El elevado techo de sus antiguos aposentos fue lo primero que vio al abrir los ojos. La luz le cegaba un poco obligándolo a parpadear un par de veces, incorporándose sobre la enorme y elegante cama, hecho un vistazo a su alrededor tratando de asegurarse de que su mente no le estaba jugando una mala pasada y si lo que estaba viendo no era una ilusión provocada por los Dioses, pero no era así.

Con juventud restaurada, Shion de Aries, el antiguo patriarca, se levantó de la cama y observo sus manos con detenimiento.
Shion (): ¿Qué rayos ha pasado? - Saliendo de la habitación, dirigiendose al gran salón de la cámara patriarcal.

Recargado junto a un muro sin cumplir correctamente con su trabajo, un joven guardia aburrido se rascaba, pero al ver a Shion, de inmediato se dirigió a él con nerviosismo.
?: ¡Ga-gran maestro! ¡¿Es usted?! ¡No puedo creer que esté vivo!😳

Shion: dime tu nombre soldado.

?: Soy Argos señor. He oído de su mandato antes de la usurpación del Saga y debo decir que siempre quise saber cómo era usted. ¿Pero cómo usted está aquí? Creí que había muerto junto a los 12 caballeros dorados. - El guardia sonaba acelerado.

El lemuriano no hizo caso a las dudas del guardia.
Shion: bien, tranquilízate Argos. Quiero que hagas algo por mí, así que presta mucha atención.

Argos: lo que usted ordene gran maestro.

Shion: quiero que recorras el camino bajando las escaleras por las 12 casas y verifiques si los demás Caballeros dorados también se encuentran en sus templos.

El guardia tenía una cara de incrédulo, sabía que los templos se encontraban vacíos desde la batalla contra Hades y lo único que había dentro eran las armaduras.

Shion: De ser así, quiero que los convoques a mi recinto tan pronto sea posible. ¿Queda claro?

Argos: como el agua, gran maestro. - salió deprisa para cumplir su tarea y Shion se quedó parado en la entrada pensativo.

Shion (): Si lo que sospecho es cierto, una nueva batalla nos aguarda. Y para que Athena necesite a la orden Dorada, significa que el enemigo es muy poderoso.

Comenzaron a llegar 1x1 los 12 Caballeros Dorados, al igual que el ex caballero de Aries, todos estaban desconcertados, algunos de ellos se saludaban o se daban un fraternal abrazo, felices de ver nuevamente a sus viejos compañeros de armas, sus viejos amigos. Aunque a pesar de ese sentimiento de reencuentro, no podían evitar sentirse preocupados, pues si se requería su presencia quería decir que la talla del enemigo era considerable.

Formados en 2 filas.
Aioros: Creo que es obvio, solo hay una razón para que estemos aquí de nueva cuenta. Athena nos necesita. Es probable que una nueva guerra este apunto de dar inicio. - rompiendo el hielo

Saga: bueno, creo que todos ya habíamos imaginado eso -intervino de brazos cruzados- la pregunta aquí es; ¿Con quién?.

Aldebaran: da igual quien sea el Dios que amenace la paz en este momento, lo aplastaremos.

Mu: Aldebarán, tu siempre tan entusiasta😏.

Shaka: el tiempo que tenemos para estar aquí, es prestado, por lo que debemos ser rápidos y concisos para descubrir y detener al enemigo. La pregunta real aquí es; ¿En dónde está Athena? - con actitud pasiva dio su punto de vista.

Dohko: es probable que como cabeza de la fundación Grade y bajo la identidad de Saori Kido, Athena tenga otras tareas en su agenda.

Shura: aun así, debería de estar aquí.

Aioros: Dale tiempo Shura, además, seguramente ella estará al lado de los caballeros de bronce, ellos la protegerán con sus vidas, estoy seguro.

Aioria: tienes razón hermano, mientras este con Seiya y los otros, estaa a salvo.

En un hotel de Atenas

A algunos kilómetros lejos de ahí, en un conocido hotel de Atenas, Darién y las sailors outhers también tenían cosas de que discutir. Llevaban más de 5 días en la ciudad y aún no habían averiguado nada, por lo que la frustración en ellas era evidente.

Haruka: aááááa¡No lo puedo creer! -caminaba de un lado a otro por la habitación del hotel lentamente- Desde que llegamos a este país, no hemos avanzado nada ¿Qué les diremos a las demás?

Michiru: tranquilízate -sentada en el borde de la cama- Si mantenemos la cabeza fría lograremos encontrar algún indicio.

Haruka: ¿Y de qué forma? No tenemos ni la más mínima idea de dónde encontrar a esas "Shaina y Marín" Se nos acaba el tiempo. -saco su broche de transformación del bolsillo- Debemos darnos prisa, no puedo dejar de preguntarme que fue lo que habrá ocurrido en Japón.

Setsuna: también yo. Nuestros cristales han evolucionado hace poco a la forma eternal, creo que eso nos da más poder sin duda, pero lejos de tranquilizarme, me preocupa aún más.

Las 4 Sailors observaron sus cristales que habían sido modificados a una especie de broches con el símbolo de sus respectivos planetas.

Hotaru: creo que estamos pasando algo por alto - sentada en la cabecera de la cama abrazando una de las almohadas, llamo la atención de todas.

Darién: sin mencionar que no encontramos nada.

Hotaru: pero tal vez ese no debía de ser el primer lugar. - suspiro exasperada por los rodeos de la más joven de las Scouts.

Michiru: Hotaru, no entiendo a dónde quieres llegar.

Hotaru: quiero decir que ellas deben de encontrarse en el templo de Athena. Si vamos a ese lugar quizás sepamos algo.

Daríen: lo que dices tiene sentido. ¿Pero cómo llegamos ahí?

Setsuna: Es simple.
-estaba callada hace poco leyendo una guía turística levanto la mirada-
El santuario de Athena se encuentra al norte. Aquí marca el lugar
-señalo la revista- También dice que el paso al interior de los templos está estrictamente prohibido, no dice el porqué, pero si es territorio de Athena sobra preguntar.

Darién: ¿Entonces qué es lo que estamos esperando? -poniéndose en pie- Mientras más pronto acabemos con esto mejor, en marcha.

Santuario

Jabu recorría los alrededores del Santuario, y no podía evitar sentirse preocupado. La noticia de la resurrección de los caballeros dorados se había esparcido como el fuego.

Jabu (): no tiene sentido, ¿Por qué los Caballeros dorados habrán revivido? Cielos, me preocupa la Señorita Saori.

Parado sobre un alto pilar, el caballero del unicornio vio a las 4 Sailors Scouts correr a toda prisa con la intención de adentrarse en lo más profundo del santuario.

Jabu: ¡Alto ahí!

Las Chicas se frenaron en seco volteando a ver al joven en lo alto del soporte.

Jabu: No puedo permitir que se adentren un paso más dentro de este recinto sagrado, el gran Jabu de unicornio se los impedirá.

Setsuna: -dio un paso al frente al reconocer el tipo de armadura- No nos malinterpretes Caballero, no venimos en un plan hostil. Venimos buscando a alguien.

Jabu: si están buscando a Athena pierden el tiempo, ella no está aquí.

Daríen: lo sabemos. - El joven se sorprendió de lo informadas que estaban.

Jabu: ¿Entonces que buscan aquí?

Haruka: buscamos a las mujeres caballero de plata Shaina de Ofiuco y Marín de Águila. La señorita Saori Kido nos dijo que ellas nos ayudarían en nuestra misión.

Jabu: ¿De qué misión están hablando?

Haruka: una diosa ataco a la persona que nosotras protegemos, al igual que a algunas partes de la ciudad de Tokio. La señorita Kido se ofreció a protegerla junto con sus Caballeros mientras nosotras veníamos a investigar en Grecia. Añadió que ellas nos podrían ayudar.

Jabu: entiendo, iré a buscarlas, pero les advierto que no avancen más allá de este sitio o podrían lamentarlo.

Las 4 se limitaron a caminar en círculos por la zona del viejo templo, algunas casas solariegas era lo que se observaba más allá del monótono y aburrido escenario lleno de peñascos, acantilados y piedras.
Aburrida, Hotaru camino un poco más del Partenón en el que se encontraban, inspirada por la curiosidad del enorme y monumental reloj de fuego, la Sailor llego hasta la explanada que daba entrada al inicio de las 12 casas del zodiaco.

Hotaru: ¡Es increíble! Este lugar es hermoso.

Haruka y Michiru siguieron a la joven de inmediato al escuchar su comentario.

Setsuna: tienes toda la razón - mantuviendo un poco su distancia

Michiru: me pregunto qué es lo que significara ese enorme reloj.

Haruka: ¿Marcar las horas? ¿Quizás? - con sarcasmo.

Michiru: eso ya lo sé. Yo me refiero a los dibujos debajo de cada fuego.

Saliendo de una ladera que daba acceso al coliseo, los caballeros de bronce restantes regresaban de su entrenamiento, llegando a la misma explanada donde curioseaban las visitas.

Geki: los aspirantes a caballeros de ahora son demasiado enclenques. Parece que estoy dando una clase de educación física de secundaria.

Nachi: -caminaba con los brazos cruzados sobre su cabeza no pudo evitar contestarle- Tú quieres que todos sean unos brutos rudos como los viejos caballeros de plata. Dales tiempo, es solo el 2do día.

Ichi: si, o mejor vete a las montañas a jugar con tus osos de peluche como antes.

Ban: pero Geki tiene razón, los aspirantes ya no son chicos prometedores como antes. Ahora se quejan y lloriquean igual que... -se quedó a media palabra al percatarse de las 4 Sailors.- Vaya, vaya, miren que tenemos aquí. - Les dijo a sus compañeros al notar a las bellas guardianas.

El caballero del lobo, acercándose en un burdo y patético intento de conquistador, se acercó a Michiru, al igual que el resto, con excepción de Geki.

Nachi: buenas tardes señoritas. ¿Qué las trae a este sitio tan apartado?

Setsuna: Solo estamos de paso, gracias por preguntar.

Ichi: ¿No les molesta si las acompañamos verdad?

Ban: si están perdidas podríamos ayudarlas. - Haruka trato de no golpearlo ante el atrevido acercamiento.

Hotaru: gracias, pero estamos bien.

Setsuna tampoco era excluida de la estúpida charada de conquista del caballero de hidra.
Ichi: ¿Por qué no permites que te acompañe un perfecto espécimen de belleza masculina como yo, lindura?

De forma amable, Hotaru trato de apaciguar ese hostigamiento, ya que las demás se quedaron calladas ante ese tipo de acoso.
Hotaru: favor, solo estamos esperando a Jabu. No son necesarias tantas atenciones, por favor déjennos solas.

Ichi: eres muy linda, jovencita. ¿Qué edad tienes?

Hotaru: 15, pero eso no tiene nada que ver con lo que les pedí.

Nachi: vamos nena, podría darte un recorrido por el interior del Santuario. - sujeto a la fuerza a Michiru por la cintura mientras que ella trataba de apartarlo.

La Sailor Uranus ante la atrevida insistencia del caballero de lobo sobre su íntima compañera no lo toleró.

Haruka: ¡Aléjate de ella!😠 -propinandole un tremendo puñetazo que casi noquea al joven- ¡Demonios, parece que jamás han visto a una mujer!

Nachi: ¿Cuál es tu problema? Solo deseaba salir con ella - resentido

Haruka: si, forzándola. Te diré algo Caballero, si quieres pasarte de listo con ella, tendrá que ser si es que me derrotas.

Nachi: Ja. ¿Crees que porque me diste un golpe que me derribo puedes vencerme? Eso fue solo porque estaba descuidado. Pero no te será tan fácil en un verdadero duelo.

Haruka conoció de antemano la fuerza de Seiya y los otros, así que no subestimaría al joven y luego se transforma al igual que sus compañeras.

Haruka (): Es hora de comprobar cuál es el alcance de mi poder en la forma eternal. Muy bien, Caballerito, muéstrame de lo que eres capaz.

Nachi: ese golpe te costara caro. ¡Aullido mortal! - La Scout se sorprendió de la simpleza de ese ataque.

Haruka: fanfarrón. ¡Tierra... tiembla! - manda lejos al al caballero agrietando su armadura de forma considerable.

El caballero del oso comprendió que su amigo tendría problemas, y aunque estaba del lado de las Sailors en que esos payasos recibieran su merecido, su lealtad hacia ellos le decía que debía hacer algo.
Geki: bueno ya basta, se acabó.

Nachi: ¡Ataquen!😠.

Esto puso sobre aviso a las demás Sailors quienes se pusieron en guardia. Hotaru impidió a Ichi entrar a la pelea interponiendo su lanza, dándole a entender que ella sería su oponente. Michiru se paró enfrente de Ban poniéndose en guardia y a Geki no le quedo de otra que enfrentarse a Setsuna.

Hotaru: que la señorita Saori nos perdone por esto, pero no puedo tolerar que estos tipejos se sobrepasen con nosotras.

Ichi: vamos pequeña. -dándole palmaditas en la cabeza por su estatura- Hazte a un lado o el más guapo de todos los Caballeros te dará una paliza.

Hotaru utilizo la base de su lanza para pegar horizontalmente en ambos talones de sus pies, separándoselos y así golpear en la entrepierna al caballero de hidra

Ichi: No es justo😵 - entre pujidos mientras que la joven uso su arma como apoyo sobre la tierra para asestarle una patada en el abdomen. Con eso Ichi se llevó una valiosa lección y comprendió que las apariencias engañan.

Ban: ¡Bomba de león menor! - Michiru esquivo sin dificultad aquel ataque de fuego.

Michiru: creí que ustedes serían mucho más fuertes, pero ese ataque comienza a parecerme bobo, ¡Maremoto de Neptuno! - Las Sailors mostraron notoria superioridad ante esos santos de bronce.

Por supuesto que dicho evento no pasó desapercibido pues la notica llego en segundos hasta los oídos de varios soldados y guardias y continúo creciendo con aumentos y distorsiones hasta desatar la alarma de ataque.

En el recinto del patriarca seguía la reunión Dorada, ellos seguían debatiendo opciones y conspiraciones sin llegar a ningún lado, hasta que uno de los guardias abrió bruscamente las puertas de la cámara patriarcal causando que todos se pusieran en estado de alerta.

Shion: ¿Qué sucede Argos? Más vale que sea importante lo que tengas que decir, porque acabas de interrumpir un asunto importante. -sentado en el gran trono se puso de pie y se encamino hacia el guardia que respiraba agitado, dandose cuenta que venía corriendo para informar algo de suma importancia- ¿Qué ocurre?

Argos: discúlpenme gran maestro, pero hace unos momentos un grupo se infiltro dentro del Santuario. Los caballeros de bronce intentaron detenerlas pero comenzaron a atacar sin previo aviso.

Shion: ¿Quiénes son?

Argol: no lo sabemos señor, son mujeres, visten como marineras y parecen fuertes que los caballeros de plata incluso mas.

Shion: ¿Has dicho mujeres? - Todos se pusieron de pie interesados y dispuestos para ir a ver de qué se trataba.

Argos: si maestro, son mujeres. Pero no son ordinarias, ellas son demasiado fuertes y violentas.

Shion: parece que no tendremos que ir muy lejos para averiguar quién es el nuevo enemigo de Athena dado que ya se encuentra en nuestras puertas. Saga, Camus, Shura. Quiero que vayan y echen de aquí a esas intrusas, los demás ocupen sus puestos de vigilancia en sus respectivas casas, Afrodita, encargate de alistar tus defensas en la entrada del Santuario. Si esas mujeres vienen aquí buscando pelea, la tendrán. Ahora ¡muévanse!

Sin decir ni una sola palabra, los 12 caballeros se dirigieron a tomar las posiciones ordenadas.

Setsuna: ¡Grito mortal! - Geki quien solo se alcanzó a ver como caía inconsciente con el casco y hombreras rotas.

Haruka: creo que nuestras habilidades han mejorado gracias a la transformación "Eternal", ni siquiera sude. - tronandose los dedos de las manos con un movimiento.

Michiru: no sé, fue muy fácil, pero esto no debió pasar. Si este es el santuario de Athena podríamos haber provocado un mal entendido.

Setsuna: ellos se lo buscaron. No pueden acosarnos e invadir nuestro espacio personal. Y por si no fuera poco, se lanzaron sobre nosotras para atacarnos.

Hotaru: yo solo espero que esto no nos traiga problemas mayores.

De golpe, 3 presencias extremadamente poderosas se hicieron sentir y las 4 Sailors vislumbraron a 3 hombres con resplandecientes armaduras. Sus ropajes no se comparaban con los de Seiya y los otros, no. Ellos lucían uno distinto, desprendían un brillo similar al que emanaba el mismo sol. El sujeto de la izquierda era un joven de cabello corto de aspecto rudo con un diadema con cuernos (estilo Loki), el de la derecha era diferente; su largo cabello verde marino era adornado por una gran diadema que cubría toda su frente y parte de sus mejillas, pero lo que más lo distinguía del resto era su expresión indiferente y tranquila. El último sujeto que estaba parado en medio de ellos, era un poco más alto de los 3 y probablemente el más intimidante, tenía un largo cabello azul y aparentaba una actitud de liderazgo. Los 3 se colocaron frente a ellas con mirada bastante tensa.

Haruka: ¡¿Quiénes son ustedes?!

?: Soy Shura de Capricornio.

?2: Camus de Acuario.

?3: Y yo, Saga de Géminis. Pero la pregunta se la devuelvo señorita ¿Quiénes son ustedes? ¿Y qué hacen Aquí?

Haruka: por lo visto ustedes no saben cómo tratar a las visitas de una manera adecuada. - el caballero miro a su alrededor y noto a los caballeros apaleados.

Camus: y por lo que se ve, ustedes no saben cómo comportarse en territorio ajena. Márchense inmediatamente o nos veremos obligados de echarlas a patadas.

Haruka: lo sentimos, pero tenemos una misión que cumplir y ni tu ni tus amigos nos impedirán el paso por este lugar.

Shura: ¿Quieres apostar? Detendremos su avance mandándolas al otro mundo y yo seré su guía. - comenzó a caminar levantando su brazo derecho en posición horizontal.

Haruka se ponía en guardia sonriendo muy confiada de sus nuevos poderes y dispuesta a retar al guardián de la 10ma casa.

Haruka: de acuerdo, te bajaré los humos igual que a esos patanes. - La mano de Setsuna detuvo a su amiga. Adelantándose nuevamente, intento calmar los ánimos.

Setsuna: alto. Venimos en forma pacífica. Déjennos presentarnos primero. Yo soy Sailor Plut y ellas son Uranus, Neptune, y Saturn, somos Sailor Scouts del Extinto Milenio de Plata.

Los 3 caballeros arquearon las Cejas ante la presentación.

Saga: ¿Extinto?

Setsuna: si, el reino lunar desapareció hace mil años, pero no venimos aquí para hablar de eso.

Camus y Shura se miraron entre si extrañados pero Saga se veía tranquilo.

Camus: jamás habíamos escuchado hablar de las Sailors scouts.

Saga: yo sí.

Shura y Camus miran a Saga.

Saga: En la antigua era mitológica, las llamadas Sailor Scouts, eran las guerreras personales de Selene, la primera Diosa de la Luna, se decía que a pesar de su apariencia, poseían un poder increíble cuyas técnicas y habilidades solo rivalizaban con las de los mismos caballeros dorados de la época.

Cameos de ficticios enfrentamientos comenzaron a aparecer durante la explicación de Saga. La antigua Sailor Neptune con cabello más largo, apareció con sus manos en alto a punto de lanzar su maremoto de Neptuno en contra del antiguo Caballero de Acuario quien preparaba su Ejecución de Aurora. La antigua Sailor Júpiter, con el cabello suelto, esquivaba los ataques a la velocidad de la luz del plasma relámpago del antiguo caballero de Leo y el brazo del Caballero de Piscis, era sujetado por una cadena de corazones por la antigua Sailor Venus mientras el lanzaba una lluvia de rosas rojas contra su enemiga.

Camus: entonces si sus poderes pueden rivalizar con los nuestros, deben ser guerreras formidables.

Shura: no importa que tan poderosas sean, nosotros los caballeros dorados no dejaremos pasar a nadie, no importa si se trata de una mujer, eliminaremos a nuestro enemigo.

Setsuna (): caballeros dorados. -temía que ese incidente creciera más y se creará un problema más serio de lo que era- Estamos aquí en forma pacífica.

Saga: ¿Pretendes que me crea eso, cuando acabaron con todos estos hombres?.

Setsuna: no estamos aquí para intentar algo en su contra.

Haruka: pero lo haremos si nos provocan - mientras se cruzaba de brazos con altanería.

Shura: por lo visto, tú no tienes ni la menor idea de con quien estas tratando, ¿no es así? - se sentía provocado por ella.

Haruka: claro que la tengo. Ustedes son otros patanes que necesitan una patada en el trasero para entender que una mujer puede mandar. - algo dentro de ella la obligaba a decir ese tipo de cosas, algo que la hacía querer compararse en habilidad con esos hombres.

Shura: ¡Muchacha arrogante! ¡Te contaré esa maldita lengua para que dejes de decir insolencias!

Haruka: adelante, ¿Qué esperas? - Ambos estaban a punto de iniciar una pelea, hasta que Saga intervino.

Saga: ¿A eso es a lo que vienes, muchachita? ¿A provocar a las personas? -Haruka solo lo miro altivamente- Por qué si es así. Te daremos gusto. En cuanto a ti Plut, di lo que tengas que decir y acabemos con esto.

Setsuna: Saga, hasta hace unos días, Athena se acercó a nosotras para ofrecernos una alianza para hacer frente a un diosa que amenaza la tierra. Nuestra princesa acepto la propuesta que nos hizo. Ahora combatiremos por el mismo objetivo que los Caballeros.

Saga: ¡Patrañas! Athena jamás ha hecho una alianza con nadie, todos los dioses que han intentado apoderarse de la tierra, se han aprovechado de su amabilidad para provocar el caos.

Setsuna: te aseguro con toda franqueza que esa es la verdad.

Saga: no me lo creo. Lo que dices no tiene sentido para mí. El reino de la Luna no tiene por qué intervenir en los asuntos de la Tierra ni viceversa. Nunca se ha escuchado de algo semejante.

Camus: en lo personal, creo que debe de ser una artimaña suya para desviarnos de la verdad.

Michiru: y según tú. ¿Cuál es la verdad?

Saga: tu princesa desea crear un nuevo reino lunar aquí en la tierra. ¿O me equivoco? - El recuerdo de Tokio de Cristal les llego a la mente a las 4 y se quedaron calladas.

Shura: su silencio me tranquiliza -con sarcasmo- Si ese es el plan de su líder, díganle que lo piense mejor antes de hacer algo estúpido. Ya que nosotros la detendremos. -Los 3 se giraron para macharse- Ahora, largo.

Setsuna: de acuerdo, si no desean creernos, está bien. Buscaremos a alguien que lo haga. ¡Andando chicas!

Molestas por la incredulidad de los caballeros, las Sailors emprendieron camino para adentrase más en el santuario, en busca de las Amazonas de plata. Pero Saga se giró para detenerles el paso nuevamente.

Saga: ¡Les dije largo! ¡¿No lo entienden?! ¡No seguirán husmeando por aquí!

Sersuna: no pensamos irnos, tenemos una misión muy importante que cumplir😡.

Camus: entonces nos veremos obligados a matarlas.

Setsuna: no venimos a pelear, pero si nos impides cumplir con nuestro deber, que así sea.

Saga: muy bien. Si deseas que sea de esa forma, te mostrare mi gran poder. - ardiendo su cosmos dorado y este empezó a avanzar a paso lento hasta la Sailor del tiempo.

Setsuna: que quede claro que ustedes nos han obligado a llegar a esto. -Al sentir la actitud amenazante del caballero, la mayor de las Sailors lanzo su ataque sin titubear- ¡Grito mortal!

Con una mano logro atrapar toda la energía de la chica.

Saga: subestimar a un caballero dorado equivale a la muerte. Y ese es el precio a pagar si pretenden cruzar por aquí. ¿Sabiendo eso están dispuesta a correr el riesgo?

Setsuna: ya te dije que sí.

Saga: entonces... espero que estés preparada, porque voy a mandarte... ¡A otra dimensión!

Setsuna: ¡¿Que es esto?! ¡AAHHH! - De una manera muy repentina, una especie de portal asemejándose al universo se abrió, y Sailor Plut fue tragada por completo en aquel vacío de dimensiones. Todo había pasado tan rápido como si se tratara de un soplido de aire.

Uranus, Neptune y Saturn: ¡Sailor Plut!

Haruka: ¡¿A dónde la enviaste?! ¡¿Contesta?!

Saga: realmente no importa en donde se encuentra ahora, basta con saber que no la volverán a ver.

Hotaru: ¡Te exijo que la traigas de vuelta, ahora! -apunto con su lanza al caballero- ¡De lo contrario caerá sobre ti toda mi ira!

Saga: márchense o serán las siguientes.

Hotaru: ¡Maldito!

Haruka: ¡Lo pagaras caro!😠

Saga: ¡Te daremos una lección!

La desaparición de su compañera a manos de Saga, desato la cólera de las Sailors quienes se lanzaron al ataque.

Hotaru se lanzó de frente al guardián de la 3ra casa, mientras que Haruka y Michiru intentaban flanquearlo. Sin embargo... una corriente de aire frio detuvo a la chica de cabello aguamarina congelando el piso bajo sus pies, Camus estaba enviando una advertencia, lo mismo que Shura, quien lanzo un haz de luz para impedir que Haruka avanzara más.

Saga: no necesito ayuda de nadie. Para pelear con estas chicas me basto yo solo.

Shura: no dejaremos que te quedes con toda la gloria.

Saga: ¿Cuánta gloria puede haber en acabar con esas chicas?

Camus: basta, expulsemos a estas entrometidas, de una vez. - lanzando una esfera de aire gélido que la Sailor del mar solo pudo ver como un brillo de luz blanca debido a la velocidad con la que fue arrojada.

Haruka salió en auxilio de Michiru al ver como el destello que Camus arrojo de su palma derecha, estrello a su compañera contra uno de los antiguos pilares del lugar, pero sin poder dar más de 3 pasos, el caballero de Capricornio se lo impidió al dividir la tierra con una profunda grieta.

Haruka: ¡No puede ser! ¡Neptune! -gritó desesperada por la impotencia de ayudar a su más cercana compañera, la Sailor del viento se sintió temerosa de la seguridad de la chica de cabello verde marino- Tengo que hacer algo pronto.

Shura: tu no iras a ningún lado, soy su oponente, señorita. Los únicos caminos que tú y tus amigas pueden elegir, son; marcharse o morir. -avanzando a paso lento, el caballero se aproximó hasta estar a una distancia prudente de la rubia de cabello corto- Si quieres ir a salvarla, tendrás que vencerme antes. O tal vez prefieras rendirte para convencer a tu amiga de lo mismo y largarse del Santuario. Si ese es el caso, puedo considerar pedirle a Camus que le perdone la vida a tu hermosa compañera.

Haruka: no necesito ningún favor tuyo, Neptune se encargará de darle su merecido a tu amigo. Mientras tanto, yo me ocupare de ti.

El campo de batalla se formó de una manera súbita dividiéndose en 3 áreas para 6 gladiadores; 3 Caballeros Dorados contra 3 Sailor Scouts. Haruka estaba a punto de iniciar su pelea contra de Shura a un costado de Hotaru, quien se encontraba en medio del lugar plantando cara a Saga, mientras que Michiru se incorporaba para enfrentar a Camus del lado izquierdo...

Michiru (): debo tener mucho cuidado, esa ráfaga de aire frío que lanzo; fue muy rápida, no tuve tiempo de reaccionar. Debo pensar en algo. -analizaba todas las opciones que tenía a la mano.

Desafortunadamente ninguna de las 3 tiene la menor idea del tipo de rivales a los que iban a enfrentarse-

Michiru: Espero que estés listo porque no me contendré en mis ataques.

Camus: adelante, inténtalo. Muéstrame de lo que eres capaz. - El viento azotaba a ambos rivales meciendo sus cabellos y ondeaba la blanca capa del caballero, provocando un suspenso de lo que estaba por suceder.

Michiru: tú lo pediste, ¡Maremoto de Neptuno! - lanzo su técnica básica de forma enérgica para abatir lo más pronto posible al Caballero.

Camus: una técnica de agua. - levanto su mano para contener el golpe. El ataque en forma de planetoide azoto toda su furia en la palma del caballero de Acuario ante el asombro de la Sailor del mar.

Michiru: ¡E-es imposible! Lograste contener mi técnica con una sola mano. No pensé que alguien fuera capaz de eso.

Camus: ¿Este es el poder de una guerrera de la luna?. Pero... no entiendo que quieres decir con eso de "Maremoto" más bien parece una frágil y ligera brisa de mar. Temo que necesitaras algo más efectivo para hacerme frente. - Levantando su mano derecha, el Caballero provoco un destello para repetir una vez más la dosis de dolor y arrojarla lejos.

Michiru (): de nuevo. En cuanto su mano derecha emitió ese brillo, mi cuerpo se sacudió con fuerza. -Sentada en el piso, volvió a ponerse de pie- Debo encontrar la forma de eludir sus Ataques.

Camus: de nada te servirá con ese nivel, es insignificante. Muéstrame el asombroso poder de una Sailor Scout.

Michiru: ¡Cállate! La pelea acaba de comenzar, es muy pronto para hablar de más. -Arrojándose con la intención de iniciar un combate cuerpo a cuerpo, Michiru mostraba su habilidad de combate. Sin embargo, Camus evadía cada golpe con sencillez- ¡No puede ser! No consigo alcanzarlo, pero debo seguir tratando si quiero darle aunque sea un golpe.

Camus: es inútil. Puedo ver tus ataques en cámara lenta. Parece que las Sailors no son tan poderosas como cuentan las historias. -Atrapo su puño y lo congelo con una fina escarcha- Lo ves, no tienes la más mínima oportunidad, escúchame, no tiene caso que sigas, márchate. Sería una pena que una mujer tan bella como tú, tenga que morir tan penosamente.- Dándole la espalda, el joven se disponía a marcharse.

Michiru: ¡Infeliz! No creas que me daré por vencida. ¡Maremoto de Neptuno! - Girando de manera brusca, el caballero de Acuario cruzo sus brazos para repeler el ataque.

Camus: ¡Te dije que no tiene caso! ¡¿No lo comprendes?! - Después de repeler ese planetoide, Camus volvió a lanzar una descarga helada sobre Michiru.

Michiru: No. No logro entender cómo puedes detener todos mis golpes y ataques.

Camus: te lo diré porque no pareces darte cuenta del abismo que existe entre nosotros y espero que cuando lo sepas, te des cuenta de que nunca podrás ganarme con tus poderes. Nosotros los caballeros dorados no peleamos a una velocidad ordinaria como ustedes, sino todo lo contrario, somos capaces de movernos tan rápido como la misma luz y podemos golpear a nuestro enemigo miles de veces en una fracción de segundo.

Michiru: no puedo creer eso, nadie puede moverse tan rápido, ni siquiera Haruka puede hacerlo, es imposible😰. (): Cielos, Si lo que dice es cierto, entonces... Esa es la razón por la que no pude ver ninguno de sus ataques, quiere decir que debe haber lanzado golpes a la velocidad de la luz.

Camus: como te habrás dado cuenta, hay mucha diferencia entre nosotros dos. La misma que hay entre el cielo y el mar.

Michiru: me resisto a aceptar eso. ¡Reflejo submarino!

Camus: ingenua, ¿De verdad crees que el brillo de ese espejo te ayudara? Observa el brillo del 0 absoluto que lo congela todo. ¡Polvo de diamantes!

Michiru: no puedo creer lo que veo. ¡AAAAH! -Las 2 ráfagas chocaron, pero en una fracción de segundo, el viento de Camus supero a la ventisca de Michiru y la mando a volar muy alto hasta caer de cara al piso-
(): esa técnica... ya la había visto antes.

Camus: ¡Puedo matarte con un solo movimiento! ¡Entiéndelo! - De pie a unos pasos de ella, Acuario miraba como se ponía en pie una vez más.

Michiru (): Maldición, ¿Qué puedo hacer? Sus técnicas son muy superiores a las mías y sus golpes tan veloces que... ¿Cómo puedo hacerle frente a alguien como él? ¿Cómo puedo vencerlo si no puedo ver sus ataques, si no puedo evadirlos?😡.

Del otro extremo, Haruka miraba a su "amiga" en problemas y como ella parecía no ser suficiente para Camus. El sentimiento de querer ir en su auxilio, la ahogaba, pero no podía darle la espalda a su rival, o ella también acabaría de la misma manera, tenía que acabar con Shura lo más pronto posible si quería ayudar a Neptune.

Shura: tu amiga morirá a manos de Camus. Debieron irse cuando se les dio la oportunidad. - sacándola de su angustia el santo hizo hincapié en la oferta de retirada

Haruka: ¡Guarda silencio! ¡El único que morirá aquí, eres tú!

Shura: detesto a las mujeres como tú que hablan más de la cuenta.

Haruka: ¿Entonces que estas esperando? ¡Ataca! ¡Porque yo no mostrare clemencia! ¡Tierra... tiembla!

Shura: ¿Crees que será así de fácil? Semejante truco de 3ra no tiene garantía contra un caballero dorado. - no tenía ningún problema al esquivar la técnica de Uranus, quien enérgica, la continuo lanzándola más de 5 veces.

Haruka: No. No. No. Se supone que yo soy la más veloz entre todas las Sailor Scouts, ¿Por qué no puedo simplemente alcanzarlo? Pareciera que puede leer todos mis movimientos. No, eso no puede ser cierto. -Sacudió su cabeza negativamente para desechar esa idea- Sería una locura.

Shura: no es ninguna locura. Realmente esperaba un verdadero reto al enfrentarme a una Sailor como tú, creí que desmentirías el mito de que una mujer no puede ser tan fuerte como un hombre, pero con decepción veo que me equivoque.

Uranus se arrojó a los golpes y Shura solo daba un paso de un lado a otro, casi como si fuera un baile

Shura: ¿No lo entiendes? Es ridículo atacar con esa velocidad.

Haruka: veamos qué te parece esto. ¡Tierra... tiembla!

Shura: insolente. Me has lanzado "eso" tantas veces que la conozco de memoria.
-Dando un gran salto se colocó detrás de ella y puso sus empeines bajo los hombros de la Sailor-
Ahora serás víctima de la fuerza de tu propio truco. ¡Salto de piedra!

Haruka: ¡Ahhh! -Después de que fue enviada directo al cielo con esa fuerte patada. Uranus cayó como flecha de cara al suelo sin la oportunidad de meter las manos en su caída.- (): no me lo puedo creer. Se movió tan rápido que no lo pude ver. Nada había escapado de mi vista antes, por más veloz que fuera... Nada.

Shura: ¿Ahora lo ves? Una Sailor Scout no puede retar a un caballero dorado solo porque sí.

Haruka: ¿Cómo lo hiciste? ¿Qué truco usaste para escapar de mi vista? - interrogo cuando se ponía de pie lentamente, mientras que en su cara podían verse varios raspones debido a la caída.

Shura: ¿Truco dices? Mjmjmj.

Haruka: sabes a que me refiero. Desapareciste de mi vista de una forma muy repentina. Nunca me había sucedido antes. Yo soy la más veloz de todas mis compañeras, puedo moverme tan rápido como el viento.

Shura: sí, es cierto. Reconozco que tu velocidad de pelea es alrededor del match 5, muy rápido para cualquier mortal. Pero no puedes enfrentar a los caballeros dorados con algo así de lento.

Haruka: ¡¿Qué?!

Shura: como lo oyes. Para mí y mis compañeros, la velocidad del viento o la del sonido es tan risible, que no supone una amenaza hacia nosotros.

Haruka: ¿Qué quieres decir?

Shura: quiero decir que para vencer a alguien de mi nivel, necesitas moverte a una velocidad mayor.

Haruka: ¿Dices que pelear a 1500 kilómetros por hora es algo ridículo para ti?

Shura: Menos que eso, los números que acabas de decir simplemente no significan algo de lo que deba preocuparme. Que te quede muy claro, los caballeros dorados somos veloces, peleamos a 300000 kilómetros por segundo!

Haruka: ¡Es imposible! ¡Eso quiere decir que tu...! - dando un paso atrás por la impresión.

Shura: veo que entiendes, puedo moverme tan rápido como la luz, todos nosotros podemos hacerlo.

Haruka (): No. Tan rápido como la luz. Imposible, jamás podría moverme así de rápido. si eso es verdad, ninguna de nosotras podrá resistir mucho contra ellos. - empezando a ver el abismo que existían entre sus habilidades, saco su talismán

Shura: bien, veamos lo que tienes. ¡Ataca!

Haruka: Así será. ¡Espada de Urano... elimina! - Las ondas filosas atravesaron una imagen hetera del caballero de Capricornio, como si se tratara de un fantasma.

Shura: hazme reír

Haruka: no. Debe haber usado su velocidad de la luz para evadir mis ataques. Si lo hubieran alcanzado probablemente ya estaría acabado.

Shura: bromeas ¿Verdad? Sería una completa vergüenza que alguien como yo sea derrotado por tal truco... -El guerrero aparto un poco su capa que se mecía con el viento- Vamos, arroja tu tonto ataque otra vez, en esta ocasión lo detendré y veraz que ni siquiera el más fuerte de tus ataques surte efecto contra mí.

Haruka: De acuerdo, lo haré. ¡Espada de Urano... elimina! -Cumpliendo su palabra, se quedó de pie sin moverse de su sitio. Solo se limitó a parar cada onda con su brazo derecho en sincrónicos movimientos. Shura detenía todos eso filosos ataques con el antebrazo como si se tratara de un choque entre espadas.- I-Increíble.

Shura: ¿Ahora lo entiendes? Nunca podrás ganarme. Ahora, te mostrare lo que es el verdadero filo de una espada. ¡Toma esto! ¡Excalibur! - Una brillante luz surco por el piso, si no fuera por sus reflejos y movimientos tan agiles, ella no hubiera logrado salir de ahí en una pieza.

Haruka: ¿Pero qué rayos...? Fue un corte perfecto. -fijándose en el piso, noto la enorme y profunda grieta.- No cabe duda que es realmente increíble el poder que tienen los caballeros dorados.

Shura: ¿Por fin te diste cuenta?

Haruka: si, así que ese es tu poder, puedes separar hasta la tierra.

Shura: más que eso. Mis extremidades superiores e inferiores están afiladas como el acero y la presión que ejercen es la más fuerte entre los caballeros dorados, aun mas, mi brazo derecho es una espada sagrada que lo puede dividir todo, se llama; "Excalibur" - levantando en alto su brazo.

Haruka (): de mal en peor. No solo es fuerte y veloz, ahora también debo preocuparme por sus 4 malditas extremidades afiladas... estoy en problemas.

Hotaru, la Sailor de la destrucción, se enfrentaba a Saga de Géminis. Tenía que atacar de forma rápida y contundente, sin vacilar, después de todo, la forma en que hizo desaparecer a Setsuna en aquella masa de tiempo, fue temible.

Hotaru: regresa a mi amiga ahora mismo Saga, te lo advierto. - Amenazo apuntándolo con su lanza.

Saga: no estás en posición de amenazar a nadie muchachita pretenciosa, les pedí claramente que se marcharan de aquí, pero hicieron caso omiso a mis advertencias.

Hotaru: las que venimos a advertir aquí somos nosotras, una diosa malvada está apunto de atacar en cualquier momento y si no lo detenemos, todo estará perdido.

Saga: escuche suficiente hace unos momentos y no creo nada de lo que dicen. ¿Pretendes que trague esa sarta de mentiras? Athena nunca ha hecho una Alianza desde la era mitológica, ¿Y ahora ustedes llegan aquí para decirnos que estamos del mismo bando?

Hotaru: por favor, escucha lo que estoy diciendo, nosotras...

Saga: ¡Silencio! Te ofrezco la oportunidad de marcharte. Pero si quieres quedarte a morir es tu decisión.

Hotaru: no lo hare, tenemos una misión que cumplir. Y no me moveré de aquí hasta que hayas traído de vuelta a Setsuna del lugar al que la mandaste.

No muy lejos de ahí, Darién avanzaba a grandes zancadas por los techos del Santuario hasta llegar a un enorme campo de rosas, la neblina roja que la rodeaba desprendía una dulce fragancia. Pero la plática de un par de guardias le llamo la atención.

?: ¡¿Cómo dices?! ¿El santuario está bajo ataque de unas intrusas?
?2: Si, se dice que son muy fuertes. Acabaron con 4 caballeros de bronce en segundos.

?: Esto está mal, podríamos ser los siguientes.
?2: Tranquilízate, los caballeros dorados ya se están encargando de ellas en este momento.
?: tienes razón, no por nada son los más fuertes dentro del ejercito de Athena.

Darién (): Demonios, si eso es cierto las chicas están en problemas, debo ir ayudarlas de inmediato. - El joven salió de ahí a toda prisa sin notar que alguien la estaba observando.

Saga: -no podía evitar sentir cierta curiosidad por la Sailor de la destrucción- No cometas el mismo error que tu amiga, márchate si no quieres sufrir el mismo destino que ella.

Hotaru: no me subestimes por mi apariencia, mi poder es mucho mayor que el de mis compañeras. ¡Yo soy la Sailor más poderosa de todas!

Saga: lo dices muy segura de ti misma, por tu bien espero que sea cierto.

Hotaru: bastara con decir que soy tan fuerte como para destruir un planeta si me lo propongo.

Saga: si una pequeña como tu puede destruir un planeta, entonces alguien como yo puede destruir las estrellas.

Hotaru: no es ninguna broma Saga, no estoy presumiendo. - no paso por alto eso.

Saga: yo tampoco.

Corriendo a toda prisa por los techos y los viejos pilares del santuario, tuxedo masck llego a la explanada que marcaba la entrada a los 12 casas zodiacales, parado sobre un peñasco, Darién analizaba la situación desde una zona elevada, algo habitual en él. No tardó mucho en darse cuenta de la desventaja en la que estaban las chicas al enfrentarse a esos 3 hombres, pues, a pesar de la distancia, podía apreciarse el gesto de frustración de las 3 chicas en cada una de sus peleas.

Darién: -sudo al presenciar la triple batalla- (): Esto no me agrada, a pesar de que ellas están transformadas en su forma eternal, existe una gran diferencia de poderes entre las chicas y esos tipos.

La reencarnación de Endymion saco de su saco unas rosa, pero algo llamo su atención, o mejor dicho, noto que algo faltaba.- ¡No puede ser! ¡¿Dónde está Setsuna?! ¡¿Acaso ella...?!

La situación no podía continuar así, tenía que intervenir en el acto o las chicas lo pagarían caro. Saco otras 2 rosas rojas y las lanzo con todas sus fuerzas, tal vez el ataque sorpresa les podría dar una leve ventaja contra aquellos tipos o mínimo su ayuda podía nivelar la balanza. Pero sin que se diera cuenta, sus rosas fueron atravesadas por otras 2 rosas pero negras.

Darién: ¡¿Pero qué diablos...?! - volteo a ver en todas direcciones para saber quién había sido el responsable de clavar sus rosas en el piso. Pronto se daría cuenta de quien se trataba.

A unos 40 metros, recargado de perfil junto a un pilar, un hombre de bello rostro sostenía una rosa roja en sus labios y con un soplido, arrojo la flor con intención de advertir al joven.

?: la técnica de la rosas son lo mio, por lo tanto detesto que alguien me imite.

Daríen (): una armadura de oro. ¡¿Quién eres tú?!

?: Soy el guardián de la 12va casa, soy Afrodita, el caballero dorado de Piscis!

Daríen: si eres un Caballero, ¿Por qué me atacas? Nosotros no tenemos nada en contra suya.

Afrodita: es difícil creer eso, ya que te he sorprendido intentando atacar por sorpresa a mis compañeros para ayudar a tus amigas.

Daríen: si hice eso, es porque no puedo permitir tal arbitrariedad, proteger a esas chicas es mi prioridad en este momento y tú no me lo vas a impedir.

Afrodita: bien, si tantos deseos tienes de pelear con alguien, que sea conmigo. Te enseñare el auténtico terror que puede inspirar una rosa. - saco una rosa e inhalo su aroma al igual que Darién sacaba una de las suyas de su saco.

El joven lanzo su rosa en contra del Santo pero con el dorso de la mano, el Caballero la rechazo. - Patético.
Afrodita: tus ataques son un verdadero insulto a la verdadera letalidad que reside en una rosa. ¡Conoce la mortal fragancia de mis bellas amigas! ¡Rosas demoniacas reales!

Él fue atacado por las rosas, pero no tenía mucho daño en su cuerpo que digamos. Al contrario, la fragancia que despedían aquellas flores era agradable. -
Daríen (): ¿Pero qué clase de técnica es esta?

Afrodita: ¿No te has dado cuenta verdad?😏

Daríen: ¿Darme cuenta de que? -En ese instante, comenzó a toser sangre.- ¿Pero que me está pasando?

Afrodita: mis rosas, no son rosas ordinarias como las tuyas. Las mías son venenosas, cualquiera que inhale su fragancia, no tiene otro camino más que la muerte.

Rápidamente, el joven se tapó medio rostro con su capa para impedir que ese veneno llegue a sus pulmones.

Daríen (): debo tener cuidado con esa fragancia, si procuro evitar respirarla lo más posible, podre pensar en algo.

Afrodita: oh, ¿Crees que tratando de evitar su aroma ya no podré acabar contigo? Pero que iluso, te mostrare quien es un verdadero amo de las rosas.

Mientras tanto en Japón en la nueva limusina de la fundación Gradd avanzaba a toda velocidad por el enorme puente suspendido de 6 carriles que atravesaba el gran río para unir dos distritos de Tokio. Dentro, Saori y sus caballeros compartían el vehículo con las Sailor scouts para dirigirse al aeropuerto principal de la ciudad.

Continuará.....