Viejas Heridas

Quince años atrás

Miraba desde lejos las luces del santuario, aun no se acostumbraba a estar lejos de sus amigos...pero después del ataque de Marte procuraba no descuidar nada.

Sus hadas vigilaban el interior, una tierna sonrisa se formo en sus labios al escuchar la voz de Saori tratando de calmar a un pequeño....a Koga.

La calma desapareció en un instante...el cielo estrellado de tiño de rojo y por este, se podía ver Marte.

Presente, Santuario de los caidos

— Es imposible... —dijo incrédula

— Pues no, el sello se rompió...y esta buscando las tres gemas de los dioses. —comento con tono serio

Retrocedió con el terror en su rostro.

— Hablemos en privado, Kei, regresa al santuario en caso de que pase algo

— Por supuesto

Grecia, Santuario de Athena

— Pues si te soy sincera Kiki...no confió en el, desaparece cuando quiere y se reusa a portar armadura...es sospechoso —dijo Tatiana

— Kei es un chico solitario, no es nada raro, a demás, Seiya confía en el, no veo el problema —el tono con el cual respondió sonaba molesto

Puede que sea un espía.

Ante la palabra Kiki se tenso mirando con incredulidad a Tatiana

— ¿Y espía de quien? —dijo Hoyga subiendo las escaleras acompañado de Shun

— La hija de Hades —dijo con seriedad

Los tres se miraron entre ellos, Hyoga y Shun confundidos y Kiki inconforme por la insistencia de Tatiana

(...)

Dos años atras, Palaestra

Las carcajadas de Geki la tomaron por sorpresa haciendo que se tambaleara

— Es raro verte salir de tu escondite Lia —solto otra carcajada— Sabes que puedes venir a verme cuando quieras — le dio una palmada en la espalda

— Si, si Geki —dijo con una leve sonrisa.

Por extraño que pareciese solo Geki y unos pocos la recordaban, y eso...la tranquilizaba un poco

Caminaban por los pasillos con tranquilidad, suspirando con fastidio cuando pasaban los estudiantes haciendo comentarios ya sea sobre su cicatriz, su cabello, o la venda que cubría su brazo izquierdo.

— A crecido bastante —comento Geki viendo la tela.

— Supongo — respondió con desgano

Bajo la cabeza un tanto deprimida, sus pensamientos fueron interrumpidos por un golpe en su hombro.

— Fíjate por donde vas niña —dijo el chico con cara de pocos amigos

— El que se tiene que fijar eres tu mocoso —dijo con la misma expresión, e incluso...la suya era mucho mas antipática

Se quedaron mirándose fijamente por un momento, podía percibirse el cosmos hostil que emanaba de ambos.

— ¿Cual es tu problema?

— Olvidalo, no vales la pena pequeño renacuajo —sonrió con burla dándose vuelta retomando la caminata con Geki

— Jajajaja —carcajeó— sigues teniendo ese carácter, no has cambiado nada

— Ja...por cierto ¿quien era ese chico?

— Su nombre es Eden, es el caballero de Orion

Sonrio al escucharlo

(...)

Suspiro pesadamente viendo como el sol se ocultaba tras las montañas.

— ¿Que piensas hacer? —pregunto Anubis mirando a Liana con preocupación

— El vendrá por mi... —dijo mirando su mano— no me voy a quedar esperando a que venga por mi...

— Perfecto

— Solo necesitamos una cosa...el problema, es que esta en el santuario de Athena

Proximo capitulo: Infiltrados

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