Narra Anson:

Han pasado algunos días y seguimos en una cabaña que apesta a perros; pero con el tiempo me he ido acostumbrando, sobretodo cuando veo sonreír a Charles. Él es un sueño, se encarga de que todos en la manada estén complacidos y desde que llegué, no se ha quejado ni una sola vez; este lugar es tan diferente del castillo de mi padre.

- ¡Anson! Hay algo que no te he podido decir.

- Hablemos en mi habitación.

Subimos con Gun, soy consciente de que él no me hace perder mi tiempo, siempre que me pide hablar, es porque es algo sumamente importante. Sin embargo, no esperaba escuchar que aquello se relacionaba a uno de los vampiros de Neil, por cierto, maldito vampiro como lo odio, pero aquel dato fue impactante.

- ¡No me mordió! Los otros tres sí lo hicieron, en los puntos más sensibles de mi piel, querían causarme gran dolor.

- ¿Quién era? ¿Conoces su nombre?

- No lo sé, pero es el único que tiene cara de buenos amigos... Oh, creo que es el chico bien parecido, su mano derecha.

Rápidamente recordé de quién se trataba, su nombre es Zee Pruk, es verdad que es el único que no se ve que sea malo y es el más educado de todos. Apesar de su expresión dura como piedra, realmente parece que jamás ha lastimado a nadie, aunque eso no importa, sigue siendo parte del enemigo.

Salimos de la habitación y lo primero que encontré fue un gruñido de parte del idiota de Off, siempre hace lo mismo cuando me ve demasiado cerca de Gun. Y la verdad es que ha sido divertido hacer comparaciones de fuerza y destreza, ya varias veces le he metido una buena paliza; además, el único razonable en esta casa en Charles.

- Oye, deja de pelear con Anson.

- Quítalo de mi vista, o le arrancaré la cabeza... Y que no se acerque a Gun.

- Pues yo llegué primero imbécil. Acéptalo y sufre por ello.

Todo eran juegos y diversión hasta que vi al alfa llegar con mi hermano en brazos y no se veía bien; no sé qué le hizo, pero su tiempo ya se agotó. Durante el día, vino Gun para hablar conmigo y le di la opción de irse con nosotros; sin embargo, dijo que ya había encontrado a su destinado y que lo ama con inmensa locura.

- Entonces, te deseo toda la felicidad del mundo; pero ya no puedo ver a Gulf así. Acaba de desmayarse frente a mis ojos, si no hubiera estado, se habría lastimado.

- Te entiendo, jamás imaginé que el rechazo del destinado podría hacer tanto daño.

- ¡Ayúdanos a escapar!

- ¿Ayudar? ¿Cómo?

- NuNew, tiene el mejor oído de la manada; por favor distráelo, que no nos escuche.

- Bien, a las 8:00 pm estaré con él, te daré solo 10 minutos para poder huir.

Asentí en agradecimiento, Gun siempre ha estado ahí cada vez que lo necesitamos; para ser humano, también es el mejor de los amigos que conozco y el más valiente. Exactamente a la hora que dijo, agarré a Gulf y corrí a la mayor velocidad que dieron mis piernas, pero me detuve porque él empezó a llamar al alfa por su nombre.

- No me separes de Mew. - Su voz se escuchaba casi en un susurro.

Entonces lo bajé en el bosque, me quede viendo su rostro y fue cuando lo entendí; revisé su hombro y vi la marca que dejó el alfa de aquella manada. Levanté mi rostro, solo para encontrarme con Neil, sus vampiros y mi padre, ¡Nos encontraron! ¡Ahora sí quisiera que la manada de perros odiosos estuvieran aquí para salvarnos!

- ¡Qué decepción Anson! Eras mi hijo favorito, pero ayudaste a ese fenómeno a escapar.

- Este fenómeno es mi hermano, y no permitiré que lo vendas.

- ¡NO PUEDEN VENDER LO QUE ES MÍO! - Mew llega y se transformó en lobo.

A mi espalda aparece la manada de lobos y casi empiezo a llorar de alegría cuando los vi; sé que el alfa no permitirá que le hagan daño a Gulf y mucho menos que se lo lleven. Empieza una fuerte batalla entre ellos por proteger a mi hermano, hasta que agarraron a NuNew y Neil amenazó con succionar toda su sangre.

- Este chico huele a ti... ¿Es familiar tuyo Mew?... ¿Es tu hermano? ¿Es a quién tu padre rescató de mí?

- ¡Quita tus sucias manos de él! - Dijo Mew al transformarse en humano.

- ¿Acaso no sabe nuestro pequeño secreto?

- ¡Cállate Neil! ¡O juro que te mataré! - Neil se burló de una forma diabólica.

- Ni siquiera cumpliste eso cuando tuve así a tu padre.

El rostro de NuNew se llenó de confusión, parecía que en cualquier momento rompería a llorar; Mew estaba lleno de ira y ahora entiendo porqué nos odia. Aunque eso no fue nada, lo peor vino cuando Charles llegó montando a Mix, ni siquiera sabía que él se convirtiera en lobo, creí que solo era otro destinado como Plan y Up.

- Mira, tu otro hermano está aquí... ¡Qué empiecen las confesiones!

- ¡CÁLLATE NEIL! ¡MALDITO BASTARDO! ¡CIERRA LA BOCA!

- ¿Confesiones? ¿De qué habla Mew? - Preguntó Charles.

- Awwww, la confianza entre hermanos está a punto de romperse.

Entonces Neil, quien seguía amenazando la vida de NuNew, empieza a contar la historia de aquella terrible noche, cuando todos éramos adolescentes. Mew entró en una batalla junto con su padre y otros miembros de la manada; habían atrapado a NuNew y su padre se ofreció a cambio de salvar la vida de su hijo de apenas cinco años.

Mew llora mientras el insensible de Neil le pide que recuerde como su padre le decía que debía cuidar de NuNew incluso con su último aliento. Fue entonces cuando Neil insinuó morder el cuello del hermano menor del alfa, los mismos Mew y Charles se quedaron impactados al ver a otro vampiro salvar la vida de NuNew.

- ¿Zee? ¿Qué demonios haces? ¿Cómo te atreves a arrebatármelo?

- Neil, yo te respeto y lo sabes; incluso cuando fuiste cruel conmigo me callé... Pero, no permitiré que le hagas daño a mi destinado; ¡antes tendrías que matarme!

Todos nos quedamos atónitos viendo cómo Zee tenía entre sus brazos a NuNew, así como cuando Mean protege a Plan y está dispuesto a todo por él. Gulf ya había reaccionado, pero estaba tan preocupado por Neil que ni siquiera podía alejarlo de mi cuerpo; aunque lo más importante fue escuchar a Mew protegernos.

- Son vampiros, así que pronto los echarás.

- Son parte de mi manada ahora; si los tocas, te mataré.

Se transformó en lobo de nuevo, toda la manada hizo lo mismo y en ese instante, mi padre junto con Neil retrocedieron al verse superados en número y tamaño. Ellos mismos nos llevaron de regreso a la cabaña; sin embargo, lo que Zee y yo no vimos venir, es que Mew nos agarraría del cuello y nos pondría contra el muro.

- ¡Quiero escuchar una buena razón para dejarlos vivir... O saber quién quiere morir primero!

- Mew... Lo siento... Yo... No... Sabía... Lo juro... - Traté de explicar con el poco aire que quedaba en mi cuerpo.

- Yo te daré una buena razón... - Intervino Charles. - Si los matas, romperás los corazones de tus hermanos.

- ¡Duerman con un ojo abierto!

Zee y yo nos desplomamos en el piso, tratando de recuperar el aliento cuando Mew nos soltó y nuestras parejas vinieron a ayudarnos, nos levantaron. NuNew se ve muy joven para saber sobre el destinado, pero su corazón le indica exactamente lo que debe hacer; en el caso de Charles, se ve muy dolido y decepcionado de mí.

- NuNew, llévalo a la habitación que fue de Gulf; Charles, tu también lleva a Anson a la suya... Y en cuanto a usted, señor pareja del alfa, vendrá a dormir en mi habitación, ya está arreglada para tu comodidad.

- Mew... - El alfa cargó a mi hermano y se fueron con una sonrisa.

- Ven, te mostraré tu habitación. - NuNew se llevó a Zee.

- Vamos Anson, pronto saldrá el sol.

Primero le pedí que por favor me diera un poco de sangre, porque ha pasado el tiempo necesario para sobrevivir sin beber, por eso no pude defenderme del alfa. Charles me llevó a la cocina, me sirvió un vaso con sangre y la bebí como si fuera el vampiro más sediento del mundo, en ese instante, empecé a recuperar mi fuerza.

Caminamos con Charles de regreso a mi habitación, pero él no me dejó tomar su mano y estaba casi a un metro de mí, esto no puede ser bueno. Él abrió la puerta, sin embargo, al ver su rechazo, lo agarré del cuello, obligándolo a que entrara conmigo y cerré con llave para evitar que él se vaya, porque tenemos que hablar.

- Estás enojado conmigo y lo entiendo...

- No, tú no entiendes nada; ¿acaso ser un vampiro te hace olvidar que tienes un destinado?

- ¿Qué dijiste? - Me sentí indignado porque comprendí su ofensa.

- Que tienes sangre fría Anson, ni siquiera pensaste en mí cuando escapaste, estoy seguro... - Lo besé para callarlo, porque sí pensé en que volvería por él cuando dejara a mi hermano en un lugar seguro; y Charles me llevó a la cama.

- Eres mío Anson, y no tienes permiso de volver a escapar de mi lado.

Por primera vez desde que Charles y yo intentamos estar juntos, estoy de acuerdo en que me haga suyo, más si eso me garantiza no perderlo...