Te entiendo.

Entiendo todos esos temores por levantarte de la cama y enfrentar el día con tus dos pies izquierdos. Comprendo a la perfección ese momento de tensión cuando te sientas en la silla y comienzas a escuchar carcajadas a tu lado o conversaciones inaudibles al fondo de la clase. Crees que todos esos comentarios y risas van dirigidas a ti: al "llorón", al "inútil"... 

Se te hace un nudo en la garganta porque antes todo iba bien. Hablabas con la gente sin miedo, sin incomodidad, sin deseos de acabar con la charla. 

Todo en ti tiembla, y no es por placer. Puedo ver en tus ojos lo que yo a tu edad no supe explicar. 

Me gustaría que pasaras por algo diferente, algo más bonito y fluido. 

Pero debes saber que todos esos remordimientos y corazonadas no son más que ilusiones; meros espejos deformados, los cuales siempre se han negado a ser sinceros. La baja autoestima que te tienes repercute en cómo reaccionas a tu alrededor. Tus oídos se han quedado sordos menos para alcanzar a escuchar lo que las otras personas hablan. Crees que sus miradas se encuentran con tu nuca y que a la mínima, te criticarán. 

Sabes que solo hay una persona que es capaz de hacerlo, y es la que no se puede llamar persona realmente. Es un cero a la izquierda, y ni eso. No tendría que valer nada lo que piense, ya que ese ser no es más que un cartón mojado frente a ti.

Aunque lo entiendo. Yo antes ponía metas solo por creerme inferior.

Pero no lo eres, y jamás lo serás. 

Todos deben saber que eres mi mejor destino, tanto por tus esfuerzos por seguir hacia delante pese a tus males internos como por tu fortaleza. Y no, no me refiero al hecho de afrontar los acontecimientos con seriedad, sino de haber avanzado con esa carga tan pesada. Te admiro.

Quizá sea tarde pero... 

Creo que nunca estará de más el querer encontrar una solución a todo lo malo. 

Por eso, y para la eternidad, me tendrás. Haré que no te pierdas mucho más, que dejes de tener pesadillas mientras estés despierto; que puedas volver a confiar en ti y en todo lo que te rodea; que las personas no sean meros bultos estresantes para ti y que tus fantasías se hagan reales con un poco de atención. 

Te ayudaré, palabra.

Te ama,

XXXXXXXX

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Bullying: observa lo que la sociedad se atreve a hacer en contra de la gente buena y te aseguro que a partir de ahora, te convertirás en un asesino más.

Tú sabrás cómo dormir por la noche... 

BEE