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Odiaba la estúpida e irritante sensación de haber olvidado algo. Era desagradable, sobretodo porque no puedes parar de pensar en ello.

Caminé unas cuadras hasta llegar a la parada de bus. Una vez que llegué esperé escuchando música a que el bus llegara. Y en realidad, no demoró en llegar, y si lo hizo, ni noté cómo pasó el tiempo.

Un chico con un estilo bastante alternativo subió al bus y se quedó de pie por un rato. Noté que tenía un parche de BVB en su mochila.

Luego de unos minutos, sonríe al ver que tengo un parche de BVB también.

—Hey. Soy Spencer Cooper, un gusto. —dijo extendiendo su mano hacia mí.

—_________ Simms. Igualmente. —dijo algo dudosa al principio. No sabía si estrechar o no su mano. Decidí hacerlo.

—¿Puedo suponer que vas camino al concierto?

—Así es. ¿Vas tú también?

—Sí, también voy al Meet And Greet.

—¡Genial! —suertudo. —Por poco yo no vengo, me costó una eternidad reunir el dinero para mi entrada.

—Qué mal, linda. Mis padres manejan mucho dinero, así que no pasé por eso. Incluso dieron por hecho que iría con alguien más y tengo dos Meet And Greet.  Pensaba venderlo allá pero ¿Te gustaría ir conmigo? Te doy el pase.

—¿Es en serio? ¿No me estás jugando algún tipo de broma?

—El trayecto al teatro es largo, así que por mientras podríamos hablar sobre distintas cosas o temas.

—Bueno, cuéntame qué tal tu escuela, tus amigos, calificaciones, no lo sé.

-Bueno, como mis padres manejan grandes sumas de dinero, la mayoría de los chicos se muestran ariscos hacia mí. Tengo buenas calificaciones. ¿Qué más? Bueno, supongo que por lo de mis padres, se podría suponer que tengo una vida bastante perfecta y feliz, pero la verdad solo siento que mis padres llenan un vacío de amor con dinero. No conocen otra manera, y no se dan cuenta de lo que sufro porque a veces necesito más que a unos padres con dinero, sino unos padres que sean capaces de escucharme y abrazarme cuando lo necesite. —paró un segundo. —y además, soy gay. Y no se lo había dicho a nadie, se siente bastante bien decirlo.

—Bueno, gracias por confiar en mí. Puedo darte abrazos cuando los necesites si quieres.

—¿Tu qué puedes contarme sobre ti?

—No lo sé. Quizá lo típico. Familia rota. Mi padre está muerto. Mi mamá abusa del alcohol y es bastante agresiva. También tengo buenas calificaciones. Tengo algunos problemas con la policía de vez en cuando. Soy algo antipática y no tengo muchos amigos. No sé qué más.
Nos paramos de nuestros asientos porque nuestro destino se acercaba y llegaba la hora de bajarse del autobús. Me sujete de los pasamanos que estaban por sobre mi cabeza, y luego preferí sujetarme de un asiento porque era muy bajita y me costaba sujetarme bien del que estaba arriba :c.

Cuando llegamos no había casi nada de gente, lo cual fue genial porque significaba que éramos de los primero en llegar y tendríamos un buen puesto. No pasó mucho hasta que empezamos a conversar con los demás chicos de la fila. Fue una tarde agradable. Conocer gente con gustos y personalidades parecidas es siempre bastante agradable.