Toma de contacto
La abracé.
La abracé con todas mis fuerzas. Tan fuerte que hasta podía sentir cómo palpitaba su corazón sobre mi piel.
Y ella hacía lo mismo conmigo. Escondió su rostro por el hueco que une mi cuello y mi clavícula, impidiendo todo contacto visual conmigo. Pero no se escondió de mí, al contrario. Con solo mojar mi ropa con sus lágrimas, apretar sus uñas en la parte baja de mi espalda y dejar que sintiese cómo temblaba tan cerca de mí, fue más que suficiente para darme cuenta de que ella me estaba pidiendo a gritos que la sacase todo ese dolor que tanto se estaba descomponiendo dentro de su pecho.
Pero, ¿por qué tanto?
¿Por qué había tanto empuje?
¿Y por qué no salía nada aun así?
–Es horrible que salgan tantas lágrimas, y no consiga saciarme... –Soltó, de repente, con la voz entrecortada por el llanto. Su sonido era hasta diferente.
–Pues habla en alto por todas ellas. No hay mejor cura que escuchar de uno mismo todo lo que pasa dentro de sí.
–¿Y si hace más daño?
–La única manera de saberlo es arriesgándose, y lo sabes, amiga.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top