Santuario de los caidos

— ¿Hilda? —pregunto confundida mientras que Kai afirmaba— ¿para que me quiere a mi en Asgard?

— No lo se señorita, a mi también me resulta extraño... —comento dándole una carta

Tomo en sus manos y la abrió leyendo con curiosidad el contenido.

— Kai...llama a tus hermanos...iremos a Asgard

(...)

Santuario de Athena, Grecia

Los gritos, alaridos y quejidos se escuchaban a la distancia, el cuerpo cayo al suelo levantando una nube de tierra

— Maldito engreído —dijo entre dientes mirando con rabia a su rival

— ¿Ya fue suficiente? Date cuenta que no tienes oportunidad contra mi —dijo mirándolo con frialdad

“Kei”

Escucho su nombre por un momento

— ¿uh? —miro hacia el cielo— Señorita... —susurro

Aquel novato trato de aprovechar la distracción de Kei atacándolo por la espalda, sin embargo se giro y con un rápido movimiento coloco un cuchilla en su garganta

— Aparte de idiota...un cobarde...no me sorprende que seas discípulo de Tatiana —comento con un tono de repugnancia en el nombre

Aparto el arma y de un empujón lo llevo al suelo.

— No te atrevas a hablar de la Señorita Tatiana de esa forma

Fue por un instante, pero podria haber jurado que vio como las pupilas de Kei se hacían afiladas

— Un excelente combate Kai... —la voz de Kiki llamo su atención 

— No fue nada maestro —dijo haciendo un ademán

— Aun asi, no comprendo por que te negaste a portar la armadura de plata...—comento con una leve sonrisa

— Puede que usted y los maestros piensen que estoy listo, pero yo no me siento de esa manera —hizo una reverencia— si me disculpa maestro, me retiro
— Adelante

(...)

Asgard, Palacio Valhala

Miraba con extrañes al rededor, sentía un aura diferente en el palacio.

— ¿Sucede algo señorita? —pregunto Kai preocupado

— Mmmm

— Ya te diste cuenta, ¿no es así Liana? —Hilda apareció acompañada de dos doncellas sonriendo con nostalgia

— Mas o menos...tienes un problema y grande, ¿cuantos? —pregunto ya mas interesada

— Decenas —se escucho el suspiro de frustración

— Te juro que yo no eh tenido nada que ver... —dijo con un tono de angustia, algo que sorprendió a Kai

— Tranquila —sonrió con cariño

— ¿Y...? —dejo la pregunta en el aire

— ¿Lyfia? Esta fuera, acompañame —la invito con un movimiento

(...)

Santuario de los caídos

— Venga Kei, debe haber alguna...según se, Yuna es muy bonita —le pico su hermano

— Ya te dije Ken, no estoy interesado en esas cosas —respondió sin apartar la vista del libro

— ¿Volviste a tomar un libro de la biblioteca de acuario?

Antes de que respondiera el eco de un caminar tranquilo resonó poniéndolos en alerta.

Miraron confundidos al chico que caminaba hacia ellos mirando al rededor emocionado como un niño

— ¿Ustedes son los guardianes de mi precioso Ónix? —pregunto con una sonrisa

— ¿Ónix? —cuestionaron ambos a la vez

— ¿No? Entonces los puedo matar —dijo con total tranquilidad

Ambos trataron de atacarlo, sin embargo, cayeron al suelo con un simple movimiento que el desconocido realizo.

— ¡Auch! —Sintió un golpe que lo desequilibro liberando a los hermanos

— ¡Señorita! —exclamaron al ver a Liana parada detrás del chico jugando con una roca en la mano

— ¡Mi Ónix! —exclamo contento dispuesto a abrazarla

— Tienes...cinco segundos para decirme que haces aquí...Anubis, no sales de tus dominios sin que sea necesario

— Tu ganas —dijo borrando la sonrisa y tomando una actitud seria— El sello de Amón se a roto...