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Ahí estaban tomados de la mano frente al pozo, Sota, la Sra. Higurashi y el abuelo estaban detrás de ellos despidiéndolos, Kagome tenía una mochila en su espalda e Inuyasha también, ya se habían despedido, ya habían dicho adiós, y ahora solo les faltaba brincar y ver si funcionaba… Inuyasha sabía que si el pozo ya no funcionaba estaría bien… sabia que en parte estarían mejor por sus cachorros y los de Kagome estarían a salvo…

Pero también quería regresar… porque a pesar de que se había acostumbrado a esta época… quería regresar al Sengoku-Jidai y ver a sus amigos… regresar haya donde las cosas eran mas simples y el podía cuidar de Kagome… y no tendría que depender le de ella y de la Sra. Higurashi… quería construir una cabaña para ellos con sus propias manos y darle a Kagome todo lo que necesitaba… para eso… tenían que estar en el Sengoku-Jidai…

Abrazo a Kagome contra él y brinco parándose en la orilla de la urna del pozo, voltearon a ver una vez más sonriendo y luego brinco… Kagome se abrazo a él con fuerza y justo cuando pensó que nada pasaría la luz violeta les envolvió y luego… estaba en el fondo del pozo viendo un cielo claro y brillante sobre ellos… brincaron fuera del pozo…

Inuyasha tomo a Kagome de la mano y comenzaron a avanzar en dirección de la ladea…

Cuando llegaron Rin corrió hacia ellos emocionada gritando… y Sango que venía con agua detrás de ella… la tiro al suelo y corrió hacia ellos… llorando…

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Sota sintió su corazón doler, iba a perderlos a los dos al mismo tiempo, pero de una manera buena, se habían despedido y habían pasado compartiendo y hablando desde que termino la boda la noche anterior, ya habían venido hablando de que esto sería lo que sucedería después de la boda y Kagome les había informado que Kaede, la señora con el parche en el ojo, les casaría probablemente también haya en el Sengoku-Jidai…

Su madre lucia feliz y radiante y a pesar de tener lágrimas en los ojos sabia que estaría tranquila, el mismo se sentía feliz por su hermana y porque tendría un final feliz junto con Inuyasha… que a pesar de todo lo que paso, ahora todo estaba bien.

El tenia una nueva novia, Sakura, era una niña muy linda que iba a su mismo grado, Hitomi y el se había separado hacia más de seis meses, y Sakura y el llevaban un mes de novios, y esperaba que las cosas funcionaran.

El abuelo finalmente había terminado de aceptar a Inuyasha e incluso lo había abrazado cuando se habían despedido, le había dicho que cuidara de Kagome y el les aseguro a todos que lo haría.

Su hermana había vuelto a ser la misma de antes y eso era suficiente para él, y supo que había sido bueno no odiar a Inuyasha y que buscarlo de nuevo había sido la mejor decisión que pudo haber tomado.

'Que sean felices, les deseo lo mejor, hermana… Inuyasha…'

Inuyasha siempre… seria su héroe.

Y ahora sabia que también seria le héroe de su familia…

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Kagome estaba dormida junto con él, estaban en un futón en la cabaña de la anciana Kaede… al tarde había estado tan llena de conmociones… Sango y Kagome habían llorando por un largo rato abrazándose… Miroku llego después sonriéndoles… y la anciana Kaede les invito a pasar a su cabaña…

Las cosas habían seguido como antes… Shippo no estaba… había viajado a hacer uno de los exámenes de kitsune que hacia… y Sesshomaru probablemente llegaría al día siguiente… la nueva boda la habían planeado para el día siguiente y todos habían parecido emocionados por ellos… Inuyasha simplemente se sentía feliz…

Miroku había estado construyendo una nueva cabaña junto con Rikichi que era uno de los aldeanos que el salvo junto con su familia cuando un Youkai los ataco antes de que regresara a ver a Kagome después de que Naraku casi destruyera la aldea… Miroku le dijo que el sabía que regresarían y que por eso construyo la cabaña… y que después la boda el los llevaría… a él y a Kagome…

Eso le tenía nervioso… pero sabía que las cosas saldrían bien…

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Kagome se sintió en un sueño hecho realidad cuando Sango le regalo el hermoso Kimono blanco… la Yukata era larga con mangas largas, hecha de una tela suave y hermosa… estaba maravillada y Sango le había arreglado su cabello… en casa su madre lo había hecho… en casa uso una Yukata hermosa… pero esta era mas hermosa…

Y más aun se sorprendió porque casi la mayoría de la aldea estaba presente, todos habían llegado a celebrar que la Miko que los salvo de Naraku se casaba… e Inuyasha parecía aun mas sorprendido que ella… todos estaban presentes menos Shippo, pero Miroku y Sango les aseguraron que estaría bien hacer la boda ese día porque el Kitsune se ausentaba hasta meses en ocasiones, y que acababa de marcharse hacia un par de días…

La ceremonia fue muy parecida a la que su abuelo realizo y al finalizar, se sentía increíblemente feliz y realizada, todos comenzaron a celebrar conversando… bailando o bebiendo, cada quien lo hacía a su manera, como Inuyasha no se veía muy cómodo en medio de la gente de la aldea se acerco a él y Miroku llego hacia ellos junto con Sango ofreciendo llevarles a su cabaña…

Ellos aceptaron y se alejaron… Kagome volteo a ver a Rin y a Kaede-baba avanzando hacia su cabaña con las niñas y el niño de Miroku y Sango…

Ellos avanzaron por el bosque sin ayuda de una antorcha o algo… finalmente llegaron a una zona cerca del Go-Shimboku… entre el rio y el árbol sagrado… Kagome sonrió abiertamente al ver la pequeña cabaña igual a la de la anciana Kaede… Miroku y Sango les sonrieron y ella tomo a Inuyasha de la mano y entraron… era igual a la cabaña de la anciana Kaede… pero aun así había algo… algo diferente…

Avanzo al interior de la cabaña y entonces Inuyasha fue quien la guio hacia el futón que estaba junto a la pared más lejana de la puerta… le sentó en la superficie suave y finalmente levanto la frazada y les envolvió con ella acostándose detrás de ella moldeando su cuerpo con el suyo…

Kagome parpadeo varias veces mirando la pared de la cabaña en la oscuridad…

Ya había tenido dos noches de bodas…

Y ninguna de las dos había sido como había soñado que fueran…

Inuyasha se había acostado de la misma forma ahora que con ella en la noche de bodas en su época…

Y como en esa noche… ahora tampoco sentía nada que le indicara que Inuyasha quisiera hacer algo más que dormir con ella…

No sabía cómo podía pedírselo o si era mejor esperar…

Pero esperar cuando tiempo?

Sabía que quería estar con Inuyasha se esa manera…

Pero tenía miedo… miedo de que doliera… miedo de recordar…

Ya casi no recordaba lo que sucedió… en el momento en que sucedió… si recordaba caminando hacia el sujeto y golpeándolos pero luego desde que la tiraron a la nieve y recibió más golpes todo era confuso… y solamente recordaba dolor y oscuridad… y luego solamente oscuridad…

La Dra. Masamune le había aconsejado… comenzar despacio con Inuyasha… y que si en algún caso no podía reunir el valor para hacerlo con el… que lo hiciera ella sola…

Kagome se había sentido tan apenada ante la sugerencia de la doctora de tocarse ella misma… y debía de admitir que había pensado en hacerlo desde que quedo atrapada en su época… pero nunca se había atrevido… pero una cosa que si había sucedido… es que había soñado con que Inuyasha le hacía el amor… si… y se había despertado sudada y sensible ahí abajo… así como húmeda… y no le había sucedido una sola vez… habían sido varias… y pensaba que tal vez podía sentirse así de bien…

Pero le daba miedo…

"Kagome?"

Kagome se tenso en ese momento… Inuyasha no se había dormido…

"Pasa algo?"

Kagome suspiro…

"No Inuyasha… estaba pensando… en cuando podremos tratar…"

Sintió sus mejillas arder y guardo silencio… Inuyasha la apretón un poco mas fuerte contra el y respiro profundamente enterrando su nariz en su cabello…

"Podemos hacerlos cuando estés lista Kagome… tranquila… duerme…"

Kagome suspiro y asintió… llevo sus manos hacia los brazos de Inuyasha… y se relajo… durmiéndose lentamente…

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Inuyasha estaba cortando madera junto con Miroku… bueno… Miroku estaba viéndolo cortar madera mientras él estaba sentado sobre el tronco del árbol que acababan de derribar, el árbol se había secado y era mejor convertirlo en madera a dejar que se pudriera…

"Como te fue con Kagome-sama?"

Inuyasha suspiro… no le gustaba hablar sobre el tema… pero sabía que tenía que hablar con alguien… y el Miroku no había hecho ningún comentario pervertido… cuando levanto su mirada para verlo… lo noto preocupado… por lo visto Miroku realmente comprendía lo horrible que fue tal cosa para Kagome…

"No tan bien… Kagome se puso nerviosa y tensa… y yo ni siquiera le dije o pedí nada… ella simplemente comenzó a pensar una y otra vez en cosas que… no se… comenzó a oler a mucho miedo y le pedí que se calmara… finalmente se durmió…"

Inuyasha suspiro…

"Sé que Kagome va a sentirse culpable por eso tarde o temprano… y yo no quiero eso… quiero que ella esta lista…"

Miroku asintió y suspiro…

"Inuyasha… recuerda… cuando Kagome diga que esta lista comienza despacio… bésala… tócala… y asegúrate de estar frente a ella… que te vea… que está muy consciente que eres tu… y si Kagome-sama acepta enciende la fogata…"

Inuyasha miro al monje sintiendo su rostro arder… pero comenzó a sentirse un poco nervioso al verlo serio… Miroku suspiro y bajo su mirada moviendo un pequeño trozo de madera que tenía en su mano…

"Kaede me dijo que te dijera eso."

Inuyasha asintió y continuo cortando la madera… si… la Dra. Masamune se lo había dicho… La Sra. Higurashi se lo había dicho… al menos Kaede o Sango podían decirle el mensaje a Miroku… se sentía apenado de que las mujeres le hablaran de tal tema… pero ellas comprendían mucho mejor que el… el solo sabía que no tenía ni idea de cómo sería…

"Deberías de dejar que Kagome-sama este arriba…"

"Arriba? Como?"

Inuyasha sintió su cara arder y su corazón latir un poco más rápido pero no podía evitarlo… no comprendía…

Miroku lo miro y se rio de esa forma pervertida en que tenia tiempo de no reírse…

"Regresemos a la aldea…"

Inuyasha le miro interrogante… pero asintió… termino de cortar la leña y Miroku recogió un poco y el la mayoría y caminaron de vuelta a la aldea…

Cuando llegaron colocaron la leña en la cabaña de la anciana Kaede y luego Miroku indico a Inuyasha con su dedo que lo siguiera… Inuyasha le siguió suspirando…

Al llegar a la cabaña de Miroku vio al monje avanzar y verlo avanzar hacia una esquina de la cabaña, lo vio levantar una tabla y luego sacar un par de pergaminos, el le miro interrogante y se acerco al monje, Miroku se rio de forma pervertida y le mostro los dibujos, Inuyasha primero no comprndio al ver… pero luego de unos segundos su cara se volvió tan roja como su Haori y evito mirar tanto las imágenes como al monje…

"Inuyasha… mira, esta es la posición que yo te decía."

Inuyasha cerro los ojos, respiro profundamente y volteo a ver la imagen, sintiendo sus mejillas arder viendo al hombre acostado y a la mujer sentada sobre el, Miroku llevo su dedo hacia otro dibujo, donde le hombre estaba sentado y la mujer sentada sobre el, lo vergonzoso sobre los dibujos era que estaban desnudos y las expresiones en sus caras eran muy vergonzosas.

Inuyasha asintió y evito mirar nuevamente los dibujos.

"Oh amigo mío algo como esto no debería de avergonzarte, te los mostrare de nuevo después de un tiempo y veras que te interesaran mucho mas."

Inuyasha decidió salir de la cabaña suspiro y levanto su mirada hacia el cielo respirando profundamente, percibiendo el suave aroma a sakura de Kagome… ya no olía a aquel dolor y desesperación, en ese momento noto que poco a poco Kagome comenzó a oler como antes…

"Kagome…"

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Kagome estaba con las mejillas sonrojadas mirando a las niñas y al niño avanzar por el pasto recogiendo flores, con Sango sentada a su lado y las cestas de ropa junto a ellas, cuando se secara la recogerían y regresarían a la aldea… se había pasado preguntándose que le diría Sango si le preguntaba sobre el tema, su madre había tenido una larga conversación con ella sobre el tema, y había dicho muchas cosas que ella jamás se hubiera imaginado a su madre diciendo, así con la Dra. Masamune, pero era diferente preguntarle a Sango… a sus amigas no les pudo preguntar en su época, no sentía que fuera adecuado… pero a Sango… a ella si podía preguntarle…

"Sango…"

Sango volteo a verla.

"Cuando tu y Miroku-sama… digo la primera vez… y luego la segunda…"

Kagome sintió sus mejillas arder pero volteo a ver a la muchacha, Sango le miro con dolor unos momentos, suspiro y luego tomo su mano sonriéndole.

"No te mentiré Kagome, fue doloroso la primera vez, y muy incomodo las veces que siguieron a pesar de que Miroku trataba de hacerlo todo con cuidado, pero después de un par de veces se sintió bien, muy bien."

Sango le sonrió.

"Eso es para el acto en si, las otras cosas que se hacen antes, esas si fueron muy buenas desde el principio"

Kagome sonrió, sabia a lo que Sango se refería, todas las demás cosas que se hacen, tocas por aquí tocar por haya y también el sexo oral, la Dra. Masamune y vergonzosamente su madre le habían hablado sobre esto, y se imaginaba que también se lo había dicho a Inuyasha, esto le hacia sentirse aun mas avergonzada.

"Te dolió mucho?"

Sango entonces le miro no solo con dolor sino con los ojos brillantes.

"Si Kagome… pero me imagino que no tanto como lo que pudo para ti, no creo que de ninguna manera podría comprarse."

Kagome asintió.

"Miroku dijo que entre mas me relajaba y mejor me sintiera yo, mas fácil seria todo."

Kagome asintió, ella sabia, la Dra. Masamune se lo había dicho, la clave era lo consiente que seria de que era Inuyasha quien estaba con ella y de cuan excitada estuviera, después de lo que sucedió la noche que se embriago no pensaba que seria muy difícil teniendo al Hanyou con ella… pero se había sentido nerviosa, muy nerviosa la noche anterior, con mucho miedo y sabia que eso sucedería, y por eso… por eso tenia miedo, pero se sentía mal también, no quería que Inuyasha estuviera con ella y que no… no sintiera cosas…

Sabia que seria mas que placer físico, que Inuyasha se sentía muy solo y que nadie se sentía cómodo con el, que les daba asco a las personas, cosa que ella encontraba completamente absurda, pero sabia que era así como el se sentía, ella se sentía sucia pero Inuyasha y la Dra. Masamune decían que no era así, tal vez, de la misma manera en que Inuyasha se sentía sucio por ser un Hanyou… ella se sentía sucia… por lo que paso…

Pero cuando comenzaron a caminar de vuelta a la aldea junto con Sango se sintió decidida que esta noche lo intentaría… intentaría que Inuyasha y ella lo hicieran… y esperaba que todo saliera bien…