Cierto… Muy cierto…

Definitivamente, desde el primer momento en que conocí a Misti Takenaka, toda mi vida se ha llenado de vueltas y vueltas muy… extrañas, pero que me han gustado…

…

- ¿Y qué? ¿Estás listo o no?

Estaba sentado en una silla, a mitad de la sala. Esperando…

A mis costados estaban mis amigos más fieles y leales: aquellos que, a pesar de los años, de cómo se ha movido el mundo, nuestras vidas, los tratos que nos hemos hecho el uno al otro, siempre han estado ahí: Heishi Nodenki y Zedrick Sagara.

- ¿No me digas que te estás acobarbando? ¡Ya eres todo un hombre! ¡Debes seguir adelante!

- Aunque eso signifique renunciar a tus privilegios como hombre… ¡Es tu deber terminar lo que permitiste que empezara!

Digamos que en estos momentos ambos están sensibles. Con este temita de… bueno, hasta para mí es difícil entender. Entender que estoy a punto de cambiar toda mi vida como solía conocerla; entender que 2 letras son suficientes para comenzar una nueva vida.

- Ustedes… son un par de dramáticos… - me queje con ellos, que si: definitivamente estaban actuando con dramatismo - No me voy a morir, ni me voy a cambiar de país, ni nada de eso.

- … Bueno, en ambos casos, tu tienes la decisión final… - comentó Heishi.

- Tiene razón. Puede que te cambies de país para comenzar de nuevo, desde cero, por decisión de ambos, o…

- ¿O que no me guste mi nueva vida y me suicide? - reí con tan solo pensar en esa idea - Créanme. Dudo mucho que mi nueva vida me lleve a ese extremo.

- Todo puede pasar… - Heishi dijo mientras levantaba sus manos - En fin… ¿Ya decidieron que van a hacer después de todo esto?

- … Más o menos… - comenté, mientras me recargaba en la parte trasera de mi silla - No tenemos nada definido aún. Queremos… sentirnos vivos… Perdernos un tiempo, y pedir direcciones en la esquina.

- ¡Vaya! ¡Cuánto romance! - exclamó Zedrick, con felicidad radiante en su rostro - Sin tan solo Vale así fuera conmigo…

- Vale es malvada contigo por el simple hecho de que así es… - le defendió Heishi. Si, es… muy difícil creer que Zedrick se enamoraría de la loca de Valeria, y que Valeria aceptara ser su novia.

- Tienes razón… ¡Pero, hey! ¡Esa es la esencia de nuestra relación!

- ¡Tienes razón! ¡Si no fuera por ustedes 2, las fiestas en nuestra juventud hubieran sido de lo más aburridas! ¿O no, Sakeno?

- ¡Ja! ¡Definitivamente! - era cierto: la combinación de ambos era tan explosiva y extrovertida, que incluso podrían encender una reunión de políticos con tan solo un par de movimientos - Lo malo de esto, es que han sido almas de fiesta sin necesidad de alcohol.

- ¿Malo? ¿Por qué crees que es malo?

- Bueno… el alcohol suele sacar… la parte oculta de nosotros. Nuestro verdadero yo… - comencé a explicar, con pesadez en mis palabras - Así que… si les diéramos alcohol en una fiesta, o bien ustedes se volverían aún más almas de la fiesta, a grado exagerado; o bien se deprimirían y se sentarían a llorar… O bien, serían una combinación extravagante.

- … Tiene razón lo que dice… - respondió Heishi ante mi conclusión - Nunca han estado borrachos los 2 en una fiesta. O bueno, nunca los hemos visto.

- Una vez lo estuve… - comentó Zedrick, con algo de vergüenza - En nuestros años universitarios, cuando estábamos separados…

- ¿En serio?

- Si… ¡Pero, después de la horrenda cruda que me provocó, decidí mantenerme al margen con el alcohol! ¡Fueron horribles los días consecuentes a esa fiesta!

- Ya veo… ¡Entonces, solo hay que preocuparnos de Vale!

- ¡Ja! ¡Tienes razón! ¡Esa loquilla definitivamente se desatará con el alcohol!

- ¡Jajajaja! - reímos un largo rato, mientras yo recordaba todo lo que había vivido anteriormente.

Estaba reviviendo todo lo que había pasado en mi vida, después de aquel momento crucial que definió prácticamente mi comportamiento diario, mis pensamientos, mis intereses. Ese momento que definió que estaría sentado en esta silla, riendo con mis amigos de la secundaria.

El momento en que conocí a Misti Takenaka…

…

¿Cómo podría describir mi estado de ánimos en estos días? Con una sencilla palabra: asustado.

¿Pero por qué? ¿Que ha ocurrido que me encuentro en este estado de miedo, no profundo pero si existente? Pues, solamente 2 palabras les atribuyó este estado; 2 palabras que forman un nombre…

Misti Takenaka.

Esa chica, desde que la conocí, he visto un actuar extraño en ella.

Todo comenzó con nuestra salida, el día después de que choqué con ella a la hora de que terminaron las clases.

Honestamente… ¡Se veía tan tierna cuando se estaba disculpando! ¡Y más tierna aún con sus ojos llenos de brillo cuando le propuse comer juntos en el almuerzo como disculpa por parte mía! Cautivó completamente mi corazón, como suelen hacerlo las lolis.

Ahora que lo pienso, ella dijo que es de mi edad… ¡Por lo tanto, no es del todo ilegal para mí >:D! Pero, apenas la acabo de conocer, y no quiero hacer algo… indebido con ella.

Después, estuve pensando en ella todo lo que le quedó al día. Pensando en su cabello, largo y ondulado, con ese cambio de color de café oscuro en la raíz y concluyendo con un café amarillo en las puntas. Sus ojos azules, algo grandes para su cabeza, que transmitían sentimientos profundos. Bueno, no puedo decir "sentimientos profundos" cuando solamente me transmitió pena y timidez. Pero, ambos sentimientos… si me tocaron; me conmovieron. La ropa que llevaba… sencilla, pues de trataba solamente de una falda sencilla, una playera, y un par de medias. Aún así… esa imagen de ella. Todo lo que ella es se quedó plasmado en mi cabeza todo el día, la noche que siguió, y durante la mañana del día siguiente… hasta que volví a verla.

Después de todo ese pequeño embrollo, ocurrió nuestra salida. Estaba tan cautivado por cómo la había visto ayer, que había olvidado completamente que la había invitado a comer juntos en el almuerzo.

Yo simplemente seguí mi rutina de todos los días, mientras su imagen seguía grabada en mis retinas: me levanté a una hora muy razonable (considerando que iba a tener una hora libre al comienzo del día); me bañé en 10 segundos, casi, me cambié con mi ropa típica: playera sencilla sin estampados, pantalón de mezclilla, tenis blancos o negros, dependiendo de cuales estén limpios o… usables… y ya. Salí de mi cuarto y, como siempre, mi hermana mayor estaba ya arreglada y vestida en la cocina haciendo el desayuno.

Ella debería estar estudiando en su quinto y último año en la universidad, pero… digamos que no alcanzó su puntaje en algunas materias, y no tenía créditos para tratar de pasar de semestre. El punto es que al final no podían tenerla en la escuela ya que no cumplía con los requisitos para pasar de año, pero tampoco la querían sacar porque poco antes de su caso surgió un problema con la escuela que la terminaron tachando como una institución corrupta y poco preparada; si echan a mi hermana de la escuela, estarían en graves problemas, por lo que la tienen… "rezagada": está tomando cursos y clases extras, mientras arreglan la situación en la que se metieron y también tratan de arreglar la situación de mi hermana. El punto es que ahora está más tiempo conmigo, cuidándome, haciéndome de comer, llevándome y recogiéndome de la escuela. Bueno, las cosas típicas de un hermano mayor.

- Ya despertaste, mocoso… - sé que mocoso no es una palabra agradable, pero ella suele usarla como un cariño para mi.

- Claro que sí… - bostecé con pesadez - ¿Está listo el desayuno? ¿Necesitas ayuda en algo?

- ¿? ¿Ofreciéndome ayuda? ¿Qué ocurrió en la noche, Sakeno Kami?

- Digamos que… - No. Mejor no digo que el simple hecho de pensar y recordar a Misti me hizo… "ablandarme". Y no por el hecho de que me haya ablandado, o me de vergüenza. Sino porque sería la excusa perfecta para que me esté molestando con eso durante 1 mes mínimamente - Hoy amanecí de buenas…

- Pues… ¡Mal por ti! ¡Acabo de terminar!

Fue a la mesa del comedor y puso en ella los 2 platos que tenían un desayuno básico: panes tostados con un poco de mermelada.

- ¿En serio? ¿Toda la mañana en la cocina solamente para preparar un par de panes con mermelada?

- En realidad, puse cuatro en los platos: 2 y 2. Si quieres más, hay debajo de un plato que dejé en la cocina.

- ¡Que bien! Iré a hacerme mi café.

Tal vez podría ser temprano que teniendo 14 años tomé café. Pero, ya es natural en mi… ¡El café es realmente exquisito! Fui a la cocina, y en un par de segundos lo preparé; tomé mi taza y llegué hasta el comedor.

- ¡Bien! ¡A comer!

En el momento en que me senté en la silla, unos cuantos golpes azotaron la puerta, interrumpiendo el futuro desayuno que estaba a punto de tener.

- ¿? ¿Quién será?

- ¡Sakeno! ¡Sal de tu cantón!

- ¡Vamos! ¡O llegaremos tarde!

Las voces de Heishi y Zedrick hicieron que me tapara la cara con algo de vergüenza.

- Son…

- Si, sé quiénes son. Los traes a la casa a cada rato… - me reclamó mi hermana con algo de violencia en sus palabras.

- Espera… ¡Es cierto! - ¡Diablos! ¡Lo había olvidado! - ¡H-Hoy iba a aprovechar la hora libre que tengo para tratar de terminar la presentación de nuestro proyecto para la hora siguiente al descanso! ¡Y había quedado de ir con|!

- Siempre tan descuidado, hermano… - con bastante tranquilidad, mi hermana le tomó un trago a su café - Al menos tómate el café, y tú almuerzo también está preparado en la mesa. Al principio, no estaba segura de si hacia tu almuerzo tan temprano. Ahora veo que fue una decisión sabía.

- ¡Muchas gracias hermana! - tomé de un trago mi café, y le di 2 mordidas a mi pan h ¡Nos vemos a las 2!

- A la hora que sales. De acuerdo… - le dio una mordida a su pan, y siguió actuando con tanta naturalidad, algo que casi nunca hacía.

Fui a mi cuarto, tomé mi mochila, y a la hora de salir tomé mi almuerzo y salí de la casa. Afuera, los 2 chicos estaban esperándome pacientemente.

- ¡Rápido! ¡La biblioteca abre a las 7 am, y debemos estar a más tardar en la escuela a las 8:30! ¡Solo tenemos una hora, quitando el tiempo que hay entre la escuela y la biblioteca!

- ¡Tienen razón! ¡Vamos!

De inmediato, salimos disparados hacia la dirección de la biblioteca. Y de ahí, el día pasó muy rápido. Tanto que en un instante me di cuenta de que ya estaba sentado en el receso con Heishi y Zedrick.

- ¿Y bien? ¿Hablaste con el profesor, como compensación por no haber apoyado casi nada en la presentación? - Las palabras de Zedrick son bastante acusadoras.

- ¿Eh? ¿Por qué tanta agresividad? ¡¿Y como que no hice nada?! ¡Si yo hice 5 diapositivas!

- De 30…

- ¡Pero gracias a eso avanzamos!

- Pero sigue incompleta esa presentación… - Tienen razón. La hora que gastamos en biblioteca fue casi en vano: apenas logramos avanzar con respecto a lo que ya teníamos en un inicio.

- Tienen razón. Sin embargo, si hablamos con él…

- ¿Lo hiciste o no? ¿Le dijiste que estamos fritos o no?

- ¡No seas miedosa! ¡Háblale y ya!

- ¿?

Los chicos y yo :v volteamos a ver de quién había salido ese grito. Un grito bastante femenino, con una voz que predominaba como si fuera una clase de chillido entre aterrador y desafiante.

Lo único que vimos era una chica de espaldas. Más bien, una niña; o eso se podría decir basándose en la estatura, ya que su vestimenta no parecía el de una niña: pantalones de mezclilla de esos que van pegaditos (no me acuerdo de su nombre); una playera sin mangas y con leves tirantes de color azul como celeste, zapatillas sencillas, y cabello ondulado castaño recogido en una coleta que iba de la parte superior de la cabeza hasta la mitad superior de la espalda, que era el límite de aquellos mechones.

Espera… Esa descripción… ¡Y-Ya sé quién eres!

- ¿? ¿Misti? ¿Eres tú?…

Con algo de lentitud en sus movimientos, se volteó para darnos la cara a los chicos y a mi. ¡Y si! ¡Definitivamente era aquella chica que chocó conmigo! Y ahora, con el nuevo look que traía… ¡Diablos, será ahora más difícil sacarla de mi mente!

- H-Hola… Sakeno-k|… - ¿K? ¿K de qué? Espera… ¿Sabía que era yo? ¿Acaso no estaba de espaldas?

- Oh, sabías que era yo… - vi un ligero temblor salir de su cuerpo - ¿Qué haces aquí?

- ¿La conoces Sakeno? - las palabras de incredulidad de Heishi eran… auténticas. Por el hecho de que nos les he contado lo que ocurrió ayer.

Entonces les expliqué brevemente nuestro encuentro "cliché". Sobra decir que se rieron de ello, como si hubiera sido un chiste; sin parecer grosero, si yo hubiera estado en el lugar de alguno de los 2, también me hubiera reído de aquella historia.

- E-Es que… - pude notar un leve temblor en sus labios a la hora de hablar, junto con un sonrojó de pena en sus mejillas - Es-Estaba por aquí… Y recordé… Que tú y yo…

… ¡Es cierto! ¡Ayer quedé con ella en una cita! Pero… quedé con ella, no con Heishi y Zedrick… ¿Cómo me los sacó de encima?… ¡Ya sé!

- ¡! ¡Tienes toda la razón! - volteé a ver a Heishi y Zedrick y entonces les confesé la verdad - Chicos, olvidé que no le dije al profesor sobre nuestro proyecto prácticamente fallido.

- Espera, ¿Qué no hiciste qué?

Si: estuvimos la mañana en la biblioteca, luego llegamos rayando a la escuela, y estuvieron a punto de suspenderme 2 veces. Salir para hablar con él profesor habría sido suicida. Además… ¡Realmente lo olvidé xd! ¡Estaba tan atento en no salir reportado otra vez, que olvidé siquiera la idea!

- Lo que si sé - comencé a hablar para no sentirme tan… mal… - Es que en el receso el profesor está libre, así que vayan a decirle que no entregaremos en la siguiente clase.

- ¿Y qué pasa contigo? - Zedrick actuó alterado. Como siempre :v - Tienes que venir a ayudarnos a decirle… ¡Nos estás diciendo que lo olvidaste!

- En primer lugar… - le dije interrumpiendo sus palabras - ¿Por qué me mandaron a mi a decirle? ¡Saben perfectamente que me odia! ¡Nos matará si es que voy a hablar con él!

Y era bastante cierto. Ese profesor, al igual que la mitad de la escuela, me odia.

- … Tiene un buen punto… - comentó Heishi - Que bueno que no fuiste… ¡Ahora, Zedrick, hay que ir a hablar con él!

- ¡Argh! ¡Nos debes una Sakeno! - de inmediato, los 2 chicos salieron corriendo hacia el patio, dejándonos entonces a ella y a mi solos en ese sitio.

- … Eh… ¿Eh?…

Me levanté de la banca con completa calma, y entonces me acerqué a ella, ¿Cómo debería saludarla? ¿Con un beso en la mejilla, estrechando manos…? Creo que agitando mi mano será más que suficiente.

- Hola Misti, ¿Cómo has estado?

- ¿Qué?…

¿? ¿Por qué estaba actuando así? Simplemente caminé hacia ella, y podía notar con mayor detalle que se veía nerviosa. Y, hablando de haberme acercado… ¡Qué gran aroma! Trae puesto un perfume con un aroma realmente delicioso… ¿Qué es? ¿Fresa? Quién sabe, pero es un aroma muy rico.

Ahora que lo pienso… ¿No habrá sido mucho que la identificara con verla de espaldas? Digo; solo la he visto una vez, pero supe identificarla perfectamente… Creo que… debería actuar con mayor… "ignorancia".

- … Oye, te soy sincero con algo… - me acerqué un poco. Quería hablar y que solamente ella me escuchara. No sé del todo porque, pero mi cuerpo me dijo que no quería que alguien más supiera - Cuando te vi de espaldas, me costó un poco identificarte xd

- … ¿Eh?

- Si… - bueno, una explicación debe ir aquí - La ropa que estabas usando, ese… leve perfume dulce que tienes - ¿Leve? ¡Claramente es muy aromático! - Y que ahora puedo confirmar que eres tú… Realmente no sabía que eras tú. Pero, gracias a ese cabello que tienes acomodado en esa coleta pude saber que se trataba de ti; - En parte es cierto. Su cabello ondulado, con sus mechones decolorados, es algo que tal vez nunca olvide - Creo que nunca sería capaz de olvidar ese cabello castaño y decolorado que tienes…

- … Espera un segundo… - ¿? - ¿Qué está pasando? ¿P-Por qué los corriste?

¿? ¿Acaso es una broma su pregunta? ¡Había quedado de estar con ella en el receso, no con Heishi ni Zedrick! Además, tienen que hablar con el profesor antes de que termine el descanso.

- ¿? ¿De qué hablas? Ayer te había dicho que tendríamos una "cita" tu y yo el día de hoy para compensarte haberte tirado… - Es cierto. Ese era el motivo principal. - Así que, ven conmigo…

- ¿Eh?… ¿Eh?… ¿Eh?

- Si, ven…

Después, la invite a sentarse conmigo en la banca, y tuvimos nuestra pequeña cita: en realidad, era una simple reunión entre 2 chicos completamente desconocidos, hablando de cosas de jóvenes. No era algo tan especial…

Después, cuando terminó el descanso, me despedí de ella y me fui a mi salón, con algo de prisas para saber cuál fue el resultado de las palabras de Heishi y Zedricka ante nuestro posible fracaso.

Pero… parte de mi tiene miedo a esa respuesta…

Y después de esto, llegó la razón por la que Misti Takenaka comenzó a "asustarme": acoso.

Después de aquella cita que tuvimos, gracias a los observadores de Heishi y Zedrick, pude saber que Misti siempre estaba en algún sitio, oculta para mis ojos, pero siempre vigilándome.

Bueno, en realidad si Heishi ni Zedrick me hubieran dicho, yo hubiera seguido mis días creyendo que todo estaba pasando normal.

Cuando los chicos me dijeron, al principio no creí que el asunto fuera tan grave como me lo planteaban: una chica desconocida que me acosa. Bueno, no tan desconocida, ya que les había hablado con poco de ella a los chicos, así que era alguien ya conocida.

Pero, después hicieron un experimento que me hizo abrir los ojos: de algún modo lograron meterme en problemas con un profesor, de modo que me quedé una hora más en la escuela para terminar una tarea, y como castigo.

Me habían dicho que probablemente ella estaría pasando por el pasillo regularmente, o que estaría en otro salón observando.

Pero, en un comienzo creí que era una completa farsa… ¡Hasta que Misti pasó como 5 veces por la puerta del salón durante los primeros 20 minutos de castigo!

Creyó que no me di cuenta, pero mi vista periférica pudo confirmar su presencia. Aunque después de eso, no volvió a pasar. Y con esos datos recabados, entonces supe que me estaba acosando.

- ¿Y bien?

- Tienen razón… - al día siguiente estaba hablando con ellos acerca del tema, con algo de vergüenza.

- ¡Pero no te preocupes! ¡Para eso estamos nosotros 2! ¡Ayudarme a superar las dificultades que se te presenten!

- ¿Eh?

- ¡Escucha! ¡Tenemos un contacto que nos puede ayudar a qué tu la acoses ahora!

- ¿Qué? ¿Qué diablos están diciendo?

- ¿Acaso… no te interesa saber por qué te acosa?

Bueno, esa es una interrogante que se me presentó el día de ayer, después de que la vi pasar. ¿Por qué yo? ¿Por qué a mi? ¿Qué tengo de especial que ella quiera? ¿O cuáles son sus motivos para perseguirme y acosarme?

- O sea… si quiero saber… ¡Pero no creo que acosando a tu acosador será la forma adecuada!

- Como sea. El punto es que… ¡Vas a tener que estar castigado otra vez!

- ¿¡Qué!?

- Ya lo tenemos planeado - Estos chicos… ¡Hasta parecen más entusiasmados en saber eso que yo mismo, quien lo estoy sufriendo! - Deberás estar 3 horas metido en los baños de la escuela, de modo que cuando vaya el prefecto a revisar baños… 

- ¿Eh? ¿Los prefectos revisando baños?

- Pues si… ¡Bueno, en realidad nosotros le diremos que estás ahí!

- ¿¡Q-Qué!?

- ¡Tú solo haznos caso! ¡Tenemos todo planeado!

…

¡Los odio a ambos!

Al final hicimos los planes que tanto querían hacer… ¡Y ahora estoy castigado en la escuela! ¡2 horas extra para cobrar las 3 que perdí estando en el baño! Seguramente ese par sabía lo que estaban haciendo…

Levanté mi mano con algo de impaciencia, mientras miraba al profesor auxiliar que estaba frente a mi.

- Profesor… Necesito ir al baño…

- ¿Qué? ¿En serio? ¿3 horas en los baños no fueron suficientes?

Si, es una pregunta demasiado tonta comparando que estoy castigado ahí mismo por estar en el baño. Pero… Necesito echar agua en mi cara. Necesito aclarar mis ideas…

- … De acuerdo. Solo tienes 5 minutos…

- Gracias.

Me levanté de mi silla, y rápidamente salí al sanitario. En cuanto llegué, fui al lavamanos, abrí la llave y de inmediato comencé a lavarme la cara con bastante agua. Estaba… bastante confundido.

¿Por qué Misti me acosa? ¿Qué es lo que quiere de mi? ¡Son preguntas a las que no logró obtener una respuesta clara! ¡Alguna respuesta lógica y razonable! ¡No puedo!

Después de estar así por un largo rato, me enjuague la cara nuevamente y por última vez, y salí de los baños.

Cuando salí, y a algunos chicos con uniformes deportivos, entrenando en la cancha. Pero eran muy pocos, por lo que… tal vez se haya terminado su entrenamiento.

Pero… ¿Acaso hoy hay entrenamiento? ¿Qué equipo entrena en estos días? ¿Va a haber algún torneo entre escuelas? ¡Sería muy divertido ver si no torneo!

Frente a mi, a unos metros, se encuentra el vestidor. Un lugar al que nunca antes he entrado; la curiosidad de ir a ver qué hay dentro de esos cuartos me carcome día tras día, pero… hoy no iré a investigar que hay en esos salones. Debo ir a mi salón y terminar con las 2 horas de castigo que me gané por… tonto…

¿? A lo lejos, saliendo de esos vestidores, veo a una chica… algo chaparra. No; muy chaparra, que se detuvo para abrazarse a si misma. Tal vez porque el clima este un poco fresco… o por qué tal vez estaba entrenando, y el cambio de temperatura le genera frío. Bueno, en realidad no sé por qué lo hizo; puras teorías locas…

¡Un momento! S-Su cabello castaño… ondulado y decolorado… ¡E-Es M-Misti! ¡Misti Takenaka, la chica que me acosa!

Pero, ¿Qué está haciendo aquí? ¿Me está acosando? N-No; no lo creo… además, estaría cerca de mi si lo estuviera haciendo… ¿Entonces por qué está saliendo del vestidor? No lo sé. Pero… ¡Voy a saludarla!

- Voy a apresurarme a llegar a mi casa… O me voy a resfriar…

- H-Hola Misti…

- ¡Ahhhhhhhhhhhhhh!

Misti dio un leve salto con gran susto, sentimiento que también me transmitió, pero gracias a esa acción de algún modo me cayó, dándose un golpe un tanto fuerte en la frente… ¡D-Diablos! ¡Acabo de asustar y casi matar a mi acosadora!

- ¡M-Misti! ¡Déjame ayudarte!

Extendí mi mano hacia ella, hasta lograr tocar su hombro. De inmediato, sin pensarlo 2 veces, tomó mi mano y se apoyó con ella a modo de lograr levantarse.

- Uhh… - suspiró con algo de cansancio y dolor. Me volteó a ver con lentitud, y a la hora de verme de inmediato sus mejillas se tornaron de color rojo… ¡Su cara, combinando ese color, se me hizo una combinación tan tierna y hermosa!

- Hola Misti… - saludé con bastante entusiasmo.

- ¡Oh! ¡E-Eres tú!… S-Sakeno… Kun…

- ¿? ¿Sakeno-kun? - ¿Eh? ¿Sakeno-kun?

¿A-Así me llama? ¿No es… algo pronto, considerando que solo hemos salido una vez?

- ¿¡ !? ¡N-Nada! ¡Olvídalo! ¡Olvida lo que dije! - de inmediato se tapó la cara con su playera, tratando de ocultar su carita linda roja… ¡Por favor, no lo hagas! - ¿Q-Qué ocurre? ¿Q-Qué haces aquí?

Bueno… la pregunta la sentí lo más normal posible. Y eso que sé que me acosa todos los días :v. Pero, sabiendo que no vi que me acosara hoy, entonces la pregunta es muy normal y natural.

- Oh, bueno, estaba castigado por algo de prefectura y…

- ¡Oh si! ¡Es cierto! - ¿Eh?

- ¿? ¿Cómo sabías que estaba castigado?

Espera… ¿Si lo sabía? ¿Sabía que estaba castigado? Entonces… ¿Su técnica de acoso ha mejorado? O… ¿Acaso tendrá una fuente de información? ¿Alguien le habrá dicho sobre esto?

Vi como Misti se asustó un tanto, pero al parecer pudo contenerse lo suficiente y me dio la respuesta a mi pregunta.

- M-Me lo dijo un amigo… escuchó lo que pasó y me contó…

Oh… entonces alguien le dijo…

- … Ya veo…

¡Espera! ¿Y si fue… y si Zedrick y Heishi son su fuente de información? ¿Y si ellos me trajeron aquí sabiendo que ella estaría aquí? ¿Y si ellos planearon que esté aquí, solamente para avergonzarme o algo así? ¡Argh, los odio a ambos!

¡E-Espera! Este momento… estando ella y yo solos… este momento… ¡Este podría ser el momento adecuado! ¡Este podría ser…! 

- ¿?

¡Podría ser el momento perfecto para preguntarle si me acosa! ¡Preguntar y saber cuáles son sus motivaciones! ¡Por qué lo hace, y que quiere obtener de mi!

Pero… ¿Ahora será buen momento? Me refiero… ¿Realmente será este el momento y lugar exactos en los cuales deba hacer está pregunta? N-No lo creo…

Tal vez deba… ¿Y si tenemos otra reunión? Nos juntamos en un receso, comemos juntos, y tal vez pueda preguntarle sobre sus verdaderas intenciones; conocer sus pensamientos, y qué es lo que ve en mí.

Pero… ¿Esto no sería como una cita? Me pone un poco nervioso pensar que estaríamos en una especie de cita… ¡P-Pero no importa! ¡Debo conocer la verdad!

- … Bueno, me gustaría… - ¿Cuáles serán las palabras más adecuadas? ¡Bueno, ya no importa! ¡Lo diré así como así! - Invitarte a una cita…

ASFD ❤️