Capítulo 38: ¿Está... reservada?
Entonces sucedió.
Bakugou y Asui comenzaron a desnudarse sin pudor alguno delante de todos.
[...]
Midoriya, Iida y Kirishima no sabían qué decir.
Se quedaron de piedra al ver cómo el rubio se despojaba de la poca ropa que le cubría, dejándose ver completamente desnudo mientras que la joven de cabello verde hacía exactamente lo mismo, quitándose la camisa hecha por Eijirou y dejándola a un lado para agarrar el vestido que tenía como objetivo y ponérselo.
—¿Qué mierda estáis mirando? —inquirió Bakugou con el ceño fruncido al notar cómo las miradas de ciertas personas se posaban en él y Tsuyu.
—¡R-Ropa! —Izuku fue el primero en reaccionar totalmente rojo y cada vez más nervioso mientras comenzaba a murmurar ciertas cosas en voz baja.
—¡C-Cómo es posible que...! ¡N-No tenéis vergüenza...! —siguió Tenya igual de rojo de su amigo de cabello verde mientras comenzaba a hacer movimientos extraños con sus manos.
Todoroki se limitó a observar las reacciones de su dueño; cada vez le parecía algo más gracioso.
—Eh... —murmuró Kirishima avergonzado mientras miraba hacia otro lado en el que, para suerte suya, se hallaba Kaminari observando toda la situación con dudas.
—¡Ah, es verdad! —entró en razón el alegre rubio—. ¡Perdonad, es la costumbre! —se disculpó con una sonrisa mientras que sus amigos terminaban de cambiarse y quedarse en ropa decente—. Yo usaré esto... —terminó por murmurar casi para sí, acercándose hacia Asui, cogiendo la camisa que esta se había quitado y colocándosela con facilidad para luego mirar a cierto pelirrojo que se veía sorprendido ante tal acto.
—¿No vas a usar algo nuevo que ha comprado Iida...? —inquirió Eijirou totalmente sorprendido.
—Tú hiciste esto para mí, ¿no? —le respondió con una sonrisa y un leve rubor en sus mejillas, cosa que pilló por sorpresa al pelirrojo y le hizo sonrojarse inconscientemente—. ¿Kirishima?
—¡C-Claro! —reaccionó con alegría pero sin poder ocultar todos esos nervios que le estaban carcomiendo por dentro.
POV Asui Tsuyu
"Esos dos... ¿también se gustan?"
Esta vez preferí no decir nada y limitarme a disfrutar de la compañía de mi familia y sus amigos. Que nos hubiéramos encontrado tan rápido era algo que me hacía realmente feliz, pero aún faltaba Jirou.
"Y Ochako..."
No quería hacer sentir mal a los demás.
No quería causar más problemas volviendo a sacar el tema de Ochako.
"No quiero ser una molestia."
POV Kirishima Eijirou
"Definitivamente, Kaminari..."
Me estaba poniendo demasiado nervioso; cada vez me costaba ocultarlo más, pero opté por cambiar de tema y seguir la amigable charla que estábamos teniendo casi todos.
"Tengo la sensación de que me estoy olvidando de algo..."
En ese momento hubo algo que me llamó la atención. Además de los gritos por parte de Bakugou, había cierta persona que se limitaba a sonreír mientras escuchaba cómo Iida contaba con entusiasmo una historia de que se había independizado o algo así, pero digamos que no le presté demasiada atención.
"¡Es verdad!"
—¡Ah! —exclamé al recordar algo de suma importancia y que justo podía comunicar ya que estábamos casi todos reunidos—. ¡Midoriya, Iida! Hay algo que... —traté de decir, pero el hecho de arruinar el ambiente tan alegre que estábamos teniendo me hizo retractarme de informarlo en aquel instante.
—¡Ah, es verdad! ¡Acabo de recordar que la dueña de Tsuyu estaba en problemas! —intervino Kaminari cuando menos lo esperaba.
—Una tal "Urraca" —añadió Bakugou con enfado y los ojos cerrados, como si no le importase en lo más mínimo, pero del que se podía leer fácilmente su preocupación por Tsuyu.
—¿Quién es Urraca? —preguntó Todoroki dirigiéndole una mirada llena de dudas a Bakugou.
—Creo que era Uraraka... —agregó Kaminari pensativo y aún con dudas.
—¿Uraraka...? —pude notar la inquietud en los ojos de Midoriya.
"Supongo que ya se arruinó la felicidad del momento."
POV Narradora
El ambiente se volvió más tenso desde que Denki mencionó lo de Ochako.
Todos se habían quedado en silencio; Midoriya y Tenya no cabían en sí al enterarse de que la de cabello castaño estaba en un grave problema y resultaba ser la dueña de Asui... o que, mejor dicho, lo fue.
—¿A qué te refieres con problemas...? —preguntó Iida con preocupación.
—Se... —comenzó Tsuyu sin poder evitar que se formasen ciertas lágrimas en sus ojos—. Se la llevaron al calabozo.
—I-Imposible... —Izuku estaba perplejo ante la información que acababa de recibir; le costaba creer que su mejor amiga se había convertido en schiavu—. Pero si...
—¡Ah, maldición! —exclamó Eijirou en un grito y se levantó decidido—. ¡No hay problema alguno, vamos a recuperarla! ¡Y será ahora mismo! —agregó con los puños cerrados, una sonrisa y optimismo, el cual pudo transmitir en seguida a sus amigos, sacándoles del estado de shock en el que estaban.
—¡T-Tienes razón! —accedió Midoriya reaccionando y levantándose también.
—¡De acuerdo! —añadió Iida con decisión.
—¡¿No es genial, Tsuyu?! —inquirió Kaminari con alegría al ver cómo los demás estaban dispuestos a ayudar.
—Gracias —respondió secándose las lágrimas y sonriendo amablemente a todos.
No tenían ni un segundo que perder, así que los tres optaron por dirigirse rápidamente hacia el mercado principal donde se suponía que se debía encontrar Ochako.
Midoriya disponía de una gran cantidad de dinero debido a la paga extra que había recibido en su trabajo, Kirishima llevaba consigo todos sus ahorros... e Iida no tenía absolutamente ninguna moneda de oro porque Todoroki todavía no le había entregado la bolsa con dinero; aquel joven de cabello bicolor no tenía pensado hacerlo hasta que Izuku estuviera lejos ya que no iba a permitir que Tenya se quedase sin dinero.
—Bakugou —introdujo Shouto con seriedad después de ver cómo aquellos tres se retiraban y quedaban solamente los cuatro schiavus juntos—. ¿De verdad ese sujeto de verde es tu dueño?
—¡YO NO SOY DE NADIE! —gritó ante la pregunta del chico de cabello bicolor.
[...]
—¿Ochako... Uraraka? —preguntó Kirishima, recuperando el aire después de haber corrido lo más rápido posible, una vez que se hallaba en el mercado y al frente de uno de los vendedores de schiavus.
—Me suena, espera un momento... —respondió dicho vendedor mientras comenzaba a rebuscar en ciertos papeles ordenados alfabéticamente—. ¡Oh, aquí está!
—¡¿De verdad?! —intervino Izuku con la esperanza de que fuera posible comprarla.
—¡¿Cuánto es?! —añadió Iida.
—Pues... 5001 monedas de oro —sentenció aquel señor con alegría.
Los tres jóvenes intercambiaron miradas y se quedaron atónitos ante el precio que habían escuchado. Era imposible que Uraraka tuviera ese precio por defecto, así que Tenya supo perfectamente de qué se trataba todo.
—¿Está... reservada? —inquirió el joven noble.
—¡Exacto! La noble que vino la reservó por 5000, así que si deseáis comprarla, ¡debéis de pagar más! ¡Se la llevará en tres meses! —explicó con una sonrisa—. ¡Es una lástima! Si hubierais venido más temprano, la habríais podido conseguir por solo 15 monedas.
—Y ahora... ¿Qué vamos a hacer? —se preguntó Kirishima; tenía la mirada perdida llena de desesperación y se sentía impotente al haber hecho una promesa imposible de cumplir.
En tres meses les era imposible conseguir tal cantidad de dinero.
[...]
•◇◆◇◇◆◇•◇◆◇◇◆◇•
Recordatorio de que 1 moneda de oro equivale a 10 dólares aproximadamente
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top