Leonardo no dijo nada, solo se limito a señalar un lugar especifico del lugar. Alli, se encontraba el cuerpo sin vida del pequeño Leonardo.
- Sigo sin entender - dijo Hitomi.
Pasos se escuchaban cerca, era la Mujer que se acercaba para ver mejor el cadaver que acababa de encontrar.
- ¿Que tenemos aqui? - dijo la Mujer tomando su pulso - Esta muerto, que lastima - entonces, una idea se cruzo por su cabeza - Pero eso tiene solucion.
La Mujer tomo en brazos el cadaver de Leonardo y lo coloco en el suelo (estaba en la orilla). Hizo un circulo a su alrededor y dijo unas palabras.
- Maruen opuli nifto octel budilum voknir asurwo... Espiritu de la Vida, devuelvele la vida a este niño inocente.
Una manta lo cubria, una niebla negra lo envolvio y poco a poco fue introduciendose a su cuerpo. Al terminar, la Mujer dijo.
- Niño, despierta.
Leonardo levanto la mitad del cuerpo y quedo sentado con la mirada baja. La Mujer se acerco y le quito la manta.
- No puede ser - dijo Hitomi al verse a el mismo debajo de la manta.
- Hola, pequeñin.
- ¡¿Quien eres tu?! - dijo el pequeño Hitomi al verla.
- Eso no importa, ¿tu quien eres?
- Yo... no recuerdo... nada.
- ¿No tienes nombre? - dijo la Mujer viendolo, el solo nego con la cabeza - Entonces te llamare Hitomi, al menos hasta que recuerdes tu nombre real. Ven conmigo, te dare un hogar y viviremos juntos.
El pequeño Hitomi asintio, tomo la bandana azul que encontro a su lado y tomo la mano de la Mujer para irse con ella.
Continuara...