M A Y O

Mayo siempre fue un chico despistado. No se daba cuenta de lo que sucedía a su alrededor hasta que era demasiado tarde.

Él nunca supo de las discusiones que tenía su familia por las noches. Así que cuando su padre le despertó en medio de la noche, diciéndole que tenía un viaje planeado para ambos, Mayo le creyó desconfiadamente. Guardó sus cosas y se fueron sin despedirse de los demás.

Mayo tenía apenas ocho años de edad cuando se volvió víctima del robo de hijos. Su padre lo sacó de México ilegalmente, despojándolo de su vida anterior.

Pese a eso, él era feliz en España, rehaciendo su vida en una mentira.

Siete años más tarde, la policía se llevó a su padre a rastras de su casa mientras él estaba escondido debajo de la cama. Huyó por la ventana mientras nadie veía.

Y se quedó solo, perdido en una inmensa ciudad.

Guiado por su instinto, se convirtió en un gran estratega en poco tiempo. Y gracias a eso conoció a los CoMPaS.

Ellos lo encontraron cuando estaba a punto de caer, cuando sentía que el peso sobre sus hombros estuvo a punto de derrotarlo. Y se repartieron el dolor entre todos.

Quizá su error fue negar la ayuda que necesitaba, porque se creía capaz de arreglar todo por sí mismo.

Pobre Mayo, tan imprudente.

Merecía sufrir. No demasiado, sólo lo suficiente para saber que no debió quedarse de brazos cruzados.

Ahora es demasiado tarde. Ahora puede cruzar sus brazos todo lo que quiera.

Por esto, apodé su alma como El alma que ató sus manos tras su espalda.

***
¿qué piensas acerca de los CoMPaS? (de mi historia, jelouda).