Ansiedad (Cap: 12)
Capitulo 12:
Las filosas uñas buscaban lastimar furiosamente la piel blanca del hombre que se encontraba en esos momentos recostado en la suavidad de las sabanas de seda.
― Saya... ― gruño Luke mientras sentía como ella le clavaba mas profundamente las uñas en el pecho y luego bajaba los labios para lamer la zona herida y ensangrentada.
― ¿Si... Luke? ― pregunto ella sonriendo malignamente mientras trazaba un sendero con la lengua sobre su piel.
― Me encantas... ― llego a decir Luke antes de que ella cubriera sus labios con los propios, besándolo con imperiosa necesidad.
Las manos ansiosas de Luke subieron por el contorno de sus piernas a sus costados, continuando su recorrido hacia las caderas y la espalda femenina, mientras ella se acomodaba sobre él para rozar provocativamente sus sexos.
Un profundo gruñido fue ahogado en boca de ambos cuando Luke abruptamente la poseyó y jalo de su cabello para dejar ese cuello aterciopelado a centímetros de sus colmillos.
― Muérdeme... hazlo... ― pidió Saya obnubilada por la fiera pasión que la gobernaba en esos instantes.
Luke clavo los colmillos con fuerza y de inmediato sintió como el dulce néctar rojo corría por su garganta escurriéndose por la comisura de sus labios.
La sensación que recorría su cuerpo mientras la hacia suya, era tan grandiosa que no cabía en si, Saya era todo lo que ansiaba, todo lo que deseaba y lo único que lo hacia sentir vivo.
Todo su ser vibraba bajo la fuerza de las sensaciones que ella despertaba en él, la certeza de que dentro suyo algo nuevo estaba surgiendo lo abrumo, sabia que no era obsesión lo que sentía, no... la amaba.
Luke Black estaba enamorado de Saya por completo... pero... ¿como sucedió?
Saya se sentó sobre él y coloco las manos sobre su pecho mientras movía las caderas suavemente, mirándolo a los ojos con fiera intensidad, provocando que Luke se estremeciera una vez mas.
― Eres mía... ― susurro ebrio de placer ― y yo soy tuyo...
Saya se detuvo un instante y sonrió, deslizo las manos por todo el pecho desnudo de Luke hasta llegar al cuello, entonces allí lo tomo y apretó con fuerza.
― Y seré tu perdición Luke Black.
Luke abrió grande los ojos y llevo las manos a las que apretaban su cuello.
― Sa.. ya...
Saya lo soltó y comenzó a reír mientras volvía a mover las caderas con mayor rapidez, inclinándose a lamer los labios de Luke, susurrando sobre ellos.
― Luke Black tu eres mio... y siempre lo seras hasta que yo lo diga...
― Si...
― ¿Me complacerás en todo lo que desee? ― pregunto Saya, deteniéndose de pronto y mirándolo a los ojos.
― En todo... ― jadeo Luke cuando Saya comenzó a moverse nuevamente pero con tortuosa lentitud.
― Ya tengo a Celes, ahora... quiero a la cazadora.
Luke la tomo de las caderas y la detuvo en seco, clavando los dedos en la blanca y tersa piel de su mujer, con tension.
― ¿Porque? ¿Para que?
― Porque si quiero comenzar de cero esta nueva vida que me ofreces debo matar la anterior ― fue la respuesta de Saya, deslizándose hacia abajo con sensualidad, mientras dejaba las marcas de sus mordidas sobre la piel ardiente de Luke, sin detenerse en el trayecto hasta alcanzar su objetivo.
Luke dejo escapar un sonoro jadeo cuando Saya lo tomo con ambas manos y lo lamió como si se tratase de un dulce delicioso, mientras lo miraba fijamente.
― Sa... ya...
― ¿Me complacerás... mi amor?
Era la primera vez que ella lo llamaba de ese modo. Sorprendido, Luke extendió la mano hacia el rostro de su mujer para acariciarlo con ternura y asintió, intentando ocultar la emoción que sus palabras le habían causado.
―Todo lo que desees te lo daré, no importa lo que sea... si quieres el maldito mundo, te lo daré cueste lo que cueste... solo... repite eso... dilo de nuevo.
Saya sonrió, subió hacia su rostro quedando a centímetros de sus labios y susurro antes de besarlo con fiera pasión.
― Luke... mi amor, te amo...
*
― Tenemos lo que necesitamos, ahora nuestra prioridad es saber mas sobre los Black y sobre ese tal Yunho.
― Samiel, simplemente ten paciencia, pronto seremos los dueños de esa ciudad, por primera vez en muchos siglos serán los lobos quienes gobiernen ― le dijo Iván mirando a Cassiel y al hombre que se encontraba con ella, ambos inconscientes y debidamente atados.
― Dieron una buena lucha ― rio Samiel
― Nuestra manada es superior en numero, no podrían jamas contra nosotros.
― Iván, tu eres la mente maestra en nuestra manada, dime, ¿que deberíamos hacer ahora?
― Por el momento lo que debemos hacer es llevar a estos dos a un sitio seguro y alejado, cuando vayamos a la ciudad sentirán su aroma en nosotros entonces podremos negociar con el mejor postor.
― Perfecto, eso haremos.
*
UNAS SEMANAS DESPUES...
Yunho se encontraba frente a la mansión de los Black, había sido invitado por la nueva esposa de Luke Black, aunque el aun no sabia quien era ella, por eso estaba dudando en entrar o no.
¿Porque de buenas a primeras la mujer de su enemigo lo invitaba a la mansión proponiendo una tregua momentánea?
Tenia el doloroso recuerdo de lo que Jacob Black había hecho siglos atrás, ¿acaso su hijo quería hacer lo mismo ahora?
Se acomodo el saco y observo la imponente mansión con ojos críticos. Sentía que no era conveniente entrar pero la curiosidad lo estaba matando, ¿seria Celes la esposa de Luke?
La muy desgraciada se había borrado de la faz de la tierra...
No era ningún cobarde por lo tanto entraría a la mansión Black, después de todo lo único que le quedaba era el juramento de venganza contra Celes que mato a su mujer.
Un mayordomo abrió la puerta y estiro la mano haciendo una graciosa pose.
"Muy del siglo pasado todo esto" ― pensó Yunho y una vez mas se pregunto si debió haber concurrido a ese sitio solo, como especificaba la invitación, pero de inmediato descarto ese pensamiento, el no es ni seria nunca un cobarde.
― Pase señor, los amos lo esperan en el salón― le dijo el vampiro que aunque en apariencia era joven, Yunho percibía era muy viejo y por lo tanto peligro.
Todo vampiro de mas de dos siglos era potencialmente peligroso, por el acumulativo de experiencia y poder.
Tenia el leve presentimiento de que en esa mansión , el mayordomo no seria el único y que se encontraría con mas de su clase, muchos mas...
A pesar de los gestos y palabras del vampiro que lo recibió, Yunho noto que la mansión era moderna y amplia e iluminada, se notaba el cambio reciente en la decoración, el lugar aun olía a pintura nueva y los muebles, si bien no todos, la mayoría también olía a nuevo.
Estaba claro que la "Ama y señora" de la mansión, detestaba el decorado anterior.
― Por aquí por favor, enseguida llamo a los señores.
Yunho permaneció en pie aunque le indicaron un sillón donde podría sentarse, tampoco acepto la copa de sangre que le ofrecieron.
Mejor era prevenir que lamentar.
Continuo observando la habitación en la cual lo dejaron en tanto los dueños de casa hacían su aparición.
― ¡Bienvenido Yunho a mi humilde hogar! ― entro diciendo Luke con su característico sarcasmo, ostentando una amplia sonrisa ― por favor toma asiento, no hay peligro aquí.
Yunho elevo una ceja y se encaro a Luke siseando amenazante.
― ¿Que quieres y porque me has hecho venir hasta aquí? Tu y yo no somos amigos y lo sabes bien.
― Vamos, deja esa actitud hostil, tu no eras amigo de mi padre y como ya sabes el viejo paso a mejor vida hace bastante tiempo ― replico Luke sonriendo nuevamente y dirigiéndose hacia el refrigerador para servirse una copa de sangre fresca.
― Si lo se, uno de ustedes me robo el intenso placer de asesinarlo ― respondió Yunho con tono cortante.
― Pues lo siento, no supe nada del viejo hasta que desapareció, en fin... esas son cosas del pasado...
― ¿Pasado? ¿En verdad pretendes que olvide que estuviste involucrado en la destrucción de mi familia hace tiempo?
― Mi estimado Yunho, nadie te dijo que vivir en el pasado siendo Vampiro es perjudicial para la salud ― rio Luke sentándose cómodamente en el mismo sillón que momentos antes le ofreciera el mayordomo a Yunho.
― Luke Black no tengo tiempo para perder con vanas conversaciones, jamas perdonare a ninguno de tu familia por lo que me hicieron.
Dio unos pasos dirigiéndose hacia la puerta pero se detuvo en seco cuando la mujer que entraba se paro delante de el y le sonrió de manera seductora.
― Hola Yunho...
― Sayania... ― susurro Yunho claramente sorprendido.
― ¿Yunho, ya tienes el placer de conocer a mi esposa?
― ¿Esposa? ― pregunto Yunho reponiéndose de su inicial sorpresa ― así que eres tu la mujer con quien se caso este... buena jugada mi estimada Sayania, ahora es posible que me quede un poco mas.
Saya sonrió tomando el brazo de Yunho con elegancia.
― Entonces, deja la actitud hostil querido, tenemos cosas de las cuales hablar.
Luke no intervino para nada en la conversación, no lo hizo ni siquiera cuando Saya se colgó del brazo de Yunho y lo miro directamente a los ojos con expresión seductora, simplemente los siguió por el corredor mientras iban hacia la biblioteca.
― ¿Sobre que se supone que debemos hablar? ― pregunto Yunho sentándose una vez que llegaron y la pareja también se sentó.
― Sobre negocios.
― No tenemos negocios en común ― le dijo Yunho, notando que Luke no intervenía en la charla, sino que permanecía en silencio observándolos ― ¿acaso tu "esposo" no esta de acuerdo en tus planes?
Luke rio y se encogió de hombros.
― Estoy de acuerdo en lo que sea que desee mi mujer, pero a ella le encanta ser quien dirige y a mi me encanta darle los gustos ― le dijo Luke.
― Ya veo... y dime Sayania, ¿que tienes en mente?
― Los lobos, se están sublevando.
― Algo supe.
― Hace unos días, llego un grupo nuevo a la ciudad y se atrevieron a querer negociar con nosotros ― dijo Luke cambiando de expresión, al recordar lo que sucedió cuando una comitiva llego pidiendo audiencia y diciendo que tenían a la cazadora cautiva, y que a cambio de ciertas cosas la entregarían al consejo de sangre.
― Sigo sin comprender que tengo que ver con eso, ahora tu eres el líder de la orden, no se supone que debes encargarte de esas cosas, ¿o es que no eres capaz de hacerlo?
La provocación quedo en el aire, Saya de inmediato se puso en pie y acaricio el brazo de Luke, deteniendo lo que podría haberse convertido en un desastre.
― Calma cariño ― susurro Saya besando los labios de Luke― recuerda lo que tengo en mente... Yunho, Luke es perfectamente capaz de encargarse de esa comitiva con mi ayuda o solo, la cuestión es que me interesa capturar a la cazadora, ellos esperan que nosotros los ataquemos, que intentemos hacer algo, pero no lo esperan de ti.
― No intervendré, encarguence de sus problemas ustedes.
― Antes de que te niegues, escucha mi oferta.
Yunho estuvo tentado de negarse a escuchar, pero la presencia de Sayania lo mantenía en esa habitación, ella tenia esa mirada de mujer astuta que el sabia percibir y estaba intrigado sobre lo que tenia en mente.
El modo en que tenia dominado a Luke Black ya era un adicional, conocía sobre ambición y estaba seguro de que Sayania tenia un objetivo fijo.
― Te escucho.
― Quieres a Celes, según se rumorea, estas buscándola por cielo y tierra para vengarte por lo que hizo con tu adorada Amanda...
― ¿Como sabes eso?
― Se muchas cosas Yunho y entre esas cosas que sé, es donde esta Celestia.
― ¿Donde esta? ¡Dímelo! ― exigió poniéndose en pie de golpe, lo cual provoco la reacción de Luke, quien también se puso en pie al instante.
― Cuida tu tono con mi mujer ― advirtió Luke.
Saya una vez mas, acaricio el rostro de Luke y lo beso en los labios largamente.
― Tranquilo mi amor, Yunho no hará nada inapropiado porque solo yo se donde encontrar a Celes.
Yunho retrocedió un paso y controlo la respiración.
― Habla Sayania, ya deja de jugar y dime que quieres.
― Encargate de traerme a la cazadora, como sabes fue la... amante de mi difunto cuñado Markus, nuestra familia tiene ciertos asuntos inconclusos con ella, si lo haces, a cambio te entregare a Celes.
― ¿Y si no me interesa tu oferta?
― Pues... veras... ― Saya camino hacia una gaveta y saco unas fotografias ― encontré un pasatiempo nuevo ― le dijo mientras dejaba las fotos delante de Yunho.
Fotos en las cuales una deteriorada Celes, se encontraba encadenada a un muro.
― ¿Te gustan? ― sonrió Saya ― también descubrí que me gusta mucho torturar y lacerar a las personas ― rio con tono cantarino.
Yunho apenas podía reconocer en esa mujer a la Sayania que había conocido no mucho tiempo atrás. Era evidente que disfrutaba realmente lo que hacia y a juzgar por el estado de Celes en las fotos, se daba el gusto a menudo.
El había jurado venganza pero algo por dentro se le removió cuando vio la foto y el estado de Celes.
― ¿Sigue con vida?
― Por supuesto que si, no te ofrecería este trato de no ser así, pero últimamente las heridas tardan mas en sanar ¿se deberá a que no se alimenta hace... dos semanas? ¿o eran tres cariño, no lo recuerdo tu si? ― rio una vez mas con satisfacción.
--Ya casi un mes mi amor, desde nuestra boda.
― ¡Es verdad! ― replico Saya chasqueando los dedos ― un mes... un glorioso y excitante mes...
― ¿Donde la tienes? ― pregunto Yunho.
― ¿Aceptas el trato o no? ― pregunto Saya sentándose sobre las piernas de Luke, quien había vuelto a tomar asiento.
Yunho se los quedo mirando, mientras se besaban como si estuvieran a solas... incluso Saya metió las manos en la camisa de Luke acariciando su piel sugestivamente.
― Ella es mi presa, no la mates, te traeré a la maldita cazadora pero mantén con vida a Celes, no me robes el placer de acabar con ella ― respondió Yunho incomodo al verlos así.
― Trato hecho entonces ― dijo al instante Saya poniéndose en pie, después de morder el labio inferior de Luke hasta hacerlo sangrar.
Yunho y Saya se dieron la mano y Luke paso la lengua por la herida que Saya acaba de hacerle mientras pensaba que pronto sus planes se realizarían gracias a su esposa...
Continuara...
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top