Sans se puso su traje de baño, salió a la playa y empezó a hacer ejercicios de calentamiento, en realidad no tenía ni idea del tipo de ejercicios que debería hacer para prepararse pero sabia que nadar era un ejercicio que si no preparaba sus podría darle un calambre y eso no seria bueno, así que hizo algunos ejercicios de calistenia los cuales saco de internet, mientras miraba hacia el océano y hacía sus ejercicios de repente escucho como alguien le llamaba.

-¿Qué clase de baile es ese?- Se dio la vuelta para ver a Elsie, que ya estaba en traje de
baño. Lindsay estaba de pie justo detrás de ella.

Los diseños de sus bikinis eran exactamente iguales, lisos con bordes blancos. Sin
embargo, la de Elsie era roja, mientras que la de Lindsay era azul. La parte inferior era un
contrafuerte que tenía que ser atado al costado.

Lindsay también llevaba una larga vestimenta azul pastel, Sans pensó que ella era tímida con su
atuendo. No era necesario decir que tenían hermosos cuerpos, y honestamente, tuvo
problemas para averiguar dónde fijar la mirada. Aun así pudo confirmar que la hermana pequeña era la que tenía los pechos más grandes.

-No es un baile. Estoy haciendo ejercicios de calentamiento. No quiero saltar y tener un
calambre instantáneo en el pie, ¿sabes?- Dijo Sans mientras se calmaba lo suficiente para no sonrojarse.

-Oh, está bien entonces. ¿Así es como funciona? Bueno, seguiré adelante y lo creeré,
supongo.- Sans solo levanto los brazos en respuesta, el tampoco sabia si realmente evitaban los calambres, pero mejor prevenir que lamentar, morir por un calambre seria vergonzoso y patético. Después Miro fijamente a Elsie mientras giraba ligeramente las muñecas y los tobillos, estiraba un poco los tendones de las piernas, giraba la cintura y corría hacia el mar.

-Oh, veo que Elsie-dono ya está en el agua. Me uniré a ella, entonces.- Yae estaba
ya a lado de Sans, sonriendo por lo que estaba viendo. Ni siquiera había notado su acercamiento.

Llevaba un bikini púrpura claro que tenía que ser atado a los lados, y un halterneck. Sans no pudo evitar mirarla fijamente, mas concretamente el are de su pecho, siempre los ata con un
sarashi, así que la diferencia entre esto y su apariencia normal era gigante, ligeramente eran mas grandes de lo que Sans esperaba.

Yae ignoró por completo la mirada de Sans y corrió hacia el agua.

-¿No vas a nadar, Lindsay?-

-Ah, no soy muy buena nadando, así que descansaré en la sombra...- Lindsay caminó hacia
un área cercana desprovista de luz solar. Lindsay no parecía un tipo de chica especialmente
sana. Sólo podía esperar que no sufriera una insolación o algo así.

-¡Sans!-

-¡Padre!-

-!PAPI¡-

En el momento justo, Sue, Renne y Emily se acercaron a el. las tres llevaban trajes
de baño de una sola pieza. La de Sue era amarilla y tenía volantes por toda el área del pecho,
mientras que la de Renne era roja con puntos blancos por todas partes y volantes alrededor
de la cintura y el de Emily era de un blanco puro con volantes igualmente blancos.

Las tres se veían simplemente adorables. Sans no pudo evitar tomarles fotos, Sue estaba en un anillo de natación, mientras Renne sostenía una pelota de playa y Emily tenia unas gafas y un respirador.

-Asegúrense de no adentrarte demasiado en el mar. No es que sea profundo por aquí, pero
aún así, deberían quedarte cerca de los demás-.- Advirtió Sans ya que el nadaría a las ruinas no podría cuidarlas.

-Lo sé. Vamos a estar bien. ¡Vamos, Renne, Emily! ¡Adelante!-

-¡Te tengo, hermanita!-

-¡Vamos hermanita!-

Sue tomó las manos de Renne y Emily y las llevó al agua. "Hermanita", ¿eh?
Bueno, Sans estaba feliz de que se lleven tan bien.

-Se llevan tan bien.-

-¿¡Guau!?- La voz de Cecile lo asustó y me hizo retroceder. Hubiera preferido que no se
acercara a la gente sin dar ni una pista de su presencia. Por otra parte, realmente mostró cuál
era su verdadera vocación. Cecile llevaba un bikini verde esmeralda con un pareo del mismo
color alrededor de la cintura. Era un traje de baño estándar, sin propiedades sugestivas

-¡Señoritaaaas! ¡Déjenme unirme a ustedes- Cecile empezó a correr hacia ellas.

-Parece que se divierten-

-¿¡Hyahh!?"- Lapis estaba de pie detrás de Sans al igual que con Cecile tomo a Sans descuidado asustándolo.

-¿¡Otra vez!? ¡Deja de esconder tu presencia, casi me da algo - La reprendió Sans. Lapis, solo estaba observando a Sue y a los demás, estaba vestida con un traje de baño azul marino que parecía una combinación de un top de tubo y pantalones cortos. Por alguna razón, estaba sosteniendo una bandeja de plata.

-¿Qué es eso?- Pregunto Sans con curiosidad?

-Bueno, hay trabajo que hacer. Sólo llevaba unos tragos a las Damas y a los demás-. Lapis
miró hacia otro lado Sans siguió su mirada para ver a la reina y a la esposa del duque reclinadas
en sillas de playa bajo una sombrilla. La mesa entre ellos tenía un par de bebidas tropicales
colocadas sobre ella, aparentemente llevadas allí por Lapis.

-Lapis... eres libre de relajarte, ¿sabes?-

-Ah, no te preocupes por mí. ¡Me estoy divirtiendo mucho! Cecile y yo cambiamos de turno
de trabajo de vez en cuando.- Con una amplia sonrisa en la cara, Lapis atravesó [Gate] y fue a buscar algunas cosas a casa. Era una doncella ejemplar. No debería haber esperado menos de un miembro del Gremio de Doncellas.

"PSSHHHHHHHHH"

-¿Eh...?- Escuchando un fuerte ruido, se giró hacia su fuente y vio a Su Majestad el Rey lanzando
una bomba contra el agua. Eso no parece seguro... Oh, se escapó. Supongo que ese lugar
debe ser muy profundo. El duque Ortlinde y el general Leon pronto lo seguirían. ¿Están...
¿Están corriendo? ¿Qué demonios están haciendo ahora...? Estos tres hombres adultos están
actuando como niños pequeños.

-Sans-. Sans quien estaba mirando fijamente al rey y a sus amigos, completamente desconcertado por sus payasadas, cuando Yumina lo llamó. El bikini blanco con volantes en el pecho y la cintura le quedaba muy bien. Dio una vuelta y lo miró directamente.

-¿Y bien? ¿Algo que decir?-

-Te queda muy bien, te ves muy linda.-

- hehehe . Muchas gracias... Sans, ¿vamos a nadar juntos?- dijo Yumina mientras lo abrazaba de el brazo. 

-Tengo que investigar las ruinas, ya sabes. Iré contigo cuando termine con eso.- Dijo Sans quien no había olvidado el motivo real por el que llegaron alli.

-Asegúrate de venir a jugar conmigo cuando termines, ¿de acuerdo?- Yumina huyó tras Sue
con una sonrisa en la cara.

-(¿Qué debería hacer con la exploración?, Las ruinas están sumergidas en el mar y no puedo respirar bajo el agua)- Pensó Sans mientras miraba el agua.

-¿Por qué esa expresión pensativa?- Alguien lo llamo desde atrás.

-¿Eh...?- se dio la vuelta para ver a Leen, vestida con un bikini negro, parecido al de un
adulto, con cordones blancos, sosteniendo una sombrilla negra.

Sans pensó que si ella era tan reacia a la idea de bañarse a la luz del sol, podría haber elegido no usar un bikini, pero llamarla así parecía como si fuera una especie de inexplicable derrota en el gran esquema de las cosas. Además, había cosas que decir acerca de una persona que usaba un
traje de baño tan atrevido, de corbata lateral y de baja estatura mientras tenía una contextura
tan pequeña.

No iba a decir nada hasta que vio al oso autónomo haciendo ejercicios de calentamiento
mientras llevaba un traje de baño rojo y negro.

-Espera. Paula, ¿realmente vas a nadar?- Dijo Sans viendo la determinación del oso de peluche, Paula se golpeó el pecho como si dijera: "¡Claro que voy a nadar!" Sans le echo una mirada interrogativa a Leen, y el hada se rió en respuesta.

-No le di mi [Protection] por nada. Es completamente impermeable.- Dije tranquilamente.

Sans estuvo de acuerdo y pensó en lanzar el hechizo a su smartphone cuando fuera a buscarlo ya que lo había dejado en una pequeña casita que hizo parar Kohaku. 

-Bueno, creo que es hora de ir a nadar.- dijo para comenzar a hacer su camino hacia el mar, y Paula no estaba lejos de el  cosa que lo hacia preguntarse. ¿De verdad va a estar bien?

Paula llegó a la costa, se preparó para una increíble carrera al agua... y fue rápidamente
golpeada en la cara por una ola. Volvió a la playa. No dispuesta a rendirse, Paula corrió hacia el
mar. Y, como un reloj, una ola la golpeó y la envió de vuelta a la playa. No tenía dudas de que
estaría atrapada en este bucle todo el día.

Alejo su atención de ella y se aventuro en el mar. Llego a un punto en el que sus pies no
podían tocar el suelo y cambio a una brazada de pecho para seguir avanzando, al llegar al lugar respiro hondo y se zambullo hacia abajo.

El agua era cristalina, así que podía ver todo debajo y a su alrededor sin muchos problemas.
Ahí estaba, las ruinas que había estado buscando. Varias grandes losas fueron colocadas en
un círculo de piedra, en el centro del cual había un pequeño edificio que se asemejaba a un
templo. Sans se zambullo más abajo y miro dentro de la entrada para ver una escalera que bajaba.

Estaba oscuro ahí dentro, así que no podía estar seguro, pero tenía la sensación de que
había llegado muy lejos. En ese momento, realmente necesitaba recuperar el aliento, así que
nado de regreso a la superficie.

Sin perder el tiempo. Después de recibir una nueva toma de oxígeno, se zambullo una vez
más. Inmediatamente fue directo a las escaleras de piedra que había debajo, pero de nuevo
se vio frustrado por sus insignificantes pulmones humanos.

-(No hay forma de que pueda hacerlo así. Sólo puedo aguantar la respiración un minuto.
Quería desesperadamente saber qué había al final de las escaleras.)- Quería averiguarlo,
pero había un límite de lo que era capaz de hacer. No logro mucho, pero fue lo mejor que pudo
hacer. No tuvo más remedio que volver a la orilla.

Cuando volvió, vio a Paula enfrentándose a las olas y limpiándose la imaginaria "sangre" de
la boca, como si dijera: "Eres... bastante buena". ¿Todavía lo está intentando? Sans le conto a Leen lo que vio y se sento en la playa.

-Así que está en el fondo del mar, ¿no es así...? ¿Qué debemos hacer ahora, entonces...?
Tal vez debería intentar llamar a Marion.- Dijo el hada al parece pensó en alguien.

-¿Marion?- Pregunto Sans con curiosidad.

-La Matriarca del Clan de los Marines de Mismede. Un viejo amigo mío. No tendría
problemas para hacer cosas bajo el agua.... pero resulta que es bastante reservada-. Leen se
cruzó de brazos y comenzó a pensar.

Sans intento sugerir invitar a otros de esa especie, pero según Leen, la parte "reservada" se
refería a una política compartida por todos los marines que vivían en Mismede. En resumen,
hicieron todo lo que pudieron para no entrometerse en los asuntos de los habitantes de la
superficie, por lo que no era una opción conseguir que ninguno de ellos viniera.

-Es sorprendente que una raza como esa aceptara participar en la fundación de Mismede.- Dijo Sans.

-Ese es el resultado de mi capacidad de negociación. No es una mala chica, y si conoces a
alguien desde hace cien años, tiendes a ser capaz de decir lo que está pensando-.Dijo leen sorprendiendo a Sans.

-Bueno, dejémoslo así por hoy. Ve y diviértete un poco ahora. Si te mantengo para mí
demasiado tiempo, los demás me guardarán rencor, estoy seguro-. Con esas palabras como
la última, Leen fue a ver a Paula. 

Sans hizo lo mismo cuando de repente, su sentido del olfato se vio abrumado por el atractivo aroma de la carne cocida. se levanto y miro hacia donde soplaba el viento. Allí vio a Micah y a Crea, ambas vestidas con delantales. Estaban de pie y alegres ante una plancha
de hierro. 

Micah llevaba un bikini naranja, mientras que el de Crea tenía rayas en blanco y
negro. Con las dos siendo cocineras, no le sorprendió que se llevaran bien.
No muy lejos de ellos, vio a Aer (La dueña del comedor donde Sans inundo la mesa), que llevaba un traje de baño de una sola pieza con motivos florales, haciendo que Linze enfriara un recipiente metálico. Oh, supongo que están haciendo helado. Parece que ese será el postre, entonces.

Entonces se dio cuenta de que Julio traía ingredientes a través de [Gate] que conducían a
nuestra casa. Aparentemente, el sombrero de paja que le compro se convirtió en parte de su
look. No lo había visto quitárselo todavía.

Decidí ayudar, pero mientras caminaba hacia allí noté algo que necesitaba mi atención.
... ¿Qué están haciendo? Dos mayordomos, ignorando el calor mortal y aún usando su
habitual traje negro y guante blanco, estaban mirando algo a través de pares de gafas de
ópera.

-Para ver si está a salvo, estoy observando a la Srta. Sue.- Dijo el primero.

-Por la misma razón, estoy observando a la princesa.- Dijo el segundo.

Sans solo sonrió ante eso y los dejo hacer lo que hacían antes de dirigirse hacia los demás ya que el olor le había abierto el apetito...

fin del capitulo nasheeeeee