Estaban en combate, lo sabía muy bien. Pero algo, algo dentro suyo le obligo a mirar y bendito por Athena que no estuvo mal.
Su pelo de color oscuro como la noche mas desolada, piel nívea como la nieve del Artico. Pero eso no era lo mas impresionante de aquel ser que ahora era su enemigo. Le había fascinado sus ojos. Orbes de color del hielo más frío, fríos y helados, detonaban superioridad y cierto cansancio. Algo en su interior dio vuelta. Su mirada era fría pero tenía una belleza única. ¿Era esta la belleza que solo los dioses poseían?

Nos volvemos a ver Pegaso, igual de divino que siempre. Estoy cansado, cansado dd conocerte en tantas vidas pero siempre eres tu. Tu esencia sigue ahí. Determinado, valiente, esa es tu esencia, y es lo que mas amo de ti.

Siempre te ves ante estos cansados ojos como el original. Ai, mi bello pegaso, tu eras el primer representante de la armadura de pegaso, porque te cortaron las alas? Recuerdas el amor eterno que nos juramos bajo el manto de Nix? No, claro que no, se encargaron de regresarte al "camino del bien". Solo mi alma muerta te podría salvar, Ai, mi bello pegaso de alas blancas, aunque yo muera, tu no me miraras.

Porque sus ojos me dirigen miradas de amor y pena? Cada vez que las siento mi corazón se estruja, es pena, debe serlo. Atacó con fuerza. Atacas con desesperación. El sudor difumina mi vista. Tus lágrimas impiden tu visión. La emoción de mi corazón me duele. El latido de su corazón te duele.

Athena esta libre, vestida en su armadura. Es mis sentencia de muerte. Ella nunca había llegado a mi verdadero cuerpo. Pero, sabes? No estoy enojado contigo, solo maldigo la estrella en la que nací porque humano no fui. Viví feliz a tu lado, momento de llorar lejos de ti. Ahora viviré en recuerdos en una larga muerte