SAMY

Autora: Clumsykitty

Fandom: MCU

Pareja: Stony inicial, OC/Tony final (yep).

Derechos: pfff.

Advertencias: esto comienza como un Stony que se va al caño por culpa de la Guerra Civil. Lo siento, quiero experimentar como la loca que soy. Opsie Daisy.

Pero gracias por leerme.

Un pensamiento.

Comenzó igual que lo hacen las grandes historias, con un inicio de lo más desastroso en el que las posibilidades de éxito estaban en su contra, con villanos tratando de destruir el mundo que ambos amaban. Luego vino una calma que les permitió acercarse, conocerse un poco más y finalmente encontrar aquello que sus corazones necesitaban. Vinieron las citas, los romances a la antigua por parte de Steve, las locuras por parte de Tony. Después de las obligadas peleas, apareció un anillo de compromiso en ambos, con una boda en la que sus amigos les acompañaron antes de separarse momentáneamente al gozar de un período de paz, mientras ellos estaban en su luna de miel. Luego entonces vino lo de Ultrón, por el cual estuvieron a punto de separarse. Tony había encontrado a un nuevo Vengador al que fue a visitar mientras Steve esperó en el nuevo complejo de los Vengadores.

Sin esperarlo, ese muchacho talentoso que había adquirido las habilidades de una araña, se convirtió en su primer hijo. Peter. La cuestión doméstica familiar les tomó desprevenidos más sortearon esas olas con bastante holgura, disfrutando de ser una familia poco común. Entonces, la cosquilla por los hijos vino a Tony, proponiéndole a Steve el tener un hijo más, esta vez de ambos, que para eso el millonario conocía a los mejores talentos de la medicina. Una mujer dispuesta, las debidas precauciones y meses más tarde, Sarah María llegaba a sus vidas. Con sus hermosos cabellos rubios que se ensortijaban en las puntas con sus ojos castaños y la risa más hermosa que sus padres hubieran visto en nena alguna. Las fotografías como las pinturas de Steve jamás tuvieron mayor tiempo de abundancia que aquél, hasta de que un día, una misión en Lagos y la presencia del Secretario de Estado viniera a derrumbar sus sueños.

No hubo momentos más angustiosos que la batalla en Alemania y el rompimiento en Siberia. Tony se había quedado con Peter y Sarah María por obvias razones, tratando de calmar la furia de su hijo por lo sucedido con Steve. Él ya no quería ver más a su padre, tenía el corazón roto de haberle visto elegir alguien más que su propia familia, estaba decepcionado de Clint y Scott en quienes pensó por ser padres tendrían más cabeza en sus decisiones. La pequeña Sarah María dijo sus primeras palabras mientras el capitán permanecía refugiado en Wakanda y Tony lidiaba con Naciones Unidas, la comisión de los Acuerdos de Sokovia y un mundo que pedía explicaciones sobre lo sucedido, todo el tiempo exigiéndole respuestas a él y solo a él.

Se buscaron, por supuesto, a escondidas en un lugar entre Europa y Asia, ayudados por T'Challa. Tony le suplicó que firmara los Acuerdos, con ello podría volver a estar con sus hijos que le necesitaban... regresar a sus brazos. Steve se negó, una vez más, poniendo entre ellos la seguridad de Bucky. Fueron tres veces las que se vieron, al igual que Pedro con su Mesías, el millonario escuchó las tres negaciones hasta que en la última rompió en llanto, despidiéndose para siempre del capitán porque ya no podía más. El único papel que el capitán tendría que firmar ahora serían los papeles de divorcio. Sarah María preguntaba por su padre, porque le recordaba perfectamente, corriendo a su estudio que Tony más tarde cerró. La tristeza reinó en su hogar, Peter casi no salía de su habitación, su hija dejó de sonreír porque ya no había papá Steve, sus noches fueron frías con el llanto empapando la almohada donde ahogó su dolor.

Era todo un alivio que su matrimonio hubiese sido olvidado a los ojos del mundo porque así no tendría que dar más explicaciones. Ya estaba harto de tener que pararse frente a las cámaras y micrófonos para dar sus condolencias, pedir disculpas por accidentes que él no había provocado pero no hubo nadie más a quien culpar. Desayunaban, comían y cenaban en medio de un silencio amargo, evitando decir algo que les recordara la bella época antes de que la Guerra Civil destruyera sus vidas para siempre. Sarah María adoptó una pasión inusitada por los búhos, en buena parte por las lecturas que Peter le hacía, usando de referencia a Harry Potter. Quería un búho, una imagen auténtica de una especie en particular que solamente habitaba en una región comprendida entre el Este de Alaska y la frontera de Canadá con Groelandia. Más difícil no podía ser el asunto.

Pero Tony se lo concedió.

Hizo lo que Rhodey tanto le rogó que hiciera desde un principio, renunció a los Vengadores, dejó el complejo junto con Visión –quien tomó un permiso- y marchó con sus hijos hacia Canadá, dejando atrás un lugar que solamente traía tristezas. Peter y Sarah María se quedaron en la ciudad, mientras que él viajaba a un pueblo que ni siquiera estaba en los mapas de lo pequeño e inaccesible, pero que tenía parte del bosque donde habitaba el búho de Sarah María, o como le había apodado Peter, Samy. Buscando el tal Samy era que terminó en aquel restaurante porque ya había dado vueltas sin poder encontrar la bendita ave, no quería volver sin la fotografía, a dos segundos de llamar su armadura para buscar el búho en cuestión cuando apareció Hans Henkel con su sonrisa cínica y sus palabras atrevidas, ofreciéndole llegar donde los Samy.

Ahora estaba con unas pesadas botas, jeans, abrigo con capucha, guantes y su cámara enfocando un hermoso espécimen Samy con una ligera nevada. Quería que el búho mirase hacia la lente para gozo de su hija pero no quería asustarlo, estaba encaramado sobre un pedazo de tronco mirando sus patas con atención. Hans se acercó sigilosamente como un guardabosque podría hacerlo, arrodillándose para llamarle con un trozo de pan. Samy giró su cabeza y Tony disparó la cámara que luego bajó, escuchando al hombre hablar con ternura al ave. Fue extraño pero en esos precisos momentos, el millonario le envidió, quiso tener una vida así, tan tranquila sin preocupaciones y rodeado de una naturaleza que reconocía los buenos corazones. No Acuerdos, no Vengadores, no Capitán América y sus ideales aferrados a un pasado que ya no volvería.

¿Podríamos volver a comenzar en este lugar?