Cap. 20: Y ahora un incendio... en la cama \\Lemon// (+18)

(Nota del autor)

Advertencia!!!

Éste será un capítulo... subido de tono. Si el lemon no es de su agrado, sepan que pueden saltearse esta parte sin problemas. No contribuirá mucho al lore de esta historia, por lo que no es indispensable leerla.

No quiero que se sientan obligados a pasar por este momento cringe entre Rohan y la Rayis.

Dicho esto: preparen el clorox, y disfruten lo que se viene...

---------------------------------------------------------------------------------------------------------

La casa de Rohan fue, básicamente, reducida a cenizas por un inesperado incendio. Y ahora no teníamos otra opción más que conseguirnos una habitación en el hotel de Morioh y convivir allí hasta que todo fuera reconstruido.

Eso sería un tanto incómodo. No me malinterpreten; no estoy quejándome. Quiero decir, ¿pasar unos cuantos días en un hotel con el chico de tus sueños? ¡Es como sacarse la lotería! Pero eso no quitaba el hecho de que estaríamos obligados a vernos las caras todos los días. Y no somos... lo que se conoce formalmente como "una pareja" ni nada por el estilo.

Entre las reparaciones, reconstrucciones y eso, Rohan estaba invirtiendo una fortuna. Y yo, por mi parte, tampoco estaba económicamente dispuesta a pagar una habitación en ese hotel (que por cierto no es de los baratillos...).

Por eso no teníamos más opción que conformarnos con lo que podíamos pagar: una habitación con cama matrimonial. Y aguarden, no es como si me estuviera quejando...

Sé que estarán esperando la parte "picante" para este punto, pero sepan que no fue tan... como ustedes piensan. No es como si apenas llegados al hotel, ya estábamos quitándonos la ropa mientras nos revolcábamos salvajemente por la habitación... De hecho, las cosas estuvieron un tanto raras entre nosotros después del incendio...

Time Jump

-Y... al fin en el hotel- soltó Rohan, tirando al suelo de la habitación las pocas pertenencias que había logrado salvar, para luego dejarse caer de espaldas sobre la enorme cama.

-Parecía que esos paramédicos no nos dejarían marchar nunca... ¿Lograste contactar con tu representante?- indagué, dejando a un lado mi mochila (la cual contenía todos los documentos importantes respecto a mi investigación).

Rohan me respondió con un "ajá", y luego permaneció en silencio unos instantes.

-Ok... Entonces, ¿crees que es buen momento para hablar sobre lo que me dijis...?- comencé, buscando romper el momento de tención. Pero Rohan no me dejó terminar.

-Entonces... ¿tú quieres la cama? Yo puedo dormir en el suelo- soltó él, evitando mi mirada.

Alcé una ceja, confundida. ¿Acaso no quería hacerce cargo de aquellas cosas cursis que me dijo durante el incendio?

*Flashback para relleno*

-Escucha, si no saltas... yo... (T/N), debo ser completamente sincero contigo. Sé que éste no es el momento correcto para hacer esto... pero siento que si no lo digo ahora, podría perder la oportunidad para siempre. Cuando me dijiste lo que sentías por mí... simplemente no pude creerlo. Pensé que estabas bromeando conmigo, que te estabas burlando de mí. Si lo que me dijiste es cierto, por favor salta. Porque... yo siento lo mismo por ti. Y no soportaría perderte...

Esas, exactamente ESAS habían sido las palabras dichas por Rohan. ¡Y ahora, el malnacido estaba evitando el tema!

-¿Ya estás pensando en dormir? Aún ni es de noche- le dije, cruzándome de brazos.

-Eh...

-Está bien, no debes buscar excusas. Ya entendí, no quieres hablar de ello. Está bien, no es necesario ¿Ok? Está bien...

-(T/N), dijiste "está bien" como tres veces...

-¡Ya sé! No me hagas poner más nerviosa- solté. -Me voy de compras, necesito despejar un poco la cabeza. ¿Quieres algo del súper?

-¿Vas a comprar comida?

-No. Voy a comprar alcohol.

-Espera, ¿puedes beber?- Rohan se levantó de la cama cual resorte.

-Claro, ¿por qué no podría?- le contesté, mientras recogía mi abrigo y me calzaba los zapatos.

-Bueno, pensé que... si estabas tomando medicamentos...

-No quiero hablar de eso. Necesito un trago, y no puedes impedir que vaya a comprar alcohol.

Y dicho eso, me marché.

Time skip

Si bien dije que no estaba en posición de gastar mucho dinero, de cualquier forma de!me di un gustillo comprando litros y litros de alcohol (que luego tuve que acarrear penosamente de vuelta al hotel).
Una vez de regreso, encontré a Rohan hablando con alguien por teléfono. Asumí que sería su representante, y sin prestarle mucha más atención, me dispuse a abrir la primera botella.

No quiero que me malinterpreten, no suelo beber demasiado, pero en este caso lo ameritaba (ya que casi morí en un incendio ese mismo día).

Rohan cortó su llamada luego de unos minutos, se volteó hacia mí y me dedicó una mirada de desapruebo.

-¿Ya comenzaste a beber?- me preguntó.

-Y tú qué crees, zopenco. ¿Quieres un poco?

Le extendí la botella, pero él se rehusó.

-Vamos, no seas amargado... Te vendría bien un trago- insistí, sacudiendo la botella
frente a él.

Aunque, nuevamente, él se negó.

-Ya sé, juguemos un juego. Yo digo algo que nunca haya hecho, y si tú lo hiciste, debes beber. Luego, es tu turno de decir algo y así...- ofrecí.

-¿Eso no se juega de a varias personas?

-¿Ves a alguien más aquí, genio? Vamos, será divertido...

Luego de soltar un suspiro, él tomó la botella y tomó asiento en la cama.

No voy a aburrir a nadie con las preguntas del comienzo, y saltaré hasta la parte donde empiezan las preguntas picantes.
Ya habíamos tomado poco más de tres botellas para cuando me atreví a lanzar la primera bomba. Para ese punto ya me encontraba ligeramente ebria, ya que mayormente había sido yo quien había bebido.

-Yo nunca... le quité el brassier a una chica...

Rohan abrió enormemente los ojos, pero no atinó a tomar de su botella.

-Oye, espera... ¿vas a decirme que nunca quitaste un brassier?- indagué, tratando de contener la risa.

El peliverde enrojeció de pies a cabeza, y sin responder a mi pregunta, continuó con el juego.

-Yo nunca... ¿le vi la ropa interior a otro hombre?- soltó, dudoso.

-Pues claro que lo he hecho, tengo un hermano- reí, mientras bebía un largo trago.

-No... no me refería a eso. No cuenta si es un familiar...

-¡Oye oye espera, esto me da una idea!- sonreí maliciosamente, mientras destapaba una nueva botella -. ¿Qué tal si jugamos... por prendas?

-¿Por... prendas?

-¡Sí! Cada vez que tienes que beber, también tienes que quitarte una prenda.

Creo que para este punto, Rohan también estaba claramente ebrio... y fue por eso que no opuso resistencia ante mi idea.
Uf, ahora sí que se estaban poniendo intensas las cosas.

No pasó mucho tiempo hasta que ambos quedamos solamente en ropa interior. Él evitaba mirarme, pero podía darme cuenta de que se le estaba complicando ya que sus ojos parecían bajar involuntariamente por mi cuerpo.
A su vez, yo tampoco era muy discreta, mirando de aquí para allá por donde me placía...
Seguimos el juego, dispuestos a todo o nada.

Y finalmente... adiós bragas.

Nos quedamos en silenciosa contemplación mutua. Él no paraba de mirar mi cuerpo desnudo y yo... bueno, no podía apartar mi vista del creciente bulto que se estaba formando bajo sus bóxers.

Cuando levanté la vista y nuestros ojos se encontraron, un ardiente impulso me llevó a lanzarme sobre él, plantándole un húmedo beso en los labios.

Rohan pareció sorprendido al principio, pero acabó correspondiendo al beso.
Comenzó a pasar sus manos por mi cuerpo, sin despegar sus labios de los míos, y yo le seguí la corriente. Hasta que mis manos se posaron sobre su bulto (que había adquirido un tamaño sumamente interesante, cabe decir), y no pude evitar detener el beso para echar un vistazo.

Metí con precaución la mano debajo de su boxer, tanteando terreno. Aún no sabía si él estaría completamente de acuerdo con esto...
Pero Rohan no opuso ninguna resistencia, a pesar de lo rojo que se había puesto su rostro.

Tomé el miembro con mi mano, acariciando cuidadosamente a lo largo. Y cuando ya no pude contenerme, lo saqué hacia afuera, quitando los boxers del medio. Quería verlo en su máximo esplendor. Y la verdad, no quedé para nada decepcionada...

-O... oye, (T/N), no podemos hacer esto... No estamos preparados, y no quiero tener descendencia siendo tan joven...- murmuró Rohan.

-Que no tengamos protección no significa que no pueda darte placer- solté, seductoramente.

Y acto seguido, acerqué mi rostro a su palpitante miembro. Aventuré una tímida lamida, luego otra y otra más. Hasta que finalmente tomé coraje para meterlo en mi boca. Rohan lanzó un sofocado gemido.
Era un tanto grande, y temía morderlo sin querer, por lo que mantuve la boca lo mas abierta que pude. Pasé mi lengua al rededor, comenzando a sentir cierto dolor en la mandíbula. Creo que Rohan notó la tensión, porque sentí su mano sobre mi cabeza mientras me hablaba.

-Relájate, confío en que no vas a morderme- dijo él, sonriendo.

Fue entonces que decidí llevar esto un paso más allá.
Me bajé de la cama, situándome de rodillas frente al miembro completamente erecto. Separé las piernas de Rohan para darme lugar, y me preparé...

Lentamente, fui metiendo todo el largo de aquel miembro en mi boca. Levanté la vista para ver a Rohan, quien ahora no podía parar de gruñir debido al placer.
Tuve que hacer un gran esfuerzo para contener las arcadas en cuanto la punta rozó con mi garganta.
Me detuve unas cuantas veces para toser, hasta que finalmente mi garganta pudo acostumbrarse al intruso.
Subí y bajé repetidas veces, algunas más rápido, otras más despacio. Así estuvimos durante un rato, hasta que Rohan decidió tomar el control.

Tomó mi cabeza entre sus manos, de forma un tanto brusca, y comenzó a moverme arriba y abajo con mayor velocidad. Sentí que no podría aguantarlo mucho tiempo, pero no quise detener a Rohan. Después de todo, yo le había prometido placer, y eso iba a darle.

Sus manos iban cada vez más rápido, y ya me estaba costando un poco respirar. Sentí algunas lágrimas escapar por mis ojos, mientras el enorme miembro se abría paso una y otra vez hacia lo más profundo de mi garganta.
Los quejidos de Rohan se estaban volviendo incontrolables, hasta que finalmente, luego de dar unas cuantas cabeceadas más, él enterró su miembro lo más adentro que podía.

Me aferré con fuerza a sus piernas, apretando los puños, mientras sentía un tibio líquido bajar por mi garganta.
No tuve más opción que tragar en cuanto Rohan sacó su miembro.

-L... lo siento... no quise ser tan brusco- fue lo primero que dijo -. Déjame devolverte el favor...

Mientras yo intentaba recuperar el habla (ya que la garganta me había quedado un tanto resentida), el peliverde me alzó y me recostó sobre la cama.

Comenzó lamiendo mis dos erectos puntitos pechiles, cosa que sorprendentemente tuvo un increíble efecto sobre mí. Básicamente casi me vengo con tan sólo una lamida de pezones...
Pero él no se detuvo ahí. Continuó bajando por mi abdomen y mi vientre hasta llegar allí, a esa zona sensible que ya todas conocen...

(Y si no la conocen... ¿¡qué diablos hacen leyendo esto!? ¡Vayan a jugar con sus barbies o algo así!)

Cuando su cálida y húmeda lengua pasó por ahí, sentí un placer un tanto difícil de explicar. Fue como si una oleada de agradable calor subiera desde allí hacia el resto de mi cuerpo.
Rohan empezó a lamer cuidadosamente, formando círculos alrededor de la zona, mientras se tomaba el atrevimiento de introducir un dedo en mi cavidad. Para ese punto, yo apenas podía contener mis gemidos...
Y cuanto yo más gemía, más intensas se volvían las lamidas del peliverde.
Luego del primer dedo, vino otro, y otro más. Sentí que no aguantaba más, sabía que iba a correrme, y aunque quería que este momento durara un poco más, no pude contenerme.
Sentí múltiples oleadas de calor y placer recorrer mi cuerpo, al tiempo que sonoros gemidos abandonaban mi boca.

Rohan se levantó para mirarme a la cara, y quedó notoriamente satisfecho al ver que había logrado su cometido.

-Sabes, me encantaría darte otro beso... pero me da un poco de asquito- le confesé, mirándole los brillosos labios.

Él se rió con ganas, y tomándome las mejillas con sus manos, me plantó un beso (sí, con lengua y todo).

-Vas a tener que acostumbrarte- me dijo, picaronamente.

Ambos reímos mientras él se tumbaba en la cama a mi lado.
Había sido un momento maravilloso, a pesar de todo lo que había estado pasando últimamente. No me había sentido tan bien en años, y nunca antes me sentí tan protegida como cuando el brazo de Rohan pasó sobre mí, aferrándome en un fuerte abrazo. Con él a mi lado, me sentía completa.
Fue en ese momento en el que verdaderamente me di cuenta que era con Rohan con quien quería pasar el resto de mis días. Definitivamente.

-¿Rohan?- le pregunté.

Él apenas contestó con un gruñido. El bastardo ya se estaba quedando dormido.

-Yo... ¿te amo?- solté, en un murmullo, un tanto insegura. Estaba convencida de queél no me había oído, pero...

-Mhm... tambi... te..- comenzó.

-¿Qué?

-Que también te amo, (T/N)- fue lo último que dijo antes de quedarse definitivamente dormido.

---------------------------------------------------------------------------------------------------------

Primero, un hecho importante: escribí este lemon escuchando "Ding ding dong song" para inspirarme...

Segundo, lxs quiero mucho a todxs, gracias por seguir leyendo a pesar de todo, y perdón por no actualizar.

En serio, lo digo y lo repito: tengo lxs mejorxs lectorxs de la comunidad. ♡♡♡

Bueno eso es todo, el que entendió entendió y a pesar de todo voy a seguir escribiendo Personaje×Rayita femenina porque yolodigo. Aunque algún día tal vez haga un Rayito para variar...

Btw espero que estén bien con esto de la cuarentena, recuerden quedarse en sus casitas, lavarse las manitos y nada de andar teniendo relaciones sersuales en la vida real! Al menos no hasta que se fallezca el covid este.

Espero que les haya gustado esta cosa cringe y asquerosa que escribí. Tercer lemon que escribo en la vida. Y se ponen cada vez peor... debería dejar de escribir lemons...

Adiós, Kai-kun se retira (???

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top