—Endeavor —aquel sujeto se había acercado hacia el otro rey que permanecía en silencio observando todo—. Tengo una propuesta... bastante interesante.

[...]

POV Midoriya Izuku

Kacchan había permanecido en silencio durante todo el camino. El brillo en sus ojos había desaparecido y solo se limitaba a caminar con las manos en los bolsillos y la mirada perdida.

"Puedo entender... que la muerte de una madre duele demasiado."

Después de todo, yo también había pasado por lo mismo.

Cuando mi madre enfermó hice todo lo posible por ayudarla, pero fue en vano.
Un día, cuando desperté por casualidad en la madrugada, ella ya había dejado de respirar.
Desde ese momento, estuve solo.

"Pero ya no lo estoy."

—Sabes... —dije con ciertos nervios una vez habíamos llegado a mi hogar—, yo también perdí a mi madre —agregué con algo de temor a cómo iría a reaccionar.

Pero para mi sorpresa, solo se giró y me miró con el ceño fruncido.

—¡P-Pero pude superarlo gracias a mis amigos! —añadí tratando de evitar el incómodo ambiente que se estaba formando—. Tú también tienes amigos importantes, ¿no? —inquirí con una leve y nerviosa sonrisa.

—No son mis amigos —sentenció con ira en sus palabras.

En esos momentos me sentí mal.
Quizás no tuve que haber sacado aquel tema. Ni siquiera le conocía lo suficiente. Solamente estaba deduciendo cosas por lo que había visto.

"Pero... quiero saber más sobre Kacchan."

—Son mi jodida familia.

"¿Eh...?"

Inconscientemente sonreí al darme cuenta de que Kacchan, quizás, con el tiempo, podría mostrarme más sobre él.
Quería conocer todas sus facetas.

El hecho de que hubiese dicho aquello con tanta certeza y sin duda alguna, me daba a entender que de verdad esas personas eran importantes para él, aunque no podría decir qué cara había puesto ya que me estaba dando la espalda.

—¿Q-Quieres cenar algo? —cambié de tema después de haber escuchado un pequeño rugido proveniente de su estómago—. ¡Tengo pan, puedes comértelo todo si quieres! —añadí con una sonrisa nerviosa mientras me dirigía hacia la pequeña cocina y sacaba media barra de pan duro que había estado guardando en cierto cajón—. ¡Si lo mojas en agua quedará suave y rico!

Me miró frunciendo el ceño nuevamente y se limitó a acercarse y recibirlo. Volvió a darme la espalda mientras escuchaba el crujido del pan siendo mordido por él; se estaba dirigiendo hacia la habitación de la casa.

"Seguro que está cansado."

Le seguí por detrás algo nervioso y pensando en qué más temas de conversación podía sacar.

"Después de todo, él nunca dice nada..."

Se había vuelto a echar en mi cama y supuse que, otra vez, me tocaría dormir en el suelo.

"Pero... ¿tan rápido se ha comido la barra de pan?"

Aún en silencio, vi cómo se iba acomodando en aquella suave superficie y cómo, al parecer, se había apegado a la pared... Se había apegado lo suficiente como para dejar cierto espacio en el que cupiese otra persona más a su lado.

"¿Eso significa...?"

Volví a sonreír sin poderlo evitar y se me ocurrió una pequeña idea que, con suerte, podría probar a que funcionase.

Me dirigí lo más rápido que pude al salón y busqué uno de mis libros de cuentos favoritos. Era uno que mi madre solía leerme de pequeño y al que le tenía bastante aprecio.

—K-Kacchan —llamé después de acomodarme en la cama y haciendo que girase levemente su rostro y me dirigiera, nuevamente, una mirada con ira—. ¿P-Puedes... leerme esto? —inquirí bajando mi tono de voz con temor y esperando lo que era seguro: una respuesta negativa por su parte.

Y así fue. Se negó rotundamente a hacerlo. Pero... no me iba a rendir.

"Mañana se lo volveré a pedir."

Después de aquello, no pasó mucho tiempo hasta que me entrara sueño.

[...]

POV Todoroki Shouto

No sabía qué hacer. Estar encerrado en aquel lugar me traía algunos recuerdos de cuando estaba en el calabozo.

"La diferencia es que allí estaba mi familia."

Suspiré tratando de no recordar el rostro de Jirou. En estos momentos y por todas las horas que supuse habían pasado, ella ya no debería de seguir con vida... y dolía demasiado.

Por unos segundos me acordé del cuchillo que Iida me había dado a guardar. Lo tenía escondido en mis pantalones junto a la bolsa de monedas que dijo que podía quedarme.

Lo saqué y contemplé durante un tiempo.

"Quizás..."

Negué rotundamente un leve pensamiento que tuve.

"Iida vendrá... estoy seguro."

Él no me había traicionado. Yo confiaba en él. Iida me lo pidió... y lo haré hasta el final.

"—¿Puedes confiar en mí hasta el final?"

Recordé nuevamente sus palabras y volví a suspirar. Mientras tanto, solo podía quedarme en este mugriento lugar.

[...]

POV Iida Tenya

"Está bien, no tengo por qué sentirme así."

Pero no podía evitar que doliera. No dejaba de recordar las palabras de Todoroki y lo único que hacía era sentirme cada vez más culpable.

"He matado dos pájaros de un tiro, todo va de acuerdo a mi objetivo..."

Pero ni siquiera me había dado tiempo de mencionarle cierto detalle importante. Todo fue demasiado repentino. No esperaba que se lo llevasen tan pronto.

"Todoroki estará bien."

Pero lo más seguro era que hubiese dejado de creer en mí. Seguramente me odiaba por haberle traicionado de aquella manera sin siquiera darle una explicación. Probablemente me aborrecía y ya no significaba nada para él.

"Lo único que necesito es poder cumplir el plan..."

Me limité a apoyarme en un árbol y optar por dormir. Ya había anochecido.

"Quizás sí hubiese sido mejor haber recibido alguna de aquellas monedas."

No tenía qué comer, pero no quería pedir ayuda a Kirishima ni a ningún otro. De momento, me mantendría así.

"Solo será por un día."

Cuando pase poco más de tres meses, todo habrá terminado.

[...]

POV Kirishima Eijirou

Habíamos regresado de cazar y, ahora, nos hallábamos los tres alrededor de una fogata que había hecho al frente de mi cabaña.

—Está muy rico —comentó Tsuyu mientras saboreaba uno de los salmones que habíamos cazado.

—¡Pues espera a probar la carne de cervatillo! —exclamó Kaminari con una sonrisa mientras le daba un mordisco a su parte.

"Adoro su sonrisa..."

—Oye —introduje mientras masticaba para después tragar—. ¿Cómo os conocisteis? —inquirí con cierta curiosidad.

Kaminari y Tsuyu intercambiaron miradas para luego sonreír y mirarme.

[...]

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