Aquel adolescente de largos cabellos azabaches se encontraba caminando hacia la escuela con aburrimiento. Odiaba asistir a clases pero la sola idea de que su madre pueda sentirse triste por su falta de estudios hacia que su mente intentara concentrase para no sacar malas calificaciones.

Desgraciadamente, por más que se esforzaba en prestar atención a las clases, los resultados terminaban siendo deplorables, haciéndolo enojar y desesperarse.

No fue hasta un día en el que Chifuyu lo llevó a la fuerza a la biblioteca en donde se encontraron con una chica un curso mayor que ellos. El rubio la presentó como la chica inteligente que los ayudaría a estudiar para pasar las materias.

La chica llamada ___ solo los veía desde su asiento con una mirada molesta, llevaba diez minutos esperándolos y cuando estaba decidida a irse le llega un mensaje del rubio diciéndole que ya iban en camino.

— Llegan tarde, Matsuno — reclamó la joven viéndolos acercarse a la mesa.

— Lo siento mucho, Senpai — se disculpa Chifuyu rascando su cabeza con vergüenza. — Baji-san no quería venir. — hizo saber el rubio lanzándole una mirada a su amigo el cual solo rodó los ojos sin arrepentimiento alguno.

— No me importan tus excusas tontas, mi tiempo es valioso y lo estoy gastando por un par de idiotas que no hacen el mínimo esfuerzo de concentrarse. — responde ___ con un tono serio comenzando a abrir algunos libros y apuntes.

— Ah? Quién te crees para hablarnos— el pelinegro fue interrumpido abruptamente por la Fémina que le lanzó un libro.

— Cállate y deja de perder mi tiempo —. Ambos chicos la vieron sorprendidos, Baji la veía entre sorprendido y enojado por la forma en la que les habló, aunque no negaba que aquella chica tenía carácter.

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Dos semanas habían pasado de que aquel par de amigos se reunía con ___ para estudiar, aunque poco a poco la actitud de la joven hacia ellos empezaba a cambiar. Ya no los trataba tan mal, su seriedad estaba disminuyendo y uno que otro comentario gracioso salía de ella.

— Nunca lo pregunté pero, ¿cómo es que accediste a ayudarnos? — habló Baji dejando de escribir para ver a la chica. ___ por su parte seguía haciendo tareas y Chifuyu intentaba resolver algunos ejercicios matemáticos proporcionados por la joven.

___ sin dejar de escribir, le contestó su pregunta con un tono tranquilo.

— Ah, pues tu amigo me dijo que si los ayudaba él te convencería de tener una cita conmigo — aquella respuesta dejó un silencio algo incómodo en el ambiente. Chifuyu dejó de escribir una vez escuchó lo que dijo su superior y Baji lo volteó a ver esperando una confirmación de su parte pero el rubio no sabía si contestar.

— Estás bromeando, cierto? — preguntó el pelinegro. Quería saber si era verdad.

— Para nada — la joven desvió su mirada de su tarea hacia los ojos de Baji. Ambos se veían fijamente — Eres un tonto, para nada inteligente, tiendes a ser muy brusco y eres algo irrespetuoso, pero no negaré que eres lindo, eso me gusta. — Su sinceridad dejó sorprendidos a ambos chicos en la biblioteca. ___ suspiró al ver que ninguno decía nada, así que continuó haciendo sus deberes hasta acabarlos. Al ver que los dos chicos no se movían para nada decidió dejarlos allí no sin antes decirles algo.

— Ya se acercan los exámenes, me tomé la libertad de hacerles una guía a cada uno, por favor, no hagan que mi tiempo haya sido en vano y saquen por lo mínimo un siete. Eso es todo, repasen todo lo que les di. — dicho eso, recogió sus cosas y se fue dejándolos solos.

Una vez Baji confirmó que ya no estaba allí se giró hacia su amigo quien se estaba escondiendo en un libro.

— Eres idiota o qué, Chifuyu? — le reclamó arrebatando le el libro dejándolo expuesto. El rubio suspiró derrotado posando su mirada en él y sonrió con inocencia.

— Lo siento, Baji-san, fue lo único que se me ocurrió! Nadie quería ayudarnos porque les damos miedo y ella es la única que nos ve como idiotas! Tenía que aprovechar — le explica moviendo sus manos nervioso y entrando en pánico. Baji lo mira fijamente haciéndolo asustarse más.

— Bueno, al menos me ahorraste el trabajo — dice comenzando a guardar sus cosas. Chifuyu lo ve confundido por su comentario. — Ella es la chica de la que te hablé hace tiempo — responde, a lo que Chifuyu intenta recordar y su boca forma una "o" al saber de lo que habla.

— Entonces ___ es la que te dijo que te fueras al demonio luego de que le rompiste su maqueta por accidente? — pregunta el rubio mientras ambos salen de la biblioteca y caminan por los pasillos.

Baji hace un sonido de afirmación y ambos salen de la escuela hacia la casa de alguno de ellos para repasar las guías que la joven les dió.

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— ¿Eh? — la joven veía confusa el examen del pelinegro y luego a él y viceversa.

— Saqué un ocho de calificación — responde viéndola fijamente a lo que ___ asiente entendiendo.

— Felicidades, me hubiera molestado que reprobaran, sería como si todo mi tiempo hubiera sido desperdiciado — dice devolviéndole su examen.

— Que poca confianza nos tiene, Senpai. — contesta el pelinegro rodando los ojos con molestia. — Por cierto, lo de la otra vez... Aún quieres la cita?

___ se quedó callada, trataba de asimilar lo que dijo, acaso escuchó mal? Baji la veía esperando su respuesta, la cuál estaba tardando en recibir y como el desesperado que es no le dejó contestar.

— Olvídalo, te veré el sábado en el parque que está cerca de aquí.— dicho eso la dejó sola en el pasillo de su clase sin saber qué hacer. Lástima que Baji no pudo ver el hermoso sonrojo que adornaron sus mejillas por sus palabras.

Después de esa cita le siguieron otras más hasta que finalmente se hicieron pareja. Los de la Toman no creían que Baji Keisuke tendría novia, lo veían muy brusco para tenerla, pero al conocerla supieron el porqué estaba con ella.... Tenía un carácter fuerte.

Aunque también recibía burlas de sus amigos pues las veces que la chica lo acompañaba a sus salidas con ellos Baji parecía el perro de la chica, haciendo todo lo que ella le dijera.

— Argh, ya me tienes harto, Hanagaki — el pelinegro estaba a punto de golpear al rubio llorón pero su novia lo detuvo.

— Keisuke, ven aquí ahora mismo!— ordenó sentada a lado de Mikey viéndolo con los brazos cruzados y mirada sería. Baji chasqueo la lengua y fue rápidamente con su novia escuchando las risas de sus amigos burlándose de él y al llegar con ella se puso detrás suyo y la abrazó recibiendo más burlas de sus amigos.