°° Noveno Capítulo °°

La había dejado encerrada, a base de candados y barras de seguridad que solo un experto de la CIA podría descifrar y claro... Él. Después de retirar el dinero de (T/N) lo había colocado en un botín que guardaría bajo siete llaves en alguna parte del pequeño departamento.

  Sin embargo, había dejado el dinero suficiente para la comida que necesitaba, sin mencionar alguna ropa de segunda que le compraría a (T/N) tanteando, pues no se sabía su talla.

Y después de algunas horas... Había vuelto a casa.

- Mierda... -Se dijo a sí mismo al abrir la cerradura, cerró la puerta y observo a (T/N) con una sonrisa radiante sobre el diván, con una lata de cerveza en la mano-.

- Vaya, acabas de llagar y ya insultando... -.

- No te lo dije a ti, es que... ¿Estás borracha? -.

- ¿Yo? -Preguntó ella sorprendida, al mismo tiempo que soltaba una carcajada. La lata de cerveza revoto, cayendo al suelo-.

  Steve negó con la cabeza, tiró el botín sobre la pequeña mesa y con la otra mano tendió la pizza que había traído.

- Te dejo apenas una hora y haces esto -La reprendió- Te he traído ropa y comida -Dejó la bolsa de ropa sobre el diván- no puedo ser... Eres peor que una niña pequeña, te has tomado mi colección de Heineken... Y ni siquiera... -Cuando se detuvo, se percató de que hablaba solo-.

  La vio tendida, tenía los ojos levemente cerrados en un descanso profundo. Linda, muy linda, quizás había sido por algo que había terminado eligiendola a ella de entre esas cinco mujeres. Quizás alguien intentaba decirle algo, pero no quería ponerse a pensar en eso, al contrario, después lo notaría.

  La cargó entre sus brazos, intentando no despertarla. Los borrachos eran más duros que una piedra, pero aún así tuvo cuidado, sus manos se aferraban a los muslos de ella, teniéndola con firmeza. Caminó hasta la habitación, abriéndola con una mano, sus músculos se tensaron cuando tuvo que acostarla sobre la sábanas en el suelo. Toda mi colección de Heineken... Pensó y una leve sonrisa se expandió entre sus labios.

- Lo lamento... -Le dijo ella, abriendo los ojos suevamente, Steve se tensó-.

- ¿Por qué? -.

- Por tomarme tu colección -.

- Da lo mismo... -Se encogió de hombros-.

- Pero dijiste que te molestaba -.

- Ahora te digo que me da lo mismo -Intentó irse, apuntó de colocarse de pie, sintió las tibias manos de (T/N) tomarlo del brazo-.

- No te vayas... -Le pidió en susurros. Steve la miró a los ojos, era inevitable no hacerlo cuando lo necesitaba... Se sentía tan bien cuando la miraba tan intensamente- Vamos, quédate... -Murmuró ahora, acariciandole los bíceps. Steve lo sintió exquisito, observó las pequeñas manos de (T/N) acariciarle el brazo. Maldición ¿De qué manera hacía que lo pusiera tan tenso?-.

- ¿Para qué? -Le respondió, sin querer saber la respuesta, tan sólo deseaba quedarse ahí mismo-.

- No lo sé... -(T/N) lo empujó hasta ella, esta vez para que se acostara a su lado. Steve cayó tendido, las fuerzas se le habían ido, de pronto se encontraba hechizado por ella y sus penetrantes caricias- Tal vez para que me digas tu nombre... -.

- Pensé que lo sabías... -Dobló los brazos y los colocó bajo su cabeza- Steve, Steve Rogers -.

- ¿Y por qué lo de ayer? -Preguntó ella-.

- ¿Qué cosa? -.

- Te detuviste -.

  Y una cosa era cierta, los borrachos eran los más sinceros del mundo.

- Tú no querías... -Le respondió sin sobresaltarse. No valía la pena molestarse de nuevo-.

- ¿Cómo lo sabe? -(T/N) dio vuelta. Cayendo sobre el torso de Steve, él volvió a posicionar sus ojos sobre ella, está vez si tenía tantas ganas de hacerla suya, tantas, muchísimas. Le deseaba con toda su alma, se relamio los labios. Necesitaba hacer suyo cada centímetro de su boca-.

- ¿No es así? -Le preguntó, su brazo izquierdo le abrazó la cintura por detrás. Haciendo que sus cuerpos se junten más esta vez-.

- No... -Me respondió ella, mierda, ¿Lo decía solo porque estaba ebria? O porque... ¿En verdad lo sentía así?- Steve... -Una oleada de deseo se apoderó de él cuando escuchó decir su nombre. Se la imaginó gritandolo ahora, con la garganta ronca, gimiendo, al ritmo de sus caderas. Dándoselo todo- bésame... -Le pidió-.

Y sí, mil veces sí, (T/N)... Lo estaba volviendo loco.

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YASTAAAAAA!! 💥🤘🏻

Chicas debo decirles que el próximo capitulo estará brutal!!

(Les dejó esa pequeña pista. 🤗)

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