Narra Sasuke

Ya paso más de dos semanas y Hinata no llegaba a su casa, la había visto unas cuantas veces en las clases que teníamos juntos pero ni siquiera me miraba, se la pasaba todo el día con Toneri, eso me molestaba aún más, y a parte el dobe y la cerda se la pasaban juntos analizando algo que no me podían decir aún, pegados al maldito celular en vez de ir y ver a Hinata, Hanabi al igual que Matsuri y Gaara estaban preocupados, cada que le trataban de hablar ella simplemente los ignoraba o les contestaba secamente, yo no me acercaba por que ese maldito albino y su gemela no la dejaban en paz, y hablando de su estúpida gemela, no me dejaba ir ni al baño solo, es como si fuera un maldito chicle, odiaba eso, me coqueteaba, intenta besarme y esas cosas, así no se puede.

—Mierda—dije para mi mismo mirando hacia la cafetería, ahí estaban esos dos desayunando comida "refinada" como le llamaba Toneri, en realidad eran solo unos pequeños pedazos de carne o cualquier otra comida normal pero en porciones más pequeñas, maldito anorexico.

—Creo que debemos hablar con el ya—escuche decir a Naruto detrás de mi, no entendía a lo que se refería, el e Ino se la habían pasado diciendo cosas así durante esas dos semanas.

—Aun no es momento, baka—lo regaño Ino y le tapo la boca con ambas manos llendose lejos de mi, yo mientras tanto ya no aguantaba el verla con el, me desespere y me acerque a ellos con rapidez, pero en el camino vi como mi hermano se colocaba junto a mi y juntos nos dirigíamos con la Hyuga.

—¿A que vienes? —le pregunté frío, después de su intento por quitarme a mi Hinata, no lo trataría bonito.

—A hablar con Hinata—me dijo mientras yo me quedaba viendo su espalda observando como el se acercaba, lo seguí a pasos más lentos esperando a que Hinata lo rechazara como a todos los demás.

Narra Hinata

Cuando desperté, me sorprendí al ver que mis recuerdos seguían ahí, menos los de Sasuke, únicamente los más recientes como los besos con el y ese tipo de cosas sin embargo el sentimiento de cariño que le tenia se había esfumado, al igual que todas mis demás emociones, me sentía vacía.

—Entonces Hime-sama... ¿Qué sientes por el Uchiha? —me pregunto mientras el estaba sentado en una silla junto a la cama.

—Nada—respondí secamente, ¿En que estoy pensando? Es como si estuviera lejos de ahí, como si contestara un cascarón roto, esa no era yo.

—Y... ¿Quieres ser mi esposa? —vi como el se ponía en cuclillas frente a la cama y lo mire, sin sentir nada pero sabía que debía obedecer.

—Si, Toneri-kun—respondí aún con indiferencia, en eso su gemela se acerco a donde nosotros estábamos y lo miro con fastidio.

—Debes dejar de hacer estas cosas Toneri, simplemente iremos por la fortuna Hyuga y la dejaras ¿Quedo claro? —el me miro por un instante y negó.

—Me quedaré con ella... Es un lindo juguete—su hermana rodó los ojos y me miro indiferente.

—Es como un juguete nuevo, úsalo mucho y te aburriras de ella—lo regaño y me miro.
—Ella es buena, no la fastidies esta vez si es que en verdad quieres llegar a algo—lo mire y el me sonrió como si me viera con lástima, mi orgullo me decía que lo golpeara hasta hacerlo entender que yo no era una princesa indefensa pero mi cuerpo no respondía, yo no podía hacer absolutamente nada, no sentía nada.

—Claro que no la voy a fastidiar... Ella ayudara a revivir nuestro clan—su gemela sonrió de lado y me vio.

—En ese caso me quedaré con el Uchiha—estaba que estallaba de rabia, no podía decir absolutamente nada, pero ya me imaginaba mil maneras de ahorcarla, asesinarla, torturarla hasta la muerte...

—¡Ese Uchiha es mio, perra!—grite internamente.

—Bien, hora de ir a la escuela, me encargaré de que las sirvientas la vistan... —dijo su gemela y ambos salieron de la habitación.

Y así fueron los siguientes días, tal vez fueron semanas, las palabras salían de mi boca, mi camino lo dirigía otra cosa, yo no estaba en mis cinco sentidos, otra cosa me controlaba, ignoraba a mis amigos y evitaba hablar con él Uchiha a toda costa para no lastimarlo o causarle algún daño con las palabras tan frías e indiferentes que salían de mi boca, era una persona completamente diferente.

No quería seguir así, por más que trataba de controlar mi cuerpo o mi boca no podía, en verdad era una persona sin sentimientos, ahí fue cuando me di cuenta de que en verdad amaba a ese Uchiha, supongo que cuando sientes que pierdes algo es cuando realmente te das cuenta que lo quieres, pues eso me sucedió, iba caminando normalmente camino al carro de Toneri cuando me tope con esa escena.

Flash back

Estaban en el pasillo cerca de los baños junto a los casilleros, a unos cuantos pasos de la puerta de salida.

—Uchiha, necesito hablar contigo—escuche a mi "cuñada".

—¿Necesitas algo?—como siempre, ese Uchiha siendo indiferente hasta con las damas.

—Y-yo te... Amo—susurro en el oído del Uchiha, lo vi cuando estaba por doblar, en ese momento sentí como si volviera a la realidad, me escondí detrás de los casilleros y observe atenta a la escena, ella lo intentó besar, de ahí no vi más, sentía como mi corazón se partía en mil pedazos... No soportaba más eso, al instante sentí como cada vez más iba perdiendo esos sentimientos que por un momento volví a tener.

Fin de flash back

Bien, en este momento estoy desayunando junto a Toneri en la cafetería de la escuela, me sentía como una idiota ahí, por lo menos se que aqui no tengo ni voz ni voto. Vi como poco a poco Sasuke e Itachi se acercaban a donde estábamos, sentí una pequeña esperanza crecer dentro de mi... Pero lo arruinare, los tratare mal o algo... Se que eso pasara.

—Hinata—alce mi mirada y vi a Itachi, traté de evitar decirle algo malo.

—Tu no tienes nada... —le corte sus palabras y hable yo.

—Itachi-kun—dije con esperanza, tratando de que el viera que estoy mal y que me ayudara a sacar lo que sea que el Otsutsuki me metió, vi a Sasuke detrás de él, con la mirada fija en mi, llena de ilusión... Al parecer logró esquivar los besos de Kaguya.

—Oh, que agradable sorpresa, si nos disculpan estamos tratando de comer en paz—escuche decir a Toneri con molestia en su voz, se notaba lo irritado que estaba.

—Hinata, ¿Qué te hizo? —Sasuke se acerco a mí y me tomo de las manos, sentí que por un momento volvería a ser libre...

—E-el... —trate de hablar con dificultad, vi como Toneri apreto uno de sus puños y sentí una punzada en el pecho, la cual al instante me tranquilizó y volví a perder el conocimiento, a dejar de controlar mi cuerpo. —El es el amor de mi vida, me casare con el, no te atrevas a interferir, Uchiha—le conteste fría y vi como el con todo y su orgullo se paraba bien, lo había lastimado de la peor forma posible, directo ahí donde más le dolía, en su orgullo.
Ese maldito orgullo que se carga.

—Bien dicho Hime-sama, nuestra boda será dentro de dos semanas, pueden venir si gustan—de su mochila saco un par de invitaciones y se las entrego a cada uno, Sasuke por su parte la tiro y la pisoteo.

—Ni se te ocurra pensar que estaré ahí —me dijo enojado y se fue, Itachi tomó la invitación, dio una leve inclinación y se fue detrás de su hermano, no sabía lo que hacía en ese momento, me sentí como una idiota nuevamente...

Terminó el receso, pasaron las clases, llego la tarde... La misma rutina de todos los días estaba harta, harta de Toneri, tenía unas inmensas ganas de golpearlo, de ver a mi hermana y de ir a demandar a ese hombre que se hace llamar "Mi padre".

Narra Sasuke

—E-el... —se detuvo unos instantes, esperaba a que me dijera que el le hizo algo pero no. —El es el amor de mi vida, me casare con el, no te atrevas a interferir, Uchiha —me lanzó una de las miradas más frías que podría ver en toda mi vida, no me lo esperaba y mucho menos de parte de ella.

—Bien dicho Hime-sama, nuestra boda será dentro de dos semanas, pueden venir si gustan—el nos entrego una invitación a cada uno, estaba tan enojado que ni siquiera me puse a analizar la situación, la rompí y la tire al piso.

—Ni se te ocurra pensar que estaré ahí —me di la vuelta tratando de conservar la poca dignidad que me quedaba, ¡Ridiculizado! ¡Por una Hyuga! Esto no se quedará así, haré que ella y ese Otsutsuki se traguen sus palabras.

Paso una semana, la Hyuga y Toneri no se despegaban para absolutamente nada, las vacaciones de verano ya habían dado inicio y ellos se fueron al extranjero a buscarle un vestido de novia perfecto a Hinata, a pesar de todo... Se que no es culpa de ella el actuar así, en el fondo se que Toneri la controlaba de alguna manera, pero ¿De cuál? Pase los siguientes tres días así, pensando, Naruto de vez en cuando me iba a dejar algo de comida y a pasarla conmigo, yo solo estaba distante, no tenia ni idea de que hacer...

Narra Ino

Antes de que Hinata se fuera, le pedí a Toneri hablar con ella un momento, el accedió y nos dejó a solas sin embargo... No conseguí mucho.

Flash Back

—¿En que piensas Hinata? —le pregunté al ver que Toneri se había ido.

—¿A que te refieres? —me dijo usando ese tono tan indiferente.

—¿Por qué te casas con el? ¿Qué no amas a Sasuke? —ella chasqueo la lengua, definitivamente aún no había olvidado al Uchiha.

—Tsk, ¿Ese baka? No me interesa, me casare con Toneri, el me hace feliz—siguió con ese tono neutro, yo debía intentar algo para sacarle ese chakra que la controlaba.

—Hinata, antes de que te vayas desearía hacerte un chequeo médico ya sabes... Para que no te pase nada durante el viaje—trate de sonar lo más convincente posible, no quería arruinar el plan que Shikamaru, Naruto y yo habíamos hecho.

—Está bien—accedió y yo le ordene que se acostara sobre su cama, coloque mi mano sobre su pecho y ahí sentí esa fuerte energía, intente sacarla, metí mi mano al igual que lo había hecho Toneri anteriormente y cuando toque esa pelota entro corriendo Toneri, yo enseguida saqué la mano y le sonreí de manera inocente.

—Tu prometida ya esta lista—le dije y me retire. —No te atrevas a tocarle un pelo, si no... No tendré piedad—le amenace y salí de esa horrenda mansión.

Fin de Flash Back.

Y ahorita no sabíamos que hacer, con el orgullo que se cargaba Sasuke, las dudas de Naruto y Shikamaru que estaba buscando algún fallo en su plan, ya todo estaba casi listo para cuando ellos regresarán nosotros poder atacar sin problema y hacer que Hinata regrese a la normalidad. Por otro lado, Sasuke estaba pensando en volver a meterse a Akatsuki, cree que cometer crímenes lo ayudara a olvidar a Hinata, Naruto y yo aún no le hemos enseñado el video, arruinaría todo lo que planeamos, se lo diremos al último minuto, por si nuestro plan falla.

Narra Naruto

Esto es una locura. Bien, lo que haremos es que cuando sea el día de la boda Ino ayude a Hinata a vestirse, en ese transcurso nosotros le quitaremos la pelota de chakra y la sacaremos de ese lugar, nos la llevaremos al extranjero, acabaremos con Toneri y de ahí regresaremos.

¿Simple, no? Pero el maldito baka de Sasuke ya no quiere cooperar, aunque también estoy algo intrigado por eso de querer regresar a Akatsuki, no me vendría mal... Pero no, debo hacer que ese teme pierda su orgullo un instante y salve a Hinata, aunque aún sigo dudando.

—Hey, teme... —le hable viendo como el estaba frente al televisor jugando Call Of Duty Black Oops, así a estado los últimos cinco días después de que Hinata le dijo que se iba a casar con Toneri.

—¿Qué quieres, Naruto? —otra cosa rara, me ha estado llamando por mi nombre, no por "Usuratonkachi" o "dobe".

—¿Qué pasó con Hinata-chan? —el ni siquiera me volteo a ver, simplemente se quedó mirando al televisor, su cabello cubría levemente sus ojos, no sabía ni siquiera lo que ese teme estaba pensando, como no me hizo caso me pare y apague la consola, el se quedó quieto.—¿Teme? —me acerque a el y lo que vi no me lo esperaba para nada.

Una gota escurrió por su mejilla, seguida de otra, y otra, y otra, y otra... Y así sin parar durante un largo rato, al principio no supe como reaccionar, de ahí me acerque a él y espere a que se tranquilizara.

—La perdí—dijo finalmente, me sorprendí al ver que el aceptó eso. —No pude hacer nada, simplemente me la arrebato... Pensé que podía, que era lo suficiente para ella, pero veo que no... Se fue con un maldito albino anorexico—vi como apreto sus puños a sus costados, alzó un momento la mirada y su Sharingan estaba activado, enseguida un lobo llegó y se acurruco en las piernas de mi amigo. —Incluso sus regalos me quieren, ¿Por qué ella no? —empezó a acariciar levemente al lobo, vi que tenía una sonrisa en su rostro.

—Ya veras que ella regresará teme, yo te ayudare ¡Es una promesa! Dattebayo—le dije estirando mi pulgar arriba frente a el.

—Pero si ella es feliz junto a Toneri dejala, ya es hora de aceptar que no siempre gano yo, esta vez perdí—se seco sus lágrimas y cerró los ojos recargando su cabeza en el sillón, me coloque junto a él de la misma manera y sonreí.

—Creo que ya sabe lo que es sufrir por amor—pensé.

Otro día le enseñaré el vídeo, mientras, debe sentir esto.

Otro capitulo hoooy dios miooo son las 04:00 am, me desvelooo pero vale la pena, pronto vendrá el final amikos, espero que lo disfruten uwu denle amorrr
Baiiss patatas ;3
Ale se despide!!