Capítulo XIII
Ocurrió hace 2 semanas, cuando tuvo lugar aquel acontecimiento tan importante en mi vida… y la de él, supongo…
Hace poco más de una semana, casi 2 semanas, le declaré a Sakeno-kun muy abiertamente que me gusta…
[ - Sakeno-kun… ¡Tú…! ¡Tú también me gustas!… P-Por favor… Por favor, sal conmigo… ]
- ¡Argh! ¿¡Por qué le dije eso último!? - me revolví el cabello con bastante desesperación.
¿¡Por qué carajos le dije eso último!? ¡Parecí una desesperada! ¡Una loca! ¡O, cualquier cosa menos una chica enamorada! ¡Soy una completa tonta! ¡No debí haber dicho eso último! ¡Claro que no debí!
- ¡Ya fue! - me reclamó Valeria, que estaba a un lado mío sentada en una silla - ¡Ya le soltaste la sopa! ¿Qué tiene de malo?
- … ¿Acaso no lo entiendes?… ¡Debe de sentir lástima de mi, ahora mismo!
- … ¿Y por qué?
- ¡L-Le suplique que fuéramos novios!
- ¿Y eso es malo?
- ¡Es que no lo entiendes! - exclamé, mientras azotaba mi cabeza en la mesa de la silla donde estaba sentada - ¡Al mismo tiempo que le dije que me gustaba, le rogué que fuera mi novio, pero lo dije con un tono de desesperación demasiado notorio! ¡Seguramente se está riendo de mi, junto con Heishi y Zedrick!
- … ¡No lo creo! - me respondió Valeria con total tranquilidad - ¡Seguramente está… está… admirando tu valor!
- ¿Valor? ¿Acaso crees que es valiente decirle a tu "crush" que estás locamente enamorada de él, así de la nada? ¡Eso es tontería! ¡Tontería total!
- ¡No digas esas cosas!
- Oigan, señoritas… aún cuando sea el último día de clases… ¿Podrían bajar el volumen de sus voces?
- ¡Oiga! - gritó con mucha molestia Vale - ¡No me deja por los problemas amorosos de mi amiga!
- Oh… disculpe…
Si. Ahora mismo están corriendo las últimas horas de nuestro último día de clases del 2018. En un rato más, estaré en mi casa con total aburrimiento, tal vez viendo películas y series en Netflix, saliendo con mis primos que viven en Hong Kong, si no mal recuerdo, o sentada en mi cama, viendo memes todo el día, esperando a que algo bueno pasé en mi vida…
- Entonces, cambiando de tema… ¿Ya decidiste que vas a hacer en estas 3 semanas de vacaciones?… - me preguntó Valeria con total indiscreción.
- No tengo pensado nada… - le respondí, mientras me recargaba más en mi asiento - Estuve pensando en tal vez quedarme en casa y dormir… A menos que dejen tarea para estás vacaciones, no creo que esté haciendo nada…
- ¿Y acaso no vas a salir con Sakeno-kun?
- ¿Eh? ¿¡Qué dices!?
- ¡Pues, lo invitaste a salir! ¡Debe de tener una respuesta para ti!
- … - me quedé pensando en ello. Y, tiene total razón: no me dio ninguna respuesta ese día. Se despidió de mi, en cuanto lo solté, y me quedé sin ninguna palabra de su parte…
Acaso… ¿No quiere nada conmigo? Por eso… ¿Por eso me dejó ir libremente, sin decir nada más que un "Adiós"?… ¿¡S-Solo me ve como una amiga, o tal vez ni eso!? ¡Demonios, mis mayores miedos se están haciendo realidad!
- ¡Entonces, háblale y pregúntale si quiere salir contigo en estas vacaciones!
- … ¿Y cómo quieres que le dé la cara, después de haber pasado por tal vergüenza? ¡N-No soy capaz! - ¡Claro que no lo soy!
- Yo sigo diciendo que lo que hiciste fue un acto de valor… ¡Y debería admirarse por ello! Pero, dejando eso de lado… No hay necesidad de que vayas a hablar con él cara a cara.
- ¿?
- ¿? ¿Acaso no me dijiste que te pasó su número telefónico?
- …
¡! ¡Es cierto! Había olvidado completamente! Después de que lo abracé y me declaré, él se separó de mi, y tuvimos una pequeña charla. O… bueno, creo que tuvimos una pequeña charla…
[ - …
- …
Los 2 chicos se miraron el uno al otro, sin decir ni una sola palabra. Ambos mirándose cara a cara, con sus rostros sonrojados por las palabras que acababan de suceder. Sus corazones en sintonía, dentro de un palpiteo rápido y desenfrenado que marcaba la tensión que cada uno sentía en el momento. Sakeno, por recibir esas palabras, y Misti por haberlas dicho.
- … - Misti se sentía desprotegida y muy insegura de si misma. Si mirada de tristeza, combinada con esperanza en una respuesta positiva, le daba un aire de ternura a un alto nivel, combinando el perfil de una mujer, entregando su corazón y esperando ser amada del mismo modo que ama.
- … - Sakeno, con tan solo ver esos sentimientos que transmitía su rostro, se sonrojó bastante, tanto que la cara le quemaba. Se separó un poco más de ella, y sacó su teléfono. - Oye… T-Te pasó mi número telefónico…
- … O-Oh… gracias… - sus nervios y timidez la hicieron actuar en automático, como si fuera una robot.
Los chicos intercambiaron sus números telefónicos, y después de haberlo hecho, ambos se miraron el uno a otro, conservando los sentimientos que tenían antes.
- Oye… Creo que, hay que regresar a nuestros salones…
- ¡! T-Tienes razón…! Yo… me voy a mi salón…
- Yo… tendré que… Nos vemos…
Sakeno y Misti, conservando sus caras y sentimientos, se dieron la vuelta y se fueron cada quien a su lado ]
Entonces… si el me dio su número telefónico… ¿Significa… que si siente algo por mi? ¿¡Significa… que Sakeno-kun me está ofreciendo la posibilidad de intentar el salir con él!?
- ¡Te dio su número! ¡Puedes llamarle y tener una cita con él!
- … Llamarle… ¿¡Llamarle!? - ¡La idea no podía caber en mi cabeza! ¡En ese momento… sentí como explotó mi mente!
- ¡Si! Argh, si no lo harás tú… ¡Lo haré yo!
- ¡N-No! ¡Ni se te ocurra! - me aleje un tanto de Vale, mientras la veía con mirada fría y seria - ¡No te lo permitiré!
- Bueno, eso es un paso… ¡Pero, debes arrojarse a sus brazos! ¡Debes hacerlo lo más rápido que puedas!
- … Lo más rápido que pueda…
- ¡Bien, jóvenes! La clase ya terminó… ¡Ya puedes irse a sus casas!
- ¡Si!
- ¡Tú no: tu reprobaste tus materias! ¡Te debes quedar a pasarlas!
- ¡Demonios!
- Bien… ¡Vámonos, Misti! - me dijo Vale con su voz chillona y femenina.
- De acuerdo… ¡Vayámonos!
Tomé mis cosas, las guardé todo en mi mochila, y entonces salí del salón acompañada de Vale. Al salir, casi de inmediato nos topamos con Daniel.
- ¡! ¡Dan!
- ¡Chicas! ¡Jajajajajajajaj: pasé todas mis materias! ¡Voy a tener vacaciones completas!
- ¡Vaya! - exclamó Vale - Hace mucho tiempo que no decías eso… ¿Desde hace cuánto? ¿Desde… primero de primaria?
- ¡Jajaja! Muy graciosa, Vale - le respondió Dan - Y, para tu información, en realidad había dejado de decir aquello desde cuarto de primaria… ¡Para que se te quede grabado, enana!
- ¡! ¿¡C-Cómo me llamaste!?
- ¡Enana!
- ¡Ya sacaste boleto! - Vale se arrojó violentamente contra Daniel, y ambos comenzaron a tener una… honestamente, era una muy extraña forma de pelearse. Yo simplemente solté una leve risa al verlos.
- Jeje… Hace mucho que no pasaba esto…
Mi mirada se desvío entre los demás chicos y chicas que estaban presentes en el pasillo, todos saliendo de la escuela o cambiando de salón para tomar lado última clase del día (algunos salen un poco más tarde que yo). Y entonces, mis ojos captaron una cabellera.
Cabellera castaña, de tamaño medio, alborotado un tanto de modo que a pesar de estar desordenado lucía un peinado peculiar. Sin lugar a dudas, era él. He estado acosándolo durante semanas, prácticamente hablamos de un mes detrás de él… ¡Lo conocía perfectamente! ¡Nunca sería capaz de olvidar la cabellera de Sakeno-kun!
Me separé de la pelea entre Vale y Dan, y caminé entre los chicos y chicas de la escuela, tratando de abrirme paso para llegar hasta Sakeno-kun.
Pero, la gente que estaba presente era mucha, y sus alturas mayores a la mía… ¡Sentía que me estaban consumiendo!
- Argh… - comenté por lo bajo. Pero, mis ojos aún eran capaces de ver la cabellera de Sakeno-kun, a tan solo un par de personas de aquí… ¡Ya estoy cerca! - ¡S-Sakeno-kun!
- ¡!
Sakeno-kun volteó para ver quién lo había llamado, en el momento justo en que yo lo tomé de su brazo por medio de su chamarra.
- ¡S-Sakeno-kun!
- ¡! ¡Misti! ¿Q-Qué… qué haces aquí?
- … Este… yo…
- ¡! ¡Vayamos a un lugar menos apretado!
Él también se abrió paso entre el gentío, hasta llegar a mi. Me tomó de la mano y me alejó un poco de la bola de personas, mientras yo comenzaba a hervir del sonrojo que se apoderó de mis mejillas rápidamente.
Una vez que estuvimos lejos de mucha gente, me dirigió la palabra.
- ¿Qué pasa, Misti? ¿Qué ocurre?
- ¡Es que…! - ¿C-Cómo le digo? ¿Cómo le expreso lo que estoy sintiendo en este momento? ¿Cómo le hago ver mis sentimientos, de manera…? Ni siquiera sé cómo expresarlo… ¡La única forma que tengo y que se me ocurre es arrojarme a sus brazos y envolverme con él en un cálido abrazo! ¡Claro que quiero eso!
- ¿?
- … - ¡Oh si! ¡Enfócate! - Sakeno-kun… quería… hablar contigo… sobre lo de hace 2 semanas…
- ¿?
- … Cuándo… - ¡Ay! ¡Por favor, recuerda, que la pena por recordarlo yo misma me recorre de pies a cabeza! - Cuando… nos topamos cerca del baño y… tu y yo…
- … Oh, ya lo recuerdo… - rápidamente sus mejillas se sonrojaron y miró hacia otro lado.
Y, así permanecimos los 2. Los 2 en silencio. Yo posando mis ojos en él, y el tratando de enfocar su mirada en otro lado, ya que cada vez que me miraba sus mejillas se coloraban. Estará… ¿En qué estará pensando?
- … Es que… yo… - comencé a jugar tímidamente con mis dedos, mostrando total inseguridad… ¡Y claramente! ¡Estar con él…! Hace que baje la guardia…
« Aunque no sé si algún día lo harás; el estar contigo, Sakeno-kun, despierta mi total confianza y dependencia en ti. Despierta en mi un sentimiento y un deseo de que me protejas… »
- ¡S-Sakeno-kun! ¡Y-Yo quiero…!
- ¡Oh, disculpa! - Sakeno-kun sacó su teléfono, el cual estaba vibrando, frente a mi - Tengo una llamada, ¿Te molesta si…?
- No te preocupes. Tu contesta…
- Gracias… - se alejó un poco y tomó la llamada. Mientras él estaba en ello, yo comencé a respirar un poco agitada, al estar procesando el concepto de que en este mismo momento estaba hablando con el chico que tanto me gusta y a quien me le declaré hace un par de semanas.
Cuando se dio la vuelta y camino hacia mi, el valor regresó a mi cuerpo… ¡De inmediato me sentí lista para poder hablar con él!
- Lo siento, Misti… - me habló con una voz un tanto decepcionada - Vienen a recogerme, y hoy voy a estar ocupado, así que… me tengo que ir…
- ¡Oh! N-No te preocupes por mí… - !por favor, dime qué estás mintiendo! ¡Qué estás lo suficientemente asustado para hablar conmigo que solo inventaste esto! - Si quieres, después podemos hablar… ¡Tengo tu número!
- ¿En serio?
- … Si… me lo diste ese día…
- Oh, ya veo… Entonces, nos vemos… - mostrando que tenía prisa, Sakeno-kun se dio la vuelta y caminó hacia la salida de la escuela. Y, me quedé sola ahí, parada, y mirando su perfil saliendo de la escuela…
…
- Que buenos tiempos eran aquellos…
Suspiré, mientras me acomodaba en aquel viejo colchón. Cómo había mencionado, ya estaba muy viejo: muy usado y "aguado", uno uno que otro hoyo donde salían resortes deformes, con polvo por doquier; tal que, cuando me recosté, la habitación se llenó de polvo.
Pero, todo lo malo que tiene este colchón… es para mí un recordatorio de que en este colchón, dentro de estás 4 paredes… hubo muchas cosas. Viví demasiadas cosas dentro de esta habitación… ¡Realmente demasiadas! Considero que haber conocido a Sakeno-kun ha abierto completamente el curso total de mi vida.
En un principio, de no haberme topado con Sakeno-kun… seguiría viviendo en esta casa. Esta habitación estaría llena de peluches regados por todos lados, colchas en la cama, una que otra almohada grande, uno que otro póster colgado, y un montón de ropa sucia acumulada en una esquina de la recámara, zona que tendría un cartel con el símbolo de peligro biológico… Porque, probablemente, mi ropa sucia acumulada sería un peligro biológico.
Pienso y pienso infinitas veces en todo lo que he vivido al lado de Sakeno-kun. Todas las aventuras que tuvimos juntos: desde la secundaria, donde nos conocimos, hasta el día de hoy,… un evento que realmente me tiene muy asustada, pero… que debo cumplir…
Miré mi teléfono una y otra vez. Faltaban aproximadamente unas 3 horas para aquello. Y yo seguía ahí, tumbada en mi cama, con total… pereza.
Bueno, ese sitio era culpable de ello. Mi cama era culpable de que estuviera ahí tumbada… ¡Era un lugar avogedor, a pesar de las imperfecciones, y mi cuerpo estaba moldeado para estar ahí! Había vivido tantos momentos estando en aquella cama. Mis días de alegría, y… mis lágrimas de tristeza…
…
- ¡Wuaaaaaaaaaaa!
Acostada en mi cama, lloraba y lloraba desconsoladamente, soltando largos ríos de lágrimas que empapaban mis almohadas, mis cobijas, y mis ojos.
- ¿Por qué no lo hice? ¿¡Por qué!?
- ¿De qué hablas? - la fría voz de Valeria me indicaba que, efectivamente, no entendía por lo que estaba sufriendo.
- ¡De todo! ¿Por qué rayos no le invite a salir, el último día de clases? ¡Soy un total fracaso!
- Misti… eso pasó ayer…
- ¡No me importa! - la miré con molestia - ¡Quería invitarlo a salir, pero me dijo que estaba ocupado! ¡¿Acaso… será que me está rechazando?!
- ¡Cálmate! - me rogó Valeria - ¡Te pareces a… ti misma… en exámenes! ¡No es normal que te pongas así!
- ¡Claro que es normal! ¡Yo quiero salir con él, pero no puedo! - comencé a hacer un puchero ahí mismo.
- Vaya… años sin ver esa forma en la que mueves tus manos, sueltas lágrimas y reclamas con tu boca. ¡Sakeno-kun me ha dado la oportunidad de volver e revivir esos momentos!
- ¡No es divertido, Vale! - exclamé - Quiero… salir con Sakeno-kun… ¡Por eso también le rogué cuando me le declaré!
- … Si lo pones de ese modo, si parece que estás desesperada…
- ¡Oye! ¡Y-Ya lo sé, y lo sé porque lo…! - pensé cuidadosamente mis siguientes palabras, pero… conociendo a Vale, a veces lo mejor es guardar silencio.
- Bueno, si tan interesada estás en él… ¿Por qué no le mandas un mensaje? Digo… Tienes su número…
- ¡Pero me dijo que ayer no podía!
- ¿Pero no te dijo nada sobre hoy, cierto?
- Eh… cierto… ¡Pero…! ¿Y si está…?
- ¡Nada de dudas ni pretextos! - Valeria se paró frente a mi - ¡Si tú no le llamas, ni le mandas un mensaje, yo misma lo haré!
En ese momento, Vale se alejó un poco de mi, y pude notar como levantaba mi teléfono en sus manos… ¿¡Qué!? ¿¡Cómo rayos llegó hasta sus manos!?
- ¡N-No te atrevas! - rápidamente me dirigí a ella y le arrebaté mi celular.
- ¿Por qué no?
- ¡N-No quiero molestarlo!
- ¿Y, si en realidad está teniendo un mal día, y con tu voz se alegra su existencia?
- ¡! ¿E-Eso crees…? - volteé a verla para confirmar sus palabras, solo para darme cuenta de qué estaba con mi celular en sus manos… ¿Pero qué? - ¡Oye! - volví a quitárselo y lo tomé entre mis manos.
- ¡Vamos! ¿Por qué no le llamas?
- … Pues… ¿Qué le diré? No tengo ningún buen motivo para hablarle…
- ¡Al diablo con eso! - mi celular volvió a aparecer en sus manos, y está vez comenzó a buscar el número de Sakeno-kun.
- ¡Oye! - volví a quitárselo, y está vez lo metí en mi blusa, de modo que no podría alcanzarlo.
- ¡Vamos! ¿Realmente necesitas una razón para hablarle? ¿Una razón para mandarle un mensaje de "Hola♥" y ya?
- N-No lo entenderías… - comenté mientras volteaba a otro lado - ¿No creerá que soy una loca que lo persigue si solamente le hablo para decirle "Hola"?
- … Si así fuera, la mitad de chicas que conozco estarían tras las rejas… - y entonces se quedó pensando - Bueno, si tanto quieres un motivo para llamarle… ¡Lo tengo! - metió la mano en su blusa y comenzó a urgar, hasta que encontró mi teléfono y se puso a buscar nuevamente el contacto de Sakeno-kun… ¿¡Pero qué carajos!?
- ¡Oye! ¿¡Cómo diablos haces eso!? - le arrebaté el teléfono, y me abracé a mi misma tan solo al imaginarme mis teorías.
- Querida… mi nombre es Valeria Nakahara. Puedo hacer cualquier cosa UwU… Además, todos lados s teléfonos que has tomado son carcasas parecidas a la del tuyo. El original y verdadero está aquí… - dicho esto, tomó un último celular igual al mío y lo levantó.
Confundida, revisé en mí y efectivamente encontré que todos los demás que había tomado eran simples carcasas iguales.
-¡! ¿¡C-Cuándo preparaste todo esto!?
- Comencé mi planificación cuando comenzaste a hablar de Sakeno-kun OwO…
- ¡! ¡Devuélveme mi teléfono! - trate de quitárselo de sus manos, pero ella fue más rápida y pudo esquivar mi mano - ¡Vale!
- Te lo devolveré… ¡Hasta que esté marcando a Sakeno-kun!
- ¡No! ¡Por favor, no seas malvada! ¡Tan solo devuélveme mi teléfono!
- … No creas que hago esto por el gusto de ser malvada… ¡Lo hago por tu bienestar!
- ¿¡ !?
- Siempre he pensado en tu futuro… ¡Y lo que he visto no es para nada agradable! ¡Tú, con 50 años, sentada en una silla de madera afuera de una casita de campo, rodeada de gatos que entran y salen de la casa a voluntad!
- ¿Eh?
- Digo… ¿Quién desea este futuro siquiera para su mayor enemigo? ¡Si ni siquiera lo he considerado para mí, como es posible entonces que promueva este futuro para ti! ¡Cómo mejor amiga, hermana de otra madre, y compañera de escuela que soy, no debo permitir esto! ¡Lo evitaré, cueste lo que cueste!
- Vale… - sus palabras… ¡Son tan inspiradoras y fuertes! ¡Me hacen recobrar mi espíritu!
- Además… si te quedas soltera, viviendo con gatos y tejiendo cosas… ¿Cómo rayos me daré a conocer? Digo; me quedaría muy bien el título de "tía Vale"… Algo así como… "¡Mami! ¡Papi! ¡Queremos visitar a la tía Vale!". Sería un lindo gesto para dejar mi legado… Además, ¿Qué clase de niño no me querría a mi como su tía? ¡Sería una excelente cuidadora, además de que me encargaría de hacer cosas divertidas para maleducarlos! ¡Sería un ejemplo a seguir en la sociedad!
- … ¿Sabes? Tus palabras sobre mi futuro realmente me inspiraron… Pero, ahora que sé que quieres llamarte tía de mis hijos… Ahora, no sé si te deje a cargo de mis futuros hijos…
- ¡Vamos! ¡No seas mala!
- ¡Tú eres la mala al querer usarme para tus planes como futura tía de mi familia!
- ¡Bueno, estamos a punto de averiguarlo! ¡Tómalo!
Vale me arrojó mi teléfono con la pantalla prendida; a penas pude reaccionar y tomarlo a tiempo, antes de que cayera en algún otro lado. En cuanto vi la pantalla, mi cara quedó completamente asustada: estaba llamando a Sakeno-kun.
- ¡V-V-V-Vale! ¡¿P-Pero qué has hecho!?
- Te dije que para evitar mi sueño de que te quedarías soltera haría lo que fuera necesario… Aunque, también aplica para mis planes de ser la tía chida… ¡Pero hablaba en serio! ¡Haré lo que sea necesario!
- ¡N-No! - le arrojé el teléfono de regreso.
- ¡Claro que sí! - me lo devolvió, y yo solamente me asusté aún más.
- ¡L-Le colgaré ahora mismo! - tomé la pantalla y apunté mi dedo a aquel icono.
- ¿Serás capaz?… - sus ojos de orgullo me hicieron sentir pequeña - ¿Serás capaz de terminar la llamada que es hacia tu amado?… ¿Qué pensará Sakeno-kun cuando vea una llamada pérdida tuya…? Probablemente volvería a llamar… Pero, más aún… ¿Si llegara a contestar y tu le cuelgas, qué imagen tendrá de ti? ¡Eso sería realmente terrible para ti! Entonces… ¿Serás capaz de hacerlo?…
- … - yo solamente me quedé en silencio, mientras el color subía a gran velocidad por mi cara. Tragué saliva, y entonces pensé todo lo que había dicho Vale.
¡Carajo! ¡Todo era cierto! ¡Y no solo cierto: todo eso había surgido en mi cabeza desde que me dio su número y pensé en llamarle poco después! ¡Te odio tanto Valeria!
Deje de apuntar a mi teléfono, y entonces la pantalla cambió de distribución. La llamada ya había llegado, y Sakeno-kun había contestado el teléfono.
- ¡Hazlo! ¡Háblale! - me trató de animar Vale a modo de susurró para que no se escuchará a través de la llamada.
Yo levanté el teléfono, con un ligero temblor en mis manos, y hablé con voz nerviosa y un poco tímida, mientras el color de la vergüenza seguía aumentando en mi rostro.
- ¿B-Bueno?…
ASFD ❤️
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