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- 15 Años Después -

Podemos observar a la Alde Hage, tiempo después, donde reinaba la paz, entre sus habitantes, que estaban realizando sus actividades cotidianas, del día a día.

Como un par de señores, que usaban su magia, para poder, plantar nuevas cosechas, para poder consumir o vender.

_ Espero, que tengamos una cosecha muy abundante, en e su a temporada... - comentó uno de los señores, que usaba su magia, para manipular una herramienta, para preparar la zona de tierra, para poder plantar las semillas de los cultivos -

- Vamos a ver...¡ arriba ! - otro de los señores  a cargo de la cosecha, utilizó su magia d ragua, para arrojar, chorros del elemento, al cielo soleado, para que cayeran en los cultivos ya cultivados -

Cuando iban a seguir con su trabajo, escucharían una voz familiar a la lejanía, aunque lo escucharon, como si estuviera muy cerca suyo.

_ ¡ Hermana Lily ! - fue lo que gritó esa voz chillona y ruidosa -

- Otra vez... - comentó con cansancio, uno de los granjeros, que limpiaba su oído al quedar algo sordo por el ruido -

- Es ese muchacho de la aldea...otra vez - comentó con pesar, el que poseía magia de agua, mientras volvía a su trabajo - Ese niño, jamás se rinde...

- Aldea Hage -

En la aldea Hage, más concreto en la gran tiendita del pequeño sitio, se estaba viviendo una escena muy cómica a la vista, y muy repetitiva en esos rumbos, debido a que pasaba de forma seguida.

Asta - ¡ Un día me convertiré en Rey Mago, y te haré comepltmante feliz ! - comentó determinado y en voz alta, a una monja de cabello azabache y ojos celestes, que poseía una expresión de pena, ante esta escena repetida - ¡ Por favor cásate conmigo, te ruego de rodillas, que aceptes ! - termino su confesión, para quedar de rodillas y mostrar una flor rosa, destinado a la monja -

Hermana Lily - Lo siento Asta, pero no puedo ser únicamente de una persona - comentó con una sonrisa de pena, hacia el muchacho -

Mismo, que al saber que su confesión falló, otra vez...se deprimió cómicamente en el sueo natural.

Pero de forma apresurada, se levantaría del suelo y se acercaría, bastante al rostro de la chica.

Asta - ¡ Aún no me rindo ! - comentó determinado, provocándole sorpresa a la monja, que simplemente le sonrió con nervios -

Hermana Lily - Perdóname - comentó, cerrando los ojos y aún, mantenéis la sonrisa nerviosa, por la actitud del muchacho - Lo lamento mucho...

Asta - ¡ Ah ! - reacción con los ojos en blanco, y retrocedió unos pasos atrás, para dar una reverencia, con la cabeza al suelo - ¡ No me rendiré ! - volvió a gritar -

Hermana Lily - P-Pero Asta... - trato de hablarle al chico - Yo no pue...

Asta - ¡ No me rendiré ! - hizo varias rveentenciad, dando resultado que su cabeza chocará con el suelo, de forma repetidas -

Hermans Lily - De verdad, lo siento mucho... - dio una reverencia, al no poder acceder, a la petición del chico y por su siguiente acción, que cometería para darle un "Alto" al muchacho -

De la parte atrás, sacaría su girmorio de color celeste y con un trébol de 3 hojas, mismo que al ser abierto por su portada, adquirirá un brillo celeste cristalino, a la par que Asta, seguía hablando a gritos.

Las páginas del grimorio, cambiaron de forma rápida, hasta detenerse en una, y seleccionar el hechizo por la monja, que con el ceño fruncido, comentó lo siguiente.

Hermana Lily - ¡ No...insistas...más ! - grito, para lanzar su hechizo en contra de Adta, tratándose de un puño de agua gigante, que saldría a un lado de la mujer - Magia De Agua - Puño Sagrado De Amor

Asta al notar, la gigante sombra que tenía arriba de él, levantó la mirada y vería con terror, el puño de agua que iba dirigido hacia el.

El puño de agua, chocaría de forma directamente contra Asta, hundiéndolo en el suelo, y creando un pequeño cráter en la zona, donde estaba el chico cenizo.

La azabache, al notar las cuin que hizo, en contra del muchacho, se alarmó inmediatamente.

Hermana Lily - Ay, perdóname Asta - se acercó a donde yacía el chico, siendo el mismo cráter generado con su cuerpo y que ahora, parecía un pequeño charco de agua - Use magia con mi grimorio, sin darme cuenta... - comentó a pena da, mientras notaba como el chico, poco a poco, se comenzaba a reincorporar del ataque -

Mientras Asta, trataba de levantarse, el sonido de unos aplausos, reinó en la escena, perteneciéndole a una niña de cabello corto y de color rojo oscuro y ojos celeste, que poseía una sonrisa en su rostro, mentiras seguía aplaudiendo y acercándose a donde estaba, tanto un adolorido Asta y la Hermana Lily, que trataba de atender al chico.

_ Muy bien hecho, hermana - comentó la chica, soltando algunas risas -

A su lado, también estaba un niño mejor a ella, que tenía un cabello corto, de color café claro, y ojos d color violeta, a la par de tener sus brazos cruzados, detrás de su cabeza, y manteniendo una expresión aburrida.

_ No tienes piedad - comentó aburrido el chico, viendo al escena -

Hermana Lily - Y-Yo no pude evitarlo.. - comentó con una mano en su mejilla, y una expresión de arrempetimiento -

Asta - ¡ No me rendiré ! - comentó de la nada, mientras se lanzaba al aire, hacia la azabache -

Pero antes de llegar hacia la hermana, una corriente de aire, lo mandaría al mismo cráter que actuaba como charco de agua, provocando que caiga de cara y más adolorido.

Serás d esta, estaban los dos niños recién llegados, a parte de un niño y niñas de 4 años, y por último, a un chico de la misma edad de Asta, pero siendo un azabache, de ojos color miel y de gran altura, a la par, que poseía un collar peculiar, alrededor de su cuelll y que en su mano derecha, poseía una corriente de aire, dejando ver, que fue el responsable de detener a Asta.

_ Cuantas veces, necesitas que te rechacen, idiota - comentó el niño de cabello café claro, con una mano en su cabeza, y sin un poco de vergüenza, decirle sus verdades a Asta -

Asta - ¡ ¿ Por qué te entrometes, tú también ?! - se reincorporó del suelo, y se quejó en contra del niño que seguía con la misma mirada dirigida a él - ¿¡ Y eso va para ti también, Yuno !? - ahora se quejaría, hacia el azabache que tenía una mirada neutral -

Yuno - ¿ Qué, por qué ? - comentó, para tomarse del mentón - Eres ruidoso, bajo, nervioso y poco tolerante... - comentaba los contras del cenizo, que recibía todo como flechas en su cabeza - nada que pueda gustarle a una mujer... - comentó por último, para pasar por su lado, sin darle atención a que este estaba depresivo en el suelo -

Asta - ¡ Oye, esa no es forma de hablarle a alguien, con quien has vivido por 15 años, maldito Don Juan ! - le grito como reproche a los comentarios hacia su persona -

Yuno - Te ayudaré - le comentó a la hermana Lily, que le respondió con un - Gracias - mientras él seguía ignorando al joven cenizo -

Asta - ¡ No me ignores ! - se quejó -

Yuno - Asta, la hermana pertenece al clero, así que no puede casarse...y los hombres de 15 años, tampoco - le comentó con la verdad al chico -

Asta - Cállate...¡ Maldito seas, Yuno, enfrentémonos ! - contra atacó con determinación en su mirada -

Yuno - Me niego

Asta - ¡¿ Por qué ?!

Yuno - No quiero perder el tiempo...

Asta - ¡ Repite Eso !

Mientras ambos chicos discutían, los niños estaban preparando el desayuno, el niño que poseía magia de fuego le comentó, algo a Asta.

_ Ya basta, Asta, Sabes que no puedes vencner a Yuno... - le comentó con una expresión aburrida -

Asta - ¡ Te haré probar mi Arte Especial !... - comentó para tratar de lanzar un ataque mágico, desde su palma abierta -

_ Asta...Sabes que no puede usar magia - le respondió el mismo niño con la pura verdad -

Asta - ¡ No salió nada ! - comentó con lágrimas cómicas - ¡ Pero aún no me rindo !

_ Asta es muy gracioso jiji - comentó una de las niñas pequeñas con una sonrisa -

_ No tiene talento... - comentó el niño con magia de fuego, con la misma expresión dirigida a Asta - Es increíble que hasta ahora, no puedas usar anda d enagua para alguien de tu edad...

Asta - ¡ Esa no es forma de hablarle a alguien mayor que tú ! - se quejaría en contra del niño, cara a cara -

_ Cállate, En este mundo la magia es todo... - le respondió de forma basada a Asta y creando una pequeña llama en su dedo con su magia - Cualquiera puede usarla, tú eres el único que conozco, que es incapaz de hacerlo...

Asta - Chts...No me dejas opción...te mostraré mi mejor truco - le sonrió con los dientes apretado y una vena en la frente -

Todos los niños mostraron sorpresa ante lo dicho por Asta.

_ ¿ Tú mejor truco ? - comentó una niña con pelo rojizo -

Asta se quedaría quieto en un segundo, hasta que comenzó hacer flexiones a una velocidad sobre humana.

Asta - ¡¿ Ven ?!, ¡ Seguro que ustedes, no hacer abdominales tan rápido ! - comentaba mientras hacía el ejercicio -

_ ¿ y, que idiota ? - comentó el niño de magia de fuego -

_ ¡ Asta, es muy gracioso ! - comentó la esquela niña, una vez más -

Aunque la misma niña, voltearía a un lado y vería como el azabache, Yuno, usaba su magia de viento para crear una cúpula de corrientes de aire, para secar la ropa.

_ ¡ Yuno, es genial ! - comentaba la niña acompañada de otro niño encomiando por la demostración de magia del azabache -

_ No esperaba menos - comentó el niño de magia de fuego -

Yuno - Gracias - agradeció directamente -

Asta estaba helado al ver la magia de Yuno, y con la boca abierta de forma cómica.

Asta - ¡ Si Yuno seca la ropa, entonces yo... ! - corre rápido a una dirección, dando la vuelta a la iglesia y a punto de comenzar a cortar madera con una hacha - ¡ Me encargo, de cortar la leña !

Pero el tronco sería cortado en un momento, por una corriente de aire afilada, que había lanzado Yuno, mucho antes, de dejar que Asta bajara el hacha 🪓.

_ Pese a tener la misma edad, Asta y Yuno son muy distintos... - comentó el mismo niño que solo criticaba a Asta -

Cuando Asta iba a decirle algo al niño, se golpearía con la puerta abierta de la iglesia, misma que se abrió por el mismo padre Orsi.

Padre Orsi - ¡ Yuno es la esperanza de la Iglesia, él puede convertirse en uno de los caballeros mágico del Rey Mago ! - comentó con lágrimas cósmicas -

Asta que se había reincorporado del golpe, se quedó sentado de rodillas en el suelo, escuchando todo lo que decía el padre.

Hasta que s exacerbó la Hermana Lily hacia el.

Hermana Lily - Pronto será la ceremonia de entrega de grimorios, cuánto tengas uno...quizás, puedas a crear magia - le dio una sonrisa comprensiva al chico -

Asta - ¡ Hermana... ! - comentó emocionado, con los ojos llorosos de forma cómica -

Hermana Lily - Probablemente je... -comentó con la sima sonrisa -

Asta voltearía la mirada, al ver el gran cráneo de demonio que estaba en la colina de Hage.

Asta - ¡ Pronto tendré un grimorio...y podré hacer magia, así será ! - comentó determinado en conseguirlo -

Asta - ¡ Conseguiré el mejor grimorio de todos, me haré un caballero mágico, y un día me convertiré en Rey Mago ! - diría con determinación, mientras observaba la estatua del primer rey mago que estaba por arriba del gigante cráneo del demonio -

_ Ya vuelve a decir tonterías... - comentó el niño con una mano en los bolsillos -

Asta - ¡ Y entonces reformaré esta iglesia deteriorada ! - comentó a gritos -

El padre al oír eso, una vena emergió de su frente de la ira.

Padre Orsi - ¡ Siento que este deteriorada, enano ! - lo señaló con enojo -

Asta - ¿ Verdad, Yuno ? - le habló al azabache, ignorando olímpicamente al padre -

Yuno - ....

Asta - ¿ Verdad ? - le enseño el puño con una sonrisa -

Yuno simplemente lo volteó a ver y comenzó a irse en silencio.

Dejando a Asta con la mirada tapada por la sombra y susurrando algo.

Asta - Ya verás... ¡ Ya verás, maldita sea ! - grito al aire, para comenzar a correr hacia una dirección desconocida -

Hermana Lily - ¡ Asta ! - llamo al joven -

_ ¿ De verdad, es mayor que yo ? - replicó el niño mirando por donde se iba Asta -

...

Yuno estaba dentro de la iglesia, observando una estatua santa en silencio.

Hasta que escuchó como las puertas se abrieron y se cerraron, cosa que no provocó que se moviera de su lugar, hasta que escuchó una voz.

Hermana Lily - Yuno, ¿ Por qué no te intentas llevarte mejor con Asta ? - le preguntó al azabache - ...Como antes...de niños siempre estaban juntos, tú solías llorar mucho

- Recuerdo -

Se ve a Yuno en su etapa de niño ayudando a caminar a Asta niño, que estaba bastante herido, peor a pesar de eso, estaba sonriendo felizmente.

Hermana Lily - Hasta el día en que volviste con Asta muy lastimado...Desde entonces, dejarse de llorar...

- Fin Del Recuerdo -

Yuno - No puedo llevarme bien con el - comentó con voz neutral -

Ante esta respuesta, la hermana se sorprendió por lo dicho por el azabache.

Hermana Lily - ( Ahora que lo pienso...Asta empezó a volver lleno de barro y heridas, a partir de aquel día... ) - pensó con un semblante triste - (¿ Adónde irá y qué hará ? )

...

Donde estaba el cráneo del demonio gigante, adentro de su mandíbula estaba una gran cueva de vegetación en cada sector del lugar.

Donde se escuchaba algunos murmuros de un joven chico, que estaba esforzando en su voz.

Asta - ...Novecientos noventa y cuatro...N-Novecientos noventa y cinco...Novecientos noventa y seis... - contaba para sí mismo, mientras había flexiones con una sola mano y otra en su espalda, haciendo equilibrio en el aire por arriba de su cabeza -

Siguió con la rutina hasta que llegó a mil y se levantó d sin saltó, para sacar de la nada una cantimplora para beber un líquido verde.

Asta - ( ¡ Y bebo jugo de hojas Monguro, para aumentar mi poder mágico ! ) - pensaba, mientras seguía tomando del líquido extraño -

Para posterior, comenzar hacer poses para tratar d e hacer magia, sin ningún éxito.

Mientras exhalaba y inhalaba aire del cansancio por su boca, un recuerdo llegó a su mente:

Asta - Seré el Rey Mago...No cederé ante nadie...¡ Y empezaré fortaleciendo mi cuerpo ! - comentó determinado, para lanzar puñetazos al aire -

Sin saber que por un segundo, de sus puños liberó una especie de energía roja con detalles negros.

Cosa que despertó algo, ocultó en una casa de madera, no muy lejos de ahí.

Un grimorio grisáceo de 5 hojas, comenzó a levitar en medio del suelo, liberando energía rojiza y negra bastante inusual.

Misma donde liberó por unos leves momentos, la silueta de un ser macabro a la vista, que sonreía al saber, que su misión había comenzado.

|| CONTINUARÁ ||