.
El pelinegro toma aquel pene con ambas manos y usa su lengua para acariciar la punta. Suzaku gime pesadamente, viendo a su querido amigo chupando de esa manera.
Le hace ver... jodidamente erótico.

–Lelouch...lo haces muy bien...pero házlo más rápido...–Le dice Suzaku con la respiración agitada.

–Por supuesto, haré todo lo que me digas.–Lelouch besa el tronco y acaricia los testículos, pasados unos minutos mete aquel falo en su boca, saboreando todo lo que ese pedazo de carne puede ofrecer.

–Si...si, eres bueno Lelouch...–Suzaku cierra los ojos y se deja llevar por el placer, siente la lengua del príncipe recorriendo toda su intimidad.–Quiero tenerte así todo los días...

En cuanto los oídos de Lelouch escucharon eso, sus pantalones empezaron a apretar. Aquello le había excitado más de la cuenta por lo que comenzó a mover su cabeza con más rapidez. La mano de Suzaku se posó sobre su cabeza, estaba usando su boca de una manera muy dominante, y eso excitó más a Lelouch, quién sin muchas más opciones comenzó a tocarse por encima de los pantalones.

–Lelouch...aag...me voy a correr...aaahg, si sigues así...

Lelouch no se detuvo, quería probar aquello. Su lengua saboreó todo lo que se encontraba a su paso, tras varios interminables minutos, Suzaku se corrió en su boca, Lelouch no se esperaba que fuese mucho por lo que no se pudo tragar todo, algunos hilillos blancos sobresalían de la comisura de los labios.
Suzaku vio a Lelouch quién todavía está arrodillado en el suelo.

–¿Estás bien? No quería hacerlo tan brusco.–Dice Suzaku con notoria preocupación en su voz.

–Eatuviste muy bien, gracias por permitirme haber hecho esto.

Lelouch está sonrojado, algo jadeante y con una fuerte erección. Había hecho todo lo posible por complacerse mientras hacia el oral pero fue en vano. Necesita algo más, algo que le haga sentir de maravilla, y lo tenía frente a sus ojos.

–Lelouch, nunca te había visto de esta forma.–Le dice Suzaku con una sonrisa burlona.

–Es normal ¿No?

–Ahora es mi turno de hacerte sentir bien.

Suzaku es un soldado, por lo que en cuanto a fuerza física está bien dotado. Carga a Lelouch con cuidado y lo recuesta en una de las mesas. Lelouch lo mira con brillo en los ojos, sabe lo que va a pasar y está más que emocionado.

Suzaku se posiciona encima y le besa las mejillas, seguido del cuello mientras sus manos van desabrochando su oscuro uniforme.

–Suzaku, es mi primera vez así que...

–Sera un honor tocar a Lelouch Vi Brittania de una manera tan excitante.–Suzaku se acerca al cuello de Lelouch, comienza a morderle y a chuparle con fuerza.

–¡Ah!–No sólo era el chupetón, los dedos de Suzaku le acarician la entrepierna y uno de sus pezones–Todo esto e-es nuevo para mí...

Lelouch ya no cuenta con su camisa y sus pantalones están desabrochados; Suzaku le besa en los labios y se queda un par de minutos admirando lo bello que se ve ahora mismo.

–Tu piel es muy delicada Lelouch–Suzaku admira la marca roja que tiene ahora el pelinegro en su cuello–Y adoro la cara que pones al gemir.

–Suzaku ¿Quién te enseño a hablar así?

Suzaku no responde, le besa y las caricias siguen al bajarle los pantalones a Lelouch y acariciar sus piernas. Al mismo tiempo, le empieza a besar uno de los pezones suavemente, provocando que Lelouch gima poco a poco. La punta de su entrepierna comienza a mojarse un poco, es el líquido preseminal dando a entender que a este paso se correrá.

Suzaku le baja la única prenda sobre su cuerpo. Toma el miembro del pelinegro y mueve su mano de arriba hacia abajo, Lelouch intenta contener sus gemidos pero fue en vano, ya está perdido en el placer, ya no tiene control sobre su cuerpo.

–Suzaku... Suzaku...–A Lelouch le gusta decir el nombre de su amigo, sentirlo tan suyo y tan cerca.

La mano del castaño se mueve con mayor rapidez, su lengua se mueve al otro pezón del pelinegro para ponerlo también duro. El delgado y pálido cuerpo de Lelouch sufre uno que otro espasmo y entre el mar de sensaciones, uno de los dedos de Suzaku abre camino en la entrada de Lelouch, quién se sobresalta por el repentino toque.

–¡Ahhh! ¿Q-Qué es eso?–Exclama Lelouch mientras aquel dedo se mueve en su interior con rapidez, intentando llegar profundo.

–Debo prepararte Lelouch.–Suzaku besa su cuello, tiene ambas manos ocupadas.

Un segundo dedo entra en Lulu, este grita un poco más fuerte, abraza a Suzaku por el cuello, sus piernas, por pura inercia, intentan cerrarse pero Suzaku no lo permite. El miembro de Lelouch no soporta más y finalmente se corre en la mano del castaño.

Suzaku usa ese semen para lubricar su miembro mientras sigue estimulando la entrada de Lelouch para lo verdaderamente importante. Se quedan un momento quietos y con el corazón a mil por hora. Se abrazan y se besan.

–Relájate.–Es lo único que le dice Suzaku antes de empezar a prenentarlo lentamente.

–¡Suzaku! ¡Suzaku!–El pelinegro cierra los ojos con fuerza, abre sus piernas todo lo posible para darle todo el acceso a su amigo.–Idiota ¡Duele!

–Perdóname, pero te prometo que te sentirás bien.–Suzaku le besa el cuello y acaricia su torso para tratar de aliviar el dolor.

–¡Aaahg!–Lelouch se toma su tiempo para sentir ese miembro dentro suyo, tocando sitios que nunca habían sido tocados y recibiendo sensaciones nunca sentidas, es doloroso pero increíblemente satisfactorio.

Las caderas de Lelouch comenzaron a moverse, indicando que quería más. Suzaku le toma de las piernas y se mueve con él, chocando sus pieles e intensificando el placer. A los pocos minutos, se mueven en sincronización y con fuerza, dando un éxtasis más que perfecto.

–¡Si, si, si! ¡Suzaku! ¡Mas fuerte!–El propio Lelouch no tenía idea de lo que decía, recibiendo más embestidas y caricias por todo su cuerpo.

La mesa se movía con ellos, ambos jadeando, chocando y dando lo mejor para que esté momento sea más que fantástico. Lelouch ya no sentía dolor, sólo un enorme placer en toda su columna vertebral y cintura. Suzaku por su lado no sé detiene ni un segundo, su miembro toca todos los puntos débiles de Lamperouge haciendo que su sensibilidad se multiplique. En más de una ocasión le hizo gritar como si la vida le fuese en ellos. Son embestidas duras, algo crueles pero es justamente lo que el otro está buscando, un nuevo orgasmo se avecina y los dos están listos para terminar.

–¡Suzaku! ¡Me voy a correr!

–¡Yo igual!

–¡Házlo dentro mío! ¡Házlo por favor!

Durante un segundo, Lelouch se dejó obedecer por alguien más. Hasta él tiene un lado sur desea ser dominado.

Las últimas embestidas fueron las más fuertes. Se corrieron haciendo que todo sea un desastre. Cuando terminaron se levantaron con dificultad; las piernas de Lelouch tiene varias líneas delgadas de semen provenientes de su entrepierna, también un poco en su abdomen. Nunca había estado tan sucio.

–Hay que ir a lavarnos, tengo la llave para entrar en las duchas.–Dice Lelouch mientras se va vistiendo.

–Respecto a lo de hoy...¿Qué significa?

–Significa que nos gustamos, pero...no puedo estar contigo, no ahora.–Las palabras de Lamperouge habían sido firmes y seguras.

–¿Porqué?

–...–Lelouch tardó minutos en responder.–Ahora mismo, el Área 11 corre peligro, tenemos mejores cosas que hacer, yo...yo no quiero que te pase nada por estar pensando en esto.

–Oh, es eso...–Suzaku no aparta su vista del príncipe–No te preocupes, yo me encargaré de que todo termine.

–¿Cómo dices?

–Yo mismo atrapare a Zero, y cuando todo esto termine...tú y yo estaremos juntos.–Termins su discurso con una alegre sonrisa.

–Suzaku... esta bien, confiaré en ti.

Lelouch le entrega un último beso antes de salir del salón e irse a los baños para darse una buena ducha. Miles de ideas y pensamientos se cruzaban por su mente pero ahora mismo no servía de nada.

–(Lo siento Suzaku...pero seré yo quien le de fin a todo esto, y cuando eso suceda...podré ser feliz contigo y con Nunally...ese ese es mi objetivo).

Todo esto es por un mejor futuro. Un futuro para todos, pero sobretodo, un mejor futuro para aquellas personas que Lelouch tanto ama. Un mundo ideal para ellos y sin prejuicios.

Fin.

Es una pena que este shipp este algo infravalorado, en fin, yo la adoro y tengo varias ideas para fanfics.

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