ACTO III (Veintiseisava Escena)
Escena XXVI: El regreso de Runkuno y su familia a la avenida La Marina en busca de Ninoko para acabar con la guerra entre ellos
Fecha: 19 de agosto del 2022 (Tarde)
Personajes:
· Runkuno
· Prutuo
· Irdelo
· Nuntela
· Irtela
· Irfo
· Kirlo
· Urtulo Lonro Kirto
· Enura Kirto
· Perito Lonro
Lugar: Avenida La Marina San Miguel
(Descripción del lugar: Avenida La Marina San Miguel es un espacio amplio que consta de los siguientes aspectos. En el lado izquierdo, se ubica una plaza comercial llamada Plaza San Miguel. En el lado derecho, se muestra una pista de color blanco y negro. En el centro, se halla un parque donde hay mucho césped verde que se muestran como si fuera una mini colina empinada.)
(Se abre el telón)
(Ingresa Runkuno caminando al escenario por el pasillo izquierdo)
(Ingresa Prutuo caminando al escenario por el pasillo derecho)
Runkuno: (nervioso)Prutuo, ahora nosotros debemos pensar en una forma para que Ninoko venga hacia aquí. Nuestros amigos Irfo y Kirlo nos pueden ayudar, porque ellos pueden pensar en una manera de ayudar a Ninoko para que pueda acumular experiencia gracias a la ayuda de todos por muchos motivos.
Prutuo: (caballeroso)Runkuno, tengo que decirte acerca de un asunto. Yo siento que estoy en peligro al exponerme con Ninoko y quiero regresar a mi casa con Urtulo para que pueda descansar de una vez. Quiero enfocarme en mejorar mi personalidad en vez de luchar contra un perro llamado Ninoko, porque ahora necesito descansar.
Runkuno: (sorprendido)Pensé que me ibas a acompañar, pero veo que me traicionas. No quiero presionarte a quedarte, pero quiero que sepas lo mucho que te valoro como amigo. Espero que vuelvas en caso de que quieras ayudarme con Ninoko. Yo voy a estar ocupado atacando a ese perro hasta que se rinda o se dé por vencido de una vez.
Prutuo: (caballeroso)Gracias por entender, amigo. Quiero darme un descanso luego de varios días pensando en decírtelo. No lo veas de una forma negativa, porque la verdad es que yo quiero que transformes tu vida. A veces si te enfocas solo en Ninoko, pues llegas a descuidar tu propia vida y eso es perjudicial incluso para ti.
Runkuno: (sorprendido)Prutuo, ya no creo que te vayas a irte de mi vida. Anhelo que te quedes pendiente de lo que puede pasar. Tal vez yo termine herido y voy a necesitar que me curen como pasó con mi cuello ensangrentado. Ahora estoy mejor y volví a la calle para enfrentarme con Ninoko de una vez. Me sorprende tu respuesta.
Prutuo: (caballeroso) Runkuno, ya te sugiero que empieces a concentrarte en un aspecto importante de tu vida. Ahora quiero que todos se mantengan atentos. Además, quisiera que nosotros estuviéramos pendientes de los pasos de Ninoko, porque estoy pendiente de lo que pase. Ninoko es una amenaza para todos los perros salvajes.
Runkuno: (sincero)Solo te pido que si vuelves a casa me dejes un juguete para jugar. No quiero que empieces a invadir la sala como si fuera tu territorio y ahora necesito que amplíes tu mente de una vez. Deseo que me acompañes hasta el final, porque Ninoko puede que me haga pelearme contigo en más de una ocasión.
Prutuo: (caballeroso)Runkuno, ahora quiero que te mantengas apegado a mí. Deseo que te pongas serio cuando te estoy hablando. No es bueno que te pongas resentido, porque eso le hace daño a tu mente. Quiero que comprendas mi cansancio, porque necesito que te mantengas de mi lado y empatices conmigo.
Runkuno: (sincero)Prutuo, ya creo que debo cambiar. He cambiado, porque he aprendido a ser más leal con mi dueño. Ahora creo que me siento preparado para seguir las órdenes de Ninoko. Ese perro a veces me saca de quicio por sus comentarios hirientes que son tan insoportables de escuchar. Deseo que te quedes a mi lado.
Prutuo: (nervioso)Runkuno, ahora debo regresar a mi casa para evitar que salga lastimado. No quiero que lo veas como algo malo, pero creo que debes comenzar a pensar de forma racional lo que quieres hacer. Además, no quiero que te pongas mal por una situación estúpida que no tiene sentido. Ahora deseo que transformes tu vida por completo.
Runkuno: (sincero)Prutuo, ahora tú debes demostrarle a Ninoko que eres mi aliado, porque seguro que él traerá a sus gatos para que lo escolten como si fuese una deidad entre todos los perros. No es bueno que te mantengas ocupado como siempre, porque eso te puede perjudicar para siempre. Recuerda que eres especial para mí.
Prutuo: (nervioso)Runkuno, estoy nervioso, porque no me quiero quedar aquí. Quiero regresar a mi casa, porque la verdad es que yo me encuentro preocupado por lo que pueda pasar. Ahora quiero que te encuentres atento. Sin embargo, ahora quiero que Ninoko dialogue contigo para poder establecer un acuerdo de paz.
Runkuno: (sincero)Prutuo, ahora quiero que te conviertas en un perro que siempre está dispuesto a luchar. En este momento, deseo que te comportes de una forma adecuada para que continúes mostrando de una forma agradable. Ahora quiero que te pongas triste, porque la verdad es que me hartas un poco sobre lo que dices.
Prutuo: (nervioso)Runkuno, me siento incómodo, porque yo me siento angustiado de saber que no me comprendes para nada. Ahora ya no te recomiendo que te pongas enojado si es que me voy ahora, porque la verdad es que yo me siento un poco preparado para irme de vez en cuando. Ahora creo que debo retirarme hacia la casa.
Runkuno: (sincero)Prutuo, eres un perro que es leal a mí y no quiero que te desapegues de mí. Eres un amigo especial y creo que podrías empezar a perder tiempo si es que te vas de esta calle. No dudo de que eres un tipo leal, pero créeme que eres un poco temeroso. Eso se me hace un poco raro en realidad. Deseo que te sientas mejor.
Prutuo: (cordial)Runkuno, ahora quiero que venga Ninoko para que puedas ver lo mucho que ha cambiado ese perro. Me interesa que te tranquilices de una vez, porque eso es lo que necesito. Ahora quiero que te enfrentes con Ninoko para que esto se acabe de una vez. Deseo que los problemas acaben de una vez.
Runkuno: (sincero) Prutuo, ya no creo que sea necesario tu partida. Ahora quiero que te pongas de mi lado, porque deseo que transformes tu vida de una vez. Ya no creo que sea necesario que todavía Ninoko venga, porque ahora quiero que ese perro se enfrente conmigo. Ya no creo que sea necesario que te quedes.
(Ingresa Irdelo caminando al escenario por el pasillo izquierdo)
(Ingresa Nuntela caminando al escenario por el pasillo derecho)
(Ingresa Irtela caminando al escenario por el pasillo izquierdo)
Irdelo: (cordial)Nuntela, quiero que cambies tu vida de repente, porque ahora quiero que transformes tu vida. En realidad, deseo que empieces a pensar en una forma agradable. No quiero que me digas estupideces ni ninguna lisura para nada. No creo que Urtulo tenga varias responsabilidades, porque es solo un joven.
(Ingresa Irfo caminando al escenario por el pasillo izquierdo)
(Ingresa Kirlo caminando al escenario por el pasillo derecho)
(Ingresa Urtulo Lonro Kirto caminando al escenario por el pasillo izquierdo)
Irfo: (cordial)Urtulo, por favor toma responsabilidad y empieza a asumir responsabilidades en este momento. Deseo que ayudes a tu perro a sobrevivir en la calle, porque lo va a necesitar en la batalla final con Ninoko. Es urgente que se resuelva ese problema, porque es un asunto que se debe solucionar en este instante.
(Runkuno se retira caminando del escenario por el pasillo izquierdo)
(Prutuo se retira caminando del escenario por el pasillo derecho)
(Irdelo se retira caminando del escenario por el pasillo izquierdo)
(Nuntela se retira caminando del escenario por el pasillo derecho)
(Irtela se retira caminando del escenario por el pasillo izquierdo)
(Irfo se retira caminando del escenario por el pasillo derecho)
(Kirlo se retira caminando del escenario por el pasillo izquierdo)
(Urtulo Lonro Kirto se retira caminando del escenario por el pasillo derecho)
(Enura Kirto se retira caminando del escenario por el pasillo izquierdo)
(Perito Lonro se retira caminando del escenario por el pasillo derecho)
(Cierre del telón) (Fin de la escena XXVI)
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