En un pueblo cercano al bosque...

Patty

Sabía que ella había llegado bien, que había logrado persuadir a John, o al menos hizo algo para demostrar que ella estaba diciendo la verdad. Algo muy dentro de mí me lo decía, hace días tenía esa sensación de tranquilidad por su partida, y no era particularmente porque ella era un completo caos, se que ella estaba bien, espero que pueda llevar a cabo todo lo que una vez elaboramos, o que improvise, pero aún así que todo salga más que bien. Únicamente deseaba eso.
Era un día normal en el vecindario, no estaba tan caluroso, era un clima raro, aunque verdaderamente gustoso.
Estaba leyendo un libro que había adquirido mediante una ronda de regalos con todas mis empleadas cuando una ola de imágenes se aparecieron en mi mente, no podía parar de reproducirlas, supe en ese momento que estaba teniendo una visión, comencé a entrar en un estado de pánico, nunca hubiera pensado que tendría otra visión, desde que tuve la última con Emma no ha vuelto a suceder, eso me tenía aterrada.
Trate de calmarme, mientras colocaba una mano en mi pecho, mi corazón parecía a punto de salirse de su lugar, mi respiración cada vez se aceleraba más y más.
Comencé a acercarme a la ventana con pasos lentos, no quería llegar a ella, cuando llegué ahí lo vi, su única víctima, aquel alma que no perdonarían, aquel que sufriría con todo este caos, sin querer comencé a sollozar mientras negaba con mi cabeza repetidamente.
Me aleje de la ventana lo más que pude rápidamente, para luego cerrar de forma apresurada mis persianas, no podría hacer nada, no me quedaba más remedio que esperar hasta que la desgracia llegase.

Trate de sacar esas imágenes de mi cabeza y comencé a pensar en otras cosas.
Sabía que era psíquica pero quizá mi mente me había engañado, puede ser que como estaba tan preocupada por la llegada de Emma al bosque Jood y con ello la llegada de John que mi mente divagó entre mis más oscuros miedos... trataba de convencerme junto con mi intento de explicación, pero sabía que no era así, sabía que las visiones habían sido reales... nunca me equivocaba en estas cosas, gracias a ellas Emma estaba aquí hoy, no podría engañarme de eso, pero no me quedaba más que tratar de mentirme a mi misma.

Sostuve el libro que hace unos momentos atrás estaba leyendo, aleatoriamente lo abrí en una página, en esta decía algo que describía lo que pasaba en este momento...
"Si no puedes hacer nada al respecto, entonces déjalo ir.
No sea prisionero de cosas que no puedes cambiar."
No había nada más que agregar, no podría hacer nada, eso me tenía mal yo soy una persona que ama ayudar a los demás, quizá no lo demuestre demasiado pero me gusta ayudar, quizá si me esforzaba un poco más, podría pensar en algo para poder remendar esta situación, de alguna forma u otra.
No quise seguir pensando en eso así que seguí haciendo los quehaceres de la casa, trataba de despejarme lo más que podía, mi hija llegaría en un par de horas ya que estaba con el padre, trataba de verme lo más serena para que cuando ella llegara no notara nada extraño, ella por más pequeña que sea siempre sabía si algo me ocurría.
Lastima que en el futuro no vendrá a visitarme tan seguido, me tendrá un poco olvidada, agradecía a Emma por darme esta oportunidad de pasar más tiempo con mi hija, ella no lo sabía pero todo esto me daba tiempo de estar mucho más tiempo con mi niña, quizá así el futuro cambie para nosotras dos, esperaba que así fuese.

Le había tomado cariño a Emma y me preocupaba lo que le pudiera pasar, o lo que ese Adams podría hacerle, no lo conocía pero con lo que les hizo a sus compañeros me daba muchas razones para desconfiar de el, aunque todavía no haya hecho nada no importaba, deseaba que llegara el día en el que todo volviera a la normalidad, donde nadie está muerto, donde la cura ya está terminada. Donde sepa que Emma está bien al igual que todos.

El timbre había sonado, por lo tanto mi hija había vuelto. Con pasos largos me acerqué a la puerta y así poder abrirla.

—Hola cielo, ¿cómo te fue? — Conteste feliz de poder verle.

Me sonrió, me saludó y me contestó con un "bien" para marcharse a dejar sus cosas.
Estaba por cerrar la puerta cuando mi ex esposo lo impide.

—Y ahora que quieres. — Solté de manera seca.

—¿Por qué no tratamos de llevarnos mejor? — Quiso proponer el.

—No gracias, ¿qué quieres? Tengo cosas que hacer. — Lo apure.

—Bien, seré lo más breve posible para así ya no molestarte. No podré llevarla conmigo el mes entrante, tendré que hacer muchas cosas en la empresa, no podré estar con ella.

—Ja ja ja, ¿hablas en serio?, ni siquiera la vez lo que deberías verla, yo estoy con ella siempre, que no me molesta claro está, ¡pero tú no puedes desocupar la maldita agenda por ella!, no entiendo porque no solo me das toda su custodia, digo, tu siempre decías que todo se resolvía con dinero, pásame el dinero de ella y todo se acaba, no la verás mas.

—No digas eso, solo que está vez no puedo, compréndeme. — Suplicó.

—No puedo comprenderte, ni siquiera la conoces del todo bien, el mes pasado casi se muere por un descuido tuyo, siempre te recuerdo y te anoto las cosas que ella no puede comer, sin embargo tú no haces absolutamente nada. No soy tu maldita secretaría pero aún así lo hago para que no pase una desgracia.
Así que la verdad no puedo y no logro entenderte.

—Sabes que no sabía que esa comida contenía eso, no fue mi culpa Patty.

—¡Pero si la cocinaste tú! ¿Entonces de que hablamos? Por Dios, eres un imbécil.
Si eso es todo, adiós.

Finalicé para cerrarle la puerta en la cara. No se como pude estar casada con ese hombre.

Hola queridos saltamontes 🦗

Hoy podremos observar una cara distinta de la historia, conoceremos un poco más acerca de Patty, sin irnos por las ramas, todo tiene que ver en la historia.
Pd: imagínense de quien está hablando, será crucial✨