C A P Í T U L O 13
°° Décimo tercer Capítulo °°
Llevo aquí exactamente tres días. Y sigo haciéndome la misma pregunta... ¿Cuándo es que me dejará libre? No lo sé... No lo sabría, si no estuviera escribiendo esto, por si alguien me encuentra alguna vez...y tal vez quiera saber sobre los últimos días de mi vida, por si muero...por si él me quita la vida...que se yo, ya no sé que esperar, no de él ¿Qué harías tú, si estuvieras aquí?...en mi lugar... Secuestrada.
Dejó el lápiz y el papel bajo las sábanas, para luego regresar a a la pequeña sala. Tan solo quería expresar un poco, no le veía sentido a las cosas.
Steve llevaba más de dos horas en la calle, otra vez retiraría dinero ese día y a ese paso, ya habría terminado de retirar todo su dinero, que más le daba, lo único que le importaba en ese entonces era irse, dejarlo, no volverlo a ver, nunca más si era posible, mudarse.
Olvidarse de todo lo que estaba viviendo...pero...entonces, una leve oleada de sentimientos se abrió en su estómago ¿De verdad quería olvidarse de todo esto? Sí, quería ¿Y porqué lo dudaba? No (T/N), se dijo a sí mismo, cerrando los ojos. Se conocía perfectamente y conocía cada síntoma que sentía cuando empezaba a...
Steve abrió la puerta del departamento. La cerró de voltearse, se detuvo por un momento antes de voltearse, no quería hablar, no tenía ganas, y (T/N) supo por que cuando lo vio voltearse, con la mandíbula hinchada y ligeramente morada, golpeado, su corazón se contrajo de inmediato al verlo así, sus ojos los observaron asustados, le dolía... Y no sabía por que...le dolía verlo así.
- Steve...-.
- Déjame, estoy bien -.
- Dios mío ¿Qué te han hecho? -Corrió de inmediato hacia él. Antes, cogió lo más cercano a sus manos. Una servilleta tendida sobre la mesa. Intentó pasarla sobre él mentón de él, Steve cerró los ojos, negando con la cabeza-.
- Que estoy bien...-Susurró-.
- No te hace falta hacerte el fuerte conmigo Rogers -Le dijo ella. Con una bonita sonrisa en los labios, que le tranquilizó en lo más profundo. Steve también sonrió, sin saber porque, solo lo hizo.(T/N) Fue hasta el cilindro de la cocina, rocío la servilleta de tela con agua y volvió hacia él- Esta muy hinchado -.
- He estado peor -.
- ¿Qué te han hecho? -.
- ¿De verás te importa? -.
- No quieras pelear conmigo ¿Sí? Trato de estar bien...-.
- Lo digo enserio, ¿Te importa? -Sintió sus manos rozarle el mentón. Un roce que había sentido en lo más profundo. Se mojó los labios, muy cerca a los de ella, de nuevo... Maldito sentimiento...que bien se sentía poder olerlos a poca distancia-.
- Si...-Le contestó ella. De lo más profundo, más allá del rencor que se tenían, le importaba, si y mucho-.
- Pues lo sabes, me han...golpeado...-.
- ¿Quiénes? -.
- Un hijo de perra...-(T/N) lo miro mal. La servilleta se puso helada, término de pasarla por su mentón, al menos eso me ayudaría en algo. La dejó a un lado, concentrándose ahora en la mandíbula de Steve-.
- Pues ese hijo de perra te ha dejado mal -.
- Ellos han quedado peor -.
- ¿Quién fue? -Le dijo verdaderamente preocupada. Colocó sus brazos sobre su fina cintura, viéndose realmente graciosa. La enorme camisa que Steve le había comprado le quedaba hasta un poco más arriba de ma rodilla, por lo que no usaba pantalones-.
- Un imbécil ¿Sí? Uno de los que se ha llevado a una de tus mejores amigas...-.
A (T/N) le entró un escalofríos recordar esa escena... Le erizaba la piel por completo.
- No creo que quieras escuchar esto -Steve caminó hasta la habitación. Separándose de ella-.
- Dímelo -.
- Eres tan terca...-Refunfuñó él-.
- No me afectaría -.
- ¿Quieres escuchar la verdad? -Le preguntó. Frío de nuevo. A (T/N) la sacaba de quicio, ella asintió- Han matado a tres de tus amigas -Le dijo sin escrúpulos-.
Se abrió un silencio entre los dos, los ojos de (T/N) se humedecieron por completo, solo le faltaba cerrarlos para completar su llanto. El cuerpo se le debilitó, sosteniéndose tan solo por la mirada Steve, la mataría...sí... Solo faltaba ella...
- ¿Y sabes? -Le preguntó- Solo faltas tú y otra más...-Las lágrimas de (T/N) se hicieron interminable. Otra vez asustada, sus manos empezaron a sudar. Sus ojos se hicieron pequeños- La diferencia es que yo no pienso hacerte nada -.
°
°
°
Chicas hermosas, no olviden que mañana viernes estaré montando un maratón de 5/5 capítulos.🙇🏻♀💛
No olviden votar ⭐ y comentar 📢 mis nenas lindas.
¡Nos leemos!
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top