El día casí perfecto, a excepcion de un cielo un poco nublado, un día fresco, y con probabilidades de lluvia, y una mierda, ¡Ben Parish me ha invitado a salir!, no hay mejor día que este.

Punto final y listo, digo antes de poner mi nombre en mi reseña. Ya le he pedido permiso a mi paá y no se ha negado, claro tuve que decirle con quien y cuanto tiempo tardaría, dos horas y media, le pedí sin estar segura, ya que nunca le pregunte a Ben cuanto tiempo tardaríamos, sin embargo acepto y eso es lo unico que importa realmente.

-Yo las llevo, andando guarda tus cosas- Me dice Ben al mismo tiempo que se levanta de su asiento, le entrego mi reseña y él se marcha rumbo al escritorío de la profesora, siento el nudo de nervios crecer a escalas inimaginables e intento mantener la respiración a un ritmo normal. Es tan dificil con Ben actuando como un caballero conmigo.

Guardo mis cosas a las prisas. Ben quien tiene todo ordenado desde que comenzamos a trabajar, no necesita guardar nada, por lo que rapidamente se cuelga su mochila a la espalda, yo hago lo mismo.

-Gracias profesora- dice Ben en voz alta una vez que estamos casi a la altura de la puerta de entrada a punto de marcharnos -hasta luego.

-Hasta luego- digo yo tambien.

-Hasta luego chicos... y joven Parish, no lo quiero ver de nuevo por aquí.

Comenzamos a caminar, y una pregunta se formula en mi mente, sin embargo no puedo contenerla por mucho tiempo.

-¿Acostumbras a pasar mucho tiempo en detención?

-No- se ríe - es solo que la señorita Smith es amiga de mi madre y usualmente se cuentan todo.

-¡Oh!, lo siento, hice que te dieran detención y seguro le dira a tu mamá de esto- me disculpo sintiendome realmente mal.

-¿que?, no, no te sientas mal, esto ha sido culpa mía por lanzarte ese papel- de pronto la idea de que se arrepienta de haber lanzado el papel me hace sentir fatal.

-si, quizá no debiste lanzarlo- dijo bajando la mirada inevitablemente.

-No, eso estuvo genial, de otra manera, creo que no habría tenído pretexto para inivtarte a salir- me dice sonríendo. Una enrome sonrísa se forma en mi rostro mucho antes de que yo sea conciente.

-Oye damé tu mochila- se la paso aún sintiendome dentro de un sueño -yo la llevo.

-Gracias- le digo caminando a su lado y acomodandome un poco el cabello.

Cuando llegamos a su auto me abre la puerta y me deja ocupar el asiento del copiloto, deja mi mochila en el asiento trasero y sube al asiento del chofer.

Nunca he visto a alguien manejar tan confiado como lo hace Ben Parish, tan bien, me gusta hasta su forma de conducir. Para ser exactos, la verdadera pregunta aquí no es que es lo que me gusta de Ben Parish, sino que es lo que no me gusta de él (respuesta obvia: NADA). Le observo manejar por no se cuanto tiempo, él de vez en cuando me sonríe y me dice quien sabe que cosas a las que yo asiento como respuesta.

La velocidad disminuye en algun punto y Ben se estaciona, entonces se que podemos bajar. Vuelve a abrirme la puerta.

-podemos dejar tu mochila adentro- me dice.

-claro, no hay problema- le respondo, despues de todo tengo mi cartera y telefono a la mano siempre, por cualquier cosa.

-bien vamos- caminamos un rato hablando de muchas cosas, como su hermanita y mi hermano, le cuento como es Sammy y me siento tentada a preguntarle si recuerda aquella experiencia donde ambos dijimos que nuestros respectivos hermanos habían nacido en fechas casi iguales. Sin embargo lo descarto cuando Ben cambia el tema radicalmente al detenerse frente a la tienda de deportes.

-¿Te gustan los deportes Cassie?- me pregunta, me veo tentada a mentir y a decirle que que sí, pero la verdad es que soy pesima para ellos y bueno, él es Ben Parish, no puedo mentirle.

-No se me dan- admito con tono avergonzado.

-Lo he notado, "Sullivan, si no mejoras te enviare a repetir la materia", es asombroso, eres la primera chica que conosco que podría repetir deportes.

-eres cruel- le digo riendo un poco.

-yo podría darte algunas clases, se me dan excelente todos los deportes.

-y no lo dudo- Ben ríe.

-Bien, ¿vamos por ese helado?- me dice posando su mano en mi hombro, casi siento como la respiración se me escapa al sentirlo.

-claro- respondo tratando con todas mis fuerzas de que la voz no me falle.

Un relampago estruendoso retumba en el cielo al mismo tiempo que el sonido de la lluvia al soltarse de un momento a otro, se hace notar.

-¡Oh mala suerte!- dice Ben mirando al techo de cristal, hago lo mismo y veo las gruesas gotas resbalarse.

-Helado y lluvia no son muy buena convinación- le digo sonriendo.

-Entonces será Café- dice tomandome de la mano para tirar de ella mientras caminamos hacía el starbuks más cercano.

Nos sentamos en una mesa, Ben aún lado de mi. Nos atienden rapido, ambos pedimos capucchino y brownies de postre. Me cuenta de la escuela y lo que pretende ser despues de graduarse, le cuento mis planes y le hablo de Liz mi mejor amiga. Me pregunta si es mi unica amiga, a lo que repondo que es la unica que me comprende del todo pero que tengo algunas otras amigas tambien. Terminamos de comer y retiran todo de la mesa.

El cielo no ha dejado de retumbar, an algun momento enmedio de nuestra platica, cae un rayo demaciado cerca produciendo un corte de luz.

Me asusto y salto de mi asiento de inmediato, golpeandome la rodilla, no veo nada. Siento unas manos tomarme de la cintura y encuentro su camisa, a la que me aferro con mucha fuerza con ambas manos.

-Tranquila- me dice la voz de Ben Parish. Escucho a las demás personas parlotear a nustro alrededor.

Busca mi mano a tientas antes de encender la linterna de su celular para buscar mi silla. Una vez que la encontramos me siento. Completamente avergonzada por semejante brinco y por la actitud que tomé.

-Lo siento- le digo.

-descuida, será mejor que te lleve a casa, tus padres podrían preocuparse.

-Bien, vamos- me toma de la mano para salir de ahí iluminando el suelo con la linterna de su celular.

y depronto la luz vuelve, al parecer la planta de almacenaje de energia para emergencias tuvo un fallo y por eso no funciono como debería, o eso escucho al guardia explicarle a una señora. Noto que apesar de que la luz volvio Ben no ha soltado mi mano, lo que me hace volver a la sencación de los terremotod se mi estomago, a decir verdad así me he sentido toda esta tarde, desde que he compartido más de la mitad de mi día con Ben Parish.

Nos detemenos al notar que el agua cae a cantaros del cielo y la cortina de agua que cae es tan espesa que casi no permite ver al otro lado.

-Debí dejarlo adentro- dice refiriendose al auto, ya que lo dejo en la parte del estacionamiento al aire libre.

-estamos atrapados- le digo divertida, riendome de la situación.

-habrá que esperar un poco- dice tirando de mi mano para sentarnos en una banca.

pasa media hora en la que platicamos y la lluvia no cede ni un poco. Solo quedan quince minutos para que mi tiempo limite se ágote y comienzo a sentirme nerviosa, no quiero que mi padre me castige por si Ben me invita a salir alguna otra vez.

-Tendremos que mojarnos- dice viendo el reloj y sonriendome.

-tendremos que...

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No me negaran que Nick tiene una sonrisa encantadora :3 jajaja