Capitulo I: trato sangriento

--señorita—la mujer que aparentaba tener mas de cuarenta años toco por tercera vez la gigantesca puerta de madera.

La chica apenas y se removio, últimamente no habia descansado lo suficiente, sentía los parpados pesados, no tenia el animo para despertarse, y mucho menos en aquel dia.

Era aproximadamente el medio dia, no habia desayunado siquiera, y aun asi parecia como si las sabanas la mantuviesen encerrada

--señorita – la mucama no tuvo mas remedio que entrar en el lugar con la mirada aflijida—señorita Meiri es hora de levantarse, mire la hora. Si no se apura llegara tarde a la reunión de la tarde

La chica gruño entre sabanas y se oculto de la luz cuando la mucama habia abierto de par en par las cortinas

--hoy es un dia sumamente especial, asi que le pido por favor que se levante—su voz ahora era mucho mas demandante—el señor Blades estará muy enojado si llega tarde

--no me importaría disgustarlo un poco—dijo con sorna mientras que por fin se dignaba a levantarse

Abrió sus llamativos ojos carmesí con delicadeza, mientras que sus cabellos azabaches caian por encima de sus hombros

--hoy es un dia especial señorita Meiri-- ronroneo la nana—y usted debe de estar muy contenta

Lo que menos estaba era contenta, quería que ese asqueroso dia acabara cuanto antes

--¿tengo siquiera opción?—se pregunto mas asi misma que cualquier otra cosa

La nana ignoro su comentario y se dispuso a buscar entre el enorme armario, sacando un hermoso vestido blanco

--se vera preciosa—sonrio amablemente—le combinara a la perfeccion con...

--¿mis ojos?—termino la frase pensativa

La mucama se mantuvo en silencio, despues de todo, tendrían que ponerle unos lentes de contacto, no querían que el secreto de la familia Togami fuese revelada... el muy, muy oscuro secreto

cuando los preparativos terminaron Meiri se miro al espejo con el ceño fruncido, sus ojos estaban ahora de un azul brillante y sus labios de un rojo casi escandaloso, el vestido se ceñia con perfeccion a su figura

--el señor Blades estara muy contento en cuanto la vea—murmuro la mucama peinando sus cortos cabellos castaños – el señorito Kiriji también estara muy ilusionado en cuanto note su hermosura

Meiri se mantuvo en silencio mientras que apretaba con fuerza los puños respirando con calma para tranquilizarse

--nada me haría mas feliz—se obligo a decir ganándose una sonrisa satisfactoria de su mucama

La primera mentira del dia

Nada mal, hasta incluso podía convencerse a si misma

Cuando la mucama termino por organizar las ultimas rosas blancas en su peinado, el infierno estaba mas cerca de lo que imagino

(...)

Camino con calma por el pasillo, en unos pocos minutos empezaría el evento que acabaría con su vida

--ohhh pero miren nada mas—su primo menor apareció en mitad del pasillo evitándole el paso

--C-Caules—susurro ella con nerviosismo

--¡por fin lograste que padre se sintiera orgulloso de ti!—se mofo de ella—al fin aportas algo a esta familia... falla

Sintió que todo se oscurecia ante la fatal y contundente palabra, "falla" tenia un efecto radical en ella y sus primos lo sabían

--yo no soy una falla...-- susurro por lo bajo ocultando sus ojos bajo el flequillo

--¡¿ehhhh?! ¿acaso has dicho algo? FALLA—Caules le dio un pequeño empujon

--¡Caules!—en el otro extremo del pasillo una figura mayor le reprendia

--p-pero... Yuu-Nisama—Caules bajo la mirada al ver la desaprobación en el rostro de su hermano mayor

--hoy no—paso al lado de Meiri sin siquiera mirarla—debemos mantener la fachada de buena familia, no queremos que salga mal.

--Yuu-san—Meiri bajo la mirada—g-gracias

--no agradezcas—regaño con acidez—falla...

De nuevo el dolor en el pecho, la sensación de no pertenecer allí. Que horror

Aun con la mirada gacha siguió a Yuu, en dirección hacia el enorme salón de reunión donde ya la mayoría de personas habían llegados

La mayoría cazadores

Cuando estaban a pocos pasos de las escaleras, Yuu se detuvo dándole una ultima mirada de advertencia

--Caules Togami—anuncio el hombre al lado de la escalera. El bullicio acabo y Meiri no pudo evitar sentirse aun mas nerviosa—Yuu Togami—el mayor bajo las escaleras con buen porte y una mirada completamente neutra—y la señorita Meiri Togami

Suspiro con pesadez intentando tranquilizarse, con una mano en la baranda bajo las escaleras intentando no hacer contacto visual con ningún invitado

Casi nunca estaba en las reuniones, por lo cual, a muchos les daba curiosidad

la fiesta inicio despues de los anuncios, las personas hablaban tranquilas o simplemente bailaban. Meiri prefirió ocultarse en uno de los rincones mas apartados, no quería llamar la atención. Estaba un poco decepcionada, despues de todo era la primera reunión de gala, era extraño no ver a los cazadores de diferentes gremios en costosos trajes en vez de sus usuales uniformes de caza

cuando la hora de comer llego, todos los invitados dse acomodaron en una enorme mesa, donde Meiri se sentaba entre sus dos primos, se sentía nerviosa por lo que seguía

tal como lo imagino, Kiriji se habia levantado y le habia dicho algo en el oído a su tio, se tenso en cuanto su mirada se encontró con la de el

el joven suspiro y camino hacia ella, con la mirada fija en sus ojos. Sus cabellos rubios le daban cierto encanto...

--señorita Togami—llamo el con respeto, la mayoría de invitados miraron la escena interesados—lamento si me veo muy descortes, pero tengo la impetuosa necesitad de hacerle saber que es usted quien ha ganado un gran interés de mi parte, y ha nublado la mayoría de mis juicios—se inclino tomando su mano--¿se casaria conmigo?

Meiri se paralizo en ese mismo momento, habia visto a Kiriji no mas de tres veces y ni siquiera se habían dirigido la palabra, miro a su costado como su tio sonreía con un asentimiento

Kiriji Ridley, perteneciente a una de las mejores familias... ah...

--yo...-- Meiri susurro cerrando los ojos

Si... no... si... no

Los recuerdos de sus primos molestándole, los insultos de su tio. el desprecio de todos aquellos que conocían su secreto

¿Qué es lo que quería?

--¡NO!

Todo se quedo en silencio, ¿de verdad lo habia dicho? Sintió que las mejillas se le calentaban, no podía ser cierto. Pero la mirada escrutadora y molesta de su tio se lo dijo todo.

--¿no?—Kiriji le miraba confundido además de aturdido, no esperaba esa respuesta

--¡Meiri!—rugio el Togata mayor

Los invitados empezaron a murmurar, las mejillas de Meiri se encendieron aun mas, no esperaba que la cosa fuese tan grave...

--no quiero...-- murmuro ahora mas suave

--¡¿Qué has dicho?!—su tio se habia levantado de golpe y se dirigía hacia ella

--lo que oiste—soltó con brusquedad las manos Kiriji que aun en shock no le habia soltado—no sere un sacrificio mas para tu imperio

--mocosa—le tomo el brazo con fuerza—no te crie todos estos años para que no me sirvieras para nada

--¡entonces déjame en paz!—grito fuertemente

Antes de que el mayor pudiese reprocharle las puertas del salón se abrieron de golpe, una energía pesada se instalo en el lugar... todos se pusieron en guardia.

Un hombre mayor de cabellos albinos aparecia en el lugar, por su semblante se notaba que estaba molesto, entre abriendo su boca... Meiri lo noto

Vampiro

Su tio tembló en su lugar al reconocer de quien se trataba, soltó con brusquedad a su sobrina y miro con nerviosismo al nuevo invitado

--Karl...--susurro –no sabia que vendrías...

El hombre parecio relajarse un poco

--no me invitaste Blades—el hombre tembló al escuchar su nombre de esa manera

--era una reunión un tanto... familiar—respondio con inseguridad--¿q-que lo trae por aquí?

La media sonrisa que les ofrecio congelo en su lugar a Meiri, nada bueno iba a pasar

--me engañaste, Blades... -- la frialdad en sus palabras eran de sobremanera impactantes

--n-no se a que se refiere—

Meiri miro sorprendida a su tio, era la primera vez que lo veía tan nervioso eh incluso asustado

--utilizaste a Komori para que me confundiese—gruño—para que me diese una falsa Eva

--s-señor Sakamaki—tartamudeo—no sabia que Komori habia hecho tal cosa

--teniamos un trato Togami—cerro los puños con fuerza—y lo vas a cumplir si no quieres que la sangre corra de los tuyos

Antes de que pudiesen reaccionar dos de los cazadores cerca a la puerta se abalanzaron contra el vampiro, con armas en mano

Pero fue inútil, con solo un ligero movimiento los hombres estaban noqueados en el suelo

--no creas que no se a quien tengo que llevarme—murmuro fríamente

Blades corrió hacia donde se encontraba el vampiro

--podemos llegar a un acuerdo—intento negociar

La media sonrisa que dio fue mas que suficiente, y en un solo pestañeo, ya no se encontraba allí, cuando el liquido carmesí se esparció frente a sus ojos manchándole parte del vestido logro entender que estaba tras suyo con una mano atravesando a uno de los invitados

Meiri se quedo paralizada, esa mirada sadica y es asonrisa satisfecha, ni siquiera podía hablar

--¡Alejate de ella!—Blades parecia aun mas desesperado

El vampiro dejo caer el cuerpo del hombre y con la mano ensangrentada tomo el mentón de la chica para que le mirara

Estaba temblando

--esta chiquilla, es hija de Kaori, ¿verdad?—se relamio los labios – huele igual a ella

--Karl... pór favor—rogo Blades

--si el imbécil de Komori no me lo hubiese confesado creería que es un disparate—sonrio de medio lado—jamas pensé que tendría una hija... ocultaste a alguien tan valiosa por tanto tiempo Togami...

--no...-- Meiri susurro al sentir como el vampiro apretaba con mayor fuerza su mejilla

Sabia de la existencia de los vampiros, incluso los habia conocido, pero todos ellos eran amables...

--Eva ira conmigo, ese era el trato—repuso el vampiro neutral –si te opones... acabare con todo el linaje Togami...

Meiri abrió los ojos por la impresión, su tio parecia en un estado critico, en pánico, sin saber que hacer. Jamas lo habia visto asi, normalmente era del tipo frio y calculador

--n-no puedo permitir que te la lleves—susurro

--¿es por el acuerdo con los Tsukiyamis?— Blades parecio sorprendido—no creas que puedes ocultármelo todo

--y-yo—Meiri miro al hombre con pánico—¡ire con usted pero por favor no tome represarias contra el clan!

Odiaba a su tio y primos, pero este era el clan de su padre, y no permitiría que lo dañasen, además, deberían de haber mas familiares que a pesar de que no la conocen... eran inocentes... y no merecían morir

El vampiro sonrio gozoso

--hay trato entonces—

--¡NO!—Blades parecia desesperado

El hombre se abalanzo contra Meiri. Todo se volvió negro