16. Los Cuatro Pilares
A pesar de que la búsqueda se tornó exhaustiva nadie logró encontrar a Kenneth y por ende el capitán Graff decidió mejor dar la orden de regresar a la zona en donde dejaron las tiendas de campaña.
Todos llegaron cansados, buscaron a Kenneth por todos lados pero ni en el lugar más remoto lo encontraron, nadie se le hubiera pasado por la cabeza que Kenneth estuviera en ciudad Espectra ni siquiera al más inteligente de los aspirantes.
El capitán Idate que fue quien lideró la búsqueda les indicó a los aspirantes que la búsqueda continuaría al día siguiente, aunque también ordenó a guerreros oficiales de ciudad Capital que realizaran una búsqueda nocturna.
Esmeralda era la más preocupada por el paradero de Kenneth.
No sabía lo que le pasaba, lo extrañaba mucho, ya quería verlo.
Esa misma noche el gobernador Marck Reim estaba ansioso por iniciar el ataque a la principal enemiga de ciudad Capital, tenía planeado dejar en cenizas a ciudad Espectra, el hogar de miles de personas con poderes sobrehumanos.
—Vamos, es hora de acabar con esta ciudad —decía Reim muy emocionado—. Comencemos, guerreros usen sus bazucas para destruir sus edificaciones y demás casas, así vamos a iniciar—Dio la orden esta vez mostrándose serio—. Luego seguirán los guerreros con espadas y lanzas, maten a todos, así sean niños, mujeres, lo que sea.
Sus lacayos asintieron.
—¡Vamos! —Gritó y todos los guerreros corrieron en dirección a la entrada principal de ciudad Espectra.
La entrada estaba hecha de unas enormes puertas de color marrón, estaban cerradas pero sobre ellas se encontraba un balcón de larga extensión con cabinas, donde dentro de ellas estaban varios guerreros de ciudad Espectra vigilando la entrada, todos con sus armaduras de color rojo vinoso.
Los guerreros de armadura salieron de sus cabinas al detectar a los guerreros de ciudad Capital, los cuales llevaban trajes color blanco con ciertas partes metálicas que protegían algunas de sus zonas corporales más sensibles.
Los guerreros de color rojo vinoso saltaron del balcón, unos volaron al instante y lanzaron rayos de sus lanzas eléctricas, otros cayeron directo al suelo de pie, dispuestos a pelear contra los guerreros de color blanco.
La batalla comenzó y nadie quería ser derrotado.
El capitán Arthur Benner al ver, que los guerreros capitalinos estaban siendo derrotados con facilidad optó por unirse a la contienda.
Degens y Raven hicieron lo mismo, con los tres juntos las cosas se equipararon un poco.
Los tres formaron una buena estrategia en donde Arthur usó su tele transportación para vencer a un numeroso grupo de guerreros espectras y Marcus usó su elemento tierra para crear un gran movimiento al tocar con sus manos el suelo con el cual hizo que se cayeran para que Degens aprovechara a matarlos con sus grandiosas habilidades de combate cuerpo a cuerpo, con esa estrategia pudieron vencer a la mayoría.
—Pensé que los espectras darían más batalla —mencionó Reim mofándose—. Pero me equivoqué.
Marck se rio a carcajadas.
—¡Eso es lo que tú crees maniático! —se escuchó a un hombre hablar a lo lejos, su voz provenía del balcón de la entrada.
Estaba oscuro, solo se podían observar unas siluetas.
—Ya llegamos —exclamó un hombre de tez blanca con su cabello agarrado con un moño y con una camisa color beige y un pantalón verde oscuro—. ¡Es mejor que se preparen!
No estaba solo, a su lado lo acompañaban tres personas más, había una mujer rubia con un vestido celeste, también estaba un hombre un poco pasado de peso con un largo cabello castaño y por ultimo estaba un hombre de cabello negro con un abrigo lanudo de color morado.
—¿Quiénes son ustedes? —preguntó Marcus Raven mirando hacia arriba el balcón.
—Nosotros seremos quienes los derroten —contestó el hombre del moño en su cabello—. No dejaremos que ataquen nuestra ciudad.
—Sí, así será —agregó la mujer rubia.
—¡Perfecto! —dijo entusiasmada la capitana Degens—. Ya llegaron personas fuertes, porque con esos de armadura fue totalmente aburrido pelear.
—¿De verdad creen que van a derrotarnos? —preguntó Raven de forma desafiante—. Si ni siquiera bajan hasta acá, están allá arriba escondidos de nosotros.
—Si llegan a bajar puede que hasta yo me anime a pelear —comentó Marck mirando fijamente a las cuatro personas que llegaron para defender a ciudad Espectra.
Los dos grupos tuvieron que alzar un poco su tono de voz debido a la distancia que existía entre ellos.
—No me hagas reír Reim, tu nunca peleas, solo envías a tus lacayos como siempre —habló el espectra de cabello largo y castaño—. Seguro es porque no eres tan fuerte como suelen decir.
Marck Reim solo frunció el ceño y de forma inmediata ordenó un ataque contra los cuatro sujetos que saltaron del balcón para pelear, ninguno poseía la capacidad de volar pero el espectra del moño en el cabello usó una técnica especial que le permitió crear unas alas negras de su espalda y tres brazos negros con los cuales sostuvo a sus amigos.
Ni bien llegaron al suelo la pelea entre tres de los capitanes de ciudad Capital contra los cuatro guerreros espectras, que se hacían llamar "Los Cuatro Pilares de ciudad Espectra" debido a que eran los cuatro más fuertes de la ciudad a excepción del líder de la ciudad.
La capitana Ibeth comenzó a atacar a la mujer rubia, su combate inició con una lucha cuerpo a cuerpo, ambas chocaron sus puños en constantes ocasiones pero a medida que el combate avanzaba Degens tenía la victoria, sin embargo la rubia se apartó un poco pero no por miedo sino porque iba a usar su poder espectra.
La rubia de nombre Irina juntó sus manos e hizo un triángulo con ellas, señaló y se enfocó en Ibeth con el espacio del triángulo que formó.
—¡Ahora! —dijo Irina sin dejar de enfocarla.
—¿Qué es eso lo que haces con tu.... —Ibeth no terminó de decir lo que quería porque cayó desmayada al instante debido al poder de la rubia.
El poder espectra de Irina se localizaba en sus manos, con dicha técnica podía enfocar a sus enemigos y hacerlos dormir, aunque a pesar de que sus víctimas quedaban con los ojos cerrados y sin poder abrirlos o hablar si podían escuchar además de sentir lo que ocurría con sus cuerpos.
Al ver lo sucedido un grupo de ocho guerreros capitalinos se prepararon para atacarla.
Al otro lado estaba Marcus Raven enfrentándose contra el espectra de buso lanudo.
—Ríndete, elemental no podrás contra mí —mencionó Kira quien estaba frente a Raven—. ¿No acabas de ver como derrotaron a una de las tuyas?
—¿Y a mí qué me importa eso? —contestó de forma fría Marcus—. Degens perdió porque no es una de las mías, no es una elemental, solo es una simple mujer con una buena táctica de pelea cuerpo a cuerpo, pero de ahí no es la gran cosa, a comparación de mi ella es débil.
—Hasta no ver en realidad que eres fuerte no lo creeré... —le respondió Kira confiando en sus habilidades.
—¡Kira ya deja de hablar y mejor pelea! —le gritaba el espectra cabello largo que estaba peleando con el capitán Arthur.
—Chuck no te metas, mejor encárgate de eliminar a tu rival que yo me encargo del mío —contestó Kira algo molesto por las palabras de Kira.
Raven y Kira no esperaron más e iniciaron su combate, Kira era muy bueno en la lucha cuerpo a cuerpo pero Raven usaba el elemento tierra para atacarlo con espadas hechas de tierra que le lanzaba sin parar aunque Kira las esquivaba debido a su gran agilidad.
Entonces Raven comenzó a bombardear a Kira con puras rocas que creaba a partir de la tierra que el mismo pisaba, Kira se concentró más y a cada instante retrocedía sin embargo al ver que las cosas estaban complicándose para él optó por usar su poder, sus uñas le crecieron a gran velocidad hasta quedar largas y filosa, no solo las uñas de las manos crecieron sino también las uñas de sus pies debido a que sus zapatos se rompieron.
Sus músculos aumentaron un poco de tamaño, su poder espectra consistía en una transformación parcial en un animal salvaje y con dicho poder podía romper con suma facilidad las rocas que Marcus le lanzaba sin cesar.
Al ver la transformación Marcus se hizo una armadura de tierra que cubría todo su cuerpo menos sus ojos.
La pelea entre ambos fue formidable, a cada segundo de la contienda cada vez más le destrozaba la armadura de Raven de a poco Marcus estaba perdiendo y no tuvo más opción en pensar en algo más para asegurar su victoria.
Retrocedió y procedió a golpear muy fuerte el suelo para abrir la tierra con su poder elemental dejando así una grieta muy grande además de que aplastando un poco de tierra le lanzó polvo a Kira y con una patada lo lanzó a la grieta.
—¡Yo gané! —vociferaba Marcus.
Por otro lado Arthur estaba enfrentándose a Chuck, el capitán Benner tenía toda la ventaja debido a que usaba constantemente su tele transportación, él gana en rapidez pero gracias a su peso Chuck tenía mucha más fuerza que Arthur.
Entonces a Benner se dispuso usar una de sus dagas ya que intuyó que Chuck no era tan bueno esquivándola y realmente fue así debido a que logró cortarlo en tres ocasiones.
El espectra de cabello castaño al verse que estaba perdiendo comenzó a usar su poder, que consistía en crecer algo más de lo normal y sumándole al hecho de que ya era bastante alto antes de usar su poder espectra, con su nuevo tamaño intentó aplastar con sus grandes manos a Arthur que al inicio lo esquivaba pero después se tele transportó encima de él sobre su espalda y cuello para clavarle la daga.
Pensó que tenía la victoria asegurada pero no fue así, la daga se quebró al impactar en su cabeza, prácticamente no le hizo nada.
Chuck se reía muy fuerte.
—Pensaste que ya ibas a matarme, pues te equivocaste —exclamó Chuck con una gran sonrisa en su rostro—. No solo puedo hacerme más grande, sino que puedo hacer que todo mi cuerpo se haga duro cómo una piedra.
—Vaya, pensaba que no iba a usar mi elemento, pero tendré que usarlo —confesó Arthur quién desde un inicio se dio cuenta de la dureza de la piel de su contrincante pero no quería matarlo debido a la alianza secreta que él quería formar con los espectras.
Sin embargo para disimular creó rayos de cada una de sus manos y procedió a atacarlo pero no lo dañaba tan solo lo hacía retroceder, evitaba herirlo de gravedad pero si quería pasar desapercibido con Marck Reim tenía que esforzarse un poco más.
—Esos rayitos solo me dan cosquillas —Chuck se reía.
Derrotarlo de la manera fácil iba a ser complicado así que no le quedó más opción que acumular más energía en la palma de su mano derecha para así obtener un rayo que cause más impacto que los anteriores.
Supo que su rayo estaba listo cundo tenía un tamaño considerable y prosiguió a correr con todas sus fuerzas hacía Chuck, que solo se quedó de pie esperándolo, estaba dispuesto a detener el ataque.
Cuando ya estaba cerca Arthur se tele transportó más cerca y acto seguido impactó su gran rayo contra el abdomen graso de Chuck que forma inmediata salió volando varios metros.
A pesar de que fue una técnica mortal sabía que eso no lo mataría pero lo dejaría fuera de combate y así Marck Reim no ordenaría matarlo porque Chuck ya estaba fuera de la zona de combate.
El ataque a ciudad Espectra apenas estaba comenzando y tanto del lado atacante como del lado defensor había bajas importantes.
El capitán Arthur quería evitar que nadie de ciudad Espectra muriera pero sabía que sería algo difícil, una interrogante se formuló en su mente:
¿Cómo hacer para que el ataque a ciudad Espectra terminara?
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