4. Deseo sexual


4. Deseo sexual

La serotonina parece tener también un efecto sobre la capacidad que tenemos los humanos de enamorarnos y sentir amor por otra persona.

La serotonina guarda una relación directamente proporcional con el deseo sexual. Altos niveles de esta sustancia se asocian con una falta de libido o deseo sexual. Mientras que unos bajos niveles tienden a asociarse con conductas orientadas a la búsqueda de la satisfacción del deseo sexual. Esto es debido a que después de eyacular o tener un orgasmo, aumenta considerablemente la cantidad de serotonina en el cerebro lo que provoca un estado de placer y tranquilidad. Por lo tanto, niveles excesivamente elevados de serotonina, se asocian con un bajón en la libido, menos relaciones sexuales, pero una conexión emocional superior con tu pareja.

[...]

Matteo Balsano se encontraba caminando por los pasillos de su escuela yendo en dirección a el área del gimnasio, la razón, había escuchado de las inscripciones y matriculas en la escuela culinaria. Emocionado se levantó temprano un sábado con intenciones de ser el primero en llegar ese día.

Desde pequeño ya sabía a qué quería dedicarse, siempre ayudaba a su abuela en la cocina, las sartenes y ollas siempre le parecieron atractivas... cocinar era su hobbie, su pasión y su meta.

Abrió las puertas del gimnasio encontrando la enorme sala casi vacía, con estandartes de diferentes universidades y academias. No había muchos estudiantes interesados en levantarse temprano un sábado a medio periodo de vacaciones.

Caminó al puesto en donde estaba escrito en cursiva el nombre de la escuela culinaria Le Cordon Bleu. Y cuando estaba a punto de tomar el bolígrafo para anotarse en el listado un huracán rubio lo sacudió haciéndolo retroceder.

— ¡Lo siento...! —se disculpó la chica de espaldas a él sujetando el boli y anotándose primero. Llegó su turno y él imitó su acción, no sin antes dedicarle un rápido saludo a la desconocida, leyó su nombre en el listado y cuando terminó la miró curioso; la chica era muy bonita.

—Al parecer somos futuros compañeros, Emilia. Un gusto, soy Matteo Balsano —saludó.

—Un placer, nos veremos luego, Matteo.

[...]

—Es una lástima que no veamos clases juntos, me divierto mucho contigo Matteo, eres un chico muy... carismático —como de costumbre desde que habían comenzado en la escuela culinaria Matteo la acompañaba todos los días a su casa y se quedaban charlando en el umbral de la puerta, o pasaban un buen rato viendo películas y cocinando. En esa rutina llevaban ya 4 meses, 4 meses llenos de coqueteos, miradas lascivas y muchas, demasiadas indirectas.

—Y usted es una señorita muy sarcástica y atractiva, por eso quisiera pedirle un favor —Emilia sonrió—. ¿Me daría usted el placer de convertirse en mi novia oficial?

—No, ¡no puede ser! Matteo Balsano me está proponiendo ser su novia, ¿es esto un sueño acaso? —la chica se abanicó la cara exagerando su emoción, logrando hacerlo reír y ponerlo menos nervioso—. Sería un placer señor Balsano, ¡claro que acepto!

La chica se puso de puntitas y lo sujetó de los cachetes para presionar sus labios con los de él, uniéndose en un beso.

—Bueno, novia, compañera de cocina y gran amiga, ¿qué otro título quieres agregar a la lista? —el la abrazó de la cintura depositando un beso en su mejilla y entrando a su casa.

—Futura Chef Repostera, y alumna de Balsano, no sabes cuanto me ha servido tu ayuda en 'Química de los Alimentos'.

—No es tan difícil, ni se disimula como la química entre tu y yo... —Emilia sonrió y dejó un besito en su nariz. Ese sin duda era el inicio de una bonita y duradera relación.

[...]

— ¿Cómo que quieres terminar?

Matteo estaba en shock, no podía creer lo que Emilia le estaba diciendo. Estaba impactado.

No comprendía por qué ella había tomado aquella decisión tan repentina, él no recordaba haber hecho algo malo o si quiera llegó a incomodarla, o por lo menos así lo pensaba.

Emilia dio un suspiro y lo miró con algo de pena y tristeza.

—Matteo, tu te vas a Italia y yo, yo quiero concentrarme en mis estudios, no puedo simplemente descuidarlos por intentar mantener una relación amorosa contigo.

—Pero, si la preparaduría dura solo 3 meses, ya te dije que estaré de vuelta para el próximo semestre.

— ¿Y la distancia? Apenas nos vemos entre clases porque estamos en aulas diferentes y no coincidimos porque todo el santo día nos la pasamos estudiando para los flexibles... y eso era en un inicio, no me imagino cuando te vayas.

—Pero Emi-

—Es mejor así Matteo, he pasado muy lindos momentos junto a ti, pero ya es hora de decir adiós. Te prometo que nada entre nosotros va a cambiar, podemos seguir siendo ami-

—No, no lo digas —Emilia iba a protestar, pero la mano de Matteo posarse en sus labios la hizo callar—. Si vamos a cortar, al menos que sea en buenos términos —él la apretó de las caderas y con un impulso la hizo engancharse de su cintura, Emilia soltó un gritito sorprendida, no se esperaba aquello.

Ella se sonrojó y lo miró con una sonrisa nostálgica.

—Me estaba reservando para nuestro aniversario, pero viendo las circunstancias...

—No, ¿en serio? —ella asintió, ahora el nervioso era Matteo, lo pensó unos segundos, no seguro de que había actuado correctamente—. Emi, si no quieres yo-

—No, quiero hacerlo —fue ella quien tomó la iniciativa, comenzó a besarlo, lenta y pausadamente, hasta que el beso se fue tornando algo más fogoso y apasionado.

Matteo intetanba ser cuidadoso y delicado para no espantarla, pero en realidad Emilia sentía que con cada caricia se llenaba de confianza y seguridad. Pasaba sus manos temblorosas por los brazos y pecho de su casi-exnovio.

Intentó grabar cada detalle, para que aquella despedida fuese la mejor de sus vidas. Poco a poco Matteo fue deslizando los tirantes de su vestido hasta quedar completamente desnuda frente a él. Ella no sintió pena ni vergüenza, ella estaba feliz de poder compartir su primera experiencia sexual junto a él, estaba segura de su decisión y de que quería entregarse por completo a él.

Aquella sensación no fue de dolor ni miedo, quizás porque se sentía segura y protegida, quizás porque solo se concentró en el placer, quizás porque quiso recordar aquello con una sonrisa en la cara, quizás porque Matteo fue súper atento con ella...

Para Matteo simplemente fue la primera vez que hizo el amor, que se concentró en el bienestar de su compañera, que quiso brindarle apoyo y seguridad. Quiso que ella disfrutara al máximo de todas aquellas sensaciones que le brindaba.

Emilia no significaba otra pareja sexual, sino buen amor y una gran compañía, compañía que disfrutaba, ella era alguien a quien estimaba y guardaría siempre en su corazón.

Se despidió de ella de la mejor manera, aunque su viaje a Italia se extendió más de lo debido, porque 3 meses se convirtieron en 7. Tendría que hacer intensivos si quería graduarse con los de su generación.

Estaba encantado y contento de volver, se llevo la noticia de que compartiría curso con Emilia, por lo que ya no estarían en aulas separadas. Se reencontraría con ella y si se daban la oportunidad continuarían con su relación. Pero definitivamente no se esperaba volver y enterarse de que ya mantenía una nueva relación.


Benicio, ese era el nombre de su rival. Y no descansaría hasta lograr que Emilia regresara con él.








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Tengo una novia japonesa, que no me saco e' la cabeza 🎶🎤

¿Ya vieron? Dopamina es infidelidad y Serotonina es amor y deseo sin llegar completamente a lo sexual. Entonces, ¿qué será Oxitocina?

A Serotonina le quedan dos capítulos babys.

Re acaramelados la Emilia y el Matteo, eh, eh.



ErxLee.

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