Leyendas... Historias forjadas con el tiempo.

La humanidad se ha encariñado bastante con el afán de contar las hazañas de héroes y villanos, olvidando tan fácilmente que somos remanentes; subproductos de un pasado olvidado.

El hombre, nacido del polvo, ere fuerte, sabio e ingenioso, pero nació en un mundo que no perdonaba. Una obscuridad inevitable, criaturas de destrucción, las criaturas de las sombras... Grimm.

Las bestias pusieron su vista en el y en todas sus creaciones, las dos fuerzas chocaron, y parece que la intención de la oscuridad era la de regresar la corta existencia del hombre a la nada.

Aun así, aun el mas pequeño destello de esperanza, es suficiente para impulsar el cambio, y con el tiempo, la pasión, recursos e ingenio del hombre, lo llevaría a crear la herramienta que emparejaría la batalla, este poder fue llamado "Dust".

Con la furia de la naturaleza en su mano, el hombre ilumino su camino a través de la oscuridad. Y con la ausencia de la oscuridad, llego la civilización, y mas importante, la vida.

Pero eventualmente, incluso las luces mas brillantes parpadean y mueren, y cuando ya no estén... La obscuridad regresara.

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Reino de Vale

Un chico caminaba por las calles del reino, este chico tenia el cabello castaño, ojos rojos y piel bronceada, estaba usando una playera azul marino, pantalones estilo militar y botas de combate de color negro, en su espalda llevaba lo que parecían ser dos espadas guardadas en su funda.

-Papá, juro que la próxima vez que te vea te voy a golpear hasta el cansancio, ¿¡Como se te ocurre dejarme aquí sin nada de dinero!?- Grito el chico con total enojo, su padre lo había abandonado ahí sin nada de dinero.

El chico siguió caminando, vio una tienda de Dust, pero recordó que no tenia nada de dinero.

-Solo espero que me quede el suficiente Dust para potenciar a Kanshou y Bakuya unas cuantas veces- Dijo con resignación el chico, iba a seguir su camino cuando vio que la ventana de la tienda se rompió cuando alguien salió volando de ella.

-¿¡Que demonios!?- Se sorprendió al ver a una chica con una enorme hoz de color rojo con toques negros y dentro de la tienda a lo que parecían ser asaltantes.

-Okay... ¡Atrápenla!- Ordeno un hombre pelinaranja, el cual fumaba un puro y tenia un sombrero de copa.

Los demás hombres fueron a atrapar a la chica.

-Oh no, no en mi guardia- Dijo el chico con enojo, sus puños fueron rodeados de fuego y fue rápidamente al ataque.

La chica esquivo a uno de sus atacantes, pero justo cuando estaba por ser tomada por sorpresa, un golpe de fuego mando a volar al asaltante.

-¿Que no les dijeron que a las damas se les debe respetar, grupo de idiotas?- Dijo el chico con enojo.

-Oye, podía manejarlo- Le reprocho la chica, mientras golpeaba a otro de los asaltantes con su hoz.

-Se dice gracias, chica malagradecida- Respondió el chico mientras el usaba sus puños cubiertos de fuego para dejar fuera de combate a los asaltantes.

Aun en su pequeña discusión, acabaron rápido con los asaltantes.

El líder solo parecía decepcionado de sus hombres, dos chicos los habían vencido con facilidad.

-Valen cada centavo, de verdad que si- Dijo con sarcasmo el pelinaranja al ver a sus hombres vencidos.

-Bien, eso fue fácil- Dijo el chico.

-Bueno rojita, azulito, creo que podemos decir que esta ha sido una larga tarde... Y por mas que me encantaría quedarme, me temo que aquí es donde nos despedimos- Dijo el hombre pelinaranja para levantar su bastón, este también era un arma, así que disparo contra ambos chicos.

Ambos esquivaron, pero habían perdido de vista al hombre.

-Genial... Simplemente genial- Dijo con sarcasmo el chico.

Ambos vieron que el hombre estaba huyendo por una escalera de emergencia, el chico hizo desaparecer el fuego de sus puños y fue rodeado por un aura blanca.

-Agradezco tener bastante aura...- Dijo mientras se movió a gran velocidad, dejando una estela eléctrica detrás de el, y llegando a donde estaba el hombre, unos segundos después, la chica también ya estaba ahí.

El hombre vio a ambos con indiferencia.

-Persistentes- Dijo el hombre, mientras un vehículo aéreo llegaba para llevárselo.

-Ay no puedo creer esto...- Dijo con molestia el chico.

-Fin del juego, chicos- Dijo el hombre, lanzando un cristal de Dust y después disparándole para crear una explosión.

El chico había usado su velocidad para proteger a la chica de la hoz, pero lo que no espero ninguno es que una Huntress apareciera para protegerlos a ambos.

La Huntress empezó a atacar el vehículo para tratar de derribarlo, el hombre fue a la cabina del piloto, ahí estaba una mujer tratando de mantener el control del vehículo.

-Tenemos una Huntress- Dijo el pelinaranja, mientras la mujer se levanto para enfrentar a la Huntress y ahora el pelinaranja trataba de controlar la nave.

La Huntress creo una nube de la cual empezaron a llover estacas de hielo que impactaron el vehículo, pero este aun seguía en el aire, eso le dio una idea al chico.

-Bien, hora de que muestren lo que son capaces de hacer- Dijo el chico, desenfundando sus espadas, una era de color blanco y otra de color negro.

El chico saco dos pequeños cristales azules de una bolsa y los puso en una ranura especial que tenían las espadas.

-Aquí vamos... Raiju Impact!- El aura del chico fue a las espadas, y los cristales brillaron, haciendo un movimiento hacia el frente con ambas espadas, de estas salió una gran cantidad de rayos que impactaron al vehículo, pero aun así, seguía en el aire.

El chico mantuvo el ataque, mientras la chica convirtió su hoz en una especie de rifle y empezó a disparar, la mujer que estaba en el vehículo ataco a los chicos y a la Huntress con fuego, así que tuvieron que esquivar.

La Huntress siguió el ataque, mientras que la chica seguía disparando, por su parte el chico estaba algo sorprendido.

-¿Ataco con fuego usando su aura, igual que yo? No, esto se sintió diferente... ¿Qué diablos hizo?-Se pregunto el chico.

Dejo eso de lado cuando tuvo que ser salvado por la Huntress de otro ataque de fuego, mientras el vehículo aéreo escapaba a duras penas.

-Tu eres una Huntress... ¿Puedo tener tu autógrafo?- Pregunto la chica emocionada, mientras la Huntress veia a ambos chicos con molestia.

-¿Estamos en problemas verdad?- Pregunto el chico, ya sabiendo la respuesta.

-Mas de los que se imaginan, jovencitos- Respondió la Huntress.

El chico solo dio un suspiro de frustración, era lo único que le faltaba.

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Y bueno, hasta aquí el prologo de esta historia, espero que sea de su agrado.

Como ven, por primera vez trabajo con un OC, y encima en un mundo como RWBY, que si bien me encanta RWBY, nunca se me había pasado por la cabeza un fic en este mundo, así que  a ver que sale.

Díganme que opinan del prologo en los comentarios.

Y sin mas que decir...

SAYONARA!!!