—¡Mucho gusto Kenneth Cooper de ciudad Cristal! —Federico saludó a Kenneth estirando su mano derecha.

—Mucho gusto Federico...perdón señor Federico —contestó al mismo tiempo que ambos estrechaban sus manos.

—¿Usted es el padre de Jack? —preguntó Kenneth al termino de saludarse.

—Si —confirmó Federico—. Soy su padre y también soy el líder de esta bella ciudad, Glaciem.

—Sí, sí que emocionante... —mencionó Jack sarcásticamente.

—Siempre dañando el momento —comentó Federico mirando con el ceño fruncido a su hijo.

—¿Siempre? —preguntó Kenneth extrañado.

—Yo me entiendo y sé que él también lo entiende a la perfección... —dijo Federico por lo bajo.

—Yo no dañó el momento...seguramente Kenneth vino por algo sumamente importante y no solo para hablar de que tú y yo somos parientes... ¿verdad Kenneth? —Jack estaba enojado y Kenneth lo notó.

—Ah... si cierto... —Kenneth rio nerviosamente.

—Es verdad, Jack tiene razón —agregó Arthur—. Kenneth y yo vinimos por una razón muy importante.

—Pero no creo... ¿qué quieran hablarlo aquí o sí? —dijo Federico mientras se iba alejando poco a poco de ellos—. Vengan vamos a otro lugar para hablar tranquilamente y no se preocupen por los destrozos que hay, ya se encargarán de eso los obreros.

Federico se dirigía hacia uno de los edificios más grandes de Glaciem, Arthur y Kenneth lo siguieron, Arthur iba detrás de Federico siguiéndole el paso mientras que Kenneth iba más atrás con Jack, el joven Pietro estaba sumamente callado.

—¿Qué pasó, estás un poco raro? —le preguntó Kenneth al verlo así.

—¿Raro, por qué? —preguntó Jack de forma seca.

—No sé... cambiaste tu actitud de repente —contestó Kenneth mirándolo.

—Estás...cómo más frío —exclamó Kenneth esperando que su amigo se riera.

—Eso sería algo literal —Jack sonrió por escasos segundos—. Pero mi cambio de humor se debe a...

—¿A tú padre? —Kenneth completó la oración de Jack.

—Sí a él, el famoso Federico Pietro, el líder actual de ciudad Glaciem —dijo Jack casi de forma sarcástica—. Te lo resumiré...él y yo no hemos tenido una buena relación padre e hijo durante muchos, tanto así que hasta tú te habrás dado cuenta.

—¡Hey no soy tan tonto! —dijo Kenneth—. Sí es muy obvio que no se llevan tan bien.

Llegaron a la puerta del edificio, los cuatro entraron y se subieron a un ascensor, durante el trayecto Arthur y Federico estuvieron hablando sobre cosas de su juventud mientras que Kenneth y Jack estaban en silencio escuchando todo.

Al salir del ascensor, caminaron por unos pasillos hasta abrir una puerta transparente, al entrar se sentaron alrededor de una mesa redonda hecha de hielo.

—Bueno Kenneth dinos...¿a qué se debe tu prestigiosa visita? —preguntó Federico apoyando sus codos en la mesa y con las manos juntas.

—¿Prestigiosa? —preguntó Kenneth antes de reírse por unos segundos. Su maestro, Arthur Benner le golpeó la espalda de manera disimulada para que dejara de reírse. Su golpe fue un poco brusco ya que Kenneth tuvo que toser despues de recibirlo.

—¡Perdón! —se disculpó intentando sobar su espalda.

—La razón porque estoy aquí es por mi tercer elemento, el elemento hielo —empezó a contarles—. Después de unos días que terminó la batalla que se llevó a cabo en ciudad Capital comencé a desarrollar el elemento hielo, pero hay algo diferente...

—¿Diferente? —preguntó Jack interesado en el tema.

—¡No interrumpas Jack! —exclamó Federico haciendo callar inmediatamente a su hijo.

Jack simplemente lo fulminó con la mirada.

—Adelante Kenneth sigue contándonos, por favor.

Kenneth asintió.

—Lo diferente de mi tercer elemento es que no puedo controlarlo apropiadamente, tengo mucha más dificultad que con mis dos elementos anteriores que son el agua y el fuego —continuaba contándoles Kenneth—. Sí, ya llevo más de tres meses practicando y se me hace muy difícil, cada vez que trató de usar el hielo raramente sale uno de mis otros dos elementos, pensé que sería fácil al igual que al agua y el fuego, y por eso he venido hasta aquí... —Arthur lo miró con el ceño fruncido—. Por eso hemos venido hasta aquí porque quería que Jack su hijo me enseñara a controlar mi elemento ya que es muy fuerte.

—Perdón Kenneth pero no creo que él... —dijo haciendo una pausa breve—. Que Jack pueda enseñarte, siento que él no está preparado para eso, al menos no aún.

—¿Por qué dices eso, Papá? —preguntó sumamente enojado Jack—. Claro que estoy preparado...yo podría estar preparado para ser el líder de Glaciem y mucho más, ya que me he dado cuenta que desde que tengo memoria no pasas en Glaciem y más en los últimos meses en dónde yo he liderado perfectamente la ciudad...tú ciudad la cuál has dejado abandonada gracias a tu repetitiva ausencia.

—¡Silencio! —dijo Federico haciéndolo callar—. No sabes las razones del porque no he estado presente en Glaciem durante tanto tiempo y no me retracto de lo que dije aún no estás preparado para enseñar a otras personas y es verdad.

Jack se quedó en silencio y decidió marcharse.

—Por eso es que no tengo hijos... —musitó Arthur una vez que Jack salió por completo de la sala.

—Claro, si ni esposa tiene —Kenneth le dijo al oído a su maestro.

Pasaron algunos segundos de silencio hasta que Arthur rompió el silencio por completo.

—¿Entonces sí Jack no le enseñará a controlar su poder a Kenneth, tú lo harás verdad? —preguntó Benner.

—¡Exacto Arthur! —contestó Federico esb0zando una sonrisa—. Siempre tan inteligente.

Cuando Kenneth escuchó su respuesta estaba muy emocionado, porque para él sería la segunda vez que un líder de las quince ciudades iba a entrenarlo. El primer líder en entrenarlo fue Lionel Norris, aunque su entrenamiento con él fue algo corto, él está muy agradecido con lo que aprendió.

—Bueno no perdamos tiempo y vamos a entrenar... —anunció el líder de Glaciem levantándose de su silla.

Kenneth y Arthur se levantaron, dejaron las sillas en su lugar, bien acomodadas.

Ambos fueron detrás de él.

—¿A dónde vamos? —preguntó Arthur quién no dejaba de mirar cada parte de la estructura del edificio debido a que tenías zonas hechas de hielo pero también hechas de metal, madera y otras cosas más.

Las paredes del gran edificio estaban muy gruesas y muy bien elaboradas, como si hubieran sido talladas casi a la perfección.
—Iremos a la sala de entrenamientos para líderes —dijo Federico sin mirar para atrás.

—¿Acaso está aquí mismo? —preguntó Arthur mientras aumentaba sus pasos para alcanzarlo.

Federico confirmó moviendo su cabeza de arriba bajo.

Subieron tres pisos más hasta llegar a la sala de entrenamientos, al entrar Kenneth quedó asombrado, la sala era de un gran tamaño y al igual que las demás edificaciones estaba hecha en gran parte de hielo puro.

Arthur se sentó en un extremo de la sala para observarlos.

—¡Yo me quedaré aquí! —dijo él haciendo de la mano para que se fijaron en su ubicación.

El líder de Glaciem se colocó en el centro de la sala y Kenneth hizo lo mismo.

—Bien Kenneth antes de comenzar con el entrenamiento te explicaré algunas cosas que aprendí durante todos los viajes que hice —dijo Federico como introducción al entrenamiento—. Porque no me ausenté por gusto de mi amada ciudad como mi hijo cree...

Al final soltó un leve suspiro al final.

—¡Está bien! —asintió Kenneth.

—Durante mi viaje aprendí con lo que me contaban los sabios y demás personas de edad avanzada, también aprendí bastante con la ayuda de libros en conjunto con objetos históricos de las diferentes ciudades elementales —empezó a contar Federico—. Aprendí algo importante y eso fue que un usuario de un solo elemento sí puede desarrollar otro elemento o aprender a controlar un segundo elemento sin haber nacido con él pero claro el elemento que quiere aprender a controlar debe ser compatible o debe ser un elemento complementario con el primer elemento, en eso tenemos ejemplos cómo: tierra y arena o arena y tierra, tierra y metal o metal y tierra, hielo y diamante o diamante y hielo, entre otros más y de hecho yo soy un ejemplo claro de eso, tan solo observa.

El líder de Glaciem alzó su mano derecha, de la palma de su mano formó un pedazo de hielo con forma de diamante y luego decidió lanzarlo al suelo, este inmediatamente se rompió.

Luego creó otra forma de diamante con la palma de su mano, pero ese diamante era diferente al anterior, mucho más real, más luminoso y brillante, tenía la apariencia de un auténtico diamante, después procedió a lanzarlo también al suelo, pero el diamante al hacer impacto con el suelo congelado no se rompió caso contrario fue el suelo quién se agrietó y también quedó un hueco sobre el cual posaba el diamante.

—¿Sí ves? —le preguntó Federico—. He aprendido a controlar un segundo elemento debido a que cualquier elemental común de un solo elemento puede hacerlo, siempre y cuando el elemento sea complementario pero hacer esto requiere un gran esfuerzo y de hecho a mí me tomó cuatro años aprender a dominar mi segundo elemento y eso es bastante rápido para aquellos que logran aprender a controlar otro elemento en seis u ocho años pero tú caso es diferente, tú naciste con dos elementos y ahora después de tanto tiempo aparece uno nuevo pero con este se te complica más que con los anteriores —confesó—. Pero parece que ya descubrí cuál es tú problema.

—Entonces dígame... —dijo Kenneth—. ¿Cuál es mi problema? —preguntó esperando una pronta respuesta—. ¿Es grave o no?

—Tú problema es... —la respuesta de Federico fue interrumpida.

—Perdón que te interrumpa pero tengo que hacerte una pregunta, Federico —Arthur se levantó y caminó de manera apresurada hacia ellos.

—¿Qué pasó Arthur? —Federico giró su cabeza en dirección a su viejo amigo.

—¿Cómo es posible que tú puedas usar el elemento diamante? —le preguntó cuando ya estaba a menos de dos metros de él.

—Eso ya lo expliqué antes...es porque ahora domino el elemento agua aparte del elemento hielo —contestó Federico.

—Sí pero, ¿cómo puede ser posible eso? —interrogó Arthur, hizo una pausa leve y prosiguió—. Por lo que sé, el elemento diamante no es tan compatible con el hielo, más bien sería Diamante-tierra o hielo-agua, quería que me explicaras eso, si no es mucho pedir.

—Sabía que me lo ibas a preguntar tarde o temprano, siempre tan intuitivo Arthur —el líder de Glaciem se rascó la nuca con brevedad—. Bueno te lo explicaré.

»En mi viaje por ciudad Aqua o ciudad del Agua, un pez muy raro y peligroso por sus grandes dientes me mordió pero no me hizo gran daño en mi mano, lo peor vino dos días después de su mordida. Un día mientras estaba en la gran biblioteca antigua de dicha ciudad comencé a marearme, a sentirme mal, también me dolía la cabeza, tenía espasmos musculares por todo el cuerpo, hasta que caí desmayado.

»Cuándo finalmente desperté ya habían pasado tress días desde la última vez que había estado en la biblioteca. Me encontraba en un hospital, una enfermera de ahí me dijo todo lo que había ocurrido, al principio no sabían la causa de mis dolores, hasta que se dieron cuenta que todo eso lo había causado la mordida del pez llamado Pirkun, este extraño pez produce todos esos síntomas a los turistas o sea a los que no son nativos de ciudad Aqua o aquellos que no controlan el elemento agua, a los habitantes de dicha ciudad no les afecta para nada, ellos son prácticamente inmunes a ese pez por eso es muy rara esa enfermedad y la única solución fue inyectarme una vacuna que provoca anticuerpos y con ello una respuesta de defensa ante la enfermedad.

—¿Qué te inyectaron? —indagó Arthur—. ¿Células que te dan la capacidad de producir o controlar agua?

—Sí, exacto Arthur, se podría decir que gracias a ese raro pez ahora puedo controlar el agua —respondió Federico moviendo la cabeza de arriba hacia abajo—. ¡Fui suertudo en ese sentido!

—Pero aún hay algo que no entiendo...el agua tampoco es tan compatible con el diamante... ¿cómo pudis...? —Arthur continuó inquiriendo.

—Sí ya va... —Federico lo interrumpió—. Como sabemos la cristalización es un proceso por el cual a partir de un gas, un líquido o una disolución los iones, átomos o moléculas establecen enlaces hasta formar una red cristalina y ahora les explicaré paso a paso con los elementos.

Kenneth estaba en silencio escuchando la explicación.

Primero creó una esfera de agua de la palma de su mano.

—Ahora que la esfera de agua está creada, como sabemos está en estado líquido y con ayuda de mi elemento hielo lo transfiero al estado sólido pero en forma de cristal —Kenneth y Arthur observaban como claramente la esfera de agua pasaba a ser de cristal—. El diamante lo formo a partir del cristal o más bien a partir de lo que se conoce como cristal covalente. Los átomos de los cristales covalentes se mantienen unidos en una red tridimensional únicamente por enlaces covalentes. El grafito y el diamante, alótropos del carbono, son buenos ejemplos debido a sus enlaces covalentes fuertes en tres dimensiones, el diamante presenta una dureza particular y un elevado punto de fusión... y así es como se puede crear o controlar el elemento diamante a partir del agua y el hielo —concluyó su explicación.

Cuándo terminó de hablar su brazo derecho pasó a ser de hielo, intentó asestarle un golpe a Arthur y otro más a Kenneth, no lo consiguió gracias a que Arthur actuó rápido, sostuvo al muchacho del hombre para halarlo hacia atrás.

—¿Pero qué...? —preguntó Kenneth sin saber porque Federico había actuado así.

—¿Qué te pasa Federico? —Arthur lo miró a los ojos.

—No deberían preguntar, más bien defenderse o intentar defenderse al menos... —fue lo que contestó el lider de Glaciem que procedió a abrir su mano derecha para lanzar clavos grandes de hielo.

Kenneth intentó crear un escudo de hielo pero no lo suficientemente fuerte y se desmoronó.

—Te hace falta más que eso para poder derrotarme —Federico miró fijamente a Kenneth.

—¡Entonces yo lo haré! —exclamó Arthur adoptando una pose de pelea.

De las palmas de su mano emergieron rayos que lanzó directo a su viejo amigo, este se protegió con escudos de diamantes que creó después de mover sus manos hacia al frente.

—Definitivamente pensé que eran más fuertes —dijo provocándolos.

—Kenneth ¿Sabes cómo acabar con un elemental de diamante? —Arthur se acercó al muchacho.

—No lo sé, nunca pelee con alguien que usara el elemento diamante —contestó con sinceridad.

—¿Ni con Esmeralda?

—Esmeralda...eh...tampoco —fue lo único que pudo contestar.

Arthur apareció frente a Kenneth, lo tomó del hombro para tele transportarse a otro lado de la gran sala de entrenamiento.

—No sé qué le pasa a Federico pero su comportamiento no es normal y si ahora es nuestro enemigo debemos ser más precavidos —dijo Arthur con seriedad al ver que el enemigo de los dos era un tri-elemental—. Él no es una persona a la cual se la puede vencer fácilmente, recuerda que controla tres elementos.

—No sé cómo vencer a alguien cuya defensa es impenetrable prácticamente... —alegó el muchacho.

—Eso es Kenneth... gracias ya sé cómo podemos vencerlo —dijo Arthur sonriendo al tener una gran idea en mente.

—De...de...de nada —contestó Kenneth un poco desconcertado.

El líder de Glaciem les lanzó una gran avalancha de hielos muy filosos acompañados de diamantes igual de filosos, Arthur Benner destruía el hielo con sus rayos al mismo tiempo que Kenneth los esquivaba con agua al usar grandes tubos de agua que creó para atrapar a los diamantes y así cambiar su trayecto.

Los rayos de Arthur eran inútiles contra su viejo amigo que tenía todo su cuerpo transformado en diamante.

Kenneth notó que cuando Arthur lanzaba rayos el diamante en el cuerpo de Federico se hundía ligeramente cuando los rayos lo impactaban, por escasos segundos pudo ver gestos de dolor de parte de Federico, dedujo que quizá si sentía algo de dolor aunque este fuera mínimo. Optó por crear una gran ola pero fue inútil debido a que olvidó que Federico también controlaba el agua y por lo tanto esfumó su gran ola en un santiamén.

—Ya sé cómo derrotarte Federico —dijo casi susurrando Arthur, miró a su joven acompañante—. ¡Kenneth distráelo!

Arthur acumulaba dos grandes rayos de las palmas de sus manos, Kenneth se quitó la camisa, no le importó el frio debido a que su control con el fuego, de su espalda se desprendieron sus alas de fuego.

Desde lo alto lanzó muchas bolas de fuego que Federico desintegró con chorros de agua.

—¡Eso no me detendrá! —Federico creó una espada de diamante. Se acercó a Kenneth para atacarlo con su nueva arma, el muchacho usó su agilidad para esquivar las estocadas, además tenía pensado transformar su cuerpo en fuego para no salir herido.

De a poco el líder de Glaciem lo estaba acorralando más y más, Kenneth pensó usar su esfera fusión pero su contrincante lo atrapó en una gruesa capa de hielo.

—¡Hey viejo amigo! —Arthur apareció frente a Federico con su tele transpiración.

Kenneth aprovechó la oportunidad para escapar de la gran capa de hielo derritiéndola con su aliento de fuego.

Arthur golpeaba con sus potentes puños de rayo el duro cuerpo de Federico.

—Eso estuvo cerca... —exclamó Federico recubriendo con su elemento diamante la parte que Arthur fundió con sus rayos.

—¡No funcionó! —se lamentó Arthur.

—Tranquilo maestro ya entendí el plan —aseveró Kenneth—. El diamante del señor Federico se puede fundir a altas temperaturas y para eso yo soy el indicado.

El muchacho encendió su puño derecho.

—Es hora de acabar con esto señor Federico, no sé qué le pasa pero no pienso perder —le advirtió Kenneth antes ir volando hacia él.

El líder de Glaciem creó una gran capa hecha de diamante mientras que Kenneth encendió sus puños a un gran temperatura, procedió a lanzar una gran cantidad de fuego para fundir el diamante, al ver que no era suficiente decidió aumentar más la temperatura.

Al sentir que sus manos le dolían usó también su aliento de fuego y solo así pudo lograr fundir por completo la gran capa.

Cuando la capa terminó de fundirse Federico empezó a aplaudir y a reírse al mismo tiempo.

—¡Felicitaciones! —dijo cuando dejó de aplaudir—. Definitivamente era cierto lo que había escuchado sobre ustedes, vaya que son fuertes, ustedes son un dúo muy difícil de vencer, definitivamente un dúo siniestro.

—¿Esto solo era una prueba? —preguntó Kenneth abriendo su boca más de lo normal.

—Eso lo noté desde que nos advertía sobre sus ataques y todo eso —aportó Arthur.

—Sí, solo fue una prueba para comprobar su nivel ya que no los pude observar muy bien con los cazadores —les confesó Federico.

—¿Tú capa de diamante se fundió por no ser de un diamante puro verdad? —le preguntó Benner a su viejo amigo.

—Exacto Arthur, de hecho es mi única debilidad —dijo con sinceridad Federico—. El diamante que yo puedo crear no es cien por ciento diamante, por tal motivo si puede ser fundido o derretido y también se lo puede romper con otra cosa que no sea diamante pero debe ser con muchos golpes o aplicando una gran fuerza contra él.

—Ya veo —dijo Arthur casi susurrando.

—Y bueno sin más interrupciones ya es hora de que te diga tu problema con el elemento hielo —Federico miró a Kenneth—. Al estar acostumbrado a tus demás elementos al momento de usar tu nuevo elemento, que es el hielo no puedes sacar todo su potencial, lo que tienes que hacer es olvidarte por completo del elemento agua y del elemento fuego, esto aplica en todo momento en el que uses el hielo y en eso es que yo te voy ayudar.

—Bueno si es eso señor Federico, estoy listo y dispuesto para aprender a dominar el elemento hielo —respondió Kenneth mirando las palmas de sus manos.

Kenneth estaba emocionado de su nuevo entrenamiento pero no llegó a imaginar que esto le causaría graves problemas a largo plazo.