{ Segunda parte }
Advertencia: alto contenido sexual, dudoso consentimiento, abuso de poder, abuso de sustancias, abuso psicologico, tortura leve, muerte de personajes.
.
.
.
- y aun asi... orion logro alcanzarlas -
Tres meses después...
- aquí tiene su café latte con crema batida y chispas de colores, que lo disfrute -
- ¡gracias!!-
Giyuu ve marcharse a otro cliente feliz con su excesivamente costoso café que puede preparar en casa o en un local menos costoso a menos de la mitad de su precio.
Según su manager, no venden comida, venden experiencia.
Puede ver que al sentarse, saca su celular para tomar una foto a la bebida.
Halagador pero innecesario.
El azabache de ojos azules continuó con lo suyo, revisando los tickets con la bitácora de compras. Es un sistema para valorar cuales son los alimentos más solicitados en el futuro y explotar alguna opción viable. Concentrado en su tarea hasta que se acerco el siguiente pobre diablo, digo cliente.
Como esa vez que salió promoción el café frappelado con temática del dia de san patricio. La gente se volvió loca por una bebida sin café con colorante verde.
Pero no se queja, es dinero para la empresa y por tanto, algo de eso llega a su bolsillo. No es una chica bonita que puede jugarse la vida en conseguir lo que quiere con un delicado pestañeo.
Aunque donde trabaja sólo trabaja gente bonita, al parecer fue del estándar de belleza del anterior gerente porque ignoro su horrido antecedente criminal. Si bien solo lo marca como "no apto para medicina o carreras similares" los de recursos humanos siempre preguntan y está obligado a responder con la verdad.
Eso sí, le impuso la tarea aprender a sonreír. No podía atender a los clientes con una mueca apática.
Con tal de mantener su empleo, se la pasó en casa practicando la sonrisa con videos de internet. quedó satisfecho al lograr una mueca ligera y profesional en vez de una expresión parecida a un payaso asesino.
Aunque los primeros días le dolían las mejillas.
- oi... -
- Bienvenido y buenas tardes, ¿puedo tomar su orden? - pregunta con su sonrisa ensayada. Al levantar la mirada, intenta esconder su sorpresa al reconocer ese cabello blanco espumoso y la cruenta cicatriz en su cara.
Sanemi.
- lo de siempre - dice en tono seco con su expresión agresiva de siempre. De hecho, muchos de sus compañeros y compañeras prefieren ceder su lugar para atenderlo en la caja por miedo.
- claro... un cafe negro mediano con azucar morena y una rebanada de red velvet - repite mientras teclea el pedido - ¿correcto? -
- si -
- bien, son... - antes de decir el costo total, el albino ya tenia su tarjeta en la mano y este la aceptó para pagar.
Tras unos segundos de la transacción monetaria, le regresó la tarjeta junto con su ticket y tras una breve instrucción de su pedido, Sanemi se alejó.
Giyuu se había acostumbrado a esa rara rutina. El albino de ojos violeta solía venir a su cafetería dos a tres veces por semana y pedir exactamente lo mismo desde hace 2 meses. Sentarse en alguna mesa cerca de la ventana y contemplar el paisaje urbano. Dura casi 1 hora en ese lugar para luego irse sin decir ni una palabra.
El azabache de ojos azules quiere pensar que han hecho una rara amistad.
Empezando desde el funeral de Kanae...
Esta soleado, con pétalos de flores de sakura revoloteando en el viento y el dulce canto de los pajaritos revelan un alegre dia.
Ironía burlesca de la naturaleza para un funeral.
Giyuu usando un traje negro llego al cementerio, manteniéndose respetuosamente distante de las personas que "verdaderamente" conocían a Kanae. Solo dio el pésame a los padres con verdadera intención, ella solo fue un daño colateral de la tensa relación entre Shinobu y el.
En el poco tiempo que interactuó con ella, le pareció una mujer muy amable y atenta, casi sintió pena en elegirla.
Casi.
Cualquiera hubiera funcionado en su plan, hombre o mujer. Se mató de hambre para conseguir el peso de Kocho y práctico el nivel de apuñalamiento por su bajita estatura, aprendió a maquillarse para no verse desgarrado, uso ropa doble (hasta triple) para evitar sospechas de su alarmante pérdida de peso. todo ese sacrificio no seria desperdiciado.
Ella fue parcialmente inocente.
Fue una sorpresa ver en su correo la invitación fúnebre, quizás lo invitaron por llenar un poco los espacios o tal vez porque realmente le simpatizo a la familia. No lo sabe y sobra preguntar si planea ya no volver a verlos.
Aunque la ceremonia fue dolorosa, no le quita belleza. Las flores y la mejor fotografía de la mujer en frente, muchos decían palabras conmovedoras y gentiles aun entre lágrimas.
Giyuu soltó una que otra lágrima, no tanto por ella, sino porque no habría nadie que se preocupara lo suficiente por él para decir algo así de bonito.
miro también a una sana distancia de la caja fúnebre, el albino de enorme cicatriz. Luce tan dolido y mordía sus labios con fuerza, intentando no llorar a lágrima viva como la señora Kocho.
Se preguntó quién era y que relación tenia con la familia.
- oh...- fue que llegó un momento de claridad. Las damas de honor dijeron que Kanae estaba comprometida con un tal Sanemi, incluso había hablado con el un poco antes, lo había olvidado por sus propios asuntos.
El ex novio.
El ojiazul lo entendió, lo entendió perfectamente.
El también perdió dos personas importantes y la doble potencia. Su prometida murió sabiendo que le fue infiel, sin saber realmente la verdad de su relación. Rengoku era su amigo y fue su padrino de boda, imagino todas las veces que salieron juntos en una amistad-familiar.
El si era la verdadera víctima de la situación y nadie parecía importarle que esta a punto de quebrarse en pedazos.
Cuando la ceremonia termino y el cuerpo fue sepultado en tierra. Lentamente todos se fueron para ir la sala de velación, menos el albino y el mismo.
Se acerco despacio, como si manejara un animal herido.
- hey... -
- ¿Qué mierda quieres? - escupe agresivo, mirándole con fiera, sus emociones están por estallar y buscan un chivo expiatorio.
- lo siento... -
- vete a la mierda con tu lastima - le golpea el hombro con afan de alejarse de el pero Giyuu lo sigue.
Guiado por una rara empatía, con el deseo anhelante de que alguien se le hubiera acercado cuando estaba en su punto mas bajo, lo siguió.
- ¡¿que putas quieres?!! ¡¿te gusto o que maldito maricon?!! - lo toma de la ropa del cuello, arrastrándolo contra un árbol y no le importo impactarlo contra el tronco con varias ramas cortadas.
- no quiero tu lastima. No quiero nada que ver con un... -
- se lo que se siente... - dice en voz muy baja. - perder dos personas a la vez en el mismo dia.-
-... -
Sanemi lo soltó mirándolo con los ojos bien abiertos y respirando con dificultad. Sabe que dice la verdad, puede verlo en su semblante.
Se quebró.
El se aferro a él como un niño aun con su altura y fuerza, en ese entonces aún estaba muy delgado, sentía que podía romperlo pero no le importo, solo paso sus brazos en sus hombros en un débil abrazo, sin decir ni una palabra.
No había palabras que sanen en ese momento para un corazón hecho añicos.
Quien sabe cuanto tiempo duraron asi, quizas minutos o unas horas, sentía sus piernas cansadas y pesadas por soportar el peso del más alto, sus brazos entumidos por estar tanto tiempo en una sola postura.
Después solo lo soltó como si lo hubiera quemado. Cayó al suelo, impactando otra vez contra el tronco por el empuje tan violento.
- te mataré si dices algo -
-... - Giyuu solo afirmo despacio, conservando la poca dignidad que le queda, se fue en silencio.
Sería la primera y última vez que se verían.
- al menos eso pensé... - dice para sí mismo, mirando de reojo al albino que parece estar entretenido con su celular.
- ¿Ya tomaste tu descanso Tomioka-san? -
- eh... Hayama-san, no aun no- volteo hacia la voz y ve a su compañero.
Un joven de su edad de cabello blanco como espuma de mar, piel tostada, sus ojos de vívido verde esmeralda le añaden más atractivo.
Hayama Akira es el favorito de todos en la cafetería tanto del personal como los clientes. es guapo, inteligente, tiene encanto, puede manejar clientes difíciles o con demasiado derecho en el trasero aun mejor que el gerente. Exuda tanta confianza que a Giyuu que fácilmente puede malinterpretar con arrogancia.
- vamos. El negocio esta calmo, le pedí a Hinata-san que nos cubra un rato-
- ... esta bien-
Decir "salir" a comer es solo referente a comer en el descanso. No es un gran salon con sillas pomposas, es discreto y pequeño que sirve de vestidor-comedor, pues parte de la política de la empresa es llegar de civil y cambiarse en el local, si el individuo en cuestión se mete en un lío, no mancha la imagen corporativa.
Cada uno tiene sus propios bentos y una que otra bebida rechazada por el cliente por no cumplir su expectativa, es una práctica parcialmente secreta. Total, ya está pagada.
Ambos conversan, o bien Akira toma mayor parte de la conversación, hablando de sus clases de gastronomía y las cosas nuevas que aprendió.
Según entiende Giyuu en una de sus múltiples pláticas pasadas, Hayama se ganó una beca escolar gracias a sus buenas notas y paga la mitad del semestre con su trabajo, la otra mitad su madre adoptiva.
Eso es bueno, hasta donde él sabe, la carrera de gastronomía es muy costosa y no todos tienen verdadero talento.
En cambio el... bueno, nunca se puso a pensar en otra carrera además de medicina y actualmente se limita a existir.
- Tomioka-san, he pensado que podrías incursionar en la gastronomía o reposteria. Se te da bien - anima el albino con una sonrisa picara. Giyuu levanta una ceja, gesto que hace reir al contrario de ojos verdes.
- los clientes compran más postres cuando se trata de ti -
- si se trata de ventas, mejor en mercadotecnia - responde lógicamente.
- buen punto pero... siempre les das mejor presentación -
Discretamente sus dedos rozan el dorso de la mano de Giyuu por encima de la mesa, dando pequeños círculos.
- ¿Hayama-san?-
Antes de que pudiera responder, la gerente de turno hizo acto de presencia, pidiendo al albino en su oficina. La mujer es un tanto mayor que ellos, de pintoresco cabello azul-verdoso que resaltan sus hipnóticos ojos aguamarina.
Queen, si no mal recuerda su apellido. Es la nueva manager.
Aunque extraño por el llamado, no desobedeció y siguió a la mujer en silencio.
Aunque no era raro que la ejecutiva los llamara para alguna situación, siempre era a él quien buscaba con mayor recurrencia.
Quizás lo está entrenando para tomar el puesto de gerente en alguna otra sucursal o en otro turno, hasta donde sabia, no hay gerencia en la mañana y es ella quien toma turnos dobles.
Guardó su recipiente vacío en su locker, el de Akira lo dejo ahí mismo, cerrado y con una nota de papel con su nombre escrito. No vayan a pensar que está abandonado.
Tras lavarse las manos, se dirigió a trabajar.
...
Esa misma noche...
- Tomioka-chan - el azabache se gira hacia la voz de su jefa, le molesta que lo llame asi tan irrespetuosa pero si quiere conservar su empleo (y mas con su historial) era mejor callarse.
- necesito que te quedes a realizar el inventario -
- ¿perdón? -
El inventario de los productos se realiza una vez al mes, normalmente viene una persona externa y es el gerente quien se queda a supervisar.
- también que retires todos los productos caducados y hagas lista al respecto para su reposición -
- me tomara hasta la madrugada -
Eso es punto y aparte, es mas facil sacar los productos caducados, solo los bota. pero hacerlo al mismo tiempo que el inventario es tedioso. se llenan dos bitacoras diferentes es el doble de molesto.
- Entonces, será mejor que empieces - dicho eso, la supervisora se fue sin decir una palabra mas.
- suerte Tomioka-san - le desea su compañera Hinata mientras sale junto con su amiga y otro chico del trabajo.
Si bien alguno podría quedarse a ayudar. El caso es que sin que los supervisores hayan sido quien los pidiera, la empresa no les pagara las horas extra. Es más, podrían meterlos en problemas.
Políticas estúpidas.
Giyuu suspiro, al menos tendría un bono extra ese mes.
...
Quince días después...
Está agotado, oficialmente está agotado.
Ya van varios dias que hace turnos dobles y quedándose a horas extras para hacer un montón de quehaceres en la cafetería gourmet que raya en lo ridículo.
Suspiró derrotado, apenas llego a su departamento de 60 mts² (si bien puede pagarse algo mas grande, su maldito historial criminal no lo deja) e iba a bañarse cuando su puerta es golpeada suavemente.
Con toda la pereza del mundo y guardando con fuerzas sus deseos de enviar al carajo al invitado.
- Fuji-san - una anciana regordeta le vio entre lastima y curiosidad en el momento que le vio.
- ¿Otra vez tarde Tomioka-san?-
- es para ganarme el pan - dice en tono moderado, no quiere ser grosero con la dulce ancianita.
Pese que el departamento es pequeñito, no hay suficiente agua caliente y la seguridad del barrio donde vive deja mucho que desear, ella le dio la oportunidad de vivir ahi, incluso no lo desalojo cuando tenia 4 meses de retraso en la renta porque no encontraba otro empleo cuando llego a esa ciudad hace 1 año.
- ya veo, te llego un paquete. Siento que este a medio abrir, mis nietos son muy traviesos - le muestra la caja mediana claramente con la cinta adhesiva removida pero encima de la caja había unos panecillos de leche.
- ¿Qué es esto? -
- estas muy flaco Tomioka-san, esta vez yo invito -
Giyuu sonríe con dulzura. Agradece la intención y se despide deseándole buenas noches.
No puede evitar emocionarse un poco con la caja, incluso su cansancio bajo un poco, camina un hasta llegar a su sillón individual, deja los panecillos en el descansabrazos y abre completamente la caja.
- oh- saca de la caja un adorable oso de peluche de un color rojo oxido con un bonito moño blanco.
- gracias Tsutako-neesan- lo abraza sonriendo.
Desde hace unas semanas, su hermana mayor empezó a hacer contacto discretamente. No por llamadas, ni tampoco correspondencia, sino mensajes ocasionales.
La primera vez, estaba algo desconfiado porque Tsutako nunca hizo el intento de hablar con él en esos 5 años, pero en su primer mensaje le explicó que al vivir con sus padres, estos la vigilaban estrechamente, incluso sus parejas para que no tuviera contacto con el. Además de que no sabía dónde había ido, fue cuando lo vio casualmente entrar al edificio donde vive pero no puede acercarse porque iba de paso con su madre.
Actualmente sus padres viven con ella y su esposo, por remodelaciones en su casa. Así que no puede hacer grandes escapadas o comunicarse libremente sin causar problemas.
Giyuu lo entendió, a diferencia de él, su hermana puede tener hijos y con la futura herencia que le dejarían los ayudaría para alguna carrera. No quería meterla en líos.
Pero de forma esporádica, ella le envía algún regalo como reloj de pared, cafetera, sábanas, incluso un celular (en la nota anexa decía que ella tenía uno nuevo y no lo necesita mas) ahora un peluche. Cosas así, le dan un sentido más hogareño a su casa.
Sin soltar el muñeco empieza a comer el panecillo.
- quizá... no estoy tan solo...- le envió un corto mensaje de agradecimiento, lentamente quedándose dormido en el sillón abrazando el osito de peluche.
mientras tanto...
un celular suena en un pequeño timbre de campanilla, quien lo escucha solo da una sonrisa cariñosa.
...
Llegó el día de paga, la emoción del momento es palpable mientras hablan de planes de fiesta y salidas a los lugares de moda. Giyuu pensó que por fin podría comprar ese horno tostador que vio en el supermercado e ir al cine por primera vez en años, no recuerda la última película que vio en el cinema.
le emociona un poco también.
propiamente después de un largo día de trabajo sirviendo cafés, bebidas frías y bocadillos, cerraron sin mucho inconveniente. después de limpiar y ordenar los productos de limpieza en su lugar. se reunieron en el descanso, tomando turnos para cambiarse. el ambiente es ameno cuando la gerente Queen hizo acto de presencia en el descanso de empleados. los fue llamando uno a uno para entregar sus cheques y recibos, todos haciendo gestos de felicidad mientras revisan sus recibos.
Giyuu al ver el suyo, solo frunce el seño ante el inofensivo papel blanco.
...
- si... ya te dije que quiero ese embarque para dentro de 3 dias. viste el inventario que te envié hace semanas... no quiero volver a tratar con un cliente molesto porque no hay especia de matcha- vira los ojos molesta la gerente mientras atiende la llamada.
Ignorando deliberadamente también los suaves golpes en la puerta de su oficina que llevan más de 10 minutos insistiendo.
- como sea, te llamo mañana- corta la llamada y tras un suspiro fastidiado permite su entrada.
- buenas noches - saluda Giyuu por mera cortesía - vine hablar sobre mi nómina. pienso que hay un error, no me están las horas extras que realice estos días -
- no hay ningún error -
- ¿entonces se depositara en el siguiente pago? -
- no, para nada. Estamos cortos de ingresos y no alcanzamos a pagarte el tiempo extra-
El ambiente entre los dos se volvió tenso, el ojiazul intentó no mostrarse enojado o grosero frente a la sonrisa pretenciosa de la mujer.
-...-
- la vida no es fácil Tomioka-chan, te has metido en un lio y no lo pienso dejar pasar -
- ¿lio? he trabajado tal como me lo ha ordenado - le esta costando contenerse para no gritarle y sabe que ella lo hace intencional, presionando sus limites.
- si, razón por la cual se te ha cortado tu sueldo -
Queen observa a Giyuu, aun con su indiferente apariencia y ropa pasada de moda, es atractivo.
Para mujeres como... hombres.
- ¿tienes algún inconveniente?-
- la verdad es que...-
- Porque te recuerdo que tus opciones son muy limitadas. Puede que no hayas ido a la cárcel pero el historial delictivo deja mucho que pensar. - suelta casualmente la mujer de engreídos ojos verdes, ni siquiera tiene la decencia de disimular un poco.
- ya veo... -
- retírate - ordena con un movimiento despectivo de mano. El moreno obedece silenciosamente, reprimiendo las ganas de llorar de impotencia, no le daría la satisfacción en la cafetería.
No lo hizo frente a Shinobu cuando lo traicionó, tampoco con Kyojuro. Ni siquiera rogó a su familia para permitirse quedarse.
Lo único que le quedaba era su voluntad, porque su dignidad y vida se las habían arrebatado hace tiempo.
Una vez que el azabache se fue, Queen se puso a revisar su celular para ver que nuevo bolso de marca podría comprar hasta que su celular suena con un nombre terriblemente familiar para ella.
- buenas noches... - saluda lo mas profesional.
- noches Queen... ¿sabes para que llamo?-
- no, pero estoy a sus ordenes -
- he notado algunas irregularidades que debo intervenir de inmediato, ya que no queremos problemas con la policía o si -
- le aseguro que no hay...-
- puedo verlo todo Queen...-
Eso la hizo sudar un poco y su mano apretó más el celular. Luchó contra el impulso de mirar alrededor suyo, tragándose el miedo.
Sabe de lo que es capaz.
Hace tiempo, en su arrogancia quiso enfrentarlo en un juicio y la hizo pedazos, no solo perdiendo el caso, también arruino su carrera como abogada ante los buffets.
Dejándola como una simple manager de una línea de cafetería de alta gama.
Y aun así, no ha podido quitarse su correa de adiestramiento.
- sé perfectamente lo que haces y con quien lo haces... me da lo mismo pero... esta última acción. Está por encima de tus límites -
- señor...-
- la vida no es justa Queen, te has metido en un lio y no.pienso.dejarlo.pasar-
Sin evitarlo, toca su cuello. Temblando y sudando nerviosa. Trago duramente la saliva. No esta en la misma habitación pero puede imaginar su densa mirada contra ella, esos ojos que esconden un demonio atroz.
- Debiste controlar tus emociones, de haberlo hecho, no tendríamos esta conversación... -
- lo resolveré de inmediato, no volverá a ocurrir -
- ¡perfecto! Que pases buena noche -
Simplemente colgó.
Llena de impotencia, Ella arrojo el centro de su escritorio contra la pared, rompiéndolo en pedazos. se sentó de golpe en la silla temblando profusamente y sosteniendo su rostro con ambas manos.
Pensó que se había librado de él.
Pero solo tiene la correa floja y esta vez fue un tirón de advertencia.
- Hayama, ven de inmediato - prácticamente ordenó la gerente via telefónica. sin darle oportunidad de réplica, colgó.
...
- listo... - su sonrisa de alivio se acrecentó cuando lo vio entrar a ese agujero que llama "casa" aunque la idea de imaginarse a Giyuu siendo un ratoncito es linda, piensa más en él como un gato.
Uno callejero de gran carácter pero igualmente precioso.
- siento haber tardado Giyuu, he tenido mucho trabajo - dice tomando asiento frente a las múltiples pantallas que tiene a el. Apago temporalmente las que corresponden a la cafetería, enfocándose únicamente en la casa de Tomioka.
Cada esquina de las habitaciones podía verlo perfectamente, incluso en la regadera.
Su lugar favorito es en la recamara, donde puede verlo acostado abrazando el osito de peluche y rodeado de esas sabanas.
Tan lindo...
- no te preocupes, ya lo he resulto por ti - dice con mucho cariño, tocando la pantalla justo donde sale la imagen del ojiazul cambiándose de ropa.
- hermoso...- sonrie, haciendo que sus ojos se iluminen más al ver su piel expuesta, su dulce rostro adormilado. Le encanta su cuerpo, le pican las manos queriendo tocarlo.
Siente ese ferviente fuego en su vientre, creciendo mas y mas, extendiéndose hasta su pecho haciéndolo jadear.
- pronto te sacare de ese lugar - sus iris bicolor de oro y rubi centellean de puro anhelo, vividos, intensos incluso un poco aterradores a quien sea que lo miren.
- y tendremos nuestro propio paraiso...-
Perfecto.
El hijo perfecto.
El amante perfecto.
El hermano perfecto.
El abogado perfecto.
Simplemente perfecto.
Esa palabra lo representa como si fuera un sinónimo de su nombre pero también...
Monocromático.
Veia sus rostros pero no los recuerda, salvo a sus padres y eso porque lo trajeron al mundo, incluso Senjuro, hay días que lo olvida y recuerda su presencia cuando le habla.
Al final, solo son personas. Solo quieren algo de el, algo de su brillo, conocimiento, poder, lo que sea pero quieren algo.
Incluso amor.
Pues él sabe que la vida es un toma y da, corrupción para tener más y el precio que hay que pagar. Al final, todos quieren algo, incluso él.
Lo que sea que llene ese vacío que perfora su pecho, haciendo que mire a todos desde su pedestal.
sentir como los demás
ó
no sentir como ellos
Sonreír sin sentirlo.
Podía consolar sin ser sincero.
Llorar por reflejo.
Enfadarse solo porque tiene que hacerlo.
Tener una imaginaria empatía solo si lo requiere.
Podía amar sin amar.
O eso creia...
...
Mientras tanto en otro lugar...
Un joven de tez morena y cabello blanco esta en la regadera bañándose con agua fria y tallando su cuerpo con dureza, irritando su piel.
Aun con la irritación y verse anormalmente carmesí, no se detuvo.
- carajo...- murmuró sintiéndose sucio.
Odia con todo su ser a esa mujer.
Desde que ella le puso la vista encima, fue su perdición. La absurda mujer cree que por ser su jefa tiene derecho a acostarse con él nada más porque le parece guapo.
¡que se joda!!
Pudo actuar denunciando por acoso pero ella lo puso en jaque. Sacando la mano ganadora, ella es conocida del director de su institución de gastronomía y conoce a la jefa de su madre.
Solo unas cuantas mentiras y chismes lo dejaría sin universidad y su madre sin empleo.
Así que cedió ser su juguete sexual.
Para su alivio, solo era esporádico, nada más cuando lo recuerda. Detesta tocar a esa mujer, que ella le deje marcas en la piel, sus besos bañados en lujuria le parecen sucios. Además no era el único, vio a otros compañeros también desfilar por su oficina.
Hasta hace poco y nada más porque se dio cuenta que le gustaba Tomioka.
En sus encuentros con Queen, solía imaginarse a su enamorado. se sentía menos asqueado y su pene podía ponerse duro, sino, tardaría más y ella le exigiría más tiempo o hacer otras cosas que la complazcan.
Todo por su propia estupidez, llamándola Tomioka mientras se la tiraba en la habitación del motel de paso de siempre.
Queen es adicta al control y quiere poseer todo, incluyendo los corazones que no le corresponden. Asi que empezó a ser más posesiva y tratar como un esclavo a Giyuu, explotando sus capacidades y siendo más irrespetuosa con él. era tan obvio que hasta personas distraídas se dan cuenta de su creciente arrebato. se disculpa en silencio, fue su culpa por la cual empezó su campaña de odio contra el.
solo con el objetivo que el renunciara para no pagarle la indemnización como es y sacarlo del medio.
- solo resiste un poco más Tomioka, solo un poco- pide terminando de lavarse. está cerca de terminar la carrera, una vez que lo logre, renunciara y le pedirá al azabache de ojos azules que le acompañe. podrían ingresar en otro trabajo o hacer su propio negocio.
hablaba en serio cuando le dijo que tiene aptitudes para la repostería o como él dijo, la mercadotecnia.
en ese infernal sitio, Giyuu se volvió un sitio seguro donde puede relajarse. podía hablar con él sin doble sentido o sentir que lo desviste con la mirada. Al principio lo considero un amigo con quien pasar el rato pero poco a poco sus emociones fueron mutando. nunca se considero gay o bisexual pero supuso que estaba bien, el ojiazul es un chico extraño pero lindo.
Akira salió de la regadera cuando considero suficiente. disculpándose nuevamente en silencio con Giyuu por su egoísmo y falta de coraje.
- pronto saldremos de este infierno...-
...
La mañana siguiente...
tras un breve sueño reparador, Giyuu se despierta sintiéndose adormecido y torpe, quería seguir bajo esas cálidas sabanas pero el pan no se gana solo y él no es una chica bonita con suerte que puede ganarse la vida con solo pestañear.
además, peligro que Queen lo castigue por faltar con alguna tontería absurda.
estirándose un poco y murmurando incoherencias al aire sobre su sueño (es la tercera vez que sueña con un programa infantil de peluchitos), fue al baño a iniciar su rutina.
Después de hacer sus necesidades y luchar de no quedarse dormido en la taza del baño, se mete bajo la regadera tras tantear la temperatura del agua. entro después de desvestirse, lavando su cuerpo a conciencia, viendo como sus provincias óseas empezaban lentamente a desaparecer, ya había empezado a recuperar su peso normal pero aun lucia demasiado delgado.
al salir, se vio al espejo empañado. notando que tendría que usar un poco de maquillaje una vez más para esconder el cansancio y el ligero demacrado de la pérdida de peso.
- otro día mas...-
...
el día en la cafetería siguió a su ritmo normal.
clientes ir y venir, lattes, frapppuchinos con bocadillos salados o dulces. limpiar mesas y ocasionalmente los sanitarios por simple presentación. Giyuu terminaba de atender a una pareja de amigos que tardó unos minutos en ponerse de acuerdo que tomar.
ambos son ruidosos y tontos, el más bajito hacía preguntas obvias mientras que el otro se desespera por ello, dando respuestas agresivas, para empezar a discutir, luego ambos quedan en blanco cuando Giyuu los corrige y el ciclo vuelve a empezar.
Al final ambos eligieron unas bebidas de soda italianas, pastel de chocolate y carlota de limón. luego se sentaron en una mesa hablando de deportes.
- Tomioka-san- lo llamó su compañera de ojos claros.- te busca la gerente Queen-
- ya veo... gracias- se guardo un suspiro fastidiado, preguntando con sarcasmo ¿Qué querría?
Camino por los pasillos del local hasta llegar a la puerta de la gerencia, dio pequeños golpes a la puerta, anunciando su llegada. escucho algo de ruido dentro de la habitación, eso lo hizo arquear una ceja confundido pero lo dejó de largo cuando escuchó un breve "adelante". vio a la gerente, luce algo agitada pero no le resta malhumor.
- eres tu, Tomioka-ch... san- dice entre dientes, tratando de mantenerse profesional.
- me mando a llamar- responde suave, intentando que la obviedad no escapara de sus labios.
- si bueno... aqui tienes- le extiende un sobre amarillo de mala gana, el moreno lo reconoce de inmediato.
- pero...-
- solo tómalo y...- Queen ve de reojo su celular cuando da un pequeño timbre de mensajería.
"Sonríe :)"
Eso bastó para hacerla temblar hasta la médula pero logró mantener la fachada.
- Son tus horas extra Tomioka-san, tal como acordamos- Queen da una sonrisa terriblemente falsa mientras le entrega con más amabilidad el sobre con el dinero faltante.
- ayer dijo que...-
- no seas tontito, fueron imaginaciones tuyas.- mueve la mano izquierda de forma casual- solo fue un error del sistema-
- ¿Está bien? - no dice más y se retira tras una breve reverencia.
Una vez afuera, sonríe más animado. no sabe qué pasó para que la gerente cambie de opinión pero da lo mismo. le pago y podría darse esos gustos que tanto espero. con mayor ánimo, continuó su trabajo.
...
Finalizando el turno, Giyuu pensaba en ir al mini súper a comprar algo de leche y azúcar. lleva cena cortesía (dos Croissant de huevo, jamón y queso, café americano grande y un strudel de manzana) porque un cliente olvidó pasar por su pedido (algo común en los pedidos en línea si no se elegía un servicio de paquetería) como ya está pagado, Giyuu pudo quedarse sin repercusiones.
fue otra alegría en la vida, le encanta el strudel de manzana y los croissants.
Al finalizar de vestirse, vio en su celular una notificación de noticias.
- otra desaparición... - murmura algo perturbado. Recientemente las noticias están desapareciendo jóvenes entre 20 y 30 años de edad, en su mayoría hombres. han sido 7 en esas semanas en la ciudad donde reside. según los comentarios, solo son chicos elegidos al azar, no tienen antecedentes llamativos, tampoco son hijos de multimillonarios o extremadamente pobres.
De los 7, solo 5 han sido encontrados muertos en circunstancias no declaradas por la policía.
- Buenas noches, Tomioka-san- saluda Akira con una sonrisa cansada. el azabache le regresa el saludo un poco más quieto, ahora que cae en cuenta, es la primera vez que lo ve en todo el día.
- me preguntaba si tenías planes para este sábado- pregunta directamente.
- voy a casa a coquetear conmigo mismo y hacerme el difícil- Akira suelta una ligera risa por su chiste.
- bien, compartimos descanso estaría bien ir a dar un paseo-
-...-
Giyuu medito un poco eso, si es sincero hace tiempo que no salía, no desde Kyojuro y Shinobu. Además, ha estado tan estresado esas últimas semanas que no le caería mal y no se vería como un rarito (más de lo normal) si va solo al cine.
- de acuerdo- aceptó su invitación.
- ¡genial! te veo en la entrada de Oikawa-mall que está en el centro, te vere a las 3 pm.- dicho eso Akira se retira con una gran sonrisa.
el ojiazul lo ve irse, olvidando que podía darle su numero de telefono para estar al contacto. si es honesto, paso tanto tiempo sin celular hasta que olvida que puede proporcionar. No obstante, en ocasiones deliberadamente omite decirlo, por ejemplo, personas indeseables o su jefa Queen, sí le hizo la vida miserable por tantos días, no quiere imaginar como seria si tuviera su número telefónico.
Sea como fuere, mañana se vería con Akira en el centro comercial.
...
Son las dos con cuarenta minutos del sábado.
Giyuu llegó al lugar de encuentro a buena hora, tuvo que salir antes de casa porque la distancia de su casa a ese centro comercial es algo lejana y tuvo que tomar 2 autobuses para llegar.
sacudió su ropa suavemente, retirando alguna pelusa o suciedad que se haya adherido en su camino. Pienso que harían en su salida, quizás ir al cine o a comer antes que nada, quizás aproveche para comprar una camisa nueva, su guardarropa ya está bastante arruinado. Una vez listo, tomó asiento en una banca y esperó pacientemente.
espero...
espero...
- mh...- miro la hora por su reloj, son más de las tres con cuarenta. Akira va retrasado y eso es raro en el, siempre es puntual en el trabajo. Al no tener forma de hablar con él, solo puede especular.
- quizás tuvo una emergencia...- dice para sí mismo. era mejor pasear por su cuenta en el centro comercial, ya se veía bastante patético estar ahí quieto por demasiado tiempo. ya hablaría con él mañana.
con sus planes parcialmente cambiados, el azabache de ojos azules paseo solo por las tiendas. buscando alguna de su interés o con buenos precios. entró en una para mirar las prendas, prefería las camisetas de botones, son prácticas para cualquier ocasión pero también las playeras.
Su tarde se fue volando en el centro comercial, compró dos camisas de botones y una playera, también un pantalón de mezclilla y ropa interior. comió una hamburguesa con queso y papas, disfrutando de la temporal libertad financiera.
si bien pensaba ir al cine, al ver la hora sintió algo de inquietud, pues mientras comía, vio las noticias locales en una de las pantallas del comedor general del centro comercial, recordando tomar precauciones sobre las desapariciones. Si bien en el día pudo tomar 2 autobuses para volver, al salir del cine tendría que tomar un taxi para volver y el sector donde vive es inseguro como para jugarse el pellejo.
Mejor regresaba a casa.
claro, no sin antes comprarse el hornillo tostador.
...
lunes...
Giyuu limpiaba mesas como siempre en la cafeteria, es de mañana y hay pocos clientes, salvo los habituales y uno que otro que pasan por sus pedidos en linea o por el autoservicio. el moreno retiraba unas manchas de cafe de la mesa junto a la barra de aditamentos para cafe mientras piensa cosas sin sentido como la gente que pide leche sin gluten. si saben que la leche es un producto animal ¿no? El gluten es propio de los cereales.
cree que la respuesta sobra.
hay días que la gente compra por comprar.
- Tomioka-san - Hinata, su compañera le habla con su voz delicada como vidrio. luce algo incomoda.- te llaman en la oficina-
- ya veo...- se llevó los productos de limpieza consigo para reportarse con Queen. se le hacía rara tanta tranquilidad en el fin de semana.
al ingresar, se quedó de piedra por dos motivos. Su jefa no estaba sola en la oficina, había dos agentes de la policía en el lugar. por unos breves instantes recordó todo el asunto de Kanae.
Después de que se llevarán a Shinobu a detención, Giyuu estuvo algunas horas dando su declaración. siendo testigo principal de la afrenta y tambien preguntar si queria añadir alguna denuncia por intento de asesinato a su persona. Fue extremadamente cuidadoso en dar su testimonio, no hablar de más, lucir inestable.
todos esos detalles que a buenos ojos policiacos no pasan por alto.
Afortunadamente pasaron por alto su historial criminal, toda la evidencia más los testigos era más que suficiente para pasar directamente a la sentencia. según recuerda le dieron 12 años por el crimen pasional, más los agravantes.
fue todo un espectáculo cuando llevaron a Shinobu a la cárcel, ella gritando mientras sus padres seguían llorando por el giro en sus vidas.
salió de sus recuerdos cuando su gerente le llamó con un chasquido de sus dedos. el ojiazul pestañeo un poco para despabilar y acercarse al asiento disponible. mirando a los agentes de la policía, uno de ellos tiene el pelo rapado y una apariencia ruda pero su presencia no es tan intimidante.
no como el otro.
y es la razón por la cual Giyuu quedó algo avispado.
posee un rostro confiable y cabello castaño oscuro corto, una expresión serena y bonitos ojos avellana, debajo de su uniforme reconoce que está ejercitado. el agente policiaco es guapo, demasiado.
- Buenas tardes, soy el detective Sawamura Daichi y él es mi compañero Tanaka Ryuunosuke. estamos en una investigación sobre el paradero de Hayama Akira, te molestaría responder unas preguntas.- ¡su voz!! Giyuu intento no arrullarse por el tono barítono masculina.
su piel bronceada, su sonrisa ligera y profesional, ¡esos brazos!!
Giyuu trago saliva.
la última vez que se sintió así fue hace años cuando conoció a Rengoku.
demasiado...
espera...
¿qué dijo?
- ¿Hayama-san desapareció? - repite cayendo en cuenta lo que el oficial había dicho. aturdido por la situación
- asi es, su madre reportó ayer por la mañana la ausencia de Hayama-san. comentó que había salido con un amigo del trabajo por la tarde pero ya no volvió, incluso cuando le envió un mensajes diciéndole que llegaría en la madrugada. - habla en tono serio - siento mucho que te enteres de esta forma pero necesitamos toda la información que puedas darnos-
- cla-claro - tartamudea - se supone que Hayama-san y yo nos reuniriamos ayer en el centro comercial Oikawa a las tres de la tarde pero no llego.-
escucho el crujido de un lápiz romperse, vio de reojo a la gerente. apenas puede disimular su enojo.
- ¿Hayama-san y tú suelen frecuentar así? -
- no, es la primera vez que salimos. únicamente hablamos en el trabajo-
- entiendo, después de que él no se presentó ¿que hiciste?- continua.
- estuve paseando en el centro comercial, compré algunas cosas y regresé temprano a casa. - explica de forma concisa. aun trae los tickets de pago de los pasajes y cosas que compro. se le había acostumbrado a conservarlos para hacer cuentas a finales del mes o como garantía.
- ¿puede comprobarlo? - rápidamente Giyuu saca los tickets y se los da al oficial, sus dedos rozan con la mano del detective, ligeramente callosas pero cálidas. tras un rápido vistazo en sus papeles, se los entrega con una expresión satisfecha.
- detective Sawamura... puedo saber... - el ojiazul estaba temblando, no quería que lo incriminen de nuevo por algo que no hizo de nuevo.
tiene miedo...
- tranquilo, solo estamos recolectando información. cada pieza aunque sea pequeña importa- Giyuu se calmó, no sabe si es efecto de su voz en un tono amable o porque no lo está señalando como culpable.
- Detective Sawamura, creo que debería investigar más a Tomioka-chan, tiene antecedentes criminales- Queen agrega aún molesta por lo que acaba de ver. - seguramente el le hizo algo a Hayama-san-
-¡ahhhaa! ¿Por quien nos toma? Queen-san esto es una investigación seria - Tanaka habló por primera vez, su tono es enérgico y sin dudas - le garantizo que consideramos cada detalle-
- basta Tanaka- san- detiene su parloteo, posteriormente gira su vista hacia la mujer.
Sawamura tenía una pesada mirada represiva que la hizo encogerse en su lugar.
- Queen-san por favor no interrumpa, especialmente con acusaciones así. - se acomoda en su asiento sin retirar su mirada - agradezco su aporte pero le recuerdo que TODOS están bajo investigación.-
- claro...-
hasta Giyuu entiende entre líneas lo que quería decir.
- hasta el momento seria todo - Sawamura le entrega a Giyuu una tarjeta con su numero de celular- si tienes más información o recuerdas algo más, hazme saber de inmediato-
- claro...- el moreno mira el sencillo papel con su información general y jurisdicción.
se sintió como una nube esponjosa o como una colegiala ante un chico guapo cuando consiguió su número telefónico.
tal como se sintió con Rengoku.
- por el momento sería todo, gracias por su cooperación- dicho eso, los oficiales se incorporan para salir de la oficina. ya solos mientras caminan hacia la salida de la cafeteria, la expresión de Sawamura se endurece un poco.
- Daichi-san, ese chico...- el tono incómodo del más enérgico no pasa por alto para el detective.
- lo se Tanaka-san, por eso mismo le di le di la tarjeta- su expresión meditativa es acorde a todas las ideas que pasan rápidamente por su mente- pide una patrulla a circular con mayor frecuencia esta zona-
- ¡cómo diga! -
- ese chico...- Daichi repasa el rostro y figura de Giyuu por unos instantes - tiene el mismo perfil que la mayoría de las personas desaparecidas...-
...
Desde que tuvo conciencia, se sentía que vivía en un pedestal.
amado por todos pero inalcanzable.
desconectado de las personas y su propia humanidad.
un vacío se apoderó de su pecho.
realmente le daba lo mismo.
hasta que lo vio...
sus hermosos ojos azules, cargados de una soledad diferente a la suya, una pureza que no conocía.
Al principio lo tomo como un reto, algo que no había probado jamás y deseo ser el primero en corromper la dulzura de sus ojos y su tierna sonrisa. pero la corrupción se transformó en algo que desconocía, algo que había escuchado tantas veces que se sintió abrumado cuando fue honesto consigo mismo.
y por primera vez, lloro de verdad.
se había enamorado.
- ¿esto es amor? - se dijo mientras miraba la fotografía de su celular- se siente extraño pero...-
jamás se había sentido tan vivo... podía sentir sus latidos cardíacos, el temblor en sus manos y su sonrisa volverse un poco torcida. es como estar en una densa oscuridad y luego desde el cielo sale un foco de luz, una fuente de luz que posee cabello ébano y gentiles ojos azules.
Giyuu lo hace sentir vivo, real y feliz.
feliz...
felicidad...
FELICIDAD...
FELICIDAD...
FeLIzIdAD...
Pasaron 3 semanas y aun con el ambiente tenso en la cafetería por la ausencia de Hayama, seguían trabajando pues aún siendo un querido amigo, la vida continua y no espera a nadie por más amado que sea.
el ojiazul se mantenía ocupado para no sentirse culpable por la situación de Akira. sentía que si no hubiera aceptado la salida con el, el moreno de ojos esmeralda estaría bien y en este momento estaría seduciendo a las clientas para distraerlas de sus berrinches. Además, no ayuda las miradas acusatorias de Queen y su poco profesionalismo en soltar sus sospechas con descaro al resto de los trabajadores. Algunos lo tomaron en serio y lo miran recelosos y otros simplemente se mantienen al margen pues tienen sus propias opiniones.
Pero dentro de esos oscuros días, había chispitas de luz. Además de las visitas regulares de Sanemi, El detective paseaba a su cafetería a comprar alguna bebida exenta de café como algún frappe de caramelo o smoothie porque; parafraseando; es de gustos más dulces. Su presencia alegraba de cierto modo sus días aunque fuera nada mas por trabajo.
Ese dia de viernes siguió avanzando con relativa calma hasta finalizar el turno. al no tener a nadie más con quien hablar de momento, solo se despidió por mera cortesía y siguió su camino normal a casa. vio de reojo una patrulla pasar, últimamente están pasando por su ruta usual y eso le crispa los nervios.
¿Y si tomaron en serio la palabra de Queen? el no tenía nada que ver con Hayama, solo era un amigo que esperaba que estuviera bien.
¿y si es algo planeado por ella para meterlo en un lio? esa mujer le tiene mala fe sin motivo desde hace tiempo.
no quiere que lo acusen de nuevo por algo que no hizo.
tiene miedo.
Aferrándose a su mochila y dejando su sentido comun a un lado, hace un cambio en su ruta. se dirige a unas bancas en un parque destartalado cercano a su residencia. necesita un poco de aire antes de encerrarse en su departamento, suspirando de agotamiento mientras mira el cielo nocturno de la ciudad. carente de estrellas.
vio una que otra, escondidas entre nubes nocturnas.
- nunca he ido a un observatorio-
- ¿en serio? vamos juntos este fin de mes. dicen que se veran mejor las pléyades -
- ¿pleyades? ¿qué son? -
- un acúmulo de estrellas que está cerca de la constelación de tauro, hay una mitología al respecto, es una de mis preferidas -
Giyuu y Kyojuro estaban en el techo del edificio de este último, mirando el cielo nocturno en una pasiva relajación, hablando de temas aleatorios mientras sus manos se frotan cariñosas.
- Se dice que la constelación de Tauro resguarda a las 7 hermanas ninfas, hijas Atlas. Se cuenta que eran tan hermosas que eso fue su perdición. Un día, paseando con su madre, se encontraron con el cazador Orión, quien se enamoró al instante. Orión se obsesionó con las ninfas y las persiguió durante cinco años, hasta que las hermanas suplicaron a Zeus que pusiera alguna solución para dejar de ser acosadas. Por ello, para que pudieran huir, el dios las transformó en palomas y volaron hacia el cielo hasta convertirse en estrellas. Se colocaron junto al lomo del toro; la constelación de Tauro; para que éste las protegiera.-
en ningún momento, Kyojuro dejo de ver el rostro de Giyuu con tal intensidad que se sintió abochornado y fue el primero en retirar su vista.
- y aun asi... orion logro alcanzarlas...-
Giyuu sale de ese agridulce recuerdo. Fue en una de las citas con el rubio bicolor, cuando creía que él lo quería de verdad cuando era todo lo contrario. no niega que realmente se metió muy hondo en su corazón, supo como seducirlo, como llenar su mente con fantasias y sentimientos bonitos.
se ilusionó mucho para estrellarse contra el suelo.
a raíz de eso y sus propias inseguridades, impedía que las personas se acerquen.
prefería la soledad a arriesgarse a que lo hieran de nuevo.
- mejor vuelvo a casa...- baja la mirada levantándose de la banca, caminando pensativo hasta que un brazo le sostiene del cuello y lo arrastra hacia atrás de forma bruta.
Giyuu jadea de terror en el momento que lo siente jalar, intento luchar contra ese extraño pero su fuerza es mucho mayor a la suya. una de sus manos libres intenta golpearlo, empujarlo, lo que sea que su desesperada psique pueda hacer para liberarse, pero lo tiene bien sujeto casi al borde de la asfixia.
una vez más intentó manotear contra el extraño cuando algo afilado y delgado pinchó su cuello.
- tranquilo... -
- ¡¿...?!!!-
Después de unos segundos del piquete, Giyuu sintió su mente flotar. como estar debajo del agua, quieta, serena, carente de ruidos conocidos. su cuerpo pesado y vista borrosa, lentamente todo se fue poniendo oscuro y silencioso.
- vamos a casa Giyuu...-
lo último que ve, son un par de ojos como el atardecer.
...
suavidad y olor a suavizante de telas llena a su nariz.
siente su cuerpo extraño entre ligero pero incapaz de moverlo, incluso los parpados. su mente se siente como estar en una nube esponjosa, nebulosa, los latidos de su corazon son perceptibles pero tan ajenos a el.
...yu...
¿que?
...sta... mi... u...
¿que se oye?
... desp... Gi...
¿es una voz? le parece familiar... demasiado.
- despierta Giyuu... ya es hora...- con mucha lentitud abre los ojos. todo se ve brillante y esponjoso, como un sueño lindo pero tambien le cuesta recordar que esta pasando. una mano le acariciaba cariñosamente su mejilla, es amable, gentil y familiar.
inquietantemente familiar.
- ...-
- ¡hola dormilón! se que estabas muy cómodo y no quería despertarte pero esto es importante- esa voz...
¡Esa voz!!
- ah... - no podía hablar ¡¿porque no podía hablar?!! ¿por que sentía su cuerpo tan pesado? hasta mover la lengua parecía un trabajo demasiado difícil. solo podía mover bien sus párpados y ojos ¡¿dónde está?!!
- antes que nada, perdóname por haber sido rudo contigo pero era necesario. no quería un escándalo - sigue acariciando su mejilla con sus ojos embebidos de ternura.
- ...-
- ¡pero lo compensaré! - toma sus manos inertes para darles un dulce beso en sus nudillos- te hare la esposa más feliz del mundo -
- ¿esposa?-
- eh... bueno... - Kyojuro se ve algo cohibido ante la mirada interrogante de Giyuu. sus mejillas estaban rojas pero no suelta sus manos- yo... no puedo estar más tiempo sin ti, asi que... vamos a casarnos esta noche Giyuu...-
lleva sus manos a su propio pecho, su corazón late con tanta fuerza que le sorprende que no se salga del pecho.
- ¡¿qué está diciendo?!! ¿casarnos?-
- será en dos horas la ceremonia, iré a terminar los preparativos- besa su frente con cariño para incorporarse de la cama, después toma una especie de control que hace que la cama se mueva hasta dejarlo semisentado. ahí puede ver mejor su cuerpo, esta usando un traje blanco con corbata gris azulado y mocasines negros, tambien en su pecho un pequeño broche de una rosa blanca, al parecer es su ramo de novia. de reojo puede ver en su brazo un tubo intravenoso.
- ¿que...?- está empezando a asustarse más pero no puede reaccionar al respecto como tal.
- se que no debería verte antes de la boda pero aborrezco la idea de que alguien más te toque - dice en voz ligera y una sonrisa dulce- realmente luces hermoso...-
Se acercó más a él, acomoda algunas almohadas para dejarlo cómodo, después toma otro control remoto y enciende la televisión.
- Te dejaré un video que hice para ti, no tardaré en regresar- deja el control remoto en un buró y se aleja con una sonrisa pequeña llena de cariño.
Giyuu en su inmovilidad solo respira apresurado y nervioso, mirando ansioso a su alrededor, es una habitación lujosa en colores cálidos, una pequeña sala de estar, la cama de hospital, una torre de bombas para medicamentos y soluciones que solo había dos, podía deducir que es la habitación principal. ¿de donde? no tiene idea. no puede moverse, puede sentir su cuerpo pero no responde a sus órdenes y eso lo pone más asustado.
[ Hola Giyuu...]
el moreno dejó su paranoia al momento de escuchar la voz de Kyojuro en la televisión. está sentado en un sillón individual usando un traje negro con guantes del mismo color. luce concentrado, pensativo en lo que fuera decir.
[ antes que nada, me disculpo por haber sido rudo contigo mi amor. se que no debi abordarte de ese modo pero debía ser rápido. (suspiro) seré franco contigo Giyuu, yo no me siento como los demás... siempre perfecto... en todo... me sentía en una especie de pedestal, admirado, deseado por todos. todos querían algo de mi pero siempre lejos de todos, Giyuu ]
el rubio bicolor toma una larga pausa para continuar.
[ sabes, yo siempre fui objetivo con lo que haría de mi vida. sería el mejor en la escuela, sería el mejor en la universidad y el abogado más efectivo. tendría el margen de ganar casos del 87%, después... nada... no había pensado en algo más allá... nunca tuve imaginación para mi futuro o algún sueño. para nada... (se acomoda en su asiento con expresión melancólica) para mi, todos son caras iguales, con sonrisas falsas e intenciones materiales. siempre me daba un sabor amargo...]
Giyuu escucha la pantalla algo confundido, ¿a qué se debe esa habladuría?
[ todo lo que hacía era nada mas para complacer y continuar siendo perfecto... Intente probar algunas cosas para sentir algo pero... todo era demasiado aburrido, soso, amargo... hasta que te vi... no mentiré cariño, pensaba que serias uno mas en la lista de experiencia para desaburrirme pero... dios... (lo ve sonreír y emocionarse) no lo eres... Conforme pasaron los días, sentía algo en mi pecho que no sabia que era. abrumador ¡caótico! ¡cálido! ¡Incierto! por primera vez en mi vida me sentía... vivo...]
sonríe emocionado a la cámara.
[ vi los colores por primera vez en mi vida... eres la única persona que no me pedía nada a cambio, solo te bastaba mi compañía ¡no tienes idea de lo desconcertante que fue eso! aunque te daba migas de mi atención, aun asi me dabas tus mejores sonrisas... me creías sin dudar y me dejabas ser... (da una sonrisa cálida) fue cuando me di cuenta que me enamore... me enamore tan profundamente de ti que me emocione tanto de ver que ya no hay monotonía. ]
levanta las manos emocionado.
[ por ti, conocí el miedo al mañana, la desbordante pasión que puede aumentar con los dias, el deseo y lujuria, realmente sentirlos, que tus besos son realmente dulces y hacen que mi corazon se caliente... los celos de verte cerca de otras personas, la dicha de verte cerca de mi... perder el sentido del tiempo en el momento que veo tus ojos... por dios, por primera vez en años, soñé. imagine una vida contigo, una hermosa donde estuviéramos solo los dos en nuestro pequeño paraíso... hasta ese dia...]
su entusiasmo se perdió y puso una expresión muerta. Giyuu sabe de que hablaría, aunque no quisiera oírlo, no podía moverse y el volumen de la televisión es alto.
[ acostarme con esa cosa no fue lo más inteligente que hice, solo vino seduciéndome y aunque ya la había rechazado, seguía persiguiéndome. así que mejor le daba lo que quería y la olvidaría, después me dedicaría exclusivamente a ti. después de fornicar con esa cosa asquerosa, que debo resaltar que ni siquiera puede llegar. iría a buscarte pero vi la llave...]
el ojiazul ve como aprieta las manos en los descansabrazos con una expresión que nunca había visto en el rubio. le dio miedo, mucho miedo...
[ fue como caer al vacio... como cuando apagan la luz de golpe dejandote en completa oscuridad... (larga pausa) todo lo que habia imaginado, se volvia vidrios rotos que cortaban mis manos... te busque, te busque una y otra vez... te llame hasta que me quede sin bateria, no dejaba de preguntar por ti en el campus y supe lo que te habia pasado ¡son unos idiotas! era obvio que no fuiste tu, no solo era porque eres mas inteligente sino porque eres zurdo, el corte estaba con inclinacion hacia la arriba-izquierda, tu lo hubieras hecho hacia abajo- derecha, la altura de la mesa de operaciones no correspondía a la tuya, la distribución del instrumental no corresponde tampoco, me decías que mantienes los instrumentos con punzocortantes a mayor distancia por seguridad. tampoco la solicitud de material quirúrgico ¡Tu usas seda 4.0 en intervenciones de mínima invasión!! ¡¡son unos idiotas!!! ]
Después del susto inicial de verlo alterado (cosa que jamas vio cuando estuvo con el) Giyuu solo rie en su mente con amargura, sabía que Kyojuro podría demostrar su inocencia tan fácilmente como respirar.
[ ya no te pude encontrar... ya no te pude encontrar... ]
El moreno quedo perturbado cuando duró mas de 10 minutos murmurando esa frase. Mirando el vacío completamente inmóvil, juraría que la imagen se congelo si no fuera por el incesante movimiento errático de sus ojos, como si el mero recuerdo bastaba para brotar sus oscuras emociones.
[ si ya no te vería, lo menos que podría hacer por ti era encargarme de la basura... ]
El ojiazul tembló y todas sus alarmas se encendieron, no sonaban a palabras vacias.
[ luego... todo fue monocromático y amargo. Aburrido y ver solo máscaras sonrientes. Volví a mis simples objetivos. Solo por ociosidad, acepté casarme con esa cosa. no es la primera vez que la engañaba y la cosa lo sabía, se lo hice saber tantas veces como fue posible (suelta una risa siniestra) Mi querido Giyuu no tienes idea de lo dispuesta que está alguien en aparentar una vida perfecta... luego fueron años sin relevancia (mueve la mano despreocupado) sin embargo... llegaste a la finca]
La mirada de Kyojuro se ilumina con una gran sonrisa, como si inyectaran vida.
[ verte ahí... fue el momento más feliz de mi vida, la luz volvió a mi. Todo lo que considere perdido volvió, sentí mi corazón volver a latir y los colores regresaron, mis manos temblaban y mi respiración se hizo errática ¡eras tu mi Giyuu!! ¡Estaba radiante de felicidad!!! Bueno, Claro que estabas enojado conmigo y lo acepte... incluso deje que asesinaras a la otra cosa]
El corazón del azabache se detuvo por unos segundos al escucharlo. ¡lo sabia!! ¡todo el tiempo y aun asi lo dejo!!
[ (risa divertida) mi amor, jamás te perdí de vista desde que te vi. No sabia que pretendías pero ¿Por qué te impediría hacerlo? Si eso te daba una especie de compensación, te dejaría hacer lo que quisieras. Admitiré que me tomó por sorpresa que asesinaras a la otra bolsa de basura pero lo importante es que ¡se canceló la boda!! Pensé en abandonar a la cosa en el altar para ir contigo pero tu lo hiciste mucho mejor... (suspiro) siempre superas mis expectativas...]
Suena entusiasmado y feliz.
[ ¿Cómo lo se? Bueno, siempre prestaba atención cuando me hablabas de tus días como practicante y de algo sirvieron las notas de la ansiosa cosa con la estuve mucho tiempo. Además de que eras el único que tenia razones escondidas para inculpar... Me preocupé bastante cuando te vi tan delgado y pálido pero entendí el porque. Después de casarnos, lo corregire. ]
Su sonrisa ligera cambia a una expresión decidida.
[ aunque ansiaba tenerte de vuelta, tenia que resolver unos asuntos. después de todo, ya te perdí una vez y ahora que regresaste, nada intervendrá entre nosotros, nada ni nadie... ni mis padres, ni mi hermano, tampoco tu familia o esos asquerosos sacos de basura que se acercaban a ti, los rectores de tu universidad, tampoco el detective... nadie ni nada te alejara de mi vida, Giyuu. eres mi única fuente de luz, mi verdadero significado del amor...]
Hubo una larga pausa antes de volver a hablar. A esas alturas esta aterrado, ¿como sabia del detective?
[ porque te amo y lo haré eternamente...]
El video finaliza para empezar un suave remix de canciones, en su mayoría románticas de los años 70- 90's, en su mayoría favoritas de los dos.
- ¿Ya estás listo Giyuu?- la voz de Kyojuro lo tomó desprevenido. ¿tan rápido pasaron las dos horas? Su corazón empezó a latir furioso contra su pecho, no sabe que pensar o sentir: miedo, impotencia, rabia, confusión. Lo tiene abrumado.
el autonombrado novio esta bien vestido, con su traje de un elegante negro con gemelos dorados y una corbata negra, tiene un pequeño broche dorado.
- nos esperan. - suena encantador y risueño. Con bastante habilidad lo acerca a la orilla de la cama para bajarlo fácilmente y sentarlo en una silla de ruedas especial siendo cuidadoso con su línea venosa y su cabeza.
Después de sentarlo, lo sujeta con unas correas a nivel de la cintura, piernas y tobillos. Mas que impedir que escape es para que no se caiga. Luego, empotro la bomba con el medicamento en un segmento especial para que llevarla consigo.
- se supone que tu padre debería llevarte al altar...-
- ¿mi padre...? ¿mi padre esta aqui?- eso lo tomo desprevenido.
- pero esta indispuesto y no podrá ayudarte asi que lo haré yo - dice en un tono alegre.
Pasaban por un largo pasillo de madera con adornos de boda blanco perla y accesorios dorados, rosas blancas en jarrones con luces LED delicadas. Conforme avanzaban mas, la música nupcial se hace mas fuerte y al llegar al jardín, Giyuu abre los ojos.
El patio esta bellamente decorado con flores como rosas blancas, peonias, gardenias y algunos girasoles que destacan descaradamente en algunos jarrones, especialmente en el arco del altar donde hay una mesa, un hombre vestido de negro con expresion ansiosa y una silla. Hay varias sillas vacías adornadas con sabanas color beige claro y un grueso lazo dorado. Formando 2 hileras en paralelo a un camino de madera con una alfombra.
Aun con la belleza nupcial, había algo raro en el ambiente, algo que le provoca escalofríos involuntarios.
- aqui estamos...- Kyojuro siguió llevando la silla de ruedas por el pasillo y conforme fue pasando, el terror en los ojos de Giyuu crecía hasta hacerlo hiperventilar.
Cabezas, había varias cabezas cercenadas y acomodadas en las sillas, algunas con corbatas y las mujeres con aretes llamativos. Estaban pálidas y carentes de sangre pero aun asi manchan un poco los asientos.
Algunas son familiares como un pelidurazno que trabajaba con el hace dos meses y renuncio por correo. También una chica morena de cabello largo que era su vecina antes de "mudarse".
- se que ellos te pretendían, los invite para demostrar que no hay rencores. Tras una breve platica, comprendieron que lo nuestro es irrompible y vinieron, incluso ayudaron con la decoración -
Admite que fue algo visceral con ellos y se dejo llevar. Los celos son algo poderoso y esta contento de tenerlos porque son causados por su Giyuu.
Una nada asfixiante plática los hizo reflexionar sobre el verdadero amor.
Siguieron avanzando y Kyojuro saludaba a los "invitados" excusando a Giyuu por su indisposición.
- mira mi amor, ahí esta tu familia - lo gira un poco hacia la derecha y en efecto esta su padre, madre y hermana con su esposo en las mismas condiciones.
- fue un poco difícil convencerlos pero no por nada soy abogado. - recordó cuando fue a su casa ha hablar con ellos sobre su futura boda, el padre de Giyuu lo echo antes de decir la fecha pero cuando le dijo aberración a su hermoso moreno. Tuvo que ser más persuasivo.
¡todos razonaban tranquilamente cuando tres balas les impactaron en el pecho!
vio que Giyuu lloraba, mojando sus mejillas e hipando en silencio.
- no mi amor, no llores. Se que estas feliz de verlos pero no es motivo para llorar - limpia sus mejillas con cariño. - hoy es un día para celebrar -
Siguieron avanzando.
- aah, mi amor, son mis padres.- también son un par de cabezas cortadas - se que los conociste en la pasada fiesta pero queria que los conocieras formalmente. Padre, madre, el es Giyuu Tomioka, bueno, próximamente Rengoku - "presenta" el rubio orgulloso. - al principio no tomaron bien que les dijera que estoy enamorado de un hombre pero después aceptaron sin problemas, les bastó un pequeño paseo por las afueras para reflexionar -
Ellos habían salido a un baile en un hotel de las afueras, llovía y los frenos no "funcionaron" junto con las bolsas de aire desactivadas, llevándolos a una dolorosa muerte cayendo por el acantilado. Kyojuro los había seguido en su propio vehiculo con mayor precaución, no le costó encontrar a su padre con vida por ser un poco mas resistente pero un tronco con una saliente "cayo" sobre su espalda, quitándole la posibilidad de salir con vida.
Una terrible tragedia que lo dejo como pronto heredero.
- mi hermanito esta en un internado en otra ciudad, por desgracia no pudo venir. Pero esta bien, esta es una fiesta de adultos y no quiero que se desvele - dicho eso, llevó a Giyuu al altar y la música cedió temporalmente.
- e-estamos reunidos para atestiguar la union en matrimonio de Kyojuro Rengoku y Giyuu Tomioka - el juez empezó a hablar mirando nerviosamente al rubio bicolor, gritando con la mirada "no me hagas daño" pero el novio se mantenía impasible.
Empezó a explicar sobre la unión y el matrimonio pero al ver el leve tamborileo en los dedos de Kyojuro supo que no diera más rodeos.
- solo deben firmar los documentos y...- el de ojos atardecer le calla con una mano.
- los votos señor juez, no olvide los votos.- dice en tono juguetón.
- claro...-
Kyojuro se gira hacia Giyuu que no paraba de temblar y soltar una que otra lágrima, atrapado en una silla drogado en esa insana locura. Sus padres y hermana muertos, conocidos también, hasta gente que no tenia nada que ver.
- Giyuu... - toma sus manos entrelazándose con las suyas - te juro solemnemente que tus manos jamas estarán vacías porque siempre estare dispuesto a darte lo mejor, te protegeré con toda mi fuerza, jamás estarás solo ni un solo dia mi amor... En la salud y en la enfermedad, en la riqueza y la pobreza. Seré eternamente tuyo, amándote incluso más allá de la muerte... -
Suelta una de las manos de Giyuu para sacar de su bolsillo una argolla de matrimonio de oro blanco. Se lo pone en el dedo anular de la mano izquierda. Posteriormente, el se pone el propio. El del ojiazul es mas delgado con pequeños diamantes mientras que el de Kyojuro es mas solido.
Dando a entender que el es la "esposa"
- como yo espero que seas solamente mio. -
Giyuu no podía decir nada, solo soltar gemidos de angustia que el rubio interpretó como ternura, una vez más limpio sus lagrimas, sonriéndole cariñoso.
- solo resta poner sus firmas -
- oh, señor juez, mi Giyuu no puede firmar como puede ver, asi que dejara una huella dactilar.- toma del otro extremo una cajita esponja con tinta indeleble azul
- me temo que es ilegal...- murmura.
- ¿que ha dicho?- le mira de reojo.
- ¡en otros estados! Solo queria dar un dato curioso, algo muy desafortunado si me preguntan -
- ¡entiendo!! - vuelve a su típica sonrisa feliz y se concentra en "ayudar" a su pronto esposo a dejar su huella en el acta de matrimonio junto con su nombre.
Después él da su huella y firma en el otro espacio.
- ¡Felicidades! Con el poder que me confiere el estado, los declaro esposos - apenas dijo eso, Kyojuro tomo las mejillas de Giyuu para besarlo con ternura.
Oficialmente están casados...
...
El resto de la celebración fue más amena. Kyojuro junto con su ahora esposo Giyuu les dijo a sus invitados de ir a la cena.
Que constaba de una entrada de crema de elote con panecillos con ajo, Solomillo en salsa de mostaza y verduras de acompañamiento. Vino espumoso o rosado y de postre pastel de boda de vainilla y crema de café.
Para sorpresa del azabache, Las sillas con las cabezas cercenadas fueron acomodadas por dos personas de cabello negro y un albino que reconoció de inmediato.
Hayama.
Pero actuaba fuera de sí tal como los otros dos, obedeciendo las órdenes de Kyojuro, moviendo la cabeza en mansa servidumbre. También el juez, voluntariamente a la fuerza se quedó a cenar.
Luego se pusieron a servir cantidades normales, excepto a el. Se le sirvió una porción más pequeña y en consistencia de puré.
Claramente con la intención de no ahogarlo.
- te ayudare mi amor - propio de un esposo amoroso, el rubio le sirve en la boca y le ayuda a deglutir pequeñas cantidades de comida y en pausas para no ahogarlo.
Había estudiado hasta el último detalle para cuidar de el en su estado.
Luego, Kyojuro comía lo propio expresando su alegría de comer algo delicioso.
Luego cortaron la tarta como la feliz pareja que son y brindaron con vino y algunos invitados optaron por el sake. Luego el rubio bicolor se puso de pie para hablar con el juez y le entró un sobre (posiblemente con dinero) después fue con uno de los morenos dándole instrucciones de acompañar al juez a la salida. Después dio más instrucciones a Hayama y el otro chico, volvió con el, tomándolo de su silla de ruedas.
- nos gustaría seguir acompañándolos pero mi esposo y yo estamos algo cansados, por favor disfruten del resto de la recepción - dijo eso para que la música vuelva a sonar un poco más fuerte.
Como es la única casa visible en medio de ese bosque, no había algun problema con el ruido.
Despacio lo llevó de vuelta adentro, Giyuu se sentía que estaba entrando a la boca del lobo porque lo llevó a una habitación diferente. Posee una cama matrimonial, una pequeña sala con televisión, un armario y otra puerta, posiblemente el baño.
- Sabes Giyuu... se supone que en las bodas se baila un vals pero siento que es algo muy intimo, asi que preferí que mejor fuera algo de nosotros - lo deja en medio de la recamara y enciende la televisión, seleccionando la carpeta de música.
Wise men say
Only fools, only fools rush in
Oh, but I, but I, I can't help falling in love with you...
- ¿Recuerdas esta canción? Es nuestra, la escuchamos una tarde mientras estamos en nuestro departamento. - dice en tono nostálgico. - es perfecta para nosotros... -
Le da una mirada amorosa mientras se acerca a el, acomoda su silla activando una función, lo puso de pie y después de un clic del seguro, sostuvo a Giyuu de la cintura y su mano izquierda para "bailar"
- estoy nervioso... nunca he bailado asi - admite con un adorable sonrojo en sus mejillas - no tuve tiempo de practicar, lo siento. -
-...-
- pero ya iremos mejorando -
-...-
Conforme paso la canción, Kyojuro fue abrazando mas y mas a Giyuu, sonriéndole con mucho amor.
- te amo Giyuu...- murmura a su cuello, depositando un pequeño beso en el.
- ...-
Giyuu solo piensa en el giro todo eso, seria perfecto si no fuera que Kyojuro es su ex novio, que esta drogado y hay varias cabezas decapitadas de conocidos y familia en el patio con 3 personas desaparecidas que actúan como zombies.
¡¿que carajos esta pasando?!!!
Se tenso cuando los labios del contrario empezaron a besarlo más en el cuello y darle pequeñas mordidas.
- te amo tanto...- murmura en voz grave.
- ¿Acaso el...?- Giyuu abrió los ojos aterrado mas cuando logra percibir algo entre ellos a la altura del pelvis.
No
No por favor.
Pedía pero sus labios y garganta no cooperan.
-... - los labios de Kyojuro seguían paseando por su cuello y rostro dejando besos húmedos y rastro de pequeñas marcas rojizas.
- yo... - besa sus labios amoroso y luego se separa de él despacio. Acomoda la silla en su posición original y con un escueto "perdón" va al sanitario.
Giyuu penso que tal vez se esta arrepintiendo pero no importaba, el no puede hacer nada para huir de ahi, ni siquiera mover un dedo sin que lo sintiera como gelatina.
Tan patético...
Mientras con Kyojuro, se mojo la cara para aclarar sus ideas y calmarse.
- esta bien... no es la primera vez que lo haces - se consuela para luego aferrar sus manos en el lavamanos y bajar la cabeza.
- ¿Qué estoy diciendo? Comparando hacer esto con Giyuu con esos sacos de basura repugnante. Me doy asco...- escupe con rencor hacia si mismo.
Fornicar con esas cosas es algo muy diferente a lo que pretendía hacer Giyuu. Su hermoso esposo merece ser tratado con todo el mimo posible y por primera vez, esta asustado.
- supongo que él también está nervioso - dice tímidamente frente al espejo. Recordó que en la habitación hay algo de vino especial que los ayudaría a los dos. Aprovecho que esta en el baño para cambiarse por una bata y salio llevando una para su Giyuu.
- siento la demora, solo estaba poniéndome más cómodo. - señala la bata en su brazo- tambien te traje una para ti. -
Desabrocha a Giyuu de la silla de ruedas y lo acuesta en la cama. Quedando en una pose que a sus ojos es sugerente, hace que la llama de su corazón se vuelva mas violenta pero se contuvo, primero tranquilizaría a su esposo.
Despacio lo desviste, retirando sus pantalones y camisa, cuidando su acceso intravenoso. Giyuu lo reconoce es un acceso central-periférico ¿como es que el lo puso? Requiere bastante práctica y conocimiento anatómico para ello.
Podía ver al rubio tenso mientras hace su tarea de cambiarle de ropa, como si tocarle le provocara algo.
Para el rubio bicolor fue tortuoso, ver la suave y blanquecina piel de su esposo, le pareció tiernos sus rosados pezones y el discreto vello en su pubis, su cuerpo es delgado por la falta de peso pero es igualmente hermoso.
Tomaba bocanadas de aire, resistiéndose a tocarlo de otras formas. Su Giyuu esta asustado y el tambien, primero calmarse y luego todo lo demás.
- listo... - lo acomoda en la cama, apoyándolo en unas almohadas para ir por un carrito de servicio que esta en la esquina, debido a su pobre movilidad no lo vio a primera mano.
Lleva dos copas de cristal y una botella de vino dentro de una pequeña hielera.
- sabes Giyuu, estoy nervioso - sirve una cantidad generosa de vino tinto tipo merlot en las copas. Luego, toma al azabache para apoyarlo en su cuerpo en un abrazo muy intimo.
- yo... no hecho esto con nadie, bueno, con amor me refiero... que tonterías estoy diciendo... - si no fuera porque lo tiene secuestrado y drogado, le parecería muy tierno.
- bien... por nuestro futuro amor... - toma una copa de vino, lo inclina hacia los labios de Giyuu y en pautas le hace beber. Luego, Kyojuro tambien da sorbos a su bebida.
Poco a poco el vino se fue consumiendo, entre risas bobas y bromas tontas de Kyojuro mientras abraza a Giyuu. El moreno no esta tan diferente, siente su cabeza ligera y su cuerpo muy cálido, la combinación del fármaco intravenoso con el alcohol está haciendo mella en su raciocinio.
- eres muy hermoso - le dice con una sonrisa enamorada. - dios sabe que las mejores pajas que me tirado es pensando en ti -
- idiota...- piensa Giyuu abochornado por su comentario pero soltando una risita en su mente.
- Giyuu... -
Poco a poco volvieron a besarse, el rubio sostenía su rostro y cintura mientras compartían besos cada vez más húmedos, sonidos graves salen de sus gargantas, sus cuerpos cada vez mas calientes y necesitados.
- Giyuu... - lo acuesta en la cama, volviendo a concentrarse en su boca, robándole el aliento. Mientras su otra mano, se atreve a explorar finalmente el cuerpo del azabache, acariciando su piel calida, dando pequeños pellizcos en sus botoncitos que lo hizo soltar un quejido en el beso.
- ¿te gusta? - repite el acto, provocando otro sonido igual. - eres muy sensible bonito. -
- también tócame - tomo la mano del moreno y la hizo recorrer con un poco de torpeza su anatomía, Giyuu pensaba que Kyojuro esta muy bien trabajado, seguro que no paró de ejercitarse en esos años.
Miro de reojo su cuerpo semidesnudo. Su piel ligeramente bronceada, sus músculos tonificados sin verse tosco.
- tienes manos frías - suelta divertido. El rubio bicolor suelta un gemido ahogado cuando la mano de Giyuu paso por su entrepierna, acariciando su dolorosa erección.
- esta muy... grande...- piensa el moreno suspirando.
- asi me tienes bonito... - la mano de Giyuu se frotó una y otra vez contra ese bulto en su entrepierna sin sacarlo de su encierro.
- n-no Giyuu. No quiero correrme en tu mano... - se queja, alejando la mano de él.
- debo prepararte Giyuu - besa sus labios con ternura para incorporarse de la cama dejando un rastro calido en ella. Kyojuro urgo por sus cajones sacando una botellita de lubricante. Vertió una cantidad generosa en sus dedos y volvio con su esposo.
- ya volvi bonito - se recostó un poco sobre Giyuu, empezando a besarlo amoroso mientras sus dedos se acercan cariñosamente a su entrada, palpando despacio y produciendo poco a poco calor.
-... - El azabache suelta suspiros febriles por las tímidas caricias en su entrepierna. Es vergonzoso pero lo toca con tanta ternura que le gusta.
- Giyuu... - jadea Kyojuro cuando sus dedos logran entrar tímidamente en su entrada, dilatando despacio, movimientos suaves que no asusten a su precioso esposo.
Reconoce que es virgen, está tan estrecho.
Le dio ternura saber eso.
-¡...!- Giyuu se estremece cuando el rubio bicolor aumenta el ritmo y cambia la forma que mueve sus dedos dentro de el, también la profundidad aumenta, tocando su próstata y haciendolo ver estrellas.
Cada vez más abrumado por ese extenso calor en su vientre.
- ya estas... - suavemente saca sus dedos haciendo que suelte un jadeo insonoro de queja. - no bonito, tendrás algo mejor. -
El bicolor saca su miembro erecto y goteante de líquido preseminal. Lo frota con algo de lubricante, luego pone un poco mas en la entrada. Acomoda a Giyuu en la cama, separando sus piernas.
- Giyuu... oh cierto, casi lo olvido- Kyojuro desenreda la linea intravenosa, dejando la bomba de infusión en una altura cómoda para ambos, después toma una pequeña libreta donde tiene unas notas y hace unos ajustes al medicamento.
Después volvió con su esposo que le miraba con una linda combinación de frustración y deseo.
- bonito, siento hacerte esperar - besa sus labios despacio, acomodándose entre sus piernas y guiando su miembro palpitante a su entrada. suavemente introduciendolo, sintiendo de golpe el calor y estrechez de su esposo, pero no hay resistencia añadida.
- (suelta un gruñido de placer) Giyuu~ me aprietas muy bien... aah...- jadea suspirando sin dejar de entrar hasta que su pelvis choca contra el trasero del moreno.
En cuanto a Giyuu, suelta jadeos por la intrusión. Alivia el intenso calor en su vientre pero no es suficiente.
Después de unos segundos más, Kyojuro empezó a moverse a un ritmo tranquilo, nada que pueda asustar a su esposo. Sostiene sus piernas carentes de fuerza mientras sigue embistiendo. De vez en cuando se inclina mas sobre su Giyuu para besarse y acariciar su cuerpo con mimo.
- Giyuu...- jadeo mas lujurioso, aumentando el ritmo, el ruido de la cama es mas notorio, la suave fricción entre pieles junto con el aumento de la temperatura crece y crece, la sensación de placer hace sus mentes delirar de gusto.
El azabache mira con sus ojos ligeramente humedos por lagrimas, entre jadeos silenciosos, su corazón a tope mientras recibe a Kyojuro. Siente plenamente su hombría dentro de él, es extraño y placentero y más cuando golpea su próstata.
Se siente bien, muy bien pero también... culpable
- ya casi mi amor... - le escucha susurrar a su oido. Aumento el ritmo con mas agresividad, inclinándose más sobre Giyuu. Su cadera choca contra sus glúteos ruidosamente. el moreno solo puede poner cara de sorpresa y placer ante los estímulos, siente extraño, su cuerpo arde y cree que va a orinarse encima.
Lo pone inquieto y el no poder moverse, lo frustra. le molesta pero le gusta, es extraño.
- ¿también vas a llegar? Vamos mi amor, juntos - dio embestidas más fuertes que el moreno resiente en oleadas de excitación y placer que lo hace ver estrellas y su mente ponerse en blanco, su vientre se libera estrechando su entrada para gusto de Kyojuro.
El rubio tambien se corre pero dentro de su pareja, su mente se nubla de placer, sus brazos tiemblan y su corazon sufre de taquicardia ¡el mejor orgasmo de su vida!!
- Giyuuu- sin salir de su entrada, se acerca a besarlo amoroso. - te amo Giyuu, te amo... -
-....-
- fue increíble... maravilloso...-
El moreno recupera el aliento, su mente sigue nebulosa por su orgasmo, su cuerpo tiembla involuntariamente y su corazon le deja algo sordo por el placer.
Tras unos minutos mas, sale despacio, Kyojuro suelta una pequeña risita cuando ve un hilito de semen sale.
- respira mi amor - se recuesta a su lado, abrazandolo y dandole suaves mimos a su rostro. - mi precioso Giyuu, fue hermoso-
-...-
- pero aun no estoy satisfecho-
Lentamente empiezan a acariciarse, besarse mas necesitados, sentían sus cuerpos arder cada vez, empezaron a tocarse y masturbarse. Al poco tiempo, ya estaban excitados. La piel de Giyuu estaba sonrojada por la temperatura del placer, su mirada brillosa es hermosa a ojos de Kyojuro.
- desde hace años que te deseo Giyuu, quería hacerte mio pero fui paciente. - besa su cuello, Dejando mas marquitas en el.
- ¿que...?-
- es muy obvio bonito, eres muy hermoso. Aunque no me creas... muchos te deseaban...-
Su tono es un peligroso combinado de celos y deseo.
- pero, siempre seras mio...- el rubio bicolor acomodo al moreno boca abajo, tomo unas almohadas para levantar su cadera, dejando su trasero en alto. Sin resistirse, le da una palmada.
- tienes un hermoso trasero mi amor, bien jugoso- lo masajea y de paso lo masturba un poco, el cuerpo del ojiazul profundo se estremece ante su tacto, su boca se abre apenas soltando gemidos suaves.
- voy a entrar cariño - tras poner más lubricante a su bonita entrada, se mete con mas facilidad. Giyuu suelta un grito silencioso de placer, golpeo de lleno su prostata y su intrusión lo volvió a llenar.
- uff... mi amor, estas muy rico...- empezó a moverse un poco mas agresivo que antes, su Giyuu ya está muy dilatado asi que puede darse ese permiso.
Por su parte, el moreno solo ve estrellas y siente su cabeza ligera y su corazon latir como loco.
- ¡delicioso!! - se inclina sobre el cuerpo ajeno, embistiendo con mas rapidez, sin darle tiempo de procesar los estímulos. Kyojuro jadea excitado, aferrando sus manos a la cama o a la cadera para embestirlo de lleno. Ve como la entrada de Giyuu "devora" su miembro, haciendo ruidos húmedos.
¡ya quiere ver como usa su boquita, sus manos o cualquier parte de su cuerpo que le de placer a su hombría!!
- ¿uh? - Kyojuro embestía vigoroso el traserito de Giyuu cuando lo sentía deliciosamente más apretado. ¿se había corrido tan pronto? Dio una sonrisa cariñosa.
- mi amor, toma un respiro mientras llego tambien - le dice mientras se inclina hacia él, en efecto, Giyuu luce arruinado por el orgasmo con su mente apenas clara.
Tanto placer como un extraño sentimiento de culpa.
Pero ¿si es tan bueno, porque se siente asi?
Siente el miembro de Kyojuro moverse dentro de el, embestidas cada vez mas rudas y caoticas, si no fuera que se siente tan cansado, se hubiera excitado otra vez.
- ...- el moreno seguía en su embriaguez mental hasta que siente algo caliente y viscoso dentro, el gemido de satisfacción del rubio lo confirma.
Kyojuro se acerco sobre él, abrazándolo por la espalda, sin sacar su hombría.
- lo mas hermoso que he vivido- lo abraza mas - y no puedo evitar emocionarme de empezar nuestra nueva vida mi amor -
Le sonríe cariñoso.
- ¿nueva vida...?- el ojiazul piensa aturdido.
- nuestro paraiso... solo nosotros dos, para siempre...- lo besa amoroso.
Su paraíso...
.
.
.
{ Fin del segundo arco }
les traje lo que tanto han pedido en este canal:
Kyojuro Yandere.
crear la version Yandere de Kyojuro fue algo dificil porque no queria caer en la faceta tipica de Yuno Gasai, Kotoha de School days, Vincent Nightray de Pandora Hearts, Ya saben, matar por matar y eso. tuve que estudiar un tanto del tema para que sea mas natural para la personalidad alegre de Kyojuro pero sobre todo, mas inteligente.
segundo, fue un poco dificil hacer el sentido del miedo en este capitulo, ver el caos mientras el esta inmutable o mantiene la fachada.
unas cuantas aclaraciones en la historia sin spoilar el tercer arco serian:
❤️ lo de tsutako, ella si vio a Giyuu pero no se acerco de forma inmediata, solo le envio el paquete inicial como regalo. Kyojuro la mantenía vigilada porque sabia que tarde o temprano intentaría comunicarse con Giyuu. cuando lo consiguio, el tomo la batuta a la fuerza.
❤️ las personas que Kyojuro tiene bajo chantaje como Queen y el juez son gente que estratégicamente el rubio tiene amenazados para su beneficio. sea con secretos extremadamente vergonzosos o potencialmente capaces de meterlos a la carcel.
❤️ Kyojuro aprendió cosas básicas de medicina por los libros y notas de Giyuu, siendo que hizo escrituras tan exactas, para el rubio fue fácil de entender. para cosas mas avanzadas, tomo la información de Shinobu.
❤️ uso las recetas medicas de Kocho antes de que le quitaran la licencia para conseguir los medicamentos, posteriormente una de las personas secuestradas era medico y uso sus recetas para conseguir. pero fue cuidadoso en ello, usando otros intermediarios para conseguir los narcóticos.
❤️ los secuestros fueron reportados mucho después de la desaparición o cuando se encontraban los cuerpos porque Kyojuro investigaba un poco sus rutinas, tambien estudio sus textos por redes sociales para enviar mensajes o publicaciones y no levantar sospechas de sus desapariciones. lo hacia solo por un determinado tiempo o hasta que moría la persona en cuestión.
esta habilidad la adquirió por su trabajo de abogado. siendo alguien que tiene que estudiar a su cliente para defenderlo o atacar a su contrincante para ganarle.
❤️ el secuestro de Giyuu fue adelantado porque Kyojuro vio que había un hombre moviéndose muy cerca de Giyuu, que a diferencia de los demás, este podía luchar y su desaparición si seria notable. ademas, estaria en desventaja en cuanto a comunicación. en resumen, actuó por celos.
❤️ Sanemi no esta enamorado de Giyuu, el es hetero. nada mas esta algo apendejado porque si quiere formar una amistad con Giyuu pero haber mostrado tan abiertamente su debilidad lo conflictua. asi que, de momento, no esta en el radar primario de Kyojuro.
❤️ Senjurito esta bien, si esta en un internado lejano. la razón es para que el plan de Kyojuro tenga exito.
❤️ nuestro rubio yandere asesino a sus padres porque se opusieron a su enamoramiento con Giyuu además de descartar tan indiferente a las Kocho junto con su familia.
❤️ ¿Cómo es que tuvo tiempo para todo esto? Kyojuro es dueño del buffet de abogados tanto que construyo como el que heredo de su padre. su rutina fue tal que si lo investigan, no habría huecos de saber que el fue quien lo realizo.
❤️ Kyojuro sabe como esconder un cadáver, asi que si dejo que los descubrieran fue por mero capricho.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top