La puerta del departamento fue azotada con fuerza, JungKook se sentó en el sofá de la pequeña sala y cerró sus ojos al tiempo que daba un bufido molesto.

Se sentía sumamente molesto, nada de lo que planeaba salía bien. Recordar la noche anterior era algo que al instante le provocaba enojo. ¿Quién diablos era ese estúpido alfa? ¿Por qué protegió a JiMin?

Su cabeza dolía al pensar en que era lo que había sucedido, aquella ronca y fuerte voz aun sonaba en su cabeza provocándole punzones dolorosos.

Ni siquiera tenía fuerzas para angustiarse por lo que fuera a pasar, es decir, ese maldito tal vez ya sabía que el omega se había ido de su lado.

Su sangre hervía debido a lo furioso que se sentía, fue un estúpido al no traerlo arrastrado, tal vez si no hubiera llegado ese alfa pálido nada hubiera salido mal en su plan.

Se levantó del cómodo sofá y comenzó a tirar de forma aleatoria las cosas que frente a su vista se posaban; convirtiendo su departamento en un desastre; sacó su teléfono y lo encendió, había decidido apagar su teléfono debido a su molesta amante quién no había dejado de molestar durante toda la noche.

Ahora tenia muchas más cosas importantes que atender. Una de ellas era hacer algo para traer de nuevo a JiMin, el nunca fallaba, nunca perdía y JiMin tenía que pagar por huir de esa manera y haberlo rechazado; no queriendo regresar con él.
Jamás había recibido una mirada como la de la noche anterior, llena de rencor y dolor, no pudo evitar sentirse afectado pero tampoco era como que tenía demasiadas opciones, estaba en una situación delicada.

Recordó que tenía sus contactos, así que antes de llamarle, se metió a la ducha para quitar los rastros de suciedad y cansancio; al salir se puso unos pantalones y una camisa negra junto a una chaqueta de cuero del mismo color, colocándose una gorra  cubre-bocas y unas botas negras, ajustó sus cosas y llevando el teléfono en mano salió del departamento.

Cuando entró al ascensor, le mandó un mensaje a su querido amigo.

Te veo ahí en quince minutos, no llegues tarde.

Mandando la dirección, guardó su teléfono. Sonriendo de forma ladina, realmente debía hacer hasta lo imposible para traer de vuelta a JiMin. —No te iras de mi tan fácilmente Park JiMin.

Saliendo del ascensor, se dirigió a su auto, condujo rápido, las calles estaban un poco solas esa mañana así que le importó poco la velocidad, necesitaba llegar cuánto antes al destino acordado el cual era un callejón desolado.

Esperó a que llegara quedándose dentro del auto. A los quince minutos alguien tocó el vidrio de la ventana, JungKook quitó el seguro del auto para que él pudiera entrar.

—Puntual como siempre mi querido YugYeom. — El alfa rodó los ojos. —¿Qué quieres esta vez JungKook? — dijo sin bajar el cubre-bocas que portaba.

Jungkook rió con burla. —Iré al grano, necesito uno de esos trabajitos que sueles hacer. —YugYeom miró curioso a su amigo. Pensando que era lo que hoy éste tramaba. —¿Cuál de todos Kook?

—¿Eh?...Ya sabes, quiero que sigas a esta persona. —El alfa le entregó un sobre amarillo y YugYeom al abrirlo abrió los ojos en grande.

—¿Pero este no es tu omega? — dijo asombrado aún, ganándose una mirada molesta. 

—No es mi omega, nunca lo fue, pero el muy idiota se ha burlado de mi y ahora se esta quedando en el edificio de sus amigos, ahí está la dirección del edificio. Se sigiloso YugYeom, no quiero errores — dijo sonando muy seguro. Esperando a que el otro no le preguntara más.

El otro alfa asintió no muy convencido y siguió mirando el sobre, como JungKook había dicho ahí estaban las fotos de los amigos de JiMin, la del omega y la dirección del edificio donde éste estaba viviendo.

Suspiró resignado y asintió. —Bien, lo haré pero, ¿ya sabes cuál es el número de mi cuenta no es así?—JungKook miró mal a YugYeom y éste rió divertido. —Era broma alfa tonto, solo llevame a almorzar y listo.

—Idiota, solo porque me estás ayudando... Paso por ti mañana. — dijo mirándole recibiendo una sonrisa alegre. —De acuerdo, me voy... Por cierto, si hay algo que quieras contarme no dudes en decirme. Somos amigos JungKook.

El alfa no respondió, no podía hacerlo. No quería involucrarlo en su miseria así que asintió y le dio una pequeña sonrisa.

¿Pero no lo estaba ya involucrando?

Negó retirando todo pensamiento y detuvo a su amigo que ya había abierto la puerta. —Espera, hay algo —YugYeom se volteó dándole una mirada curiosa para que siguiera hablando.

Éste negó retractándose. No puedo. — olvídalo, después te llamo. —el otro alfa rodó los ojos y despidiéndose se bajó del auto.

—¿Se quedará a vivir aquí?

Esa era la pregunta que había soltado tímidamente el omega, mirando al alfa que por un momento se tensó ante la pregunta. El omega avergonzado bajó la cabeza y jugó con sus pequeñas manos para calmar los nervios.

—JiMin—el omega levantó la mirada rápidamente, observando con un brillo en los ojos que YoonGi no pudo descifrar en ese momento.

Ignorando a su inquieto lobo y sus extraños pensamientos prosiguió. —No debes agachar la mirada, he notado que siempre lo haces. Yo soy como tú, así que conmigo no debes sentir miedo, vergüenza o desconfianza, después de todo te acompañare a todos lados. Así que quiero pedirte que cuando hables conmigo, o con cualquier persona, no bajes tu mirada, nunca demuestres tu inseguridad ante los demás.

JiMin no pudo evitar sonrojarse ante lo dicho, pero sonrió feliz de tener personas que se preocuparan por él, antes solo era TaeHyung y HoSeok, pero ahora también estaba YoonGi a su lado.

YoonGi miró el leve sonrojo del omega y reprimió a su lobo quien le exigía apretujar esas mejillas abultadas. ¿Que diablos?—Ahora respondiendo a tu pregunta... si JiMin, si me quedaré aquí por un tiempo. —Él omega lo miró sorprendido.

—Pero... Digo... Su esposa-

YoonGi frunció el ceño confundido. —¿Esposa?

—Usted... Ayer... dijo que alguien le estaba esperando... Yo asumí que hablaba de su esposa.

El alfa rió divertido provocando que el menor le viera serio y apenado. —En realidad no estoy casado. — levantó sus manos para apoyar lo dicho. —Me refería a Holly... Mi cachorro.

JiMin quiso que la tierra se lo tragara ahí mismo, cerrando sus ojos y escuchando la sonora risa de YoonGi.

Dios que tonto me vi...

YoonGi carraspeó llamando la atención del omega. —Creo que ayer no me presenté como debía así que... Mucho gusto soy Min YoonGi y estaré encargado de velar por tu bienestar y seguridad. — dijo como todo un profesional, provocando una risa en el omega.

El menor vio la mano que ahora era extendida en su dirección, dio una sonrisa grande provocando que sus ojos se volvieran media luna y siguió el juego. —El gusto es mío, soy Park JiMin.

Ambos estrecharon sus manos, ignorando aquella corriente que se sintió correr dentro de ellos.

—Eh... Retiraré los platos. — JiMin separó su mano rápidamente y un poco torpe se alzó para recoger la loza y así lavarla.

El alfa también se levantó dispuesto a ayudar, tomando las cosas faltantes se acercó al menor que estaba ya comenzando a lavar los platos. — Gracias JiMin, la comida estaba muy rica. — el omega se volteó quedando un poco cerca del alfa y asintió tímidamente. —Me alegra que le gustara... YoonGi hyung.

—Dejame ayudarte... — alegó el mayor.

Éste aceptó e intercambiaron puestos; YoonGi lavando y JiMin secando.

A ambos se les escapó un sonrisa; uno por los cumplidos que hace mucho tiempo no escuchaba y el otro solo por la compañía del omega.

Estaban tan concentrados en su labor que no se dieron cuenta de como HoSeok y TaeHyung los veían desde la entrada de la cocina, con una gran sonrisa plasmada en la cara.

—Buenos días. —saludaron al unísono, entrando a la cocina. Ambos; alfa y omega salieron de su burbuja y dieron un salto ante el animado saludo de TaeHyung y HoSeok.

YoonGi carraspeó incómodo y saludó primero. —Buenos días, chicos. —JiMin que en ese momento estaba hecho un tomate, pues podía ver la sonrisa burlona de sus amigos, cómo pudo saludó también. —Buenos días... preparé el desayuno, ¿les sirvo?

Taehyung miró a su amigo y asintió. —Claro Jiminnie, gracias. —el omega se dio la vuelta y miró a YoonGi quién obstruía la parte donde se encontraba la cafetera. —¿Me das permiso hyung?

—¿Eh?... Ah si lo siento.

Maldición controlate Min.

Miró las sonrisa burlona de HoSeok y sin decir nada más, salió inmediatamente de allí. JiMin rió al notar que prácticamente había corrido para salir de la cocina.

¿Qué le pasa? Pensó el omega.

—JiMin. —TaeHyung llamó a su amigo y éste lo volvió a ver.
—Dime.

TaeHyung sonriendo habló. —estaba pensando en si querías ir a comprar, digo... No trajiste muchas cosas.

—Mmm tienes razón, ¿irás conmigo? —TaeHyung le dio una mirada penosa y negó con la cabeza.

—Lo siento Jiminnie tengo una cita con... NamJoon. —el omega recordó que NamJoon era un psicólogo, extrañado decidió preguntar. —¿Vas al psicólogo Tae?

HoSeok rió al ver que su pareja se había tensado ante la pregunta de JiMin así que decidió darle una ayudadita. —Él ha estado yendo porque tiene problemas para dormir y eso, yo suelo acompañarlo en sus sesiones así que...

JiMin asintió pensativo, sin descubrir la verdadera intención de ambos sonrió. —Entiendo, le diré a YoonGi hyung entonces. —TaeHyung dio una sonrisa triunfal.

Salió como planeaba, eres grandioso Kim TaeHyung.

TaeHyung y HoSeok ya se habían marchado para cumplir con el plan.

YoonGi estaba sentado en el cómodo sofá esperando a que el omega saliera de su cuarto.

Moviendo su pie impaciente, se levantó.
Ya había pasado mucho tiempo y el omega aún no salía de su cuarto así que YoonGi caminó hacia la habitación y tocó la puerta.

Nada

—JiMin. —habló un poco fuerte. Soltando el aire retenido cuando escuchó la voz del menor.

—¡Ya voy YoonGi hyung, espera en la sala! —YoonGi pensó que si otra persona hubiera sido ya le hubiera gritado que se apresurara u otras groserías pero no podía, era JiMin. Resignado se dio la vuelta y a paso lento regresó a la sala.

Al cabo de diez minutos, un omega salió tímidamente de su habitación y al llegar a la sala vio a YoonGi entretenido en su teléfono, sonrió y caminó hasta quedar frente al alfa.

Últimamente sonrío mucho...

—YoonGi hyung ya podemos irnos. — El alfa dio un salto pues no se había percatado de la presencia del omega por estar tan concentrado en aquel juego que un colega le había recomendado. Se levantó y al verlo se quedó perplejo en su lugar.

Se veía tan bonito, llevaba unos pantalones negros que se moldeaban muy bien a sus piernas y un lindo abrigo azul, su cabello castaño era peinado perfectamente y su rostro... ¿Dios que hago?. Se reprendió, parecía un desvergonzado.

Saliendo de su admiración vio que él omega lo estaba observando sonrojado y tímido.

Carraspeó avergonzado y observó a JiMin. —Vamos JiMin. — el omega asintió y así, con un corazón acelerado y albergándose un poco de confusión en el corazón de ambos; salieron para despejar su mente un momento.

No dándose cuenta que iban siendo seguidos.

[Editado]

Este capítulo va dedicado a todas esas personitas que le están dando mucho amor a este fic.
Les agradezco grandemente❤

¡Agregué a nuestro tierno Holly!

Hotcakeworld🌟