Después de que Ron se fue un poco cabizbajo ambos chicos se quedar un rato mas a un lado del lago, asimilando todo lo que había pasado.

-¿En verdad me quieres? -Pregunto la castaña temerosa de que no fuera sincero.

-Creo que nunca había estado tan seguro de algo en mi vida Hermione. -Le contesto el rubio mientras le acariciaba tiernamente la mejilla hasta llegar a la barbilla de la chica y sostenerla delicadamente. -Querer es poco, yo te amo. No sé desde cuándo o como paso, pero simplemente ya no puedo vivir sin ti.

Hermione está emocionada, nunca imagino que podía sentir tanta felicidad al mismo tiempo, su corazón latía frenético de la excitación de sentirse correspondida, había deseado  tanto ese momento, pero lo había  visto  tan lejano, tan irreal e imposible que simplemente no podía creerlo, pero era real, tenía que serlo el calor que sentía emanar de Malfoy, su aroma y el sabor que aun tenía en sus labios eran reales.

La castaña aun sostenía en una de sus manos la gargantilla que tan inexplicablemente como inicio la música y el resplandor, de igual forma ceso, pero en eso momento parecia no importarles mucho lo que ocurría a su alrededor, lo único importante en ese instante era que se tenían uno al otro. Se miraban a los ojos tratando de transmitir todo lo que sentían en ese momento, y perdidos en ese trance sus labios se juntaron nuevamente en un beso suave, lleno de amor y complicidad, pero poco a poco se transformo en un beso pasional que los dejaba sin aliento ambos se dejaban llevar.

Permanecían con los ojos cerrados, prologándose caricias, Malfoy sostenía con una mano la cintura estrecha de la chica y con la otra acariciaba su espalda, mientras Hermione con sus manos tras la nuca del rubio le acariciaba el cabello con la mano que le quedaba libre, pues aun mantenía firmemente en sus dedos la joya regalo de su ahora novio.

Hermione se sentía en las nubes perdida en sus emociones, deseando jamás separarse de nuevo de Draco, aun con los  ojos cerrados comenzó a escuchar nuevamente la música y el latir de la joya que sostenía en su mano, sintió como si cayera al un profundo basio, la sensación en su estomago la hizo sentir como si se hubiera desvanecido, abrio los ojos lentamente con la sensación de haber despertado de un sueño y sus ojos desenfocados no le permitían ver en donde se encontraba.

Abrió los ojos por completo, parpadeando varias veces intentando observar donde se encontraba, parecía estar recostada en algún lugar que inicialmente no reconocía, débilmente aun escuchaba la hermosa música. Poco a poco se reincorporo tratando de averiguar dónde se encontraba, y se vio a si misma vestida con pijama, miro confundida a su alrededor y por fin cayó en la cuenta que estaba en su cama, no entendía como había llegado hay,  a sus oídos aun llegaban las notas suaves que emitía la gargantilla, por lo que corrió la cortina de su cama y se levanto en busca del cofre, se sentó en su cama después de encontrarlo en su baúl, corrió de nuevo la cortina para abrir el cofre sin ser vista.

Hay estaba en todo su esplendor la exquisita joya brillando y emitiendo pequeñas palpitaciones como latidos de un corazón, hay estaban de nueva cuenta agolpándose en su pecho todas las sensaciones que esa demostración de belleza provocaba en ella. De nueva cuenta estaba ajena al tiempo, solo sabía que la música seso y reacciono de repente del sopor que le provocaba el embeleso de sentirse conmovida. Toco su mejilla y encontró la lagrima cristalina que rodaba por su mejilla, testigo de lo que acababa de ocurrir.

Hermione se derrumbo en ese momento, cerro de golpe el cofre y lo apretó con fuerza contra su pecho, y comenzó a llorar desconsolada, tratando de acallar su llanto con la almohada para que no la escucharan. Hasta ese instante cayó en la cuenta de que todo había sido un sueño. Posiblemente el más hermosos sueño que hubiera tenido en toda su vida, pero al final, era solo un sueño. Era tanto su amor que su mente le jugó una cruel broma y soñó que su gran amor le correspondía.

¿Por qué lloras Hermione? Se pregunto a ella misma con reproche, y con  el dorso de su mano limpio las lagrimas de su rostro y se enderezo con cuidado de la cama, abrazando aun el cofre con fuerza, -deberías estar feliz al menos en sueño tu amor es correspondido, es lo mas cercano a la felicidad lo que viviste a través de ese sueño. -Pensó la castaña y corrió las cortinas, se levanto por fin de la cama llevando con ella el cofre para acomodarle en su lugar en el baúl, hasta ese momento recordó que ni Lavender ni Parvia se habían levantado al escucharse la música que emite la gargantilla, eso le pareció familiar, pero no le dio importancia y se dirigió al baño para darse una ducha. Tenia pensado ir a la biblioteca para investigar a Sebastián Lauper y mas información sobre la gargantilla.

Bajo el agua tibia Hermione se relajaba, suspiraba ante la satisfacción que le provocaba la caída de agua sobre su piel desnuda, rozo con su mano su mejilla hasta sus labios recordando el fugaz beso que le dio Malfoy de despedida la noche anterior y eso la hizo estremecer y sonreír. Pero inevitablemente la sonrisa se borro de sus labios, no solo esos pensamientos le resultaban familiares, por alguna razón tenía la sensación de haber vivido eso. Trato de no hacerle caso a esa sensación y termino de bañarse, salió del baño y se cambio.

Tomo su tiempo para maquillarse, se sujeto el cabello en una coleta alta y dejo algunos mechones sueltos que enmarcaron su rostro, cuando termino de cambiarse y arreglarse se miro frente al espejo y quedo atónita, inconscientemente se había arreglado exactamente igual que es su sueño, la falda corte negra el suéter de cuello alto rosa, las medias en sus piernas y los zapatos en el mismo color del suéter, darse cuenta de eso le provoco un leve estremecimiento, tomo su mochila y metió en ella algunas cosas que ocuparía en la biblioteca y fue a su baúl para sacar el cofre y meterlo también, de nuevo estaba esa sensación de reconocimiento invadiéndola.   

Bajo las escaleras rumbo a las común y lo que vio la dejo congelada en el ultimo escalón de la escalera de piedra se quedo parada contemplando la escena que se desarrollaba frente a sus ojos, no era algo similar, era exactamente igual a su sueño, no podía seguir negando que algo pasaba, era como si su dia se estuviera repitiendo, Ginny y Harry estaban sentados juntos en un sillón tomados de la mano platicaban en voz baja y Ron y Neville jugaban ajedrez mágico, todo era igual a su sueño, tan exacto que le causaba escalofríos.

Sabía lo que seguía a continuación y decidió continuar haciendo lo mismo que en el sueño. Saludo a sus amigos lo más normal posible, a pensar de la confusión que sentía, le correspondieron el saludo y la castaña les pidió que fueran a desayunar al gran comedor, y también les aviso que tendría que ir  a la biblioteca a investigar algunas cosas. Todos estuvieron de acuerdo y bajaron a tomar el desayuno.

Todo parecía normal de no ser porque Hermione era la única que parecía darse cuenta que su sueño se estaba haciendo realidad, pero entonces si eso pasaba, sabia en que iba a terminar las cosas respecto a Draco y ella, su corazón dio un salto de alegría, misma que no duro mucho cuando recordó que todo inicio por la conmoción de escuchar la música. Ahora pensaba que quizás todo se debía a que la joya los influyo de algún modo y por eso Malfoy había expresado un repentino amor que probablemente no sentia, como consecuencia de la magia que contenía la gargantilla. Pensaba que era posible que la joya en  sus manos hubiera servido como amplificador de sus sentimientos y los transmitiera al Draco influyendo en sus sentimientos de igual manera. Pero como comprobarlo. -se preguntaba afligida Hermione.

-Como te fue ayer en tu clase -pregunto Ginny. Hay estaba la conversación sobre las clases de quidditch, penso para si misma la castaña y decidió contestar de igual manera.

-Pues contra todo pronóstico me ha ido muy bien.

-Te felicito Herm, es grandioso, así cuando nos visites en la madriguera para las vacaciones, podremos jugar todos Quidditch, va a ser fabuloso. -comento Ginny con emoción y Hermione sonrió, sabía que diría exactamente eso.

-Sería fantástico. -Contesto la castaña tratando de cortar un poco la plática, sabía que se acercaba un momento importante y se sentía cada vez más nerviosa. Miraba disimuladamente al lugar donde estaba sentado Draco y Pansy, la morena parecía sorprendida por algo que le estaba platicando el rubio. Malfoy parecía tranquilo y después de unos  minutos se paró de la mesa elegantemente y comenzó a caminar. Hermione nerviosa voltio su mirada, para no verlo acercarse y tomo aire para tratar de calmarse, agradecía que sus amigos estuvieran distraídos con sus respectivas platicas, así no notaria que ella se encontraba sumamente nerviosa y con sus mejillas de un tenue color rosa.

-Buenos días. -saludo el rubio.

-Buenos días Draco -contesto  la castaña aun más nerviosa y todo continuo como ella lo recordada, su amiga pelirroja se limito a sonreír y Harry saludo con un movimiento de cabeza, igual que Neville, Ron enojado se limito a fruncir el ceño, lo siguiente era…. - ¿Te puedo ayudar en algo? -pregunto por fin, pero su voz se escucho muy baja por los nervios que intentaba contener.

-Si quería hablar contigo unos minutos si es posible. -dijo el rubio como si siguiera el guion de una obra que Hermione ya había visto.

Hermione tenía que decidir en ese momento lo que quería, sabía que tenía que hacer con toda exactitud para terminar siendo novia de Draco, tenía la certeza de que eso era lo que más anhelaba en el mundo su amor, ser correspondida, pero estaría dispuesta a tener presente la duda, de que fuera gracias a la influencia de la Joya por la que el rubio le correspondería, quizás el chico solo había buscado invitarla a salir porque aun estaba agradecido con ella por haberlo salvado, tal vez solo quería ser amable y la gargantilla había desatado algo que realmente no deseaba hacer Draco.

 -Si está bien -contesto por fin la castaña, tomo su mochila y se la entrego a su amiga pelirroja con una sonrisa un poco triste -Te puedo encargar un momento mis cosas Ginny.

-Claro Herm. -Le contesto confundida la pelirroja por la actitud y la petición de su amiga, no era común que su amiga encomendara a los demás sus artículos de estudio. 

-Gracias Ginny, la recojo un poco más tarde, nos vemos depues chicos. -dijo despidiéndose de sus amigos y caminando al lado del rubio.

Hermione caminaba lentamente a un lado de Draco, iba inmersa en sus pensamientos, sabia a donde los llevaría esa caminata, así que se limito a seguirlo, suspiro sabiendo lo que se avecinaba, en ese momento ya estaban a la orilla del lago y en unos minutos más sabría por fin que hubiera pasado si la gargantilla no lo hubiera influido.

-Tú dirás en que te puedo ayudar Draco. -dijo la chica tratando de mostrarse tranquila aunque sentía un gran vacío en su estomago debido al nerviosismo.

-Quiero invitarte a salir esta tarde para tomar algo. -contesto por fin el rubio.

-Pensé que tenías planes para hoy. -continuo con el dialogo la castaña.

-Así era iba a salir con Pansy, pero tiene que hacer un trabajo y no podrá acompañarme, y no me apetece ir solo. -contento Draco, para el no paso desapercibido como la castaña comenzó a sonrojarse ligeramente, pero tenía un semblante raro en el rostro, como de preocupación o tristeza. Lo que interpreto como rechazo. -Pero no te preocupes si tienes planes yo entiendo. -continuo diciendo tratando de eliminar la tención.

-No tengo planes, solo pensaba ir un rato a la biblioteca a investigar sobre el cofre y la gargantilla, encontré nuevas cosas. -dijo melancólica la castaña, había comprobado que la joya podía influir en las emociones y sentimientos de los que estaban cerca.

-Entonces si quieres salir conmigo. -Pregunto el rubio esperanzado

-Me encantaría Draco. -Después de todo podrían ser buenos amigos, aunque Malfoy no pudiera corresponder sus sentimientos pensaba la castaña.

-Perfecto, entonces quieres que vayamos de una vez o prefieres que sea por la tarde.

-Me gustaría quedarme un momento aquí me relaja ver el lago y que te parece si salimos mejor en la tarde, si quieres nos vemos en el comedor a las tres. -Hermione necesitaba reponerse del impacto por todo lo que paso.

-Me parece bien, te puedo acompañar un rato. -Pregunto el chico mientras Hermione se sentaba en una banca bajo la sombra de un árbol.

Hermione lo miro sorprendida, no pensó en que Malfoy la quisiera acompañar, su corazón dio un vuelco de felicidad y le sonrió como toda respuesta haciéndole lugar para que se sentara.

El rubio se sentó a un lado de la castaña, estaba buscando la manera de hablarle de sus sentimientos, esperaba contarle cuando salieran, pero este parecia ser un buen momento para empezar. Estaba tomando valor, cuando voltio a ver a la chica y pudo ver una pequeña lagrima que corrió por su mejilla.

-¿Estás bien Hermione? -Le pregunto preocupado el rubio mientras se acercaba más y tomaba tiernamente y con cuidado una de sus manos para intentar reconfortarla, como lo hizo ella cuando recordó a su padre.

-Si es solo que a veces las cosas no resultan como queremos. -contesto Hermione limpiándose la lagrima con la mano y sonriendo de manera melancólica, se estremeció un poco cuando el chico tomo su mano, pero no la quito. -No me hagas caso, son tonterías.

-No pueden ser tonterías algo que provoca que llores. -Le dijo tiernamente Draco y sin pensarlo la abrazo. -Puedes contar conmigo, se que no he sido bueno en el pasado y que he cometido muchos errores, pero estoy intentando con todas mis fuerzas cambiar, tú me has ayudado mucho, y  quiero pedirte perdón por todo los insultos y los malos tratos, lo siento mucho en verdad, por eso ahora lo menos que puedo hacer por ti es tratar de ayudarte. 

Las palabras de Draco conmovían profundamente a Hermione, eran casi las mismas palabras que recordaba en sus sueños, aunque diferente concepto, estaba feliz de que el rubio le pidiera perdón y le ofreciera su ayuda, al menos podrían ser buenos amigos y asi podría estar a su lado.

-Gracias Draco, no necesitas pedirme perdón, hace mucho que lo hice y estoy muy orgullosa de ese cambio tuyo, me doy cuenta cuanto has cambiado y me alegro mucho por ti. -Dijo con toda sinceridad la chica. -Pero no te preocupes estoy bien, solo es un poco de nostalgia, han pasado tantas cosas que a veces llegan a pesar un poco, pero no es nada importante, de verdad no te preocupes. -mintió la castaña, prefería la amistad de Draco, que su compasión por eso no quería que se enterara de sus sentimientos, no quería que la viera con lastima.

-De cualquier manera si te puedo ayudar en algo, solo basta que me lo digas. -Dijo con una sonrisa el rubio, saber que la castaña estaba orgullosa de él, lo animaba.

Hermione sonrió sinceramente y beso la mejilla de Draco, que aun la mantenía abrazada. -Gracias Draco, lo tomare en cuenta.-dijo la chica, mientras se veían a los ojos, y como un detonante  ambos chicos comenzaron a acercar más sus rostros para fundirse en un beso.

-Pensé que habías dicho que no salías con él. -Dijo una voz alterada por el enojo y la indignación, lo que hizo que se separaran sobresaltados, Draco deshizo el abrazo y Hermione se alejo un poco, habia olvidado esa pequeña parte del dia, en que cierto pelirrojo celoso, los interrumpió.

Hermione se levanto lentamente de la banca y la rodeo para quedar frente a Ron, Draco la imito y se coloco a su lado a prudente distancia del pelirrojo que tenía la cara roja de coraje y los puños apretados, no lo hacía por miedo, pero no quería poner a la castaña en un dilema.

-Que te ocurre Ron, te divierte espiar a los demás. -dijo con voz tranquila, pero mirando con reproche al pelirrojo.

-No te estoy espiando, solo quería saber si estabas bien. -contesto aun con enojo Weasley

-Ya ves que estoy perfectamente, así que te puedes ir. -la castaña lo miraba fijamente tratando de expresar todo el enojo que sentía en ese momento por el pelirrojo por haberlos interrumpido.

-Eres una mentirosa Mione, dijiste que no salias con Malfoy. -reprocho el pelirrojo.

-No la ofendas Wesley. -Contesto enojado Draco.

-Tú no te metas Malfoy, que no estoy hablando contigo. -dijo el pelirrojo aun mas enojado, acercándose peligrosamente al rubio.

-Basta Ronald. -dijo tajante la castaña mientras se paraba frente a ambos chicos para que no pelearan. -No soy ninguna mentirosa, no estaba saliendo con Draco, pero ya que te interesa tanto saberlo, voy a empezar a salir con él, y no le veo nada de malo, es mi amigo, y no tienes porque meterte en mi vida de esa manera. Te agradezco que te preocupes por mí, pero no te voy a permitir que decidas por mi y que me taches de mentirosa.

- En verdad que no te entiendo Hermione, como te puedes involucrar con este. -solto desanimado el pelirrojo.

Claramente Hermione recordaba esa frace, pero sabia que no terminaría la discusión como en su sueño y eso la entristeció, miro directo a los ojos azules de Ron y las palabras se atoraron en su garganta sin poder salir.

-Cálmate Weasley,  entiendo que estés preocupado  porque es tu amiga, pero te aseguro que no tengo malas intenciones ella también es mi amiga. Lamento profundamente todos los errores que cometí en el pasado, sé que me porte muy mal con ustedes, pero quiero cambiar y te pido perdón, como le pedí perdón a Granger sé que no puedo obligarte a ser mi amigo o convencerte de que de verdad he cambiado, solo quisiera que te des cuenta que no es correcto que trates de esa manera a Hermione por mi culpa. Ella me ha ayudado de muchas maneras, gracias a ella estoy vivo, pero también gracias  a ella estoy empezando de nuevo, jamás le haría daño.

-Pues mas te vale que así sea Malfoy, porque si no te arrepentirás. Yo no creo poder perdonarte todas las humillaciones y los maltratos de todos estos años, yo no soy tan bueno como Hermione, pero te advierto que si llegas a lastimarla, será lo último que hagas en la vida, porque te acabare.

-Por favor Ron, ya Basta. Estoy bien, Draco no me hará nada, deja de ser paranoico, gracias por preocuparte pero no es necesario. -Hermione ya se encontraba desesperada porque esa discusión terminara. -Ya  vámonos Ron, acompáñame a la biblioteca. -solto sin ganas la castaña.

Caminaron algunos pasos, Ron se había calmado un poco y tenía en sus labios una pequeña sonrisa de satisfacción por haber logrado que se alejaran Hermione y Malfoy. Pero no le duro mucho esa sonrisa, debido a que la castaña regreso sobre sus pasos y beso la mejilla de Draco y le dijo -Nos vemos en la tarde Draco, como quedamos. -Le dedico una sonrisa y alcanzo al pelirrojo que caminaba deprisa después de escuchar y ver a la castaña como besaba a Draco quien sonreía de medio lado con arrogancia al pelirrojo.

Draco se sintió decepcionado cuando la castaña comenzó a caminar al lado de Weasley, sentía los malditos celos atacándolo de nuevo, pero todo cambio cuando la vio girar, se acerco de nuevo y los cálidos labios de Hermione imprimieron un beso en su mejilla, la sonrisa que le dedico la chica lo sacudió como si se tratara de un choque eléctrico, no pudo evitar sonreir en señal de triunfo cuando Hermione se despidió y recordó su cita ante la cara de contrariedad y enojo del pelirrojo. 

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-Vamos Ron, no se porque te enojas tanto de que salga con Draco. -Pregunto la castaña un poco agitaba porque casi corría para ir a la par de Ron, que daba largas zancadas debido a su enojo.

-No tolero a Malfoy, es un estúpido hurón arrogante, no me fio de él. No entiendo cómo puedes ser tan confiada y salir con el.

-ahora si ya me hartaste Ronald, eres un terco. -Le soltó enojada la castaña parándose en seco.

Ron reacciono y paro su carrera para girarse y regresar para poder enfrentar a la enojada castaña. -Es que no debes salir con el Hermione, es por tu bien.

-YA BASTA RONALD WEASLEY. -grito fuera de si la castaña. -Esto ya es exagerado, yo nunca me he medito de esa manera en tu vida, has salido con Lavander, Parvia, Alexa, Hanna e incluso con Luna y muy a pesar que no tolero a las dos primeras por chismosas, jamás de he dicho nada, esa siempre a sido tu decisión, así que ahora con qué derecho bienes a decirme con quien puedo a no puedo salir. Además Draco es solo mi amigo y aunque fuera algo mas eso no te tiene por que importar.

-Pero me importa, tu me importas. -Le dijo mientras se acercaba mas a la castaña. -Es que yo aun te quiero.

-No digas tonterías Ron. -contesto aun mas enojada. -hace mucho que tu y yo aclaramos que solo podemos ser amigos, lo de nosotros no funciono. Es egoísta de tu parte que solo porque salgo con alguien más seas capaz de decir tantos disparates. -cuando termino la castaña de hablar se giro y se alejo muy molesta por las palabras y la actitud de su amigo.

El pelirrojo se sentía abatido, Hermione no le creía que aun la amaba y no toleraba que fuera salir con el estúpido de Malfoy, algo tenía que hacer al respecto, necesitaba que el hurón se alejara de ella.