[1]"la compañera"
Era de noche, la luna llena servía como luz natural sin opacar las estrellas, dos personas hablaban, una era una joven arrodillada, de cabellos fucsia hasta la cintura, ojos verdes acompañados con unos lentes y piel clara, esta vestida con una armadura plateada con detalles de oro y como accesorios tenia un escudo dorado, y el otro era un báculo de forma circular con una cabeza de águila dentro del ese círculo de oro. Parecía en desacuerdo con el hombre que tenía al frente, de espaldas y vestido también con armadura azul con dorado, de espaldas solo se podía ver su largo cabello plateado que le llega más o menos por la cintura que hacía juego con su larga capa blanca.
— Es que usted no lo comprende. — comenzó la joven de cabellos fucsia, mirado con recelo al hombre, que se notaba su altura sobre la de ella. — No está preparada para una guerra tan violenta. Apenas tiene diez años... y nisiquiera puede...
— Soy consciente de lo que le pasa, y no quiero que pelee. Sólo quiero que vuelva a su hogar, donde pertenece. — respondió de forma rotunda para hacerle entender a la muchacha. Pero sólo consiguió más quejas.
— ¡Ella nisiquiera recuerda este lugar! — exclamó levantándose harta señalando a los alrededores, estaban en un templo griego blanco. Parecía oscuro el la noche. — Gran maestro, mi hermana, tal vez sea el ser más poderoso del universo y sea la única forma de derrocar el mal que persigue a este mundo. Pero no lo aceptaré ¡Nunca!
— ¿No aceptas que? — repitió de forma interrogante, tomando de sorpresa a la joven. — ¿No aceptas que ella este aquí? ¿...O no aceptas que ella sea más fuerte que tú? Astrid.— finalmente se volteó con una fulminante mirada con sus ojos azules claros que parecían iluminar por la noche, camino para quedar a lado suyo mirado al frente ondeando su capa por el viento.
— Yo jamás .... podría...
— Es una orden, Tu sólo limitate a hacerla. — y no quiso decir mas, se fue dejando sus palabras en el aire, mientras bajaba por las anchas escaleras el viento se llevaba su capa a un lado.
La joven en su furia interna maldecia por dentro, y levantó la mirada hacia la luna. En silencio.
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"Todo tiene un principio y un final pero lo que importa es lo que haces en el proceso..."
En Japón, en el Instituto Natsu no hana todos estaban felices por el nuevo año de clases y el comienzo del verano, amigos reencontrarse después de mucho, los profesores preparándose para dar por empezar las clases.
Pero alguien no estaba tan animado como sus demás compañeros, en cambio, dormía en la clase de historia ya que no había dormido bien en la noche anterior. Quería repasar las notas que tenían del año pasado para no se le olvidará nada y se le había perdido la noción del tiempo; se sentía cómodo hasta que tuvo que despertar de golpe.
— ¡Criss Ángel! — reclamó enojada la profesora haciendo que el chico rubio de ojos azules, alto y piel clara se exaltara.
— ¡...! ¡Lo siento! ¡Prometo no dormirme de nuevo, profesora! — dijo nervioso Criss a cruzarse con mirada penetrante de su maestra, seguido se escucha las risas de sus demás compañeros.
— Si lo vuelves a hacer irás derechito a la dirección ¿Entendido? — dijo sería advirtiendo.
— Si.. — dijo con la cabeza gacha, en eso se escuchó otra risa baja pero Criss pudo oírla igualmente a su lado izquierdo, se encontró con un chico de cabello negro largo, ojos cafés piel algo clara que inflaba sus mejillas tratando de contener la risa. El rubio lo fulmina con la mirada de pocos amigos, aunque él era uno de ellos... — ¿Qué miras Tadashi? — preguntó obstinado.
— Valla primera impresión, Ángel jaja — dijo en un tono de burla el peli negro.
— Cállate... — Acto seguido metió su cara en su libro enojado. — Además, nosotros estamos aquí desde que comenzamos la secundaria. Y a lo que a mi respecta. Yo tengo un historial perfecto... — agregó con aires de grandeza provocando más gracia a Tadashi.
— "Casi" perfecto. ¿O acaso ya Olvidaste nuestra bromita que le hicimos al Sr. Arnold? — preguntó curioso y sonriendo arrogante, Criss esbozó una sonrisa maliciosa por tales recuerdos.
— Eso fue porque me hiciste hacerlo... — Se defendió mirando hacia otro lado con los ojos.
— ¡Si, claro! ¡Y yo soy Deathpool!— respondió con un tono sarcástico. — Ambos sabemos que ese tipo era una basura, por ejemplo... te puso una nota mala cuando todo estaba más que bien, eso ya es injusticia... — siguió con los brazos cruzados molesto.
— A ti también te puso una nota mala....
— Pero era que me equivoqué en casi todas las preguntas... — responde Tadashi ,— Pero tú siempre tuviste buenas notas así que podíamos que permitir que ese viejo haga tal cosa...
Si, Criss y Tadashi eran mejores amigos desde la infancia se cuidaban del uno del otro sin importar que, aunque hicieran una que otra travesura de niños...
— Eres una mala influencia, Hisgurashi... — dijo riendo, esa broma fue una de las razones por la que eran amigos; si, ese profesor era un asco de persona, tuvo la osadía de evaluar erróneamente a Criss que era un niño de apenas de once años. Y le tenía miedo a ese hombre, y se le encontró con Tadashi que le sugirió hacerle una broma. Pusieron una tachuela en el cojín del profesor, bueno, varias de hecho, y el hombre cuando se fue a sentar sintió el gran dolor retorsiendose en el suelo, y todos los estudiantes reían por tal escena y como no se dio con el culpable le dieron detención a toda el aula. Pero sin duda valió la pena...
En eso se oye que la puerta se abre suavemente, era la directora del Instituto que llamaba a la profesora con la mano y esta la sigue, eso le pareció muy raro a los dos chicos que cruzaron miradas confundidas. Y la mismo profesora vuelve y se pone al frente de toda la clase para comunicar algo.
— Presten atención por favor... — dijo tranquilo ganándose la atención de todos. — Acaban de decirme que tenemos una nueva estudiante, puedes pasar... — Se dirigió a la puerta que estaba entre abierta, todos de quedaron callados al ver a una chica de tes clara, de poca estatura, ojos azules claros y cabello largo rosado claro. Sin duda destacaba entre todos los estudiantes. Tadashi y Criss se quedaron viéndola embobados, se veía adorable y muy hermosa, con esa sonrisa tímida con la cabeza gacha y como sus mejillas pintadas de ese leve tono rojizo. Se notaba un poco avergonzada, hasta que..
— Hola... Mi nombre es Akira-Yoko... — finalmente dijo haciendo que el peli negro y el rubio se estremecieran, eran tan bella su voz, tan suave y melodica que si cantará podría a dormir al todo el mundo.
— ¿De donde vienes Akira? — preguntó la profesora sentándose en su escritorio.
— Soy de Grecia, pero eh estudiado por toda Europa y Asia central... Para aprender sobre diferentes aspectos de estudio... — dijo con un poco de pena.
— Muy bien, tengan en cuenta que ella aún está aprendiendo nuestro idioma, así que por cualquier cosa que necesites puedes preguntar... — la maestra amablemente para darle una señal para que sentará, ella agradece asistiendo.
Mientras ella caminaba hacia un asiento vacío que estaba frente a Tadashi, el mismo no dejaba de verla. Al igual que todos los demás. Casi nadie había visto a una chica tan peculiar, la maestra dijo que sacarán sus libros para comenzar a escribir, Akira cuando saca su libro se le cayó otro. Tadashi se bajo para tomarlo y devolverlo.— Toma se te había caído...
— Gracias... — dijo ella mirándolo junto con una sonrisa, Tadashi se quedó paralizado por unos instantes hasta que volvió a lo suyo.
Cuando ya tocaron el timbre del recreo, los dos chicos caminaban conversando sobre la nueva muchacha.
— Es muy linda...— opinó Criss un poco sonrojado leyendo un libro y a su lado estaba Tadashi que tenía la mirada perdida en el cielo. — ¿Tadashi? ¿Estas bien?
— ...Si... es que no había visto a una chica tan diferente... Creo que me tomo por sorpresa — Suspiró el peli negro volviendo en sí, en eso alguien le llega por detrás y pone sus manos en los ojos de Tadashi mientras reía bajo. — A ver... eh... tienes manos de bebé así que eres Kioro... — dijo sonriendo burlón.
— ¡Que no tengo manos de bebé! — reclamó una chica de cabello castaño largo por después de los hombros, ojos igual de cafés que de los de Tadashi que le da un golpe en el brazo.
— ¡Claro que si tienes, hermanita! ¡Sólo siente esto! ¡Son tan suaves! — dijo mientras sonreía y le tomaba de la mano a la joven castaña.
— ¡No es cierto! — reclamó casi en un berrinche de niña.
— Kioro, si lo sigues negando el te va a seguir dando lata. Sólo admitelo — añadió una chica de cabello corto, castaña clara con mechas californianas en las puntas, ojos azules y tes clara.
— Escucha a mi hermana, Tadashi es más molesto si le das el gusto... — Suspiró Criss cansado mientras se escogió de hombros.
— Yo ya se, después de todo soy su hermana y él me a dado lata desde antes de que yo naciera. — dijo Kioro resignada mirando de reojo a su hermano mayor que sólo se encogió de hombros.
Y comenzaron a reír, hasta que cierta melena Rosada llama su atención, si. Akira estaba caminando tranquilamente por el pasillo para salir al patio, Criss y Tadashi la siguieron con la mirada hasta que ya no pudieron verla más.
— ¿Ella era la chica nueva?— pregunto curiosa la castaña de mechas amarillas.
— ¡Que mona! ¡Me encanta el color Rosa de su cabello! — añadió Kioro feliz.
— Su nombre es Akira-Yoko y es extranjera... — dijo Criss volviendo en sí. — a ido a muchos institutos de Europa y ahora está estudiando nuestra cultura...
Ambas chicas notaron el comportamiento de sus hermanos y ya sabían lo que pasaba. Y ambas cruzaron miradas cansadas para irse y dejando a sus hermanos en las nubes.
Cuando se encontraron de nuevo con la peli Rosa que estaba en una banca, sola. Con la cabeza gacha pensativa.
— Pobre... debe ser muy difícil para ella, ser nueva y de paso de otro país, todo le parecerá extraño... — habló la peli castaña de mechas amarillas con lástima.
— Vamos con ella, Camila. Tal vez sea amable — dijo sonriendo Kioro mientras avanzaba a saludar a la joven seguida de Camila que asistió. Cuando llegaron notaron que estaba un poco triste así que se acercaron más. — ¡Hola!
— ¿H-Hola? — responde ella tímida y sorprendida.
— Mi nombre es Kioro Hisgurashi y ella es Camila Ángel, es un gusto saludarte — dijo ella señalando Seguidamente a si misma y a su amiga. — Me gusta tu color de cabello.
— G-Gracias... Mi nombre es Akira-Yoko... — dijo sonriendo un poco temerosa.
— ¿Eres del extranjero? ¿De donde? — preguntó curiosa Camila mientras se sentaba a su lado derecho y Kioro en el izquierdo.
— Bueno... Nací en Grecia... Pero eh estado en toda Europa...
— ¡Que bien! ¡Que suerte tienes! Ojalá yo pudiera viajar tanto...
— Es sólo para poder estudiar, no es para tanto.... — dijo un poco avergonzada jugando con un mechón de su cabello.
— Y dime... ¿Qué tinte de pelo usaste para tener ese color? — preguntó Kioro refiriéndose a su cabello, — Es tan bonito...
— Yo.... No use tinte.... es de nacimiento... — dijo bajando su tono de voz.
— ¡Waoo! ¡¿Enserio?! Es increíble.... — admiro ella con una sonrisa.
— H-Hola .... — de pronto alguien más se une a la conversación, resultaba que era Tadashi y Criss que vieron que sus hermanas menores con la chica nueva, así que decidieron acercarse. Aunque estaban sonrojados.
— ¡Tadashi! ¿Ya te presentaste con Akira? — dijo guiñiandole para que lo hiciera.
— Hola... Mi nombre es Tadashi Hisgurashi y soy el hermano mayor de Kioro, es... un gusto saludarte... — dijo con un poco de pena al ver que lo miraba fijamente a la cara como si estuviera buscando algo....
— Por casualidad... ¿Tú estás en la misma clase que yo? — preguntó con una sonrisa.
— ¡Ahh! Pues, si yo me senté detrás de ti...
— Es un gusto.... — dijo ella.
— Y el es mi hermano, Criss Ángel también está en la misma clase que ustedes... — dijo Camila llamando la atención de Akira hacia su hermano que se sonrojo más.
— ¡Hola!— dijo mas animada.
Pasaron el rato conociéndose y haciéndose más amigos hasta que llegaron a un tema en cuestión.
— Tadashi ¿Cómo te fue en el examen de hoy? — preguntó muy curiosa Kioro viendo sospechosamente a su hermano.
— ¡Oh! Eh... Yo...
— Reprobo, otra vez y en el primer día.... — dijo Criss cansado cruzandoce de brazos.
— ¡Criss! — reclamó Tadashi enojado y avergonzado, ese era un tema que todos saben, bueno. Excepto Akira, claro, y no quería que ella lo viera como alguien irresponsable.
— ¡Tadashi Hisgurashi! ¿¡Cómo piensas sobrevivir en este año sin ni estudias!? — preguntó enojada Kioro poniendo sus puños en la cintura, parecia su madre en vez que su hermana menor.
— No es que no estudie, es que no entiendo y por eso me va un poquito mal... — Se defendió un poco nervioso al ver la mirada fría de Kioro.
— ¿"Un poquito"? — dijo haciendo comillas con los dedos, pero después se resignó y negó con la cabeza. — No tienes remedio...
— Yo... podría ayudar... — la que habló fue Akira ganándose la atención de todos. — E estudiado en muchos países y tal vez pueda ayudarte, bueno. Si quieres... — dijo con un poco de pena.
— ¿Harías eso? En serio te lo agradezco mucho.. — dijo Tadashi.
— No sólo él, yo también te lo agradecería, Akira. — habló Kioro.
— ¡Por fin vas a estudiar cómo se debe! — dijo Criss riendo aliviado, pues ya no tenía que copiarse de él.
La campana retumba en los oídos de los amigos, era hora de ir a la siguiente clase....
Pasaron unas semanas y ya estaban dando contenidos para estudiar, los cuales Akira tenía que explicarle a Tadashi, a cambio Tadashi la ayudaba con sus problemas de lenguaje, en uno de esos días en la biblioteca....
— Gracias Akira, de verdad no sabría como sería mi promedio antes de conocerte.... — dijo sonriendo un poco avergonzado.
— No tienes que agradecer, igual tu me estas ayudando con mi japonés, esto es como una forma de agradecimiento.. — sonrió ella.
Hace un tiempo que quería preguntarle sobre algo, pero estaba un poco inseguro de que lo tomará a mal.
— Akira... ¿Tú tienes novio? — preguntó el peli negro que la miro de reojo duplicando en sus adentros que dijera...
— No, no tengo novio ¿Porqué preguntas? — Se sonrojo un poco, nunca le había preguntado algo parecido.
— P-Por nada, sólo quería saber... — Suspiró, ella volvió a ver su libro, su expresión cambio un poco más seria y de repente estaba recogiendo sus cosas.
— Tengo que irme, adiós — dijo rápidamente y se fue de la biblioteca: Tadashi estaba extrañado de ese cambio de humor, suspiró cansado, creyó que fue su culpa.
Lo que ignoraba era que algo más le dijo que se fuera de allí...
* Hola! Este es nuevo Cap 1, si, me tarde una eternidad. Pero fue por una buena razón.
Como saben vivo en un lugar muy lejano que se llama Venezuela y no hay WiFi así que estoy muy atrasada, de paso están las clases...
Bueno no importa ya lo publiqué y allí lo tienen sólo una cosa más...
Que el poder del cosmos este con ustedes.
Chao! :3*
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